Narrador Omnisciente

Jimin abría sus ojos lentamente, realmente la pesadez y el sueño que sentía eran inmensos, pero habían voces lejanas las cuales le impedían seguir durmiendo.

Un techo blanco fue lo primero que captaron sus ojos. Su vista siguió viajando por todo el lugar, al notar una bolsa de suero a su izquierda frunció el ceño extrañado, pero sin duda, lo que más le impactó fue la mascarilla de oxígeno en su rostro y todos los cables conectados en su pecho hacia una máquina que suponía marcaba sus signos vitales.

¿Qué diablos había pasado? ¿Por qué no recordaba nada? ¿Dónde estaban los chicos?

Jimin empezó a alterarse, estaba asustado, no entendía nada, la máquina empezó a sonar ruidosamente alertando a quienes estaban afuera de la habitación.

La puerta se abrió abruptamente y entonces con su vista aún algo borrosa logró distinguir a dos personas vestidas de blanco y a otras tres más que al parecer estaban luchando con los de blanco por entrar.

Cuando finalmente las personas de blanco lograron entrar dejando fuera a los demás, vio como se acercaban a él.

ㅡ¿Joven Park, cómo se siente? ¿Recuerda algo de lo ocurrido? ㅡla voz era de un hombre, cuando pudo distinguirlo bien se dio cuenta de que era un enfermero y a su lado se encontraba una doctora que lo observaba con atención.

ㅡY-Yo, no recuerdo ㅡsu voz salió débil y rasposa, era como si no hubiese usado sus cuerdas vocales por bastante tiempo.

ㅡEso es comprensible joven Park ㅡ habló la doctoraㅡ, lleva 9 meses en estado de coma, sufrió un atentado el tres de septiembre del año pasado en Manila, recibiendo tres impactos de bala.

Entonces, todas las imágenes de lo ocurrido llegaron a su mente como un remolino, causando que sus ojos se empañaran de lágrimas.

Pero... ¿Él creía haber muerto? ¿Acaso todo fue un mal sueño mientras estaba en coma? ¿De ser así, por qué se sintió tan real? Era una duda que jamás tendría respuesta alguna.

La doctora siguió hablándole de lo ocurrido y de los cuidados que de ahora en adelante debería tener para recuperarse lo más pronto posible, sin embargo, su discurso fue interrumpido con el estruendo de la puerta abriéndose abruptamente.

Entonces Jimin lo vio, cabello castaño y algo largo, ojos redonditos y brillantes bañados en lágrimas, ojeras bajo estos, piel pálida y una evidente perdida de peso, su corazón dio un vuelco.

ㅡD-Despertaste... Joder b-bebé, despertaste.

Jungkook corrió a su lado y tomó su mano, mientras repartía muchos besos y no dejaba de sollozar con fuerza, repitiendo una y otra vez que había despertado. Su corazón se quebró al imaginar todo lo que su amado chico había sufrido por su espera.

ㅡJoven Jeon, es prohibido que usted esté aquí, le recuerdo que estamos haciendo una revisión del estado del paciente, por eso no dejamos entrar ni a su fami...

Otra vez la puerta se abrió y ahora Jimin si pudo reconocer a las tres personas que antes luchaban por entrar, era su mamá, su papá y su hermano.

Los tres tenían miradas de asombro y alivio.

ㅡMi n-niño...

ㅡJimin-ah...

ㅡH-Hyung...

Ver a su familia y a su novio desechos en llanto causó que las lágrimas en sus ojos se intensificaran.

ㅡSeñores Park, joven Jeon, ya tendrán tiempo para hablar más tarde, así que por favor, amablemente les pido que se retiren para continuar con la revisión del pacien...

Otra vez la doctora fue interrumpida, cuando la puerta fue desprendida del marco cayendo en el suelo y causando todo un revuelo, 6 chicos se dejaron ver y todos observaban con miradas incrédulas a quien con desesperación trataba de agarrar la puerta y ponerla en su lugar.

Jimin solo puedo reír con fuerza al ver a sus compañeros de banda, y claro, en especial a Namjoon siendo un desastre como siempre, incluso en esta situación su líder era todo un dios de la destrucción .

De repente todo se volvió un caos, una fuerte discusión entre la doctora y la enfermera contra su familia y sus compañeros de grupo, Jimin estaba entretenido viéndolos hasta que recordó a quien tenía a su lado aún repartiendo besos y llorando descontroladamente.

