Narrador
Cuando el Rey entró al castillo con la Valkiria en brazos, Audrey comenzó a ponerse celosa.

Némesis veía como su médico, Ratchet, curaba las heridas, al parecer todo iba bien, por lo que salió de la bahía médica, topandose con Drift

Némesis: Drift, necesito que por favor arregles una habitación de huésped

Drift: Claro Sensei, pero ¿acaso llego alguien al castillo?

Némesis: Si, es una femme y una muy especial, es una Valkiria, ¿sabes donde está Audrey?

Drift: No Sensei,no la eh visto

Némesis: Bien, gracias

El Rey sin decir más, se retiro y fue a buscar a su femme. Cuando la encontró en la sala principal la vio de espaldas y cuando se giró para verlo, el Rey vio la vestimenta que llevaba puesta (multimedia)

Némesis: Audrey, ¿por qué estás vestida así? Sabes que no me gusta que te vistas de una manera tan provocativa - dijo con algo de molestia

Audrey: Mi amor, dime ¿qué tiene de malo? - dijo casi en forma de burla

Némesis: Sabes bien que me molesta que te vistas de esa forma; cambiando de tema, traje a una femme al castillo, se quedará aquí a partir de hoy

Audrey: Si vi que llegaste con ella, ¿quién es? - pregunto con algo de molestia

Némesis: Se llama Sariatu, es una Valkiria; ve a cambiarte, no quiero que te vean así - dijo demorando su molestia y salió de la sala para ir devuelta a la bahía, no sin antes ir con Elita, quien era diseñadora, y pedirle un nuevo vestido para Sariatu y por el momento una bata.

Al llegar a la bahía, se topó con Ratchet saliendo de la sala, preguntó por el estado de la femme y ella estaba en buen estado, por lo que ya estaba dada de alta, así que paso para verla.

Estaba recostada de lado, con una manta cubriéndola desde los pies hasta los hombros, hasta que se despertó y lo vio parado en la puerta, por lo que sostuvo la manta y se sentó en la litera

Sariatu: ¿Mi Señor, que se le ofrece?

Némesis: No, nada realmente, solo venía por ti para llevarte a tu nueva habitación, Ratchet ya te dio de alta

Sariatu: Entiendo pero, ¿cómo voy a salir así? - dijo señalando la manta que la cubría debido a que el médico le quitó el vestido para revisarla, aparte de que estaba inservible

Némesis: Por eso te traje una bata, en lo que te consigo algo para vestir - le dio la bata sin dejar de mirarla.

Cuando la vio indefensa en los límites de sus tierras, sintió algo, un cosquilleo en su chispa, una calidez, no había sentido eso ni con Audrey, ¿qué era ese sentido?

Sariatu: ¿Mi Señor?

Némesis: ¿eh? Disculpa

Sariatu; Emmm, ¿podría dejarme sola un momento en lo que me pongo la bata, por favor?

Némesis: Claro, lo siento, te espero afuera para llevarte a tu habitación - dicho esto, salió de la bahía, mientras que Sariatu se ponía la bata

El Rey estaba recargado en la pared junto a la puerta, esperando a que saliera, cuando de repente se abrió la puerta y salió Sariatu, Némesis no pudo evitar verla de pies a cabeza y más sus ojos, esos ojos azules eléctricos, unos ojos hermosos, al igual que sus labios rojos, era hermosa

Némesis: Vamos a llevarte a tu habitación

Sariatu: De acuerdo Mi Señor

Ambos caminaron por los pasillos hasta llegar a una escalera, que llevaba al piso de las habitaciones, al final del pasillo hacia la derecha estaba una puerta y la curiosidad se apoderó de Sariatu, pero tantas preguntas era fastidioso a veces

Némesis: Esa es mi habitación, ven

Némesis abrió una puerta, mostrando la habitación en donde se quedaría ella, era algo lujosa, pero no quería protestar

El Rey la llevó más adentro de la habitación y abrió una puerta revelando el baño

Némesis: Espero que la habitación sea de tu agrado

Sariatu; Es muy hermosa, la verdad, jamás había visto una habitación que tuviera baño privado

Némesis: ¿De qué casta vienes?

Sariatu: De las castas bajas, o más bien, cerca de ellas

Némesis: Entiendo - ambos salieron del baño para ir a la habitación - si necesitas algo, no dudes en venir a mi

Sariatu: Claro Mi Señor, gracias

El Rey salió de la habitación para ir con Elita pero se topó con Audrey, que no le había hecho caso con respecto a su vestuario

Némesis: Audrey, creí haberte dicho que te cambiaras

Audrey: Si, lo hiciste, pero eso no es a lo que vengo, quiero decirte que no quiero que estés cerca de esa femme que de seguro es una cualquiera

Némesis: Audrey, no te permito que le hables de esa forma, y no te preocupes, sólo acudirá a mi en caso de que necesite algo - dicho eso, el Rey fue a ver a su amiga.

Llegando a la sala que había solo para ella vio varios vestidos en maniquíes, pero solo uno llamó su atención

Elita: ¿Cuál quieres?

Némesis: Éste - dijo acercándose al vestido - creo que le quedara bien

Audrey: ¿Ahora le vas a dar vestimenta? - pregunto burlona entrando - ¿qué sigue, vas a bañarla?

Némesis: Elita, déjanos solos por favor - Elita salió dejando a la pareja solos - ¿Cual es tu problema, Audrey?

Audrey: Tú sabes que no me gusta que otras femmes se te acerquen, y esta no es la excepción

Némesis: Audrey, no empieces de nuevo con tus celos, no estoy de humor para soportar tus típicos celos

El Rey salió para ir a la habitación de Sariatu con el vestido.