CAPÍTULO 41: YOUNG

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—— YOUNG ——

Serena miró su casa desde el asiento del copiloto del Jeep, Stiles se le había dejado a Scott para ir en busca de la mestiza, y el transcurso del viaje se había producido en completo silencio. Ninguno había dicho nada y era evidente que ninguno sabía que decir, principalmente porque Scott no sabía cómo hablar con su hermana respecto a lo que había sucedido y vivido aquellas semanas.

—Mamá se pondrá muy contenta de verte.— Afirmó Scott mientras se bajaba del Jeep.

—Oye, Scott... No le digas a nadie lo que pasó.— Dijo Serena antes de que ambos bajarán del Jeep y entrarán en casa.

—Deben de saber que Amaru ya no está.— Alegó Scott creyendo que su hermana se refería a que el demonio se había ido.

—Pero no les digas lo otro, ni como me he librado de ella. No quiero... que nadie lo sepa.— Dijo Serena sabiendo que todo se complicaría si se descubría lo que había pasado cuando Moira se la llevó.

—Oye, no fue tu culpa ¿sí?— Alegó su hermano creyendo que se debía a que su hermana se estaba culpando de lo que les pasó a las criaturas que estaban encerradas y a que no hubiera podido salvar a Aiden.

—Necesito tiempo Scott, por favor. Hacer lo que hice... no es algo de lo que me sienta cómoda, se que no tener remordimientos ayuda pero..., necesito espacio para aclarar todo lo que ha pasado.— Insistió haciendo que su hermano viera que su hermana estaba afectada por lo ocurrido, y cualquiera que la conociera se daría cuenta de que la pasaba algo, no había que ser muy listo para darse cuenta de ello, pero entendía su presión e iba a guardar el secreto hasta que su hermana se sintiera cómoda hablando de ello, pero sabía que ella jamás llegaría a decirlo.

—No hay nada que aclarar, te trato como una loca.— Sentenció Scott sabiendo que, por su parte, jamás iba a perdonar a Moira por lo que la había hecho.

—Scott.— Serena miró a su hermano con seriedad, haciendo que este suspirase.

—Esta bien, venga, vamos.— Murmuró el hombre lobo mientras se bajaba del Jeep seguido de su melliza y los dos entraban en el interior de su casa.

—Serena, creía que estabas con Moira.— Comentó Rafael sorprendido de ver allí a su hija, a la cual abrazo, haciendo que los mellizos se mirasen extrañados por aquel gesto.

—Eh..., sí. Solo que tenía que volver. El curso no va a sacarse por arte de magia.— Mintió rápidamente Serena mientras fingía una sonrisa que Rafael no llegó a creerse del todo.

—Ya...— Comentó Rafael extrañado, ya que sabía que algo la pasaba a Serena, había algo extraño en ella.

—Bueno hemos venido de paso, hay clase y no hay que llegar tarde, ¿verdad, S?— Comentó Scott sabiendo que debían de salir de aquella situación de inmediato.

—Claro.— Respondió Serena mientras los dos se dirigían a las escaleras para ir a sus respectivas habitaciones.

—Recordar que hoy cenamos los tres.— Gritó desde la cocina Rafael, mientras los dos se encerraban en la habitación de Serena, la cual era las más cercana a las escaleras.

—¿Enserio? ¿Ir a clase ahora? ¿Y cena por la noche con papá?— Inquirió la mestiza sorprendida de que su primer día de vuelta a Beacon Hills iba a ser tan horrible como si fuera un día normal.

—Ya... hay algo que no te he contado. Hemos tenido un pequeño problema con Derek.— Empezó a decir Scott mientras se llevaba una mano a la cabeza nervioso, haciendo que su hermana le mirase confundida.

—¿Qué es para ti "pequeño problema"?— Quiso saber dándose cuenta de que los problemas de Beacon Hills nunca dejaban de producirse, aunque no se quejaba. Prefería aquello a volver a ser encerrada.

—Kate le ha secuestrado y le ha transformado en un adolescente de dieciséis años.— Explicó Scott sorprendiendo a la chica de lo que acaba de decir, pero no la sorprendió que su novio hubiera vuelto a ser un adolescente, sino que Kate Argent estuviera con vida.

—Echa el freno. ¿La loca de Kate esta viva? ¿No se supone que Peter la mató?— Alegó la mestiza mirando confundida a su hermano, ya que ambos sabían de lo que era ella capaz de hacer, y en este caso iría a por cualquiera.

—Sí, pero no se como esta viva.— Alegó Scott sin entender cómo es que todavía estaba viva, si fue asesinada y había sido enterrada.

—Porque para matarla Peter tuvo que profundizar con sus garras. ¿Es una mujer lobo?— Asumió Serena mientras se sentaba en su cama sabiendo que ella iba a ser otro problema mucho más grave que cualquier otro, porque ahora era una criatura sobrenatural que tenía amplios conocimientos sobre como matar a otras criaturas sobrenaturales.

