Paso el tiempo después de esa nota tan desagradable que literalmente hizo romper mi corazón en mil pedacitos, María se entero y se enojó mucho conmigo no es que todavía tenía interés en el ,solo que según ella no quería que shadow me lastimará más de lo normal.

Y a partir de ese entonces me sentí fatal dejé de mandarle cartas y chocolates. Nunca se acercó a mi, más que a pedirme dinero.

Eso sucedió hace tres años, y sigo enamorado de ese erizo.

Estaba caminando en uno de los pasillos de la escuela había llegado tarde por novena vez y solo me quedaba una solo opción y era esperar a la siguiente clase. En eso ví a Shadow fumar un cigarro, me vió pero desvío su mirada, agaché la cabeza y lo pasé de lado pero un brazo me empujó hasta los casilleros.

—¿Por qué carajos me sigues hedgeohg? -preguntó retirando su cigarro y echar el humo en mi boca, era tan asqueroso— no me digas que todavía me sigues queriendo —quité su cara cerca de la mía ya que estaba muy cerca y no me gustaba para nada tener que olerlo.

— N-no, llegué tarde no sabía que tu también llegabas tarde— dije algo tímido,siempre soy tímido con las personas.

—Umm pues... vete entonces, no molestes ni estorbes — Sus palabras eran muy golpeadas.

Normalmente me cohibiria y pediría perdón. Pero ya no soy esa persona.

Salgo de dónde estoy  alejándome de el hasta que me volteó y caminando de espaldas le señalo los dedos con una sonrisa.

Me voy corriendo.