Ϟ 11. 𝗮 𝘄𝗲𝗹𝗹 𝗸𝗲𝗽𝘁 𝘀𝗲𝗮𝗰𝗿𝗲𝘁

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11 : : CAPÍTULO ONCE

i. UN SECRETO BIEN GUARDADO

TOMAR DECISIONES ES UNA DE LAS COSAS más complicadas que una persona puede hacer, sin querer siempre dañaremos a un tercero o a varios por tomar un solo camino, no importa cuál sea nuestra decisión que tan grande o pequeña sea, toda decisión que tomemos por más benevolente que sea no la podemos tomar a la ligera, tampoco solos siempre vamos a necesitar de la opinión ajena para llegar una conclusión. Sin querer nuestras decisiones terminan dañando a las personas que están a nuestro alrededor pero a la misma vez también terminan salvando a los demás. Para salvar y ayudar a alguien se tiene que dañar a otro para hacerlo por muy raro que lo parezca era cierto, toda acción tenía una reacción y cada acción buena tenía una mala. Igualmente un accione mala tenía una reacción buena.

Y Ronnie aprendió esa lección cuando le dijo a Law su veredicto final. Aquellos ojos grises se llenaron de tristeza disfrazada con comprensión. El pirata había sido claro en decirle que no la obligaría a ir con él.

"-tranquila lo comprendo. No puedes dejar de la noche a la mañana la vida que llevas aquí por un desconocido.

-no eres un desconocido.

-no te obligare a venir, por mucho que quiera tu lugar está aquí y lo comprendo."

Sus palabras aparecieron dentro de su cabeza como espinas, le había tomado mucho cariño en tan pocos días.

Ronnie estaba parada en el muelle viendo a lo lejos que se perdía en el alta mar el barco de Trafalgar Law. De sus ojos bajan gruesas lágrimas que se pierden en la curva de su mandíbula entre sus manos aprieta el gorro que el ojigris le había obsequiado. Ese gorro tenía más peso de lo pensando y nadie creería que la castaña era lo suficientemente importante como para haberse quedado con uno de los objetos más preciados por el capitán Law.

Un beso y un gorro, es todo lo que Trafalgar Law le había dejado como un último recuerdo. El objeto tenía su aroma masculino, sus labios tenían la pigmentación de la calidez del ojigris.

Ahora que lo pensaba no era un simple objetó, tampoco un simple gorro, ese gorro lleva consigo el juramento que un día se volvería a ver, como la promesa de que existía un mañana para los dos, que el sol podía volver a brillar.

¿Que la había orillado a quedarse?

Sí, un día antes a la partida, estaba segura de que se iría con Torao.

Ronnie no estaba segura de que si tenía una débil fuerza de palabra o fuera tan fácil de convencer. Pero en cuanto escuchó la voz quebrada del rubio toda decisión cambio de rumbo, toda la inseguridad se esfumó de inmediato. Es como si con Sanji estuviera completamente segura y con Torao existiera la opción de la duda.

Es como si Sanji tuviera su disco y Torao sin querer la obligará a sacar lo mejor de ella.

Con uno se sentía cómoda pero con el otro era más confuso, la sensación que se aloja en su estómago, la confusión en no entender sus palabras, sus peleas causadas por cualquier tontería. Sanji tendría su disco. Pero también estaba lo que sentía por Law esa sensación no se iría de la noche a la mañana, tardaría tiempo en olvidarlo o al menos aprender a vivir sin su presencia. Se había acostumbrado a él en pocos días.

A unos pasos de ella se encontraban Jaeger, Sanji y Taylor. Los tres habían admirado la triste despedida de aquellos dos.

Sanji había tenido que disimular la felicidad que sentía al saber que Ronnie al final de cuentas lo había escogido antes que a Law. Lo cual era difícil de creer para él puesto que ninguna mujer antes lo había puesto sobre otro hombre, que lo escogieran sobre otro causa dentro de su ser una extraña sensación de satisfacción.

Una mujer como aquella lo había elegido.

-al menos muestra un poco menos de felicidad.- le dice Taylor al rubio.

-no puedo ocultarla.- responde el rubio que no aguanto sus ganas de sonreír.- me prefirió a mi sobre el otro. Y es algo que nadie había hecho.

-si las cosas hubieran sido al revés, el que estaría llorando serías tú Vinsmoke.- lo acusó Jaeger. No comprendía a su mejor amigo.- muestra un poco de compasión.

-ya se, Trafalgar no merece las lágrimas de Ronnie.

-tampoco tú.- opino la rubia.

Sanji se sentía un poco mal al ver a la castaña llorando pero sabía que todo había sido por una buena causa.

Ahora que la tenía solamente para él, recuperaría todo el tiempo que habían perdido por sus tonterías. Sería mejor por ella y dejaría que todo fluyera a pesar del miedo que le está corcomiendo por dentro.

Sintiéndose tranquilo camino hacia la castaña, estando detrás de ella colocó una mano en su hombro.

-princesa.- la llamo con aquel apodo que tanto le gustaba y extraño decirle.- vamos adentro, está comenzando a ponerse frío.

-ay Sanji.- murmuró la castaña volteandose para abrazar al rubio. Quien no dudo en corresponder.- voy a extrañar mucho a Torao.

-lo vamos a extrañar.- murmuró acariciando el cabello de ella.- tranquila algún día lo volverás a ver, ya verás.

-no estoy tan segura de eso.

Sanji puso los ojos en blanco.

Ser el pañuelo de lágrimas no era de su gusto pero por Ronnie se convertiría hasta un dios.

-veras que si.- la reconfortó apretándola más entre sus brazos.- mientras tanto, ¿quieres que te prepare algo para comer?

-puedes hacerme bolas de arroz.

-¿bolas de arroz? pensé que no te gustaban...

-son las favoritas de Torao.

Sanji maldijo dentro de su cabeza.

Talvez había sido una mala idea haberle dicho que se quedará. No, si podía soportarlo en unos días las cosas serían como antes y ese mal trago sería olvidado.

-si eso es lo que quieres.- respondió tras haber suspirado. Las cosas no serían tan fáciles como creía.- ¿algo más que deses mi bella dama?

-nop, solo agrégale chocolate.

-¿chocolate?

-si, el dulce les da un buen sabor a las bolas de arroz.

-tus deseos son órdenes.- murmuró dejando un beso sobre la coronilla de la chica.

Ronnie se sentía un poco más tranquila estar entre los brazos de Sanji le transmitía una tranquilidad reconfortante. Lo que eliminaba de la atmósfera la presión que había aparecido en su pecho por haber elegido a Sanji antes que a Torao.

Aunque nadie sabía la razón del porque tomo aquella decisión. Torao había sido demasiado comprensivo con ella al no haberle preguntado, al parecer ya se había hecho a la idea de que no se iría con él. O talvez, Law comprendió que no tenía oportunidad alguna con ella.

El rubio no estaba del todo conforme con lo que estaba pasando pero tenía la esperanza de que las cosas cambiarían en los siguientes días.

-dejame conquistarte con mi comida.- recitó en un murmullo que según él solo escuchó.











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Días más tarde las cosas volvían a ser como antes, la rutina volvía a ser la misma y Sanji se sentía feliz al ver a la chica sonriente como siempre. Al principio le había preocupado que está entrara en un cuadro de depresión puesto que los primeros días, había estado decaída y había hecho de todo para cambiar su expresión.

Ahora estaba más tranquilo al verla tararear canciones por los pasillos, ir entre las mesas tomando pedidos a los clientes con su característica sonrisa. Inclusive habían regresado las tardes en que los dos se perdían durante los últimos rayos de sol que dan paso a la noche.

Todo parecía haber vuelto a la normalidad, como si nada hubiera pasado.

Cómo era costumbre, Sanji y Ronnie se encuentran en el tejado del Baratie sentados en una manta de cuadros blancos y rojos. El rubio veía de reojo el perfil de la castaña quién tenía la mirada puesta en el cielo.

-mira esa nube tiene la forma de un hongo.- señaló Ronnie con su dedo.

-y esa parece un conejo.- señaló ahora Sanji hacia la nube rara.

-esa se parece a Vins.

-oye es cierto.

Los dos disfrutaban de la compañía del otro, Sanji se encontraba feliz por haber recuperado de nuevo esos días.

Amaba el tiempo de calidad que pasaba con Ronnie, esos momentos que guarda en su memoria como los mejores que a vivido durante toda su vida. No comprendía dónde había estado todo ese tiempo, la castaña había llevado felicidad a su lugrebe vida.

No negaría que le gustaría llevar las cosas a otro nivel pero con el simple hecho de saber que ella disfruta de su compañía es más que suficiente. No tenía que haber una interacción de sexo de por medio para que las cosas fluyeran mejor, bastaba con sentirla cerca.

-¿sabes? ya no siento tanto la ausencia de Torao.- murmuró ella al sentir una brisa que elevó milímetros el gorro del ojigris.- contigo a mi lado, me olvidó de todo.

-y si ya no lo extrañas, ¿por qué usas su sombrero?

-porque es un obsequió.

-pensé que se lo devolverías cuando se volvieran a ver.

-lo se, es su promesa. Torao prometió que volvería por su sombrero.

Sanji apretó los labios.

No había pensado mucho en ese juramento, si Law es como creía que era este volvería tarde o temprano. Talvez tardaría años o talvez meses pero de qué en algún momento lo volverían haber estaba asegurado.

No quería pensar en nada, no quería arruinar el momento con ella.

-mira esa nube, parece un conejo.- dijo el rubio señalando hacia el cielo.

La castaña frunció el entrecejo, ella no le veía forma de conejo se veía más como un elefante. A su parecer.

-no, es un elefante.- aclaro.

-¿que? no, mira bien. Es un conejo.

-no, no, no el que tiene que ver bien eres tú.- lo acusó.- es un elefante.

-no mira esa es su oreja.

-es su trompa.

-oreja.

-trompa.

-oreja dije.

El rubio hizo una mueca al darse cuenta de la estúpida discusión entre los dos. Cómo de las tantas veces en que habían discutido y todo terminaba cuando le daba la razón a ella.

Sus ojos azules llegaron a los avellana, observó esa chispa de competitividad en los ojos ajenos. La mueca en el rostro de Ronnie, sus cejas contraídas, sus labios semi apretados.

La dejaría ganar.

Cómo siempre.

-esta bien, es un elefante.

-¡ja! ¡te lo dije!- festejo la castaña.

Sanji comenzó a reír por lo bajo.

Verla feliz era de una las cosas que tanto ama de ella. Su sonrisa que podía iluminar toda una ciudad.

No importaba que tanto se pelearán, al final de cuentas ellos nunca pasarían de moda. Encontrarían la forma de solucionar las cosas.

Lamentablemente su momento se vio interrumpido por una voz masculina.

-debi haber buscado aquí primero.- dijo el pelinegro apoyado en la orilla del techo.- Ronnie, te está buscando Zeff necesita hablar contigo.

-¿por qué quiere hablar conmigo?- pregunto confundida.- ya le entregué el reporte de la semana.

-no me dijo el porque, solo me envió a buscarte.- aclaro.

La castaña suspiro, se levantó de su lugar y espero a que Jaeger saliera de la única salida que tenían. Una vez lo hizo bajo por la escalera.

Sanji sospecho de la presencia de Jaeger en el techo, entrecerró los ojos y espero a que le dijera lo que había venido a decirle. Intuía que ese algo tenía que ver con Ronnie puesto que se veía bastante urgido en que se fuera.

Colocó las manos detrás de su cabeza y cerro los ojos. No tenía humor para hablar acerca de la situación en la que se había metido.

Ya había confesado que el había sido el responsable de que Ronnie siguiera en el Baratie. No sé arrepentía de haberlo hecho y eso era algo que a Jaeger no le gustaba. Motivo por el cual quería saber lo que su amigo planeaba hacer, el fue testigo de lo mucho que Ronnie quería irse con Law y por alguna razón quería convencerse de que Ronnie solo había cambiado de opinión repentinamente.

Sabía la razón por la que Sanji se mantenía aferrado a la castaña pero no estaba seguro hasta donde iba a llegar por ella.

La última vez que había entregado todo por una mujer. Las cosas no terminaron como quisiera, un corazón roto y las lágrimas que no pararon. Podía recordarlo bastante bien.

-y bien, ¿que vas a decir?- pregunto el rubio ante el silencio prolongando.

-que descaro.- masculla.- bien ya sabes a lo que vengó, así que...

-no tengo humor para tus sermones.- lo interrumpió.- así que si fueras tan amable en irte.

-no es ningún sermón.- apretó los labios.

-entonces, ¿que es?

-¿que vas hacer con ella?

-con Ronnie.- apretó los labios, el mismo aceptaba que tenía miedo del resultado.- no estoy tan seguro.

-ella era feliz a lado de Trafalgar.- dijo y su repuesta irritó al rubio.- pero también es feliz a tu lado, todo lo hemos notado.- aclaró.- pero tienes que tomar una decisión. No puedes solo depender de ese cariño que ella te da.

-tengo un poco de miedo. La última vez...