—No, una mujer jaguar.— Respondió Scott mostrando que era otra criatura sobrenatural de la que no tenían mucha información.

—Vaya, incluso la pega. Bueno diría que la va más ser una víbora pero... eso es insultar a mi especie.— Comentó Serena haciendo reír a su hermano, lo que provocó que Scott se diera cuenta de que echaba de menos a su hermana, echaba de menos pasar el tiempo con ella.

—Creía que te lo ibas a tomar de otra forma.— Comentó sorprendido de que su hermana estuviera tan calmada.

—Me he abierto en canal para sacar una mamba negra, creo que he elevado el nivel de rarezas otra vez.— Comentó la mestiza dando a entender que de alguna forma aquello no la sorprendía, de hecho la parecía algo muy normal.

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—Dos de la madrugada. Me despierto y está tumbada a mi lado. Se cuela en casa y lo hace unas cinco veces por semana.— Explicó Stiles mientras los tres sabían las escaleras.

—Vete acostumbrándote, el sentido de acosador creo que es de familia.— Comentó Serena llevándose una mala mirada por parte de ambos.

—Eso no quería saberlo.— Puntualizó su hermano mientras ponía una mueca de desagrado. —¿Y qué pasa luego?— Le preguntó Scott a Stiles.

—Esto.— Respondió Stiles mientras se subía la camiseta y ambos veían los arañazos que este tenía en su espalda, algunos más recientes que otros.

—Joder.— Murmuró Scott sorprendido.

—Pobre señor Stilinski, un día deberás de explicarle muchas cosas.— Se burló Serena.

—Mola, eh.— Sonrió Stiles orgulloso mientras seguían caminando. —Después hacemos las cucharitas el resto de la noche.— Añadió con tranquilidad.

—¿El resto de la noche?— Preguntó Serena riéndose, ya que no era algo que esperaba que sucediera teniendo en cuenta a Stiles. —Perdón.— Se disculpó al ver las miradas de ambos

—Eso suena bien.— Alegó Scott apoyando a su amigo.

—Pero siempre soy la pequeña, siempre.— Se quejó Stiles, dando a entender que había algunas cosas que le gustaría que  cambiaran.

—Entonces eso significa que estáis saliendo, ¿no?— Inquirió Serena mirando confundida a Stiles.

—Sí, pero a veces por la forma en la que me mira creo que sabe que le oculto algo.— Explicó Stiles dando a entender que debían de decirla a Malia la verdad, porque sino volverían a cometer el mismo error que cometieron con Serena.

—¿Te refieres a Peter?— Preguntó Scott mirando a su mejor amigo.

—Tienes que decírselo, Scott.— Insistió esta vez Stiles sabiendo que aquella responsabilidad recaía sobre el Alfa.

—Sí lo se, pero no se como.— Alegó Scott sin saber como la iba a decir a Malia que ella era adoptada y que su padre era un psicópata que no sabía de su existencia porque su hermana le quito ese recuerdo.

—Un consejo, que no se entere por un psicópata que la halla secuestrado en la comisaría mientras usa a un Kanima como arma mortífera.— Les aconsejo Serena mientras tomaba un camino diferente al que iban a tomar Scott y Stiles.

—¿A donde vas? Toca historia.— Alegó su hermano confundido por ver que su hermana tenía las intenciones de no ir a clase.

—¿Te crees que voy a ir a una clase llena de gente sin antes desayunar? No quiero terminar en una cárcel por matanza.— Alegó Serena haciendo que Scott recordara que su hermana necesitaba sangre, para sobrevivir y para entrar en calor.

—Ten cuidado, si pasa algo llámanos o te llamamos nosotros.— La pidió Scott haciéndo que Serena recordara lo que había pasado hacia tan solo un día.

—Después de lo de Amaru... creo que puedo apañarmelas.— Le tranquilizó mientras se marchaba.

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—Creo que no es sólo joven de cuerpo, creo que también lo es de mente.— Explicó Deaton mientras Serena y Lydia intentaban curarle la herida.

—No nos reconoció a ninguno de los dos. Y parecía que estaba aterrorizado.— Explicó Lydia mientras Serena seguía vendando el brazo del veterinario.

—Si eres un hombre lobo adolescente y tienes miedo, ¿a dónde vas?— Inquirió Stiles mirando principalmente a Scott.

—En el caso de Scott a mutilar todo aquello que tenía vida.— Respondió Serena llevándose una mala mirada por parte de su hermano.

—Muy graciosa.— Comentó su hermano con tono de burla. —Un lobo vuelve a su guarida, pero Derek vive en un loft.— Alegó Scott sin saber a donde podría haber ido.

—No cuando era adolescente.— Les recordó Serena mientras seguía centrada en ayudar a Deaton.

—La casa de los Hale.— Alegó Lydia con obviedad.

