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Nisha se remueve ligeramente y mira el techo de la habitación unos cuantos segundos antes de sentir sus ojos llenos de lágrimas, la chica cierra los ojos fuertemente y comienza a sollozar.

—Sería un sueño hecho realidad que tuvieras un hijo— asegura Lucifer hacia su hija la cual sonrió con burla.

—¿Quieres un nieto?— pregunta Nisha divertida pasando a la siguiente hoja del libro que se encontraba leyendo.

—Claro que quiero un nieto, lo consentiría y le daría todo lo que me pidiera— asegura Lucifer con una arrogante sonrisa que hace reír a Nisha la cual negó ligeramente.

—Sería tan lindo que tengamos una familia— asegura Edward acariciando el plano vientre de Nisha la cual negó divertida.

—¿Quieres tener una familia conmigo?— pregunta Nisha acariciando el pecho desnudo de su prometido.

—Por supuesto que quiero tener una familia contigo, una linda niña que se parezca a ti y me haga protegerla de cualquier niño—Nisha comienza a reírse pero no evita imaginarse en ese escenario junto a Edward.

—O un niño, le enseñaría a conquistar a las niñas.

—¿Y crees que te dejaría que mi hijo se volviera en rompecorazones?— pregunta Nisha divertida haciendo reír a Edward.

—Le ensañaría a robarse a las hijas de otros hombres— asegura Edward en un susurro acercándose peligrosamente a Nisha la cual se mantuvo sonriendo.

—No me digas, ¿yo soy la hija de otro hombre?— pregunta Nisha divertida enredando su brazo en el cuello de Edward.

—Algo así— susurra Edward antes de besar a Nisha con necesidad siendo correspondida por esta.

Nisha cubre su rostro con sus manos y sigue sollozando, la chica pone una mano en su vientre y sigue llorando estando completamente decepcionada de ella misma.

La princesa de la oscuridad se sienta en la camilla sintiendo como el aire comienza a faltarle, mira a su alrededor rápidamente antes de arrancarse cada uno de los cables que tiene conectados a su cuerpo.

Nisha se levanta de la cama y sale de la habitación con velocidad comenzando a correr por todo el hospital, la chica se mantiene llorando sintiéndose tan decepcionada.

—Mi cielo, el doctor...— Edward no puede terminar de hablar porque al momento de abrir la puerta de la habitación se da cuenta de que Nisha no se encuentra dentro de esta.

—¿Nisha?

El chico entra a la habitación rápidamente antes de salir con velocidad hacia la recepción del piso del hospital.

—Com licença, ¿você viu minha esposa sair do quarto dela?— pregunta Edward hacia la enfermera la cual frunció el ceño confundida.

—A verdade não— admite la chica haciendo una pequeña mueca con sus labios.

—Código amarelo, paciente ausente— tanto Edward como la enfermera fruncen el ceño al momento de escuchar una voz masculina por medio de las bocinas del hospital.

—Mulher de vinte años, cabelos castanhos e constituição esbelta, quarto cento e quatro— dice la enfermera por medio de un micrófono que tiene en el escritorio.

Edward comienza a correr controlando su velocidad sobrenatural, el chico se choca con varios doctores que también se encontraban buscando a Nisha.

—¡Nisha!—grita Edward constantemente junto con los demás doctores hasta que estos se detuvieron en seco junto con el vampiro.

Todos miran hacia el siguiente pasillo encontrándose con la espalda de una mujer la cual se encontraba en el piso sollozando, Edward reconoce inmediatamente a la mujer y no duda en correr hacia ella para abrazarla pegándola a su pecho.

—Mi amor, gracias a dios— susurra Edward logrando sentirse más tranquilo pero esa sensación desaparece al momento de escuchar los sollozos de su esposa.

—P-Perdón, p-perdóname Edward— súplica Nisha con dificultad ya que tiene la voz rota.

—¿Por qué te disculpas?— pregunta Edward en un susurro tomando las mejillas de Nisha con cuidado para hacer que esta lo mirará.

—E-Es mi c-culpa, n-no puedo d-darte la f-familia que q-queríamos— solloza Nisha antes de cerrar los ojos fuertemente y bajar la mirada.

—No mi cielo, no es tu culpa— asegura Edward en un susurro viendo unos cuantos segundos a los doctores que tenían intenciones de llevarse a Nisha.

—Vou levá-lo pessoalmente ao seu quarto.

Los doctores asienten antes de alejarse de la pareja de casados, Edward mira a Nisha y deja que esta se esconda en su pecho para que siga llorando.

—Tal vez n-nosotros no e-estábamos hechos para s-ser padres, el d-destino no lo q-quiso así mi c-cielo— explica Edward con dificultad sintiendo nuevamente la sensación del nudo en su garganta.

—Lo s-siento— solloza Nisha sintiendo las constantes caricias de su esposo en su espalda.

—No te d-disculpes, por f-favor— súplica Edward cerrando los ojos fuertemente.

Los dos se mantienen así unos cuantos segundos más antes de que Edward se alejará de Nisha lentamente.

—Vamos, tienes que descansar— asegura Edward tomando a su esposa en brazos con sumo cuidado.

Nisha esconde su rostro en el cuello de Edward y enreda sus brazos en el cuello de este dejando que la llevará a su habitación.

—Señor Cullen, necesito hablar con usted— dice el doctor al momento en que vio a Edward queriendo entrar a la habitación de Nisha.

—¿Qué pasa doctor?— pregunta Edward confundido viendo la expresión seria del doctor.

—Tengo que informarle que tuvimos que sedar a su esposa, ella sufre cada cierto tiempo ataques de pánico por lo que decidimos sedarla— explica el doctor viendo como Edward hace una pequeña mueca con sus labios.

—¿Cuánto tiempo estará sedada o...?—intenta preguntar Edward pero se siente impotente al no poder hacer nada para ayudar a su esposa.

—Tendremos que sedarla siempre que sea necesario mientras se encuentre internada en el hospital, tiene que estar en observación por el aborto que sufrió— explica el doctor viendo como Edward mira por el gran ventanal que tiene la habitación de Nisha.

Edward juega inconscientemente con su anillo de casado mientras ve a su esposa completamente dormida en la camilla de la habitación del hospital, tiene una máscara de oxígeno y diversos cables conectados a ella.

—Ella estará bien Señor Cullen, podrá salir de esto con su ayuda— asegura el doctor poniendo una mano en el hombro de Edward el cual regresó a verlo y asintió lentamente.

—Tiene que estar con ella en todo momento, usted es la única persona que puede demostrarle que juntos saldrán adelante de esta prueba.

—Gracias doctor— dice Edward con una pequeña sonrisa antes de decidir entrar a la habitación de Nisha.

El vampiro se acerca lentamente hacia su esposa hasta sentarse a su lado para tomar su mano, Edward acaricia la mano de su esposa antes de besar sus nudillos. El chico mira a su esposa unos cuantos segundos antes de ver como esta frunció el ceño y se removió ligeramente.

—Mi amor— susurra Edward viendo como Nisha abrió los ojos después de unos cuantos segundos.

Nisha mira a Edward unos cuantos segundos antes de decidir quitarse la máscara de oxígeno, el chico sonríe al momento de ver la pequeña sonrisa de su esposa.

—¿Cómo te sientes?— pregunta Edward delicadamente sintiéndose un poco más tranquilo al ver la sonrisa de Nisha pero eso no evita sentirse mal al ver que su esposa ya no tiene el mismo brillo en su mirada.

—Agotada— admite Nisha en un susurro acariciando la mano de su esposo.

—Lo siento tanto Edward.

—Deja de disculparte por favor mi cielo— súplica Edward cerrando los ojos fuertemente mientras acerca la mano de Nisha a sus labios para besar el dorso de su mano.

—Es m-mi culpa no p-poder darte h-hijos, soy u-una mujer i-incompleta al n-no poder...— Edward no soporta seguir escuchando las palabras de Nisha por lo que decide levantarse de su lugar para besar sus labios e interrumpirla.

—Mi vida no eres una mujer incompleta, sé que te describes de esa manera por las creencias de antes pero no es así— asegura Edward acariciando las mejillas de Nisha con cariño.

—Eres una mujer completa, sigues siendo mi mujer, mi esposa, mi linda demonio.

Nisha no evita reírse pero se mantiene llorando, Edward sonríe y vuelve a besar los labios de su esposa siendo correspondido por esta.

—Podemos tener hijos de otra manera, podríamos adoptar— recomienda Edward haciendo que Nisha lo mirará con ilusión.

—¿De verdad?— pregunta Nisha en un susurro viendo como Edward sonríe y asiente lentamente.

—Claro que sí, recuerdo que también queríamos adoptar en su momento— recuerda Edward con una sonrisa sin dejar de acaricia las mejillas de su esposa.

—Además, si hubiéramos tenido a nuestro propio bebé... sería literalmente un demonio— asegura Edward haciendo reír a Nisha la cual negó ligeramente.

—Te amo Edward— susurra Nisha retomando esa mirada ilusionada que enamoró a Edward desde el principio.

—Y yo te amo a ti mi linda demonio— asegura Edward en un susurro para besar los labios de Nisha lentamente.

—Te prometo que adoptaremos a todo uno orfanato completo.

Nisha se ríe y asiente lentamente haciendo sonreír a Edward, los dos se besan una vez más cerrando su promesa.

No me toquen estoy sensible... mis bebés se merecen todo lo mejor del mundo.

*Procede a esconderse en un rincón y llorar como una magdalena*

Los amo hermosas personitas, nos vemos en una próxima actualización❤️

🔥𝐌𝐎𝐀𝐍𝐀🔥

Esta es una historia original de Wattpad, actualmente igual se encuentra disponible en Inkitt y en Booknet, si la lees en otra plataforma se debe a un virus y una copia sin mi permiso.