Fiveteen:«ʀᴇɢʀᴇꜱᴏ ɪɴᴇꜱᴘᴇʀᴀᴅᴏ»

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

- Me siento muy raro.

- Ah, no es la primera vez que escucho eso de tu parte. ¿Qué es lo que pasa ahora? - preguntó NamJoon, ambos caminando tranquilamente por el pasillo luego de que el timbre de salida hubiera resonado por todo el lugar.

El castaño hizo un pequeño puchero, disgustado ante lo que escuchó. - No son exageraciones mías pero realmente me siento muy incómodo. Es como si tuviera una mirada sobre mí todo el maldito tiempo.

- ¿Y no te has dado cuenta de quién podría ser?

- Pues no, duh, si lo supiera no dudaría en reclamarle. Aunque...

- Aunque... - repitió el pelirubio, poniéndose en frente del más alto para poder escuchar todo con atención.

- Nada, creo que esas sí son alucinaciones mías.

- Pero no pierdes nada con decírmelas, quizás pueda ayudarte. - se encogió de hombros, sacando una pequeña barra energética de su mochila para comérsela. - Anda, dime.

JeongGuk soltó un pequeño resoplido. - No le tomes tanta importancia, es solo que atrapé a Jung viéndome más de tres veces en lo que va esta semana.

- ¡¿Qué?! - y como era de esperarse, NamJoon soltó un escandaloso grito. Alarmando a todos los que estaban cerca. Incluso al susodicho alfa, que estaba conversando con una omega de otra sección.

- ¡Baja la voz! - le reprochó exaltado mediante susurros. - ¿Es que no puedes ser discreto?

JeongGuk lo haló un par de metros lejos de los demás para seguir conversando sin tanta atención alrededor.

- ¡¿Pero escuchas lo que dices?! ¿Lo entiendes? ¡JeongGuk, estás hablando de Jung HoSeok! - el más bajo le dio un zape en la frente. - ¡Auch!

- ¿Ves cómo exageras? Ya cállate, después de todo, te dije que no es nada importante.

- No lo comprendo. ¿En serio lo viste? ¿Él te estaba espiando?

JeongGuk suspiró, decidiendo ignorar sus cuestiones.

- ¡Vamos, dime! Por favor~ - refunfuñó de manera infantil, algo muy típico en él. - ¿Y qué tanto te miraba? ¿De qué forma?

- NamJoon...

- Pero Kookie, solo cuéntame, me veo en la necesidad de escu-... - fue interrumpido por una tercera voz.

- Uh, disculpen. ¿Interrumpo algo?

- Jin... - habló el castaño entre sorprendido y escéptico. No esperaba verlo de nuevo a pesar de estar en el mismo centro estudiantil.

- Hola Kookie. - le saludó con cariño, ese mismo que le tenía a pesar de haber sido rechazado. - ¿Podemos hablar?

- ¿Hablar? - preguntó dudoso. - Uh, sí. Pero ¿Tomará mucho tiempo? Debo cumplir con algunas cosas en un par de minutos

- No creo que tanta, pero realmente necesito conversar contigo.

- Ah, bueno - agregó NamJoon sintiéndose un verdadero mal tercio. -, ya debo irme. Ten mucho cuidado, Kookie. Nos vemos mañana.

El castaño asintió, despidiéndose con un simple gesto de mano. La verdad es que no sabía cómo actuar delante del alfa que tiempo atrás echó a perder la amistad que tenían.

- Ya que debes seguir aquí entonces te lo diré sin tanto rodeo.

Jeon relamió sus labios con algo de ansiedad, deseaba escuchar lo que este iba a decirle.

- Kookie - lo miró fijamente, rascando su rojiza oreja. -, yo vine a disculparme. Estoy muy arrepentido por cómo me comporté contigo aquella fecha, estuve mal, lo admito.

Los ojitos del omega se expandieron, sintiéndose asombrado cada vez más.

- Desde lo que pasó, he seguido pensando en ti y en si te encuentras bien actualmente. - chasqueó la lengua, sonriendo con desgana. - Terminé una amistad tan especial por no haber sabido controlar mis sentimientos.

- No fue tu culpa, Jin. Simplemente son cosas que suceden. - intentó darle ánimos.

- Quizás lo que dictaminó mi corazón no; pero mi reacción, sí lo fue. Debí entenderte.

- Está bien, ya no te preocupes por ello. Lo más importante para mí es que hayas venido a disculparte. - tragó saliva con cierta pena ante lo que diría. - Yo, yo en verdad te extrañé mucho.

Esta vez fue el pulso del alfa el que se aceleró, pero debido a la conmoción y la tranquilidad que JeongGuk le originó al mismo tiempo. Debido a que quería darse una oportunidad en el amor, primero debía liberar todas las emociones y actitudes que lo llevaron a ser negativo por el antiguo rechazo.

- Entonces, eso quiero decir que, ¿Aceptas mis disculpas?

- Sí, yo sabía que eras un chico muy noble. Lo sabía.

Jin no pudo contenerse y entonces rodeó entre sus brazos el cuerpo de JeongGuk. Inhalando su dulce aroma y sonriendo porque el abrazo que le proporcionó fue completamente correspondido.

- Yo también te extrañé, Kookie. Más de lo que imaginas.

El mencionado soltó un par de risas, importándole muy poco que alguien pudiera verlo. Había extrañado tanto su amistad con el alfa de hombros anchos.

- Me encantaría seguir siendo tu amigo. - habló Jin ni bien se separaron. - Han pasado tantas cosas que necesito contarte, después de todo eres un omega y me ayudarías mucho con alguien.

- Por supuesto que sí, bobo. - le siguió sonriendo. - Pero, espera, ¿Alguien?

- preguntó con curiosidad desbordante. - ¿Acaso Jinnie está enamorado?

El alfa evitó apenarse, riendo con algo de nerviosismo. - Te lo diré. ¿Qué te parece hoy, más tarde en la cafetería que está cerca a tu casa?

JeongGuk aplaudió con felicidad. - ¡Me parece una súper idea! Terminaré todo y te esperaré afuera.

- Muy bien, prometo ser puntual. - le guiñó un ojo a modo de juego. Jin solía ser muy atrevido a veces. - Espero no te aburras cuando te cuente todo sobre el omega que me trae como un tonto. - bromeó. - Nos vemos luego.

- Nada de eso, estaré encantado. ¡Ve con cuidado! - gritó lo último al ver que el alfa ya estaba muy lejos de él.

La sonrisa nunca se fue de su rostro. El regreso de Jin a su vida había mejorado por completo el extraño día que tenía. Rápidamente corrió al almacén en donde estaban los materiales de limpieza y se dispuso a empezar su labor. Mientras más se apresuraba, más tiempo tendría para prepararse y ver a su amigo alfa.

Pero claro, no fue consciente de cierto castaño que también tenía que quedarse a cumplir su sanción. Quien además, había escuchado la parte específica en donde aquel alfa le había pedido una cita a JeongGuk.

Jung HoSeok no pudo escuchar nada más luego de eso. La incomodidad y el fastidio se instalaron en su pecho de manera desagradable. Quizás no lo entendía del todo, pero era algo que no quería que sucediera frente a él. Era una sensación desconocida y sentía que iba a enloquecer. No iba a permitir que ese alfa hiciera algo.

¡Porla Diosa Luna! ¿Alguien puede darle la definición concisa de aquello? Ojalá HoSeok pudiera aceptar la respuesta.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro