El sol brillaba intensamente en el cielo cuando Izuku entró en los terrenos de UA. Sonrió mientras respiraba el aire de verano mientras se acercaba a su destino. Fue el comienzo de un nuevo día, tanto literal como figurativamente; hoy se mudaba al campus de la UA.

Solo habían pasado unos tres días desde que All Might visitó su casa para proponer la idea de que Izuku se mudara. El joven estudiante estaba, por supuesto, algo nervioso por vivir solo, pero finalmente aceptó una vez que su madre lo permitió. Después de todo, no iba a vivir de forma completamente independiente; la escuela todavía le proporcionaría comidas durante las horas de clase, así como un estipendio para que él comprara alimentos y suministros en su propio tiempo. Además, estaría viviendo en el mismo edificio que todos sus amigos.

Y por supuesto, su novia.

Con solo pensarlo, las mejillas del niño se enrojecieron y sus labios se llenaron de sonrisa. En un momento había estado preocupado por no pasar mucho tiempo con Mina una vez que las clases comenzaran de nuevo, pero eso ya no era una preocupación. Aún no conocía la estructura exacta de los dormitorios, pero de una forma u otra ella estaría cerca.

"¡Oye, Izu!"

Su sonrisa creció cuando escuchó la voz de Mina llamándolo. Dándose la vuelta, la vio correr hacia él, saludando con entusiasmo. Dejó que ella lo alcanzara, preparándose para el abrazo de entrada.

Todavía casi lo derriba.

La pareja siguió caminando de la mano. Mina parecía estar de muy buen humor mientras movía su brazo hacia adelante y hacia atrás, llevándose el de Izuku con él. No es que le importara, por supuesto; se alegraba de verla tan feliz.

"¡Oh, vaya, esto es tan emocionante!" Ella chilló de alegría mientras caminaban. "Me pregunto cómo se verán. ¿Qué tan grandes serán? ¡Oh! ¿Crees que habrá una piscina?" La chica burbujeante lanzó una pregunta tras otra a Izuku, demasiadas para que él las respondiera.

"Uh ..." Había olvidado cuánta energía podía tener Mina a veces. Realmente no había tenido la oportunidad de estar tan despreocupada durante la última semana.

"Lo siento, lo siento..." Respiró hondo, relajándose un poco. "Realmente estoy deseando que llegue esto ... ¡Woah!"

Al doblar la esquina, los dos estudiantes se detuvieron en su lugar mientras sus mandíbulas caían. Ante ellos estaban los dormitorios de la UA recién construidos, sus nuevos hogares por el momento. Eran un par de edificios de 4 pisos con una arquitectura bastante elaborada.

"¡Son enormes!" Mina exclamó, maravillándose de las estructuras. "¿Construyeron todo esto en menos de una semana?"

"Bueno, Cementoss es uno de los profesores", señaló Izuku. Los dormitorios habían sido construidos hace solo unos días, creados en respuesta al ataque de la Liga de Villanos.

Miraron boquiabiertos los edificios por unos momentos más antes de que Mina prácticamente corriera el resto del camino hacia ellos, arrastrando a su novio con ella.

...

Mina se puso las manos en las caderas y se puso de pie triunfalmente mientras admiraba su trabajo. Le había tomado unas horas, pero finalmente había terminado de desempacar sus pertenencias y había hecho su habitación, como ella diría, "linda como el infierno".

Por supuesto, cualquier otra persona probablemente encontraría confusa y de mal gusto la combinación de estampado de leopardo, manchas de guepardo y corazones que decoraban su habitación. Pero esa gente simplemente no tenía gusto.

A pesar de la cantidad de tiempo y esfuerzo que le había costado preparar su habitación, la chica rosa todavía estaba rebosante de energía. Ella ya había estado entusiasmada por mudarse a los dormitorios, pero después de ver realmente dentro de ellos, esa emoción solo había crecido. Evidentemente, UA no había escatimado en presupuesto; el edificio tenía un espacio común enorme con una cocina, una sala de recreación y áreas de baño y lavandería separadas para las niñas y los niños. Además de eso, cada habitación tenía su propio baño, así como un pequeño balcón. Mina tuvo mucha suerte en este sentido; su habitación estaba en el último piso, lo que le daba una hermosa vista del campus.

