𝗲𝘅𝘁𝗿𝗮 . 𝗁𝖾𝗇𝗋𝗒 𝖺𝗇𝖽 𝖾𝗏𝖾𝗅𝗒𝗇 𝗍𝗎𝗋𝗇𝖾𝗋

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng


ONE OF THE GIRLS ────── 𝘄𝗶𝗹𝗹 𝘁𝘂𝗿𝗻𝗲𝗿
⚔️ ⌇ ↬ 𝖺𝖼𝗍 𝘁𝗵𝗿𝗲𝗲 . . .
𝘤𝘩𝘢𝘱𝘵𝘦𝘳 .𝘹𝘹𝘹𝘪𝘹
❝ henry and evelyn turner ❞

ten year's later

EVANGELINE TURNER SE encontraba recostada en las comodas sábanas de su cama. La mujer descansaba plácidamente en ella, disfrutando de un sueño tranquilo.

Los mechones blancos se encontraban exparsidos sobre toda la almohada individual, mientras que la brisa de la mañana entraba por la ventana entreabierta de la habitacion, golpeando suavemente el rostro de la mujer.

Fue un muy buen descanso para la mujer, después de haber trabajado en la pequeña panaderia de la que ella era propietaria, y más aparte haber cuidado de los niños, se sentia muy agotada, pero por suerte la noche llegó rápido y finalmente pudo tomar un descanso tan merecido por su arduo trabajo, aunque claro, a lo largo del dia habia tenido ayuda por parte de su hermana, Elizabeth y Alexander. Esto mismo le habia servido a no sobrecargarse con trabajo y entrar en mayor estres.

Aunque el momento de "paz" que la Turner estaba teniendo se vio interrumpido cuando unos pasos y chillidos bajos comenzaron a escucharse afuera de su habitación. Evangeline tenia el sueño bastante ligero, es por eso que aquellos simples pasos habian logrado que la platinada abriera sus ojos nuevamente.

Evangeline estaba un poco somnolienta, pero por aquellos pequeños murmullos de aquellas voces pudo darse cuenta de quiénes se trataba. Una sonrisa divertida y llena de amor apareció en los labios carnosos y rosados de la mujer, aunque al escuchar como los pasos se hacian cada ves más cerca, volvió a cerrar los ojos nuevamente para hacerse la dormida.

Los pasos de los gemelos eran cautelosos a medida que se acercaban mas hacia la cama en la que su madre descansaba. Ambos intercambiaron miradas divertidas, soltando leves risitas, dado esto Evelyn se dió por hablar en voz baja.

━Shh, o vas a despertar a mamá━Dijo la pequeña de cabello blanco como el de su madre mientras hacia una seña de silencio a su hermano.

Henry asintió a las palabras de su hermana.

━Sí, está bien━Dijo Henry con una sonrisa en su rostro.

Una sonrisa amenazaba con formarse en los labios de Evangeline, pero la platinada de contuvo, o si no sus hijos iban a descubrir que en realidad ella ya estaba despierta. Aunque las voces y murmullos de los gemelos causaban diversión a la Turner.

Ambos hermanos se acercaron hacia la cama, hasta que estuvieron a un lado de ella. Despues de intercambiar algunas miradas y algunos mumullos, los dos pequeños se subieron a la cama con sumo cuidado de no despertar a su querida madre. Uno en cada lado, se sonrieron complicitamente.

Henry y Evelyn intercambiaron murmullos bajos y algunas señas, poniendose de acuerdo en el momento que llevarian a cabo su plan para despertar a su madre. Sin saber que Evnageline escuchaba todo esto con mucha diversión y cariño por sus muchachos. Los dos siguieron planificando hasta que finalmente comenzaron a moverse un poco sobre la cama para poder hacerle cosquillas a su madre en las costillas.

Y fue justo cuando ambos estaban listos para hacerlo, que Evangeline, con una sonrisa en su rostro, alzó primeramente sus manos con sumo cuidado, y despues de ello se levantó de un saltó para poder espantar a sus pequeños.

Los gemelos saltaron en cuanto vieron como su madre ya se encontraba despierta, y comenzaron a soltar chillidos cuando sintieron como envolvia a cada uno en cada una de susanos y comenzaba a a hacerles cosquillas. Comenzaron a soltar risa tras risa mientras trataban de hacer que su madre parara.

La familia de "tres" continuó jugando los unos con los otros por unos momentos más, disfrutando al máximo del cálido tiempo familiar que estaban teniendo. Aunque no era raro que los tres suelan pasar momentos como estos, eeste era bastante especial, no por las acciones, sino por el dia, este dia era bastante especial tanto para Evangeline como para Evelyn y Henry.

❪ • • • ❫

Evangeline estaba algo sumergida en sus pensamientos. Habia, bastantes cosas pasando por su mente en este momento.

Evangeline, Henry, Evelyn y Kamalia, se encontraban sentados en el comedor familiar del pequeño hogar de la familia Turner-Delarys. Todos disfrutaban de un grandioso desayuno hecho por Kamalia, la hermana de Evangeline y tía de los gemelos.

Aunque tia y sobrinos pasaban un excelente rato, compartiendo risas aqui y allá, Evangeline estaba totalmente ajena a lo que ellos estaban pasando. La platinada se encontraba viendo fijamente hacia la silla vacía que se encontraba en el otro extremo de la mesa, justo enfrente de ella.

No hacia falta decir para quién estaba resguardado ese asiento vacío en la mesa.

A pesar de que los años habían pasado, Evangeline seguía con la esperanza y corazonada de que algún día su hombre amado llegaría para quedarse por siempre a su lado. Evangeline contaba cada día que pasaba hasta el día en el que finalmente de reencontraria nuevamente con Will.

Todos sabían que Evangeline estaba bastante aferrada a la idea de que su esposo algún día regresaría, y nadie la culpaba, pues después de todo, Will era el todo de la platinada, incluyendo sus hijos. Los gemelos, sabían del apego de su madre hacia su padre, ellos la entendían perfectamente, porque ellos también pasaban por la misma situación.

Desde los diez años que ambos niños tienen, en esos diez años no han podido conocer al hombre que es su padre. Es por ello que ambos hermanos estaban tan entusiasmados por qué el día en que el pudiera tocar tierra llegará finalmente.

Ellos sentían tanta fascinación e intriga por el hombre de todas aquellas asombrosas historias que les había contado su madre sobre el. Además del hecho de que su padre era un Pirata, uno de los pocos buenos que habían en el mar, aparte del abuelo Jack Sparrow, como ellos le llamaban.

Y hoy mismo, con el atardecer asomándose por el horizonte, Henry y Evelyn por fin conocerían al hombre que se mantenía todo el tiempo en los pensamientos de su madre, el progenitor de ambos.

Y aunque ambos conocían un poco la forma física que su padre tenía gracias a las pinturas que su madre solía hacer cuando se quedaba admirando el hermoso atardecer en el horizonte, que normalmente eran todos los días, sn perderse ninguno, eran aquellos momentos en los que la platinada tenía tantas ganas de retratar la imagen de su amado esposo, y al menos, por aquellos pequeños momentos, esos retratos lograban brindarle algo de consuelo.

Pero una pintura no es lo mismo a conocerlo en persona, eso, está más que claro, y no puede ponerse en duda.

❪ • • • ❫

El sol comenzaba a ponerse en el horizonte a medida que los minutos pasaban más y más, cada ves, más rápido que la última ves, o al menos, asi lo sentia Evangeline.

Evangeline caminaba por la colina cuesta abajo lentamente y sintiendo como su corazón martilleaba rapidamente contra su pecho, mientras que la suave brisa del viento se filtraba contra su cuerpo. Mientras que los gemelos iban por delante de ella, ambos camimando y saltando felizmente por el pasto mientras que de sus bocas salia la suave melodía de una canción, la cancion famosa en los mares.