Jaeger estaba cansado de que Sanji se la viviera evitando el tema de su matrimonio fallido.

-Ronnie es muy diferente a Aemma Grayson.- masculla sin pensar.

Sanji sintió un bote de agua fría caerle sobre los hombros, escuchar el nombre de quella mujer a la cual le había entregado todo, solo sacaba a la luz los recuerdos dolorosos de ese tiempo.

Nisiquiera debería dolerle, no la amó lo suficiente -es de lo que quería convencerse- como decir que era suya. Si había aceptado ese estúpido matrimonio había sido por el amor que él creí haberle tenido a esa mujer. Porque desde muy pequeño había estado enamorado de esa niña.

El pinchazo dentro de su pecho se expandió, sus dedos temblaron y cerro los ojos con fuerza.

-maldicion, ¿por qué tenías que decir su nombre?- protestó apretando los labios.- habíamos quedado que no hablaríamos nada de ella.

-ya es hora que superes ese tema, evadirlo no es superar.- alzo su dedo.

-no es tan fácil como crees.

-claro que es fácil.

Sanji estaba al borde del colapso nadie sabía las razones de su fallido matrimonio.

-no, no lo es. Ponte en mi lugar Jason ¿que harías si te dijeran que de la nada tienes que casarte? eh, por mantener una estúpida alianza.- apretó sus puños, su corazón siguió golpeando dentro de su pecho. Lo siguiente que diría revelaría toda la verdad.- para que al final de cuentas tu esposa te engañé. ¡Ese es el maldito punto!- elevó la voz.- quería a Aemma pero no lo suficiente y eso me pesaba, me sentía mal por no amarla como se debía, porque me di cuenta que no me gustaba como creí y me sentía mal, porque ella merecía algo mejor que mis migajas de amor. Pero en cambio a ella le importó poco el no amarme, y su mejor salida fue engañarme.

Sanji exhaló con fuerza sacar ese tema a la luz lo liberó de unas cadenas que lo tenían atado.

Jaeger guardó silencio ante la confesión, Sanji nunca hablaba de su matrimonio y tampoco acerca de su ex esposa, pero lo que más le sorprendió fue saber el contexto detrás del divorcio.

Todos habían dicho que Sanji había engañado a su esposa y por eso se originó el divorció. Eso decían las malas lenguas y al parecer todos lo creyeron.

Lo que no tenía sentido era la falacia que habían inventando, cuando la verdadera culpable era Aemma.

-Sanji, yo no creí que...- trago saliva, se sentía como un idiota.

-esa es la parte de la historia que nadie conocé.- alzo la mirada.- hasta hace unos minutos nadie lo sabía.

-¿por qué te echaste la culpa? si Aemma fue quien te engañó.

-¿sabes lo que es la reputación de una mujer?- alzo su ceja. Jaeger nego.- una vez mancha su reputación, todo para ella se vuelve en su contra. Y se que Aemma cometió el error pero no dejaría que la señalarán, al menos no por mi culpa.

-sigo sin entenderlo.

-Zeff nos educó y nos enseñó a respetar a las mujeres, amarlas y cuidarlas.- dejo de apretar sus puños.- y me eche la culpa porque era lo correcto. Cómo dije, si la van a señalar será por otro lado.

-lo entiendo pero echarte la culpa de algo que no hiciste.- se rascó la nuca y suspiró.- es noble de tu parte pero para mí es estúpido.

-desde tu perspectiva es estúpido, porque no has estado en ya situación como la mía.- suspiró, nadie entendería su decisión.- pero recuerda, un caballero jamás lastimaria a una mujer por muy dolido que este.

Jaeger se metió las manos al bolsillo. Ahora que sabía acerca de lo sucedido, sentía que no tenía derecho a opinar.

Pero tampoco podía negar la curiosidad que le generó el tema, fue imposible para el preguntar.

-¿con quién te engañó Aemma?


















jane's note's

un capítulo bastante cargado como pudieron apreciar sksks

en el capítulo anterior estuvo la teoría que la chica seria algún oc de Daylight sjsjsjs pero no lo es o si si

¿se lo esperaban?

bueno también quería decirles que Willow ganó el primer lugar en un mini concurso sinceramente este es un logró que nunca pensé que llegaría, pero ¡apreciemos el premio!

aquí tenemos el puesto.

y acá el diploma, celebremos esto porque sin ustedes la historia jamás hubiera ganando si si si si

hasta la próxima¡<3

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