Sin embargo, no hay piscina. Pero, de nuevo, el centro de entrenamiento tenía uno.

Dejándose caer en su cama, Mina suspiró feliz mientras miraba al techo. Sin embargo, su sonrisa se desvaneció después de unos momentos.

Tan alegre como estaba, los recuerdos de la semana pasada aún permanecían en su mente. ¿Cómo podrían no hacerlo? Después de todo, casi la habían matado varias veces. Se había encontrado cara a cara con el villano más aterrador que probablemente vería, y había sido testigo de la caída del héroe más grande del mundo.

Además de eso, la Liga todavía estaba ahí fuera. Fue la mitad de la razón por la que ella y los demás se mudaron aquí en primer lugar. Puede que hayan perdido a su verdadero líder, pero Shigaraki seguía siendo peligroso por derecho propio. Todos lo son. Tomemos a Toga, por ejemplo; podía disfrazarse como una de las amigas de Mina, caminar directamente hacia ella y hacer lo que quisiera.

Todo su cuerpo se estremeció al imaginarlo.

"Ah, ¿qué estoy haciendo?" Se preguntó a sí misma, sacudiendo la cabeza rápidamente. Ese tipo de cosas la habían estado atormentando desde ese día, y no parecían desaparecer pronto. No es que deban hacerlo, por supuesto; Mina sintió que tenía razón en tener miedo. Simplemente no podía dejar que ese miedo la afectara.

Sin duda, la Liga de Villanos volvería a atacar. Dónde y cuándo, no lo sabía. Pero lo que sí sabía es que la próxima vez estaría lista para ellos.

Dejando esos pensamientos a un lado por ahora, la chica con cuernos se sentó. Los demás probablemente habían terminado de desempacar y ella se sentía sociable.

Mientras salía de su habitación, Mina notó que Uraraka, su único compañero de piso, esperaba junto al ascensor.

"¡Ochako, hola!" Rápidamente se acercó a su amiga.

"Oh, hola Mina. ¿Terminaste de desempacar?" Mina asintió en respuesta.

"¡Sí! ¿Qué hay de ti?"

"Oh, terminé hace un tiempo. Yo, eh, no tengo muchas cosas". La chica rosa frunció el ceño cuando vio a su amiga apartar la mirada. Uraraka no era precisamente rica, como recordaba. "Está ... un poco descubierto allí, en realidad."

"¡Aw, no digas eso! ¡Apuesto a que se ve genial!" Mina trató de animar a la chica que controlaba la gravedad cuando llegó el ascensor.

"Gracias." Uraraka logró esbozar una sonrisa. "¿Primer piso?" Su compañera de clase asintió.

Se quedaron en silencio por un momento mientras el ascensor se movía. Mina se encontró una vez más pensando en los acontecimientos recientes y en cómo Uraraka había sido uno de los que la había salvado.

De hecho, si no hubiera sido por ella ...

"Gracias, por cierto", dijo la portadora de ácido, mirando a su compañera.

"¿Hm?" La chica morena la miró confundida. "¿Por que?"

"Por... Por salvarme la vida." Uraraka se ensanchó ante la respuesta de Mina. "Si no hubieras saltado detrás de mí de esa manera, probablemente estaría ..."

"... No tienes que agradecerme por eso, Mina," le aseguró la chica más baja a su amiga con una sonrisa. "Eso es lo que se supone que deben hacer los héroes, ¿verdad? ¿Poner sus vidas en juego por otros?" Mina volvió la cabeza para mirar hacia adelante.

"Sí, pero aún así ..."

"Además, yo ... si no hubiera dejado escapar a esa chica Toga, ella no habría-"

"Detente." Una mano rosada en su rostro le dijo a Uraraka que se callara. "No te culpes por esto ahora. Tuve que lidiar con eso lo suficiente con Izu." La chica de cabello rosado estaba cansada de que todos dijeran que lo que pasó fue su culpa; al final del día, eran los villanos los culpables de todo.

"Pero yo ... No, tienes razón."

Hubo otro breve silencio cuando el ascensor llegó a su destino.

"Oye, toda esa charla sobre nuestras habitaciones me hace pensar ..." comenzó Uraraka. "Quiero ver cómo se ven las habitaciones de los demás. ¡Deberíamos hacer una gira en grupo o algo así!" El rostro de Mina se iluminó.

"¡Oh! ¡Eso suena increíble!" Definitivamente quería ver cuáles eran los estilos de decoración de sus compañeros de clase. "¡Incluso podríamos convertirlo en una competencia o algo así!"

"Uh, no sé si-

"¡Vamos, vayamos por los demás!" Fue muy tarde; Mina ya había tomado una decisión.

Tomó un poco de tiempo reunir al resto de las chicas, pero con la excepción de Tsuyu, todas parecían estar de acuerdo con la idea. El grupo se dirigió al área común, donde parecía que los chicos se habían reunido.

Al ver a Izuku entre los demás, un pensamiento travieso cruzó por la mente de Mina. Recordó lo avergonzado que se había sentido cuando ella había visto el santuario de All Might que era su habitación en casa, y aunque todavía no había visto su dormitorio, era muy probable que fuera lo mismo. Algo le dijo que intentaría ocultar algo de su mercancía antes de mostrar la habitación.

Ella se aseguraría de que él no tuviera la oportunidad.

"¡Hola chicos!" La chica de cabello rosa saludó cuando los dos grupos se reunieron. "¿Todo listo con sus habitaciones?"

"Sí. Ahora estamos todos relajándonos", respondió Kaminari, saludando a las chicas.

"¡Genial! Ya que están todos aquí, algunos de nosotros estábamos hablando y tuvimos una idea". Mina sonrió cuando esto llamó la atención de todos. "¡Hagamos una competencia de exhibición de cuartos! ¿Qué te parece?"

Después de un momento, algunos de los muchachos expresaron su apoyo a la idea. Sin embargo, parecía que Izuku y Tokoyami dudaban.

Perfecto.

"¡Genial! ¡Podemos comenzar con el segundo piso con... la habitación de Izu!"

Mientras la clase se dirigía a las escaleras, Mina sonrió cuando escuchó a Izuku gritar desde atrás.

"¡NONONONO, ESPERA SÓLO UN MINUTO!"

...

"... Eso estuvo sucio, ya sabes," murmuró Izuku, con los hombros caídos mientras se sentaba en uno de los sofás del área común. Junto a él estaba sentada Mina. "Empezando por mi vida eso."

"¡Oh, pero te veías tan lindo!" Las burlas de su novia le valieron un sonrojo. "Además, a todos parecía gustarles... a diferencia del mío." La niña se cruzó de brazos y frunció el ceño mientras se apoyaba en el sofá. "Simplemente no tienen sentido del estilo".

"Pensé que se veía bien", le aseguró Izuku, apoyando una mano en su hombro. No fue una mentira; Claro, la decoración estaba un poco... desorganizada, pero encajaba muy bien con la personalidad de Mina. Aunque podía entender por qué alguien que no la conocía como él podría no estar de acuerdo.

"Solo dices eso para que me sienta mejor".

"N-No, en serio, ¡lo digo en serio! ¡Incluso voté por ti!" No sabía por qué estaban actuando como si este concurso de habitación fuera tan importante, pero tenía la intención de seguir el juego. Mina lo miró con los ojos entrecerrados por un segundo, luego los relajó mientras sonreía.

"Lo sé, lo sé. Solo estoy siendo difícil". Se inclinó para darle un beso rápido, lo que sorprendentemente no hizo que Izuku se sonrojara en absoluto. El heredero de Quirk se había sentido considerablemente más cómodo mostrando su afecto por Mina a estas alturas, especialmente después del ataque al campamento. Un beso se sintió mucho menos estresante después de todo lo que habían pasado los dos, después de todo.

"Yo también voté por ti, sabes", agregó la chica rosa.

"¿En serio? ¿No Sato?" Sato finalmente había ganado el concurso de salas, aunque quizás por medios ilegítimos; había ofrecido pastel a la clase, que instantáneamente ganó todos los votos de las chicas. O al menos, casi todos. Mina se rió de su pregunta.

"Bueno, ese pastel era dulce, pero ..."

"... ¿Soy más dulce?" Su mirada de sorpresa le dijo a Izuku que había adivinado correctamente su línea. Dejó escapar una sonrisa inusualmente astuta cuando ella hizo un puchero.

"No es divertido si lo adivinas. ¡Se supone que debes ponerte lindo y tartamudear!" Infló sus mejillas, haciéndola parecer más linda de lo normal para Izuku.

"Debo estar acostumbrándome", dijo encogiéndose de hombros. "... O simplemente te estás volviendo predecible", agregó con un guiño. Esto tomó a Mina desprevenida; por una vez, ella era la que se sonrojaba, aunque sólo fuera un poco. Solo duró uno o dos segundos antes de que se recuperara.

"Joder, ¿cuándo te volviste tan atrevido?" Ella lo empujó juguetonamente, ganándose una risa de Izuku. "Supongo que no soy el único que está aprendiendo cosas. Voy a tener que intensificar mi juego ..."

"UH oh." A Izuku no le gustó el sonido de eso.

Sin embargo, antes de que pudiera hacer algo, Mina se dio la vuelta de repente y quedó encima de él, inmovilizándolo contra el sofá. Sus rodillas estaban sobre sus piernas mientras descansaba sus manos sobre sus hombros.

"¡Ah!" Izuku agitó los brazos, tratando de comprender lo que acababa de pasar. "MM-Mina, ¿¡qué estás haciendo !?" Su rostro brillaba positivamente.

"Eso es mejor." Tenía una sonrisa diabólica mientras hablaba. Los ojos de su novio atrapado recorrieron la habitación frenéticamente, agradeciendo a los poderes fácticos que nadie estuviera cerca para ver esto... Por el momento.

"M-Mina, a-a-alguien podría... ¡Mmph!" No tuvo la oportunidad de terminar, sus labios lo silenciaron. Su mente entró en pánico mientras ella sostenía el beso, sus manos serpenteaban por su espalda.

Los recuerdos de su última noche en el campamento brillaron en su cabeza. Los dos solos en el bosque, los labios chocando juntos mientras las lenguas luchaban. Sus manos subieron lentamente por su camisa ...

Sin pensarlo, Izuku empujó a Mina, obligándolas a separarse. Él la miró con los ojos muy abiertos, los brazos extendidos y las manos sobre sus hombros, jadeando levemente. Había una mezcla de sorpresa y pesar en sus ojos.

"Yo... lo siento, solo..." Cerró los ojos, inhalando profundamente. "E-esa noche en el campamento ... Después de esa pelea con Bakugou." En realidad, nunca habían hablado de su encuentro cercano esa noche. "Nosotros ... hice algunas cosas que ..." Se interrumpió, sacudiendo la cabeza.

"...Entiendo." Mina dijo con un suspiro. "Yo ... Lo siento, no debería haber ... No pensé ..."

"N-No, no es tu culpa", insistió Izuku, mirándola. Por supuesto, había una parte de él que quería seguir adelante. "Yo sólo ... nunca me disculpé por ..." Tragó saliva. "T... Tocarte así." Él desvió la mirada, avergonzado de siquiera mencionarlo. Se había perdido por completo en ese momento.

Una mano le acarició la mejilla.

"... Está bien, Izu."

El niño miró hacia arriba mientras Mina hablaba en voz baja. Ella no estaba sonriendo exactamente, pero tampoco parecía infeliz.

"Mira, ambos no estábamos actuando como nosotros mismos. Estábamos cansados, frustrados, estresados ​​y ... Uf. Ese fue un día de mierda". Suspiró de nuevo, sacudiendo la cabeza. "Yo ... entiendo por qué pasó todo eso. No estoy molesta por eso ni nada."

Izuku sintió alivio al escuchar eso. Era cierto que no había estado exactamente en un estado mental normal cuando comenzaron ese beso. Aún así, no tenía idea de lo que había pensado Mina de todo esto hasta ahora, y saber que ella no estaba enojada por eso lo hizo sentir mucho mejor por todo el asunto.

"... Además, no es como si no lo hubiera disfrutado ..."

Ambos se sonrojaron cuando Mina murmuró esto, con una sonrisa avergonzada en su rostro. Izuku sintió un nudo en la garganta.

"Quiero decir ... Eso fue muy repentino, sí, pero ... tú eres mi novio." Se inclinó más cerca mientras decía esto. Fue en este punto que Izuku se dio cuenta de que en realidad no había hecho ningún esfuerzo por sacarla de encima.

Su corazón latía con fuerza, pero no podía negar sus sentimientos. Mientras no lo perdiera por completo esta vez ...

Miró a su alrededor; todavía eran los únicos en la habitación.

... Quizás solo unos minutos.

Sus manos se deslizaron sobre sus hombros y su espalda mientras envolvía sus brazos alrededor de su abdomen mientras el espacio entre sus labios se cerraba una vez más. Se permitió relajarse mientras ella le rodeaba el cuello con los brazos, empujando su cuerpo contra el suyo mientras el beso se hacía más profundo. A diferencia de antes, todavía pensaba (en su mayoría) con claridad, sin permitirse ceder por completo a sus impulsos. Sus besos fueron apasionados, pero no bruscos y desordenados como la última vez.

Sintió que los labios de Mina se abrían cuando un suave sonido se les escapó; una invitación. Después de un momento de vacilación, Izuku dejó que su lengua comenzara a entrar en su boca y ...

"¡SANTA MIERDA!" Un grito repentino rompió el momento íntimo que la pareja compartía como un cristal. Mina se alejó rápidamente de Izuku mientras los dos se volvían hacia el lugar de donde venía la voz.

Mineta y Kaminari acababan de entrar al área común, y actualmente los miraban boquiabiertos con la boca abierta.

Por un momento, Izuku sintió que en realidad se había incendiado.

Mina, igualmente nerviosa, prácticamente cayó al suelo mientras se apresuraba a bajarse del regazo de Izuku, colapsando junto a él en el sofá.

"Amigo ... ¡Así se hace, Midoriya!" Kaminari logró recuperarse de su estupor, sonriendo mientras le daba al chico de cara escarlata dos pulgares hacia arriba. Mineta todavía estaba en shock por lo que había visto; parecía babear un poco. "¿No pensaste que lo tenías-Oof!"

Una almohada fue azotada en su cabeza, casi derribándolo. "¡Ow! ¿Qué fue eso ... Oh mierda?"

Mina estaba de pie ahora, con una mirada asesina en sus ojos mientras miraba a los dos estudiantes. Su rostro era magenta, pero claramente debido a la ira más que a la vergüenza.

"Uh ... quiero decir ..."

"¡LARGO!" Mineta de repente cobró vida, sintiendo el peligro inminente. La pareja corrio y Mina no estaba muy lejos.

"¡VUELVAN AQUÍ, PERVERSOS!"

Izuku se quedó sentado en el sofá, con los ojos muy abiertos mientras miraba fijamente a la pared.

...

Mina todavía podía sentir algo de calor en sus mejillas mientras comía. Junto a ella, Izuku picó su comida, sin atreverse a mirar a nadie. Estaban rodeados por el resto de su clase mientras todos se sentaban alrededor del área de la cocina del dormitorio, disfrutando de una comida considerable.

Antes de que pudiera derribar a los pervertidos residentes de su clase, le explicaron que simplemente estaban reuniendo gente para una cena de toda la clase. Kirishima había mencionado algo sobre invitar a todos a una barbacoa esa noche, y parecía que estaba cumpliendo con eso.

Mina todavía no estaba del todo convencida de que no la habían estado buscando a ella y a Izuku para espiar, pero los dejó salir ilesos.

Empezaba a arrepentirse de eso.

Parecía que uno de ellos, probablemente Mineta, le había contado a una buena parte de la clase lo que habían visto. Como resultado, la pareja fue el tema principal de discusión esa noche.

"De ninguna manera... ¿Midoriya estaba haciendo qué ?" Mina escuchó a Sero.

"¡Eso es tan romántico!" Toru suspiró soñadoramente. Mina suspiró, tratando de desconectarse.

"¡Miren chicos, les juro que no fui yo!" Kaminari, que estaba sentada frente a ella e Izuku, se había estado disculpando frenéticamente durante toda la comida. "¡De Verdad!"

"Como sea," gruñó Mina.

"Vaya, realmente entraste esta vez", comentó Jirou, que estaba al lado de Mina, a su rokera amiga. No parecía importarle mucho los chismes, para gratitud de Mina.

"Debo estar de acuerdo. Tal violación de la privacidad difícilmente es inapropiada para un estudiante de la UA, Kaminari," Iida se sentó junto a Izuku, dando una conferencia a su compañero de clase.

"Violando priva... ¡Se estaban besando en el maldito sofá!" Kaminari gritó un poco más fuerte de lo que pretendía. Se tapó la boca con una mano después de darse cuenta de lo que acababa de decir, mirando a Mina con miedo. Jirou resopló de risa mientras la chica rosada fulminaba con la mirada a la rubia. Izuku enterró su rostro rojo remolacha en sus manos.

"...¿Es eso así?" Iida se volvió hacia Izuku. "... Midoriya, Ashido, entiendo que ustedes dos tienen sentimientos el uno por el otro, pero hay un momento y lugar para-

"¡CÁLLATE YA!" Todos hicieron una mueca cuando la voz de Bakugou rugió. Para sorpresa de la mayoría de la clase, se había sentado frente a Mina e Izuku, junto a Kaminari. "Apenas puedo oírme pensar con todos tus aullidos. ¿A quién le importa una mierda quién hizo qué? Vamos a comer, maldita sea".

La habitación quedó en silencio por un momento. Finalmente, las conversaciones se reanudaron, aunque más tranquilas y sobre otros temas. Parecía que nadie quería invocar la ira de Bakugou.

La estudiante que empuñaba el ácido miró a su explosivo compañero de clase por un momento, agradeciéndole en silencio por ese arrebato. De hecho, había sido sorprendentemente suave todo el día (suave para él, de todos modos), y el hecho de que se hubiera sentado voluntariamente tan cerca de Izuku de todas las personas era ciertamente extraño.

'¿Qué estaba pasando por su cabeza?', se preguntó.

Decidiendo no insistir mucho en ello, reanudó su comida.

...

Izuku cerró la puerta de su habitación, frotándose las sienes mientras caminaba hacia su cama, sentándose. Sin duda, su primer día en los dormitorios había sido... lleno de acontecimientos.

Sabía que hacer ese tipo de cosas en el espacio público era una mala idea.

Estaba honestamente sorprendido de lo cómodo que estaba con todo el asunto, al menos hasta que él y Mina fueron interrumpidos. Una parte de él se sentía un poco avergonzado por lo poco que le molestaba ese tipo de comportamiento, pero en su mayor parte se sentía bien con eso.

Porque como había dicho Mina, ella era su novia. Y él era su novio.

A pesar del hecho de que solo habían pasado unas dos semanas desde que comenzaron a salir, Izuku se sintió considerablemente más largo. Eso puede deberse a lo mucho que había sucedido la semana pasada; todas esas dificultades que habían enfrentado parecían haber fortalecido su vínculo.

No fue solo en un sentido físico. Si bien era cierto que claramente se estaban volviendo más íntimos entre sí, eso se debía al hecho de que se habían acercado emocionalmente. Era por eso que solo la vista de Mina hacía sonreír a Izuku, por qué pensaba constantemente en ella. Fue ese vínculo fortalecido, esa confianza lo que le permitió actuar tan cómodamente a su alrededor.

Un golpe en su puerta llamó la atención del heredero de One for All. Caminando hacia su puerta, miró por la mirilla para ver quién era.

Frunció el ceño cuando vio a Mineta.

Izuku no estaba enojado con él, por decir, pero ciertamente no estaba feliz de verlo. El estudiante lascivo le había causado mucho estrés hoy, y no estaba seguro de querer lidiar con más payasadas.

Aún así, no estaba dispuesto a simplemente ignorarlo, así que abrió la puerta.

"Hola Mineta."

"Hey Midoriya," saludó el chico de la cabeza morada. "¿Tienes un minuto?"

"Claro. ¿Qué pasa? ¡Eh!" Al ser respondido, el pervertido diminuto empujó a Izuku y entró en su habitación. "Qué vas a-

"Cerrar la puerta." Al estudiante más alto no le gustó a dónde iba esto, pero obedeció a su compañero de clase. Mineta respiró hondo y habló.

"Mira hombre, lamento lo de antes. Honestamente, no estábamos tratando de espiar ni nada, simplemente entramos y te vimos". Era raro que él se disculpara por algo, por lo que Izuku no pensó que estaba mintiendo. "Y uh ... Sí, mi mala noticia con la gente sobre eso. Simplemente se me escapó".

Entonces era él.

"Está ... Está bien, Mineta, de verdad. Solo ..." Izuku suspiró. "¿Tratar de no volver a hacerlo? ¿Por favor?"

"Lo tienes. Además, quería darte algo", el estudiante con tema de uvas metió la mano en el bolsillo de un pantalón. "Como parte de mi disculpa."

Ahora Izuku estaba realmente nervioso. ¿Qué tipo de regalo debería esperar de alguien como Mineta?

"N-No, de verdad, está bien, no tienes que-

"¡Aqui tienes!" El estudiante bajito le tendió su regalo a su compañero de salón. El chico pecoso lo estudió, inseguro de qué era por un segundo. "Probablemente vas a necesitar estos más que yo".

Su rostro se puso pálido una vez que se dio cuenta de lo que estaba mirando.

"Qu-qu-qu-qu-qu-qu ..." No pudo pronunciar una palabra. Por segunda vez ese día, sintió como si fuera a desmayarse en el acto. "¿¡QUÉHHHHAAAAAAT !?"

Sentado en la mano de Mineta había una caja de condones.

"¿Eh? ¿Qué pasa?" Preguntó mientras Izuku saltaba hacia su puerta, cerrándola.

"¡¿Por-por qué me las das ?!" Preguntó el niño nervioso en un susurro fuerte. "M-Mina y yo no ... no ... no soy ..." Su cerebro simplemente no podía manejar lo que estaba mirando.

"Sé que sé." Mineta levantó las manos mientras trataba de explicar. "Lo entiendo, tú y Ashido no lo están haciendo ahora." Escucharlo decir en realidad hizo que la cara de Izuku cambiara de blanco a rojo en segundos. "Pero vamos tío, no puedes decirme en serio que no va a suceder. ¿Después de lo que vi?"

"Yo ... ¿¡Bwuh !?" Izuku estaba perdido. ¿Fue esto real? ¿Se había quedado dormido y estaba teniendo una pesadilla centrada en Mineta?

"Ashido claramente está como locamente enomarodo de ti, hombre. Vas a necesitar estos pronto, créeme".

El estudiante presa del pánico se congeló por completo. Estaba completamente en silencio mientras miraba con ojos saltones a su pervertido compañero de clase.

...¿Amor?

Tomando su silencio inmóvil como aceptación a lo que estaba diciendo, Mineta sonrió antes de caminar hacia él y poner la caja en su mano. Le dio una palmada en la espalda a Izuku.

"Puedes agradecerme más tarde. ¡Buena suerte!" Levantando el pulgar, abrió la puerta y salió de la habitación, dejando a Izuku en completo estado de shock.

¿Qué acababa de decir? Pensó que Mina estaba... ¿Enamorada?

...¿Amor?

Solo pensar en la palabra hizo que Izuku se pusiera tenso. No había pensado en este tipo de cosas desde que había hablado con All Might sobre la revelación de One for All a Mina.

Amor ... ¿Mina realmente sintió eso por él?

... ¿Lo sintió por ella?

¿Podría siquiera saber cómo se sentía eso? ¿Era posible estar realmente enamorado después de solo un par de semanas?

Amor...

Mientras Izuku ponderaba la emoción, se dio cuenta de un objeto en su mano. Mirándolo, gritó al recordar lo que Mineta le había dado, casi tirándolo al suelo. Se arrastró hacia su cubo de basura, prácticamente clavando la caja en él.

Ni siquiera empezó a pensar en... Eso .

Sacudiendo la cabeza, el joven estudiante decidió prepararse para ir a la cama. Al poco tiempo, estaba en pijama y debajo de las sábanas.

Una sola palabra se repitió en su cabeza antes de que finalmente se durmiera.