Estaba caminando por las calles y puesta con una sudadera con capucha de gran tamaño y escondí mi rostro tirando de la ella, las calles estaban inquietantemente silenciosas con no mucha gente afuera, pero a lo lejos si escuchabas bien, escucharías un par de sirenas de policía. Escuché un vehículo acercarse a mí y parar justo cuando también lo hice. Sonreí cuando la ventana bajó y allí lo vi "...Ame, estoy aquí para darte la oportunidad de tu vida" Intento no reírme de lo serio que se ve.

 "Dejate de ostias, Sergio ... ¿Cómo estás hermano?" Sergio no puedo evitar soltar una pequeña sonrisa cuando abri la puerta, entre al auto y nos abrazamos."¿Cómo va todo?" Mi hermano se arregla las gafas y me muestra los archivos restantes. Todo lo que queda por reclutar es Silene, que vive a solo unas cuadras de distancia. Ahora vete antes de que te golpee el trasero " Sergio bromea pero no sonríe. 

Me burlo de su seriedad y le desordeno el cabello antes de saltar del auto y decirle adiós. Sonrío para mí misma y me quito la capucha dejando que el mundo me vea con mi cabello rosado brillante recién teñido. 

Mientras camino por la calle no puedo evitar estar emocionado por este atraco. La ultima vez fue hace muchos ańos, mi equipo y yo casi nos atraparon, ahogaron y mataron. Tenía solo diecisiete años cuando eso sucedió, ahora tengo 27 años y ahora se cuáles son los riesgos de un atraco. Mi primer robo fue cuando tenía dieciséis años con mi hermano. Como era menor me vi obligada a vivir con él y con un amigo suyo. Todavía recuerdo ese día como si fuera ayer. 

El nerviosismo, el apuro y la ansiedad seguían corriendo por mis venas y desde entonces estaba enamorada de mi trabajo. 

************

Se sintió como una eternidad cuando Sergio consiguió a todos y las puertas principales se abrieron a nuestra casa temporal. Era un poco vieja pero era perfecto para nosotros. Somos ocho, incluido Sergio, también conocido como El Profesor.

Tenía que desempeñar el papel de que nunca nos hemos conocido por razones de seguridad. El profesor escribió Bienvenidos en la pizarra mientras los ocho estábamos sentados como buenos estudiantes.

 "Gracias a todos por aceptar este trabajo, pero primero tenemos que seguir algunas reglas. En primer lugar, no hay relaciones personales" Podía escuchar algunos gemidos provenientes de la parte de atrás.

"Eso no es justo. Odio las reglas." Un chico sentado frente a mí dijo mientras masticaba su lápiz. Un hombre sentado detrás de él le dio una palmada en la espalda, "Compórtate tio." Le dijo. El joven se rio. "Está bien papá".

El profesor aplaudió y volvió a llamar nuestra atención. "Chicos, concéntrense. Todos me llamarán el profesor. Eso significa que no deben usar sus nombres reales, así que iremos por nombres de ciudades, quien empieza? ..." Los dos hombres de atrás eligieron Oslo y Helsinki. 

El padre y el hijo pasando por Moscú y Denver.

 La chica con el pelo corto como yo pasando por Tokio, la otra chica yendo como Nairobi. El más joven del grupo pasando por Río y el hombre detrás de mí, Berlín.

 "¿Qué hay de tí?" El profesor pregunta mirándome como todos ellos. Con confianza y una sonrisa en mi rostro, le respondo. "Mi nombre es América", respondo. 

 "¿América? ¿No se supone que debemos elegir los nombres de las ciudades", Denver pregunta confundido. 

 "Cariño, no necesito el nombre de una ciudad pequeña. Soy una nación entera". Respondo con sinceridad pero con astucia, lo que me valió aplausos de las mujeres. Miré hacia atrás para ver al guapo Berlín sonriéndome.

 "Está bien, cálmate. América es entonces. Ahora esto es lo que haremos. Robaremos al banco de moneda y timbre." Nuestro salvador, El Profesor dijo. Y así nació nuestro memorable equipo.

Berlin. Un hombre buscado en todo el mundo. 27 atracos. Un autor intelectual, hombre egocéntrico con narcisismo como segundo nombre. Su mayor puntaje fue en París, robando más de 400 diamantes con su compañero común en sus atracos.

Nairobi. Ha estado robando de bancos desde que ella puede recordar. Ella es loca pero divertida y es el corazón del equipo.

Dos hombres serbios. ¿Qué más puede necesitar un equipo?  Son unos de los mejores y mas fuertes de la banda.

Denver. El hijo de moscu. Ha estado en drogas, peleas callejeras y peleas de bar. Es una bomba de tiempo y un miembro perfecto para el equipo.

Moscu. El amoroso padre de Denver. Ha sido experto en herramientas desde que comenzó a cavar túneles en Austria para robar de diferentes lugares desde allí comenzó todo.

Rio. El primero más joven del grupo. Un profesional con computadoras. Puede hackear cualquier sistema con solo un clic.

Tokio. La que siempre arruina los planes. Debido a su mal genio, su ex murió en sus brazos.

El profesor. La mente maestra de nuestro atraco. El hombre ha estado planeando esto desde que era un niño y nunca renunció a ese sueño, robar el banco más grande de España. No ha renovado su identificación desde que tenía diecinueve años. Es un fantasma para todos los demás.

Amelia Anderson o Amelia Fonollosa Marquina. America. 26. ¿Recuerdas cuando te dije que nunca me atraparon? Bueno, mentí. Más comúnmente conocido como el socio desconocido en los crimenes de Berlín. Media hermana de Andrés y Sergio. He estado robando desde los 16 años y los policías me atraparon por robar un automóvil cuando tenía 19 años. Desde entonces no me han encontrado, ya que soy una maestra por disfrazarme de alguien de cualquier género. Una individua algo narcisista pero sensible con pensamientos deprimentes y pasado oscuro.****************"Nunca planeé morir de vejez. Helsinki, llévala contigo". Berlin y yo nos miramos el uno al otro. Todo parecía ir en cámara lenta. Los policías corrían más cerca de nosotros y todos estaban listos para partir antes de que pudiéramos atraparnos. Todos sabían sobre él y su vida, los muchos matrimonios fallidos, su condición y sus formas de vida. Andrés de Fonollosa.Nos separamos a lo largo de los años, ya que hablaba constantemente o estaba con sus nuevos amantes, lo que me llevó a vivir una vida rebelde y problemática más adelante. Agarré mi arma lista para quedarme con él, morir con él, hasta que él me la quitó y me abrazó con fuerza antes de tirar de mí y agarrarme las manos con fuerza, mirándome fijamente a mis ojos oscuros.

"Amelia. Mi querida hermanita. No quiero que renuncies a tu vida para quedarte conmigo" Dijo con un tono cálido y suave, no estaba asustado o triste. Lo miré amorosamente con lágrimas en los ojos y presioné nuestras frentes juntas. Helsinki comenzó a gritar mi nombre pero tenía los ojos en mi querido Andrés. 

"Antes de que mi vida termine ... Quiero disculparme por descuidarte durante los últimos años, ahora que lo pienso, todas esas mujeres nunca significaron nada para mí, pero tú lo hiciste. Mantente fuerte para mí, Amelia, te dejo todo mi dinero a ti " Andrés me besó antes de sentir unos brazos envolviéndome y de repente fui alzada sobre el hombro de Helsinki. 

 "¡Helsinki, sueltame! ¡Andrés!" Grité su nombre lo más fuerte que pude antes de que Helsinki me arrastrara al vehículo y él corriera hacia el otro lado conduciendo rápidamente el automóvil con el dinero. 

"Ponte la capucha, Amelia" Sergio murmura y me levanta la capucha para que nadie pueda notarnos cuando pasamos el banco. Echo un vistazo a todos los que parten de nuestro equipo. Sergio mira la tableta en sus manos y yo la tomo, mirando a mi hermano en un charco de sangre. Las lágrimas no dejan de correr por mi cara cuando siento que Sergio me abraza desde un lado. Cierro los ojos por el cansancio y la conmoción que me desmayo y todo se vuelve negro.