ㅡJungkook-ah ㅡle llamó, mientras dejaba una sutil caricia en su rostro con la mano que no estaba apresada por el castañoㅡ, mi Junkookie, ya no llores amor, e-estoy aquí, estoy contigo ㅡsin poder evitarlo su voz se quebró al decir esas palabras.

Jungkook levantó la mirada y sus ojos se encontraron con los de su amado, joder, realmente había extrañado sus orbes color miel, tan lindos y expresivos, sin poder esperar más tiempo llevo sus manos al rostro de Jimin, quitó la mascarilla que le impedía tener contacto con sus mejillas y unió sus labios en un anhelado beso.

Cuando la respiración de ambos era agitada, recordaron que no estaban solos en la habitación y que aún se desataba una batalla campal, la puerta seguía tirada en el piso y los gritos de seguro se escuchaban por todo el pasillo.

Al final, seguridad tuvo que intervenir sacando a todos y dejando solo a la doctora y el enfermero a cargo de Jimin, para terminar la revisión y saber si todo estaba en orden.

Dos horas después de exhaustivos estudios y exámenes, Jimin fue cambiado de habitación y finalmente pudo tener visitas, sin embargo, debían ser de dos en dos, para evitar incidentes como el anterior.

Los primeros en entrar fueron sus padres, quienes lo llenaron de besos y abrazos delicados, contándole lo mucho que les había hecho falta escuchar su voz y su risa.

Luego fueron Namjoon y Seokjin, quienes entre llanto le prometieron cuidar mejor de él y convertirse en sus guardaespaldas 24/7 de ahora en adelante.

Después fue el turno de Yoongi y Hoseok, quienes luego de llenarlo de mimos y decir más de mil veces la mucha falta que les hacía, le comentaron todo lo que había pasado desde ese horrible día, se enteró de que la banda seguía en hiatus, también de que Taehyung estuvo recibiendo tratamiento psicológico porque había entrado en una profunda depresión, debido a que sentía culpa por lo ocurrido, también supo que su Jungkookie pasó encerrado semanas en su habitación llorando y sin probar bocado. Realmente ellos se habían vuelto un desastre sin él, pero es que era algo inevitable, si falta uno de ellos, nada jamás será lo mismo.

Cuando Hoseok y Yoongi se retiraron, no sin antes prometer estar puntuales mañana para volver a verlo, entraron su hermano y Taehyung. Su alma gemela y su pequeño Jihyunie se deshicieron en llanto, Taehyung no paraba de pedirle perdón y a la vez de reclamarle por casi romper su promesa de que envejecerían juntos, mientras su hermano sostenía sus manos aferrándose a él.

Cuando ellos se despidieron, ya sabía quién era el siguiente, era por quién más estuvo esperando, su gran amor, su querido Jungkookie.

El entró con una mirada llena de amor y arrepentimiento, silenciosamente tomó asiento a su lado, y agarró su mano con delicadeza para entralazarla con la suya.

Lo vio titubear antes de dirigirse con voz quebrada a él.

ㅡGracias, gra-gracias por no rendirte... Por no dejarme, gracias por volver a mí, mi amor y perdóname por t-todo, soy un imbécil que...

ㅡShhh cariño, ya nada importa, lo único que quiero es estar a tu lado por siempre y ser feliz, ya no me importa si el mundo lo sabe o si solo nosotros lo sabemos, t-te amo... Gracias a ti por esperarme.

Ambos unieron sus labios mientras las lágrimas empapaban sus mejillas, lo necesitaban... Se necesitaban para sanar esos meses de profundo dolor y sufrimiento, para sentir que su amor sigue vivo en sus corazones.

ㅡGracias amor, por no dejar que la sonrisa abandonara mis ojos.

Algunas estrellas simplemente no pueden morir sin antes brillar intensamente, y Park Jimin era una de ellas, él era una estrella necesaria para que la galaxia en esplendor que conformaban él y Jeon Jungkook no desapareciera. El cielo hizo de una tragedia un milagro, un milagro en donde la sonrisa de ambos permanecería viva en sus ojos por muchos años más.

🦋

Nota: Bueno, finalmente pude darle un final a esta historia, solo falta epílogo. Nos leemos pronto bebus. ❤️✨