Ante la inquietante situación mundial, los gobiernos decidieron rápidamente reunir a las personas más poderosas en el plano terrenal, para poder ejercer una ofensiva. Una reunión que se haría en la central de la ciudad S en Japón, la base de la sociedad de héroes en Japón. Mientras que en plano espíritual, en la sociedad de almas, habían reunido la ayuda de Shinigami-sama, Mael y por último,  a uno de los últimos dioses que quedaban en el cielo, ya que la gran mayoría habían muerto tras ir por el dios que venía hacia la tierra. Pronto se reunirían también, esperando la llegada de ese dichoso Dios.

A la par de todo estas decisiones, un chico de pelo naranja, cortó un gigantesco Hollow con su enorme espada negra, aterrizando en el centro de un parque donde otros 3 hollows se abalanzaron sobre él a la vez, sus tamaños eran colosales, medían más grande que un elefante y su peso equiparaba a una ballena. No obstante, el chico de pelo naranja solo hizo un movimiento con su espada alrededor suyo, con suficiente rapidez para cortar a los 3 por la mitad a la vez.

- ¡¡No paran de llegar!!!- exclamó alterado, viendo como otros cientos aparecían en el lugar. Para el chico no representaba una gran dificultad acabarlos, pero eran una cantidad inmensa de Hollows, tantos que no solo en la ciudad, sino que seguramente en otros lugares del mundo habían tantos como ahí.

Por suerte, contaba con ayuda en la ciudad. Una chica de cabello naranja perforó la cabeza de un Hollow con una especie de criatura pequeña con alas, un espadachin con cabello rojo "estiro" su espada para partir a un Hollow conocido como "Gillian" por su tamaño por la mitad, una chica de pelo negro y corto congeló por completo a un Hollow de clase "Adjucha", y siguiendo a los 3, un chico de anteojos de pelo corto también, cargando un gigantesco arco, disparaba a tantos Hollows tuviera en su mira, junto a los 4, un chico de gran altura y complexión musculosa, además de ascendencia Mexicana, destrozaba con golpes a cualquier Hollow que se le cruzara por delante.

Ichigo Kurosaki, el joven de pelo naranja que está terminando Bachillerato es un Shinigami, encargado de tratar con Hollows comúnmente y sus distintos tipos. En este momento está peleando por su ciudad, y sin saberlo, tal vez esté nuevamente peleando por el mundo que conoce. La chica de pelo naranja se llamaba Orihime, el chico de pelo Rojo Renji, la chica de pelo negro Rukia, el de pelo azul y lentes Ishida, mientras que el chico moreno se apodaba "Chad". En estas circunstancias tan adversas, eran los únicos en el lugar, capaces de dar pelea contra los Hollows.

- ¡¡Sin duda alguna, estamos jodidos!!- gritó Renji que estaba cerca de Rukia, cortó el brazo de un Hollow que quería agarrarlo, para después saltar hacia él y decapitarlo.

- Tenemos que aguantar hasta que Yamamoto-sama junto al resto de la sociedad se encarguen del asunto, Renji- le comunicó Rukia, congelando a toda una legión de Hollows en una calle recta.

Chad golpeó a un Hollow con tanta fuerza que lo hizo atravesar todo un edificio.

- Creo que use demasiada fuerza- dijo Chad, mientras veía acercarse otros Hollows, además de Adjuchas. Estaba apunto de lanzar un ataque hacia los enemigos que se le acercaban, pero antes de que pudiera mover su brazo, fueron destