-'ˏ ᴅᴀɴɪᴇʟ~ᴡᴀɴɴᴀᴏɴᴇ ˎ'-

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Era una bonita noche estrellada. Una noche de verano, de esas que dejas las ventanas abiertas y entra una pequeña brisa que no enfría pero tampoco acalora.
Daniel y yo nos encontrábamos en nuestra cama, destapados y semidesnudos. Normal, hacía bastante calor a pesar de aquella brisa.
Él estaba sentado, con la espalda apoyada en la almohada. Yo, en cambio, estaba con la cabeza apoyada en su pecho y sentada en su regazo cual bebé. Estábamos viendo nuestra serie favorita "ShadowHunters". Sí, somos fanáticos de "ShadowHunters" y del Malec.
Mientras veíamos la serie, hablábamos también de nuestras cosas. Hablábamos de temas como qué tal nos ha ido el día, anécdotas graciosas, planes para el futuro...
Todo era completamente normal, pero hoy sentía la mirada de Daniel más... Oscura. No con intención de matarme y hacerme daño, obviamente, sino con intenciones lujuriosas. Se mordía constantemente el labio, me daba besos tanto en los labios como en el cuello. Sus manos acariciaban mis muslos, y lentamente subía sus caricias hasta llegar a rozar mi centro.

: ¡Daniel! -jadeé.

Daniel: Lo siento, pequeña. No era mi intención- besó mi mejilla.

: Tengo hambre--me levanté y me dirigí a la puerta

Daniel: ¿Vas a comer ahora? Son la 1:06

: Para el hambre nunca hay hora. ¿Quieres que te traiga algo?

Daniel: No, gracias

: Vale

Fui a la cocina y abrí la nevera. Rebusqué entre los alimentos hasta encontrar el premio gordo. Una caja de helado de menta y chocolate. Lo cogí y cogí una cuchara. Volví a la habitación y me tumbé en la misma posición de antes.

Daniel: ¿Me das un poco?

: Sabía que me lo pedirías

Cogí helado con la cuchara y se lo llevé a la boca.

Daniel: Dame más

: Lo he cogido para mí. ¿Tú no has dicho que no quieres nada?

Daniel: Sí, pero una vez que he probado bocado, ya no paro

: Pues solo hay una cucharilla

Daniel: Da igual, nos la vamos pasando

Y así estuvimos hasta llegar a media caja. En esos momentos, me entraron ganas de jugar un poco...

: Amor, he notado que estas algo acalorado. Te voy a ayudar

Cogí un poco de helado y se lo fui a dar en la boca, pero "accidentalmente" el helado cayó a su pecho.

Daniel: ¡Ah! -gimoteó- está muy frío...

: Ups, perdón se me ha caído, deja que te ayude

Me senté encima suyo y lamí el helado de una forma que sabía que lo encendería.

Daniel: Mmm... -volvió a gimotear- Déjame probar... Yo también quiero jugar

Cogió un poco de helado y me lo puso en el abdomen. Solté un pequeño gemido y me estremecí. Notaba el contraste de la temperatura del helado con la de mi ahora ardiente piel.

Daniel: Túmbate

Me tumbó con suavidad y se puso entre mis piernas. Lamió lo más lento y sensualmente posible hasta dejar limpia la zona.

: Mi turno

Cogí helado y se lo puse en su forma V (La parte baja del abdomen, donde se puede apreciar la forma de V).

Daniel: Ahí no... -gruñó y se estremeció - Bueno, tú sigue princesa

Lamí aquella zona, ya pude sentir cómo crecía algo en él.

Daniel, cogió la cucharilla y cogió helado, me lo puso en el escote y mientras lamía y besaba con pasión esa zona, jugaba con la cuchara, la cual estaba muy fría, rozándome con ella en mi piel. Me causó gemídos desesperados, cuando Daniel se pone a hacer algo, lo hace a la perfección, y el sexo no es excepción.

Daniel: ¿Qué tal si dejamos de comer helado y nos comemos entre nosotros?

Dejó la caja de helado en la mesilla de noche y se sentó en la cama, yo me senté de rodillas en sus piernas. Apegando mi cuerpo contra el suyo.

: -Lamí su labio inferior- Ya estás tardando en empezar, yo ya estoy en ello- mordí levemente este.

Daniel: Adelantarse antes de la cuenta atrás es trampa- apretó mi muslo- eres una tramposa- me dio una nalgada.

Nos besábamos sin control alguno, nuestras manos ya no sabían donde descansar. Daniel desató sin ningún problema mi sostén y lo tiró sin importar donde cayera.

: Qué habilidad, amor

Daniel: Ya sabes, la práctica

Dejaba besos en mis pechos y los acariciaba como si fueran lo más valioso de este mundo.

Daniel: Babe, sabes tan bien...

Yo no decía nada, solo soltaba pequeños gemidos. Mis manos descendieron hasta su cintura y agarré con fuerza el extremo de su bóxer. Así hasta quitárselo y tirarlo como hizo él con mi sostén.
Mientras nos besabamos pasionalmente, sentí como su mano bajó hasta mi centro y empezó a masajearlo por encima de la tela.
Tuve que separar el beso para parar los grandes gemidos que querían ser liberados. Se sentía demasiado bien, no sé si sus manos son de un Dios, pero lo hacía tan bien...

: Mmm... -gemí dirigiendo mi mano a mis labios

Daniel: -apartó mi mano- No tienes porqué ahogar tus gemidos, quiero oirlos

: Pero los chicos...

Daniel: Ya nos han oído muchas veces, por una más...

Mientras hablaba bajó la intensidad del movimiento de sus dedos.

: Daniel... S-Sigue... -posé mi mano encima de la suya y le obligué a que la moviera más rápido.

Daniel: Eso es... -besó mi mejilla.

Siguió así hasta que estaba a punto de llegar.

: D-Daniel... Voy a...

Daniel: Bien, babe

De repente paró, y eso hizo desesperarme.

: Sigué, ¡Sigue!- grité desesperadamente mientras me estremecía. Ya sentía como unas poquitas lágrimas caían de mis ojos.

Daniel, sin decir nada, me tumbó y él se posicionó entre mis piernas.

Daniel: Aquí estoy- secó mis lágrimas de desespero- Voy a entrar en ti- dijo mientras se ponía un condón y me quitaba mi braga.

: ¡Hazlo!

Acarició mi mejilla y sin más preámbulos se metió en mi de una estocada.

: ¡Daniel!

Daniel: ¿Te he hecho daño?

: ¡Sigue!

Siguió tal y como se lo pedí. Primero lento y profundo, pero a medida que íbamos moviendo los dos la cadera, empezamos a ir más rápido.

Daniel: Quiero besarte-dijo mientras gemía.

Cómo el estaba de rodillas, tenía mis piernas rodeando su parte baja del torso. Levanté mi torso, como si hubiera hecho un abdominal (crunches) y besé sus labios mientras movía mis caderas sin norte ni soporte.
La temperatura de nuestros cuerpos subían cada vez más, el calor de nuestros cuerpos calentó la habitación y lo único que se oía en esta eran nuestros jadeos, gemidos y el choque de nuestros cuerpos.
Sus manos apretaban mis caderas acompañando su movimiento y las mías descansaban en la parte posterior de su espalda, arañando esta por el tan extasiado placer.
Mordí su hombro, sentía que iba a llegar, y ya no sabía como rebajar tal extasis.

Daniel: No babe- tomó mi mentón y giró mi cabeza- bésame. Quiero llegar besándote

Y así lo hice. Después de unas cuantas estocadas más llegamos los dos al cielo, vimos juntos las estrellas mientras ahogabamos nuestros gritos a base de un fogoso beso.

Cuándo ya terminamos, nos tumbamos algo cansados. Y con más calor que antes.

Daniel: ¿Te ha gustado, babe?- se podía oír con claridad su respiración agitada y él intentando calmarla.

: Joder que sí- mi respiración también estaba igual, necesitaba calmarla. Me abracé a él y apoyé mi cabeza en su pecho. Le dejé un pequeño beso en este- por más noches como estas

Daniel: Lo daría todo--besó mi coronilla- bueno, creo que ya es hora de dormir. Buenas noches, babe

: Buenas noches, amor

•⋅⊰∙∘☽༓☾∘∙⊱⋅•⋅

Hi Petitcorns!🎠

¿Cómo estáis? Espero que estéis muy pero que muy bien😊 Como veis hoy os traigo un One Shot algo... Calentorro😂 Me he inspirado en una escritora que conocí hace poco pero que me he zampado dos sagas suyas en menos de tres meses. Se trata de Lena Valenti, en serio, me he enamorado😍 Adoro su forma de escribir. Y me han encantado una de sus dos sagas llamadas "Hasta los huesos" y "Amos y mazmorras".💕
Ella escribe libros tipo romance pero con toques bastante grandes de lemon. A pesar de que yo sea algo dulce, poco poco voy abriéndome a más tipos de lecturas.
En serio, os recomiendo que leáis sus libros😍
Este One Shot fue pedido por...

Dana_Paola03

Espero que te (y os guste)❤️ Bueno, pues ya está, todo dicho. Pues como siempre... ¡GOOD BYE!💕

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro