La miré a los ojos y me sentí culpable. Estábamos sentados en el campus, uno frente al otro, no pude evitar quedar como tonto mirando aquellos azulados iris.

No me cautivaron.

Tampoco provocaron ese típico revuelo en el estómago.

Y mi error fue tratar de convencerme de que solo estaba ciego.

— ¿Te gustan mis ojos, Jungkook?

Inmediatamente pensé en ti, Jimin. Tus ojos tal vez no sean los más genuinos, ni los más grandes, o los más cautivadores. Tus ojos a fin de cuentas son normales. Son oscuros, a veces claros, de color café para ti, de color avellana para mí. Sin embargo, me logran hipnotizar, logran hacerme caer, ver esa luz que no veo en ninguna persona.

— Me encantan — Respondí tras un suspiro.

Ciertamente volví a mentir, porque esa frase debería decírtelo a ti, no a ella.

Sonreí como el hipócrita que soy, y le besé los párpados sosteniendo el rostro con mis manos. Luego la miré, y le di un casto beso en los labios.

Déjame ser débil hoy.
Déjame derrumbarme.
Mañana estaré mejor.
Mañana demostraré que nada pasó.
Mañana volveré a fingir ser fuerte.

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noticias mis papás me compraron tres libros, soy feliz 😔👊

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