Ambos vestidos con sus sombreros de piratas, aquel vestuario que les gustaba usar tanto, porque era algo que les gustaba tanto. Eso claro que no sorprendió a Evangeline, pues los gemelos siempre mostraron interés por los piratas, eso obviamente por el hecho de que eran hijos de Piratas, y aparte, tenían un abuelo pirata.

Los pasos de los niños comenzaban a relentisarse mas a medida que se acercaban mas al borde de la gran colina, y mientras que al mismo tiempo el sol se ponia cada vez ma en el horizonte, el viento se hacia frio a medida que pasaba el tiempo en el lugar. Y cada ves que se hacia mas tarde, el corazón de Evangeline latía más fuerte y rápido. Y una añoranza y nerviosismo recorrian todo su cuerpo a una rapidez sorprendente.

Las horas se volvieron minutos, los minutos se volvieron segundos, y finalmente, el sol estaba perfectamemte alineado en el horizonte. Finalmente, los gemelos y Evangeline se detuvieron, la Turner tardó unos segundos mas en llegar al lado de sus niños, de forma que en medio de ellos tres, se encontraba Henry, y a cada uno de sus lados se encontraban su madre Evangeline y su hermana Evelyn.

La platinada tenia cierto nerviosismo al ver como el sol finalmente se habia puesto. Habia tanta añoranza en ella y recuerdos del pasado regresando rapidamente a su mente. Todas aquellas aventuras que habia vivido en au vida como pirata, el dia en el que ella habia sido nombrada Reina pirata, pero los más importantes y que causaban mas anhelo en su corazón eran aquellos recuerdos en los que se encontraba Will, pero el dia de su boda encabezaba todos ellos.

Evangeline se habia dado cuenta de todo el tiempo que habia pasado últimamente, diez largos años, ahora con dos hijos, y finalmente, su esposo pisaria tierra despues de un largo tiempo separados el uno del otro, Will en el mar, y Evangeline en tierra, cuando no hace muchos años eso fue al revés.

Y he ahí, justo en el centro del horizonte, se pudo ver un destello de color verde, el mismo que se habia visto el dia en el que Will dejó a Evangeline para poder irse en el Holandés.

Evangeline miró a sus hijos, sintiendo un aleteo en su corazón, y ya habia lagrimas que ansiaba por derramar en aquel momento, con una sonrisa en sus labios, intercambió miradas con sus dos hijos, la pequeña Evelyn de cabello platinado como el de su madre y el pequeño Henry con el cabello castaño como el de su padre, ambos con sonrisas en sus rostros mientras inclinaban la cabeza hacia arriba un poco para ver a su madre.

La pequeña manita de Evelyn se envolvió con la de su hermano por los nervios que sentia, y este, al sentir aquel contacto físico, miró a su hermana con unos ojos tranquilizadores y correspondió a su toque inmediatamente, entrelazando sus dedos con los de ella.

Evangeline sonrió al notar el afecto físico de los hermanos, e inmediatamente en cuanto Henry volvió a mirarla, envolvió su mano mas grande en la mas pequeña del castaño.

A lo lejos en el mar, una nave bastante familiar apareció en medio de las pequeñas olas que se formaban en el centro del profundo y extenso océano, e inmediatamente, el corazón de la de cabellera blanca latia mucho mas rápido. Diez largos años sin el a su lado, y finalmente, el dia y momento que tanto habia añorado habia llegado.

Su corazón habia vuelto a tierra.

❪ • • • ❫

Will veia a lo lejos como unas figuras esperaban en lo alto de la colina. Entre ellas, una de esas figuras era la mas alta, mientras que las otras dos, eran mucho mas pequeñas que esa.