—No recuerda el incendio, no habría sucedido todavía.— Asumió Deaton.

—Hablaré con él.— Sentenció Scott sabiendo que era el único que podía llegar a hacer algo, y en caso extremo su hermana podía usar su capacidad para calmarlo.

—Espera, supongamos que te las arreglas para hablar con él. ¿Qué le vas a decir? ¿Que toda su familia ha muerto?— Alegó Lydia dando a entender que si lo hacía no iba a terminar muy bien aquello.

—Supongo que tendré que hacerlo.— Asumió Scott sabiendo que no le tocaba un papel fácil.

—Ah, buena suerte.— Alegó la Banshee sabiendo que aquello no iba a terminar bien.

—Seguramente tenga razón, no deberías de hacerlo hasta saber como volverlo a la normalidad.— Comentó Stiles apoyando la teoría de la rubio-fresa.

—No puedo mentirle.— Negó Scott.

—Yo lo haré.— Sentenció Stiles llevándose una mirada de incredulidad por parte de todos.

—No creo que ninguno de nosotros pueda.— Puntualizó Serena.

—Serena es buena mintiendo, consigue mentir a Rafael.— Alegó Stiles llevándose una mala mirada por parte de la mestiza.

—Mi padre no tiene un oído sobrenatural con el que pueda escuchar el aumento de los latidos.— Le recordó la chica mientras se cruzaba de brazos

—Cuando le encontremos le diremos la verdad.— Sentenció Scott sabiendo que no podían mentirle.

—Si ha ido a la casa..., no tendrás que hacerlo.— Garantizó Deaton sabiendo que la versión adolescente de Derek dedicaría que había pasado algo.

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—Yo me encargo.— Dijo el Sheriff al ver aparecer a Scott, a Stiles y a Serena, a los cuales llevo a su despacho. —Quiero que seáis sinceros conmigo, absoluta y completamente sinceros. ¿Habéis viajado en el tiempo?— Inquirió haciendo que los tres le mirasen desconcertado.

—Espera, ¿que?— Alegó Stiles sorprendido por lo que había dicho su padre ya que no se esperaba que hubiera hecho esa pregunta.

—Por que si viajar en el tiempo es posible, ¿Sabéis que? Yo lo dejo, hasta aquí he llegado. Te veo llevándome a la casa Eichen.— Garantizó el Sheriff incrédulo que de aquello fuera posible.

—Le encontramos así.— Afirmó Scott.

—¿Dónde? ¿Nadando en la fuente de la juventud?— Preguntó Stilinski sin creerse que ese crío fuera Derek.

—No, lo encontramos encerrado en una tumba de aconito en un templo azteca en México, debajo de una iglesia en mitad de una ciudad que fue destruida por un terremoto.— Explicó Stiles con normalidad, sin darse cuenta de que había metido la pata.

—Me dijiste que ibas de camping.— Alegó su padre dándose cuenta de que le habían mentido.

—¿Piensas ayudar?— Preguntó Scott a su hermana la cual hacía un fuerte intento para contener la risa.

—Oh, no. De esta salís vosotros sólitos. Pero podríais haber dicho que iba a ser así de entretenido para traerme palomitas.— Alegó la chica incapaz de dejar de reír.

—Y lo hicimos, estaba en México.— Añadió su hijo intentando salir del paso.

—Derek ha sido devuelto al pasado, no puede recordar nada.— Explicó Scott esperando que el Sheriff lo entendiera.

—Tenemos que hablar con él.— Añadió Serena sabiendo que debían de hacer algo.

—Esta bien, hasta ahora no ha hablado con nadie.— Suspiró Noah esperando que con ellos tres o por lo menos, con los mellizos, fuera capaz de decir algo.

—Con nosotros hablará.— Aseguró Serena mientras intercambiaba una mirada con su hermano.

★★★

Llegado a este punto solo puedo decir que las cosas se van a poner mucho más interesantes.

Pero lo que realmente espero es que para la semana que viene pueda daros una afirmación o una negación con respecto a si tendrá lugar la película de Teen Wolf con respecto a esta historia. Yo en lo personal espero que sí, y tengo alguna idea aunque también podría servir sino hago la peli así que... todos salimos ganando creo yo.

Aún así ese no es el tema ahora, sino el capítulo. Serena y Scott ya están en Beacon Hills, aunque Scott algo traumado XD. De todas maneras lo que se es que las cosas se van a poner mucho más intensas de lo que podéis imaginar. Y de verdad deseo llegar a determinados puntos, porque no vais a ver venir lo que va a suceder, DE VERDAD.

De todas maneras y porque me siento generosa os diré dos cosas.

La primera es que esta es la parte 45 de 68.

Y la segunda es que los problemas para Serena van a continuar y a desencadenar un par de cosas. Además de que bueno... Kate tiene asuntos pendientes con los mellizos, y no solo Kate o Peter.

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Os leo ♥️


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