Capitulo uno: Bridgit DeBerry.

Bridgit DeBerry, una de las chicas mas bonitas de Liverpool protagonizaba el escandalo mas sonado en aquella semana, todos hablaban de ella y ellos.

Bridgit era una chica de familia adinerada, con mucha educación y estudio. Se podría decir que su cabello rubio, labios rojos y ojos azules como los de un ángel no le bastaban, también era muy inteligente al igual que educada, cortés. La cual todo chico quería tener. Por obvias razones se pelearían por ella.

Si, efectivamente. Muchos chicos se peleaban por ella, pero eso no importaba. El escandalo que se hizo escuchar fue por dos amigos que trataron de salir con ella, se pelaron hasta el punto de dejar de hablarse. Liam y Greyson eran muy buenos amigos y eso había terminado a causa de la dulzura de aquella chica.

Las chicas de su edad pensaban que eso era muy romántico al igual que dramático lo que las hacia emocionarse. Mientras que los chicos pensaban lo contrario, si, Bridgit valía la pena pero no tanto como para deteriorar una amistad como esa.

La rubia entro a la heladería llamando la atención, retiro sus gafas de sol blancas, al ver que la mayoría ahí la miraba, alargó una mueca de orgullo, después con la mirada busco a sus amigas y demás chicas que la esperaban en una mesa. Bridgit se dirigió a aquella mesa, habían dejado un lugar para ella así que se sentó coloco su bolso junto con una de sus muchas gafas.

—Bien, pregunten —Dijo alzando sus manos hacia ellas como un ademán de permiso.

De pronto todas la atacaron con preguntas, como si fuera una estrella de Hollywood en una prensa ella escogía a quien le daría la palabra.

—¡Tu! —exclamo —¿Pregunta?

—¿Que se siente que dos chicos tan lindos se pelearán por ti?

La rubia pensó unos instantes formando la respuesta correcta, ella quería aclarar el tema para no manchar su nombre y mucho menos su dignidad. Tanto era importante para su familia, que le prohibieron hablar con sus demás pretendientes y rechazar todas las propuestas de citas que le hicieran. Todo hasta que el tema quedara olvidado.

—Indignante —contesto —Aunque parece un acto grato no lo es, fue muy descortés y no apropiado.

—¿Estabas enamorada de alguno de los dos?

Bridgit apretó la boca, lo que hizo que su labial rojos se mezclara mas en sus delgados labios. Como alternativa de ayuda echo una mirada rápida a su mejor amiga, ella comprendió asintiendo discretamente y dijo:

—Cambiando de tema chicas ¿Vieron los zapatos de ruby ayer? Estaban hermosos.

De pronto todas las chicas hablaron de eso olvidándose del tema anterior fácilmente.

—Gracias —susurro Bridgit

A lo que su amiga le respondió con una sonrisa.

De pronto la multitud volvió al tema sobre el triangulo amoroso de la chica que tenían enfrente.

—¿Quien te invito a salir primero?

—En realidad fue Liam —dijo —Pero a las pocas horas lo hizo Greyson.

—¿Te invitaron para el mismo día?

—No —contesto sacudiendo la cabeza —pero Liam le comento sobre mi cita con el y así fue como se pelearon.

—Que mal, eran muy buenos amigos. Pensé que se reconciliarían rápido.

Todas siguieron hablando del tema, mientras que muchachos las veían platicar. Uno de ellos era John Lennon. El al salir del lugar miro a Bridgit, tenían razón vaya que valía la pena.

John Lennon era un chico problema, pero era cierto que traía a varias chicas muertas por el, y como no si tenia un rostro no tan común y un peinado en honor a Elvis Presley. El chico malo que toda chica buena quería tener.

John avanzo una cuantas calles hasta llegar a su bicicleta, cuando le estaba quitando la cadena vio pasar nuevamente a la rubia y a su mejor amiga.

—Te veo a las 4 en mi casa —dijo Bridgit a su amiga tomándole el hombro —¿Vale?

La chica asintió con una sonrisa acompañada, después ambas voltearon a ver quién las miraba a lo que John por impulso miro hacia otra parte distraído. Bridgit se fue dejando sola a su amiga en ese mismo lugar, ella avanzó hasta donde estaba John, el la miro y entendió que su bicicleta también estaba aun lado de la suya.

—¿Tu amiga es Bridgit, no? —pregunto sin darse cuenta de la cara de la jovencita.

—Si.

Cuando ella sacó su transporte de la cadena la jalo con brusquedad haciendo que John la mirase bien. Vio el castaño de su pelo, el marrón de sus ojos y los hoyuelos que se le formaban al sonreír. Se quedo apreciandola unos segundos hasta que ella se alejo un poco de el.

—La chica que separa familias y amistades —volvió a decir el chico.

Haciendo que la castaña frunciera el ceño ¿Menciono que su cabello era ondulado mas que el de las demás?

—Estás hablando de mi mejor amiga ¿Sabes? —dijo con enojo.

—Perdón, solo quería que sonrieras un poco -Contesto acercándose a ella —Era broma.

La chica formo una mueca mirándolo.

—Mi nombre es John Lennon -El extendió su mano hacia ella —¿Y tu?

—Yo voy tarde a casa —contesto —Perdón John tengo que irme.

Ella subió a su bicicleta dejando con la mano extendida al joven. Aunque el no dejo de mirarla hasta que estuviera fuera de su campo visual, formando una sonrisa en sus labios.

Su amiga era linda, pero ella era diferente.

John fue hasta su casa, antes de entrar repaso todo nuevamente, la castaña no salia de su cabeza no por un segundo, aun tenia el sonido de su voz apagada, recordaba sus bellos hoyuelos y las ojeras que tenia por desvelarse tanto probablemente leyendo. Tenia sentimientos por ella aunque no sabia si eran buenos o malos. Apenas la conoció y no intercambiaron muchas palabras. Ella era demasiado directa.