El corazón del moreno comenzó a hincharse más, sintiendo un profundo anhelo e intriga, pero mas que nada, amor, amor bastante fluyente. El castaño no habia dejado de pensar en Evangeline ni un solo momento a lo largo de los diez años que ya habian pasado separados. El cumpliendo su deber como Capitán del Holandés Errante.

Pisar nuevamente el arena de la Isla en la que su amada esposa se encontraba era bastante reconfortante, y también calmaba mucho el dolor que habia en su corazón por la maldición en la que habia caído.

Inmediatamente los pies de Will comenzaron a dirigirlo hacia la cima de la colina, subiendo mientras sentía como su corazón martillaba con fervor contra su pecho, y sintiendo como sus manos comenzaban a temblar de los nervios que sentía. El siguió su camino hasta que comenzaba a adentrarse más y más en el lugar que era dueño de sus sueños, y aquel lugar al que tanto ansiaba llegar todos los días en todo momento.

William Turner se encontraba en el cielo. Ahí, a tan solo algunos metros, se encontraba su amada esposa, luciendo tan bella como la última vez que se vieron.

En frente de sus ojos llenos de amor y adoración, se encontraba la mujer que era dueña de su corazón, de forma literal o figurativa. Ahí, con el iento soplando contra su hermosa cabellera plateada como la de una Princesa digna de ella, aquella pálida y suave piel seguia tan igual a como hace tanto tiempo, todo en ella seguia exactamente igual, igual de perfecta. Ella seguia luciendo como un angel en la tierra.

Los pasos de Evangeline eran cautelosos, como si temeria que este momento fuera un simple sueño y en cualquier instante pudiera despertar de el. La mujer sostenia fuertemente la mano de su pequeño hijo castaño mientras se acercaba a Will hasta quedaar unos centímetros más cerca.

La pareja se miró con ojos llenos de amor y anhelo, pero mas que nada de lo último, ¿y como no podrian estar asi después de todo el tiempo que habian estado separados? Ambos se quedaron viendo el uno al otro por unos segundos más, y en esos pocos segundos que habian pasado, los ojos de Evangeline comenzaban a nublarse de lágrimas, esto mismo causó que igualmente los ojos del castaño mayor comenzaran a cristalisarce por las lágrimas que trataba de reprimir, pero claramente, eso no estaba sirviendo de nada.

Ella lo miraba a el como si colgara la luna por ella.

━Eva...━Trató de hablar William, pero no salió más que un murmullo de ello, sentia un gran nudo en su garganta que le impedia hablar. Todo el impacto de verse el uno al otro era demasiado para ambos, de una buena manera.

En cuanto ella escuchó el bajo murmullo del apodo cariñoso que el le tenia, sus pies comenzaron a moverse rápidamente y lo envolvió en sus brazos. Posandolos fuertemente alrededor de su cuello, con miedo a que si lo soltaba este se iría en ese mismo instante. Will pudo sentir la desesperación de su amada esposa, y el se sentia de la misma manera.

Envolvió sus brazos mas grandes alrededor del torso mas delgado de su esposa platinada, apretandola con la misma fuerza que ella estaba usando con el, ambos soltaron suspiros al sentirse en los brazos del otro, porque en medio de todo, lo único que ambos tanto ansiaban tener eran al otro.

Y asi, mar y tierra se volvieron a encontrar, sería tan solo un dia, pero eso no importaba, ella lo esperaria a el hast el final de su historia.

Después de que ambos pasaron unos cuntos segundos mas abrazados el uno con el otro, ambos se retiraron de los brazos del otro, a pesar de que ninguno de ellos queria hacer tal cosa.

Inmediatamente despues de eso, Evangeline se posó detrás de sus hijos que miraban a su padre como si fuera lo más sorprendente en el mundo entero, aunque con claros nervios en sus ojos porque era la primera ves que conocían a su padre, el maravilloso Capitán Will Turner del quién tanto su madre les habia contado historias asombrosas.

La platinada, notando la vacilación y los nervios de sus hijos, posó cada una de sus manos en sus hombros, una en el de Evelyn y otra en el de Henry, mientras los acercaba un poco más a su padre, animandolos a hablar con el. Mientras tanto, Will, notando la creciente timidez de los mas pequeños, decidió dar los primeros pasos, se acercó hacia ellos dos, y cuando estuvo a centímetros de distancia de ambos, se arrodillo en el suelo para poder quedar a la altura de ambos. Sintiendo ya como un nudo comenzaba a formarse en su garganta al igual que algunas lágrimas comenzaban a nublar su misión.

El pequeño castaño se parecía tanto a el, mismo cabello, mismo rostro, pero sin duda, la misma hermosa sonrisa como la de su madre. Y oh, aquella pequeña niña de ojos verdosos y cabello blanco sedoso, era la viva imagen de su madre.

Evelyn y Henry buscaron la mirada de su madre en busca de apoyo ya que se encontraban bastantes nerviosos ya que era la primera ves que tenian contacto con su padre. Evangeline conectó miradas con ellos y les dirigió una tranquilizadora, mientras les asentia con la cabeza. Esto les generó algo de confianza a los gemelos, y fue Henry quién decidió hablar por ambos.

━Padre...━Dijo el castaño en un susurro con un extraño sentimiento en el ahora que veia a su progenitor.

Los ojos de Will comenzaron a nublarse nuevamente de lágrimas que trataba de reprimir, miró a su esposa en busca de apoyo, y esta simplemente le asintió para que hiciera lo que el quería más en este momento. Fue de ahí que el moreno sacó las fuerzas e inmediatamente posó cada una de sua manos en uno de los hombros de sus pequeños, atrayendolos hacia un fuerte abrazo.

Aunque era uno con un poco de vacilación al principio, todo por el hecho de que prácticamente no se conocían. Pero inmediatamente los gemelos se relajaron en los brazos de su padre, ambos envolviendo una de sus pequeñas manos en un lado de su cuello, mientras que apoyaban sus barbillas en sus hombros, disfrutando del bello momento, los tres se sumergieron en un abrazo tan reconfortante.

Will abrió los ojos por unos momentos mientras extendia su mano hacia su amada esposa. Evangeline sonrió al ver esta acción a inmediatamente la tomó mientras comenzaba a incarse igualmente en el suelo, con el moreno atrayendola hacia ellos, ahora finalmente se encontraba toda la familia Turner.

Todos disfrutando del amoroso y familiar momento que estaban pasando, mientras que Evangeline sentía un profundo confort en su corazón al estar nuevamente dn los brazos del castaño que se la habitaba en sus pensamientos y en su corazón cada dia y noche a cualquier hora del día.

━Te amo━Evangeline susurró suavemente y con amor al oido de su esposo. Y el sonrió al escuchar las palabras de ella.

━Lo sé━Dijo el castaño en voz baja también para después volver a hablar━pero yo te amo más.

Era solo un día, sí, pero aquel simple dia se sentian como años al lado de William Turner.


࣪✦𓂃 AUTHOR'S NOTE:

Dejenme sola, ando llorando a
mares 😭, es que Will y Evangeline
son mi roman empire, mi mundo
entero, yo los amo demasiado a
ambos, no saben lo mucho que
ellos significan para mi.

Si les gustó este "capítulo" no
se olviden de votar y comentar
que quiero ver todas sus opniones
sobre este fanfic, además
me ayudarian a no caer con lectores
fantasmas ahora. Por cierto, este
es la parte mas larga del fanfic, 3000
palabras omg.

¿Capítulo?, creo que mas
bien extra, dedicado a: you_are_beaches, -cryxbaby, itsmoonlxghtt, dear-honey03, fridadeschnapp, -ChloeWinthrop-,
star6girl_, -poetgirl, maricxnt_
y a xElsyLight, y tambien a todos
ustedes que han llegado hasta
esta parte de la historia ❤❤✨.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro