Cita ིྀ

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Jisung odiaba completamente esa sensación de su estómago retorciéndose cuando estaba nervioso, y odiaba aún más que esa sensación fuera provocada por otra persona con la que solo estuvo hablando por medio de mensajes.

Desde aquella vez en el cine, no se volvieron a ver porque siempre surgía algo que lo impedía, sin embargo, por fin habían quedado de verse, y por esa razón, Jisung se encontraba de los nervios. El plan era en su casa, su madre no tuvo problemas con que Minho llegara, estaba emocionada por conocer al chico del que su hijo le había comentado.

Una vez más, Jisung revisó su celular y abrió el chat con el alfa, todavía sin saber qué responder a su mensaje.

Se sonrojó, ¿de donde sacaba toda esa
confianza? Eso solo lo hacía sentir de cierta forma, intimidado, porque él nunca se ha sentido con la seguridad suficiente para actuar de esa manera.

Mordió su labio inferior con duda mientras hacía zoom en la foto, tomando asiento en la orilla de su cama, debatiéndose sobre si ignorarlo o responder algo al respecto.

Al final, decidió responder con un comentario simple para no exponerse a sí mismo, solo esperaba poder controlarse frente a él y no hacer el ridículo, porque definitivamente, en persona se veía mucho mejor.

Algo le decía que no sería tan sencillo.

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Cuando llegó a casa de Jisung, Minho se dio cuenta de que vivían relativamente cerca, lo cuál lo hizo preguntarse porqué no se había encontrado con él antes puesto a que básicamente, frecuentaban los mismos lugares de la zona.

Antes de tocar la puerta, arregló su cabello una vez más, sacudió su ropa e intentó mantenerse tranquilo, el olor del omega ya era demasiado perceptible para él, por lo que se encontraba un poco alterado y sensible.

Tocó la puerta y escuchó pasos apresurados en el interior, acercándose. Una sonrisa se formó en su rostro de manera inconsciente cuando se encontró con el omega, éste sonriéndole de la misma manera.

—¡Hola!—saludó Jisung, luciendo más tranquilo de lo que se sentía—¿No fue muy difícil para ti venir?

—Hola—le sonrió también—No mucho, no vivo muy lejos de aquí. Así que aquí estoy.

Jisung lo miró unos segundos antes de dejarlo entrar.

Tan pronto entró, Minho sintió una mezcla de olores que no le pareció molesto, el olor de Jisung seguía predominando fuertemente entre todo lo demás.

—Traje algunas cosas para comer—levantó una bolsa con sancks hacia el menor—No sé si van a gustarte, los traje según mis gustos.

—¡Genial!—agarró la bolsa con dulces y lo puso sobre la mesa del comedor—Mamá ya casi termina de hacer el almuerzo, así que podríamos empezar a ver algo mientras tanto—sugirió, encaminándose hacia la sala principal de la casa, siendo seguido por el alfa.

—¿Está tu mamá en casa?—preguntó, frunciendo un poco el ceño—Creí que estabas solo.

—¿Por qué quieres estar a solas con mi precioso hijo?—habló alguien a sus espaldas, causando que se girara rápidamente.

—N-No es e-eso—sonrió apenado hacia la omega.

—¡Mamá!—Jisung le lanzó una mirada, dándole a entender que no lo asustara.

—Solo estaba bromeando—rió la mujer—Mucho gusto, Jisung dijo que vendrías.

Minho sonrió, todavía un poco avergonzado. Hizo una corta reverencia hacia ella.

—Gracias por aceptar que viniera, me llamo Minho.

—Lo sé, escuché mucho de ti.

—¿En serio?—miró al omega, notándolo sonrojado y nervioso—¿Qué le dijo?

—Tengo hambre mamá, ¿podemos comer ya?—interrumpió la conversación Jisung, sonriendo de manera forzada hacia su madre.

—¡Cierto! En un momento todo estará listo, yo les aviso—se dio la vuelta y regresó a la cocina, dejándolos solos de nuevo.

—No le hagas caso a ella—rió Jisung—Le gusta molestarme todo el tiempo.

—Ajá—asintió con una sonrisa divertida—Le preguntaré después—se encogió de hombros, tomando asiento en el sofá.

Jisung bufó, debía hablar seriamente con su madre para que no dijera nada que lo pusiera en vergüenza con Minho.

—El plan de hoy es ver todas las películas de barbie que podamos—dijo con seriedad el omega, encendiendo la televisión—No puedo permitir que vayas por la vida sin haberlas visto, es cultura.

—¿Qué?—Minho rió por lo bajo, realmente no esperaba algo como eso—¿Por eso me dijiste que eligiera una de esas películas más temprano?

Jisung asintió con obviedad—¿No te gusta la idea?

Minho miró el brillo en los ojos del omega, siéndole totalmente inevitable no acceder ante la ilusión en su mirada.

—Me encanta—respondió sin dudas, cautivado—Veamos las que tú quieras, me parece perfecto.

Un poco extrañado por la expresión del alfa, Jisung asintió, dándole una corta sonrisa antes de sentarse a su lado en el sofá, dejando un pequeño espacio entre los dos para no incomodarlo. Minho hubiera deseado estar más cerca, sin embargo, tampoco quería asustarlo o hacerlo sentir incómodo con su cercanía, podría malinterpretar sus aacciones y después todo se volvería extraño entre ellos.

Tal vez solo estaba exagerando.

Luego de un rato, la señora Han los llamó a almorzar; para la suerte de Jisung, su madre no dijo nada incómodo o que lo hiciera avergonzarse durante ese tiempo, se mantuvo amable y muy atenta con el alfa, ella solía ser así con sus invitados.

Al terminar de comer, ambos jóvenes ayudaron a limpiar la mesa y a lavar los platos a sugerencia de Jisung, cosa que no molestó en lo absoluto a Minho, sino que le pareció un buen gesto de su parte ser así de participativo en los deberes del hogar, ese tipo de cosas le daba cierta información sobre él, lo hacía conocerlo un poco más.

—Estaré en mi habitación, si vas a quedarte a cenar, me avisan para preparar algo, ¿está bien?—dijo hacia el alfa, viéndolo asentir tímidamente.

La señora Han le dio una última sonrisa antes de subir las escaleras y desaparecer en el segundo piso.

—No tienes que quedarte tanto tiempo—habló Jisung, un poco nervioso.

—¿Me estás echando?

—¡No! No, nada de eso. Es solo que ya sabes, no estamos haciendo mucho y tal vez te aburras—sonó tímido.

—Que yo recuerde, estábamos empezando una maratón de películas de barbie.

El rostro de Jisung se iluminó, lleno de ilusión al no ser rechazado en algo así. Normalmente veía esas películas con Sunoo, pero el omega ya no quería verlas más porque ya las habían visto todas, y claramente, a Jisung, esa idea lo entristeció un poco. Pero ahora con Minho, aprovecharía el tiempo para verlas una vez más en compañía de alguien.

Horas más tarde, se dejaron de escuchar sus voces comentando sobre lo que veían en la televisión, inmersos en la película hasta que de pronto, Minho se sobresaltó levemente cuando sintió a Jisung más cerca de él, había estado tan pendiente de la película que no se dio cuenta en qué momento los snacks se habían terminado. No pudo evitar ponerse nervioso cuando sintió el hombro del omega contra el suyo, demasiado juntos, con Jisung casi recostado sobre su hombro, y cuando estuvo a punto de decir algo, se giró a verlo y guardó silencio, dándose cuenta de que estaba dormido.

Suspiró, casi adormecido por su aroma. ¿Qué tenía Jisung que lo ponía de esa manera? Era muy extraño para él sentirse tan atraído por alguien a quien solo había visto una vez, eso no solía pasarle. ¿Era posible desarrollar sentimientos por una persona en tan poco tiempo? Su parte lógica le decía que a lo mejor, solo era simple atracción al igual que con sus anteriores conquistas, es decir, Jisung era un chico muy lindo y divertido, cosas que podrían llamar la atención de cualquiera, sin embargo, su lobo parecía encaprichado y seguro de quererlo a él, su lobo lo buscaba inconscientemente, y eso también llamaba mucho su atención, no podía ignorar ese presentimiento.

Por un momento, pensó en las historias sobre los destinados, a veces le daba ilusión pensar que esas cosas existían, pero en otras ocasiones, también creía que no podía existir algo tan maravilloso como eso. Sin embargo, a decir verdad, habían cosas que le hacían creer en que tal vez, eso podría ser real, y que tal vez, le estaba sucediendo a él.

Jisung realmente lo hacía pensar en eso.

—¿Tú eres Minho?

Minho se sobresaltó al escuchar una voz demasiado cerca de su oído, asustándolo completamente. A su lado, Jisung despertó de golpe por el brusco movimiento del alfa.

—¡Perdón, no quería asustarlos!

Sunoo hizo un puchero.

—No te preocupes—negó Minho, acomodándose en su lugar—Si, soy Minho.

—Te dije que los dejaras, ahora Jisung estará de mal humor por despertarlo y por interrumpir su cita—comentó Sunghoon, cruzándose de brazos.

—¿Qué hacen aquí?—preguntó Jisung, viéndolos con el ceño fruncido, tratando de desviar el tema.

—Solo íbamos pasando, pensé en visitar a mi mejor amigo, entré a la casa como siempre y luego los vi juntitos y abrazaditos y-

—¿Van a quedarse mucho tiempo?—Jisung interrumpió al otro, sonriéndole falsamente, claramente para que guardara silencio.

—No, ya vimos que estás ocupado así que ya nos vamos—sonrió inocente el omega, agarrando la muñeca del alfa—¡Lo sentimos!

Ambos salieron a paso rápido de la casa, Sunoo siendo regañado por Sunghoon por haber molestado a su mejor amigo y por su imprudencia, a lo que el omega simplemente se encogió de hombros, haciendo un puchero en forma de berrinche.

—Tus amigos son agradables—comentó Minho, poniéndose de pie.

—¿Ya te vas?

—Es algo tarde—miró la hora en su celular.

—Si... Tienes razón, no me di cuenta del tiempo—se puso de pie también, jugueteando con las mangas de su suéter—Lamento quedarme dormido, se supone que veríamos películas...

—No te preocupes—negó rápidamente—Me gustó pasar la tarde contigo, no me aburrí en lo absoluto.

Jisung sonrió un poco, escondiendo su emoción al escuchar esas palabras. Apartó la mirada del alfa y se esforzó en pensar en otras cosas que no lo hicieran sonrojarse; Minho sabía hacerlo sentir avergonzado con palabras simples.

—A la próxima...

—¿A la próxima?—Jisung lo miró con ilusión.

—Si... A la próxima podemos ver más películas... O lo que tú quieras hacer, solo dime.

 —Está bien—asintió sin dejar de verlo.

—Bueno, entonces debo irme.

Minho no deseaba irse, la idea de alejarse del omega no era algo que le agradara mucho a su lobo quien había empezado a quejarse. Se despidió cortamente del omega y salió, se subió a su auto y empezó su camino a casa, prometiéndose buscar la manera de poder verse lo más pronto posible.

Tan pronto cerró la puerta, Jisung se regañó a sí mismo y a su lobo tan débil por tan vergonzosa forma de actuar, ¿qué estaba pasando y por qué Minho lo ponía de esa forma? Era cuestión de tiempo para que terminara viéndose como Sunoo, y no, él no quería verse de esa manera porque de seguro, solo terminaría ahuyentando a Minho.

Se dejó caer nuevamente sobre el sofá junto a un suspiro, aprovechando el aroma que el alfa había dejado. Cerró los ojos y volvió a suspirar, preguntándose qué tan lejos llegaría con ese absurdo comportamiento.

—¿No quiso quedarse a cenar?—la señora Han se asomó por las escaleras, viendo su hijo en el sofá.

—A la próxima, mamá.

La omega simplemente asintió, regresando a su habitación, mientras tanto, Jisung simplemente sonrió, pensando en qué tanto tiempo pasaría para verse de nuevo, y aunque eso lo hacía sentir un poco fuera de lugar, no iba a negarse a sí mismo que estaría esperando por ese momento.

Esperaría para verlo otra vez.

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Minho el simp más personal de Jisung🥰

¿Cuál es su película favorita de barbie? Pregunta seria.

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