Tengo que contener mis terribles ganas de arrojar a KiKi fuera de mi auto con el pésimo intento de rap que está haciendo, estoy seguro de que si Ilhoon pudiera escucharla se sentiría terriblemente avergonzado a tal punto de querer arrancarse las orejas para poder terminar con la tortura.

A pesar de que le he pedido en más de una ocasión que guarde silencio mientras intento conducir, ella se niega a escucharme y interpreta con más fuerza I'll be your man: “Te llevaré Incluso por encima del cielo, si puedes escuchar la desesperación al final de mis oraciones ven ahora en mis sueños.”

—Vamos —Dice dándome un leve empujón.— Se que sabes la letra

—Creo que paso

—No seas amargado Park —Bufo.— No me dejes arruinando la canción sola

Doy un suspiro deteniendo el Mercedes en un alto, miro a KiKi con diversión antes de cantar la parte de Hyunsik

—“Seré tu hombre, nunca te dejaré ir de nuevo —Canto a todo pulmón.— No te dejaré sola nunca más, por favor di mi nombre.”

—“No puedo vivir sin ti —Dice KiKi uniéndose.— Por favor vuelve a mis brazos, no puedo dejarte sola, cariño, sólo rezo.”

Por un segundo miró hacia la izquierda donde una mujer junto a su esposo nos mira como si estuviéramos locos, avergonzado pongo en marcha el Mercedes cuando el semáforo vuelve a ponerse en verde dando por terminado nuestro pequeño concierto en el auto

[...]

Como es costumbre, todos me reciben con los buenos días con una ligera sonrisa a lo que yo les respondo con un poco más de frialdad, KiKi termina por correr hacia la oficina de Jungkook y yo me apresuro hacia la mía. Mi bella secretaria parece no notar mi presencia al estar tan absorta en su teléfono hasta que me digno a golpear su escritorio con suavidad llamando su atención

—Buenos días —Dice con una sonrisa.— ¿Acabas de llegar?

—He estado para frente a ti intentando llamar tu atención durante un par de minutos

—Oh ¿Enserio? —Pregunta sorprendida.— Lo siento, no te escuche

—Está bien pero ¿que es eso tan interesante que no te permite poner atención?

—No es nada —Rie bloqueando su teléfono.— Solo una tontería

Extrañado por su repentino nerviosismo ingreso a mi oficina donde una enorme pila de trabajo me espera

—Aqui tienes

—Gracias —Digo tomando la taza de té.— El día de hoy comenzará la filmación del comercial así que necesito que traigas a los integrantes de EXO

—¿Yo?

—Puedes pedirle al chico nuevo que te acompañe —Haerin me miró ligeramente sorprendida.— ¿Hay algún problema?

—No, ninguno es solo que... ¿A qué hora debo ir a su empresa?

—No irás a la SM, su manager me envió la dirección de su casa

De uno de los cajones tomé un pequeño papel con la dirección de los integrantes y se la entregué

—Puedes pasar por ellos en dos horas

—Muy bien, entonces iré a seguir con mi trabajo

—Espera —Dije deteniendola.— Ven aquí

—Jimin, alguien podría vernos

—Estamos en mi oficina, nadie nos vera

Haerin sonrió con diversión antes de rodear mi escritorio y sentarse sobre mi regazo, con una mano acaricié su sedoso cabello y después su rostro, esta mujer era la más bella en todo el maldito planeta y me tenía terriblemente cautivado. Sin hacernos esperar más besé sus labios con lentitud saboreandolos, un pequeño gemido escapó de su boca permitiendome ingresar mi lengua donde tuvo una frenética batalla con la suya hasta que fuimos interrumpidos haciéndonos separar abruptamente

—¿Interrumpo algo?

—No interrumpe nada señorita Xu, con permiso

Avergonzada, Haerin salió huyendo de mi oficina esquivando la mirada penetrante de mi mejor amiga

—Definitivamente estaba interrumpiendo algo

—No, no lo estabas —Dije con indiferencia.— Espero que estés aquí para ayudarme, tengo mucho trabajo como para distraerme

—Oh no señor, no me vas a cambiar de tema —Señalo.— Acabo de presenciarlo con mis propios ojos, tenías tu maldita lengua hasta su garganta, estoy segura de que si no hubiera entrado abrías arrojado todo esto al carajo para follarla sobre el jodido escritorio

—¿Siempre tienes que ser tan desvergonzada?

—Ese es mi encanto Park —Puse los ojos en blanco ante su respuesta.— Pero ahora quiero la verdad, ¿estás saliendo con ella?

—Estoy muy ocupado, no tengo tiempo para tus preguntas

—No te tomará más de un minuto, respóndeme

—Si te respondo ¿vas a dejarme trabajar? —KiKi asintió frenéticamente.— Si, estamos saliendo

—¡Si! —Grito emocionada.— No sabes cuan feliz me hace saber eso, la secretaria Kim es la mujer perfecta para ti

—Lo sé

El resto del día estuve ocupado moviendo me dé un lado a otro debido a las reuniones que tenía programadas en mi agenda con otros empresarios que se habían vueltos socios de Genesis Park Group, por último tuve que estar presente en la sesión de fotos y todo lo relacionado para el comercial cuidando de que todo estuviera a la perfección.

Por la empresa se había esparcido la noticia de que tres miembros de EXO estaban en el edificio por lo que en lugar de ir a sus respectivas casas, todas las mujeres incluyendo la chica de Jungkook terminaron en la sala para tener la oportunidad de obtener una fotografía o un autógrafo de los hombres que ellas describían como dioses super sexis a excepción de mi linda novia que permanecía cruzada de brazos a mi lado.

—¿Por qué no vas corrido hacia ellos como todas?

—Estoy bien aquí —Dijo Haerin encogiéndose de hombros.— Los he visto cientos de veces en televisión

—Pero los tienes a pocos metros de ti, ¿no quieres un autógrafo o fotografía?

—Te dije que estoy bien, voy a quedarme aquí contigo

—¿Esto es por lo que paso ayer? —Rei.— Entiendo que ponerme celoso de tus idols es una verdadera tontería así que no tienes porque retener las ganas de correr hacia ellos, no tengo ningún problema

—¿De verdad?

—Por supuesto que no, eres mi novia no un objeto, si a ti te gusta por mí está bien. Oportunidades cómo estas son muy pocas en la vida

Haerin me miró y después miró a las chicos de EXO, de su bolso sacó su nuevo álbum y un marcador y corrió hacía ellos para obtener un autógrafo como todas, sonreí ante lo tierna que se veía brincando de alegría por estar cerca de ellos. Al mirarla me fue imposible no pensar en Hye Sun, estaba seguro que ella desde el cielo me había mandado a esta hermosa persona para alegrar mis días grises, para alejarme de la miseria que se había convertido mi vida, para hacerme feliz después del enorme daño que había sufrido años atrás. Mientras la miraba me prometí a mí mismo proteger esa bella sonrisa de cualquiera que intentara hacerla llorar.