-¿Tú? ¿Me estás pidiendo disculpas? ¿A mí?-dijo Vanessa, con una tremenda mueca en el rostro, al escuchar las palabras de Jun Sun.

-Ya sé que lo que hice no estuvo bien, por eso me disculpo.-habló falsamente y la chica en frente de ella aclaró su garganta.

-Tsh... Olvídalo... No quiero tus disculpas.-sin más la evadió, y comenzó a caminar.

Odiaba lo cínica que podía llegar a ser esa descabellada. Eso de las disculpas no era más que una tonta excusa, para luego acercarse y volver a causar problemas.

-Oye... Señorita Lee, ¿cómo puede pasar así por el lado de su esposo, sin ni siquiera mirarlo?-se escuchó la voz de Sang Hyuk.

Ella se volteó, provocando el movimiento exagerado de su largo cabello.

Éste tapó su rostro, por lo que tuvo que quitarlo de allí.

Se acercó a su novio y lo abrazó.

-Perdón, amor. No te ví, producto a la frustración.-él sonrió al escuchar como la chica le había llamado.

-No importa, princesita.-le dio un beso en la frente, y Vane sonrió.

Caminaron juntos, hasta que se sentaron en una de las bancas, que habían en el campus del instituto.

-¿Me quieres contar por qué estás así?-preguntó el de cabello castaño, con voz calmada, mientras sostenía la mano de su chica.

-Es sólo Jun Sun... Como mismo lo evidenciaste, ella invadió tu espacio, en tu propia casa... Y ahora viene a mí, pidiéndome perdón...

Suspiró.

-Sé que esas no son sus verdaderas intenciones... Algo está planeando...

-Hey, oye... Vanessa, ella puede estar planeando 5mil cosas, e incluso puede conspirar con fuerzas extranjeras, que será en vano... No existe un ella y yo... Tampoco ella y tú de mala manera... Sólo existimos tú y yo.-eso último lo dijo juntando su frente con la de la pelinegra.

Quien sonrió más relajada... Nuevamente Sang Hyuk era capaz de transmitirle paz y tranquilidad, sólo haciendo uso de su pequeña virtud...

Y puedo que éste tuviese muchas virtudes... Pero esa pequeña, en particular... Era la que lo hacía tan especial.

-¿Te imaginas si ahora no fuésemos novios, y siguiésemos siendo mejores amigos?-preguntó la chica, muy curiosa, así de la nada.

-No me lo imagino. Tarde o temprano terminaríamos de éste modo... Señorita Lee, tú y yo estábamos destinados a estar juntos...

-¡Yah! Deja de llamarme Señorita Lee, es ilegal, aún no estamos casados, así que deja de pretender que soy tu esposa.-le dio un leve empujoncito y el chico rió.

-Pronto, Señorita Lee, pronto será...

(...)

Tiempo después, los chicos salieron de la escuela...

-Oye. Sé que no te gustan este tipo de cosas, pero... En una semana será Halloween...

Contó Tae Yang a la chica.

-Ajá, ¿y?

-Pues... Estaba pensando en dar un fiesta de disfraces...

-Ajá, y, ¡ni te pienses que yo iré usando un ridículo traje ficticio!-exclamó, para luego hacer una mueca de asco.

-Vamos, Vane. Es nuestro mejor amigo, debemos ir.-dijo Sang Hyuk, sobando el hombro de su novia.

-Pero, es que, buah.-fingió una asqueada.-No me gustan este tipo de cosas... ¡Es preferible ver un partido de futbol, acompañada de ancianos, en un asilo!

Hwi Young se rió por el comentario de su nonna.

-Ya, está bien. Dejen a nonna en paz. Ella no quiere ir. No deben obligarla... Déjenla, tal vez piense y algo la haga cambiar de idea.-dijo con su voz tiernesita y Vanessa no pudo aguantarse.

-Uyy, está bien, iré. Pero sólo porque eres un algodón de azúcar.-dijo y los chicos sonrieron.

-Gracias, nonna. Prometo que luego la compensaré...

Ofreció.

-Eso sólo si aceptas hacer un pijamada conmigo, y me dejas peinar tu hermoso cabello.-sonó como una madre apasionada, por su hijo menor.

-Está bien, no tengo problema con eso.-le regaló una sonrisa, y eso derritió a la chica.

-No sé por qué, pero siento que de ahora en adelante, ella y yo seremos los padres de tu novio.-opinó Sang Hyuk, cruzando los brazos, y Tae Yang asintió.

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Terminé de escribir el cap con 3% de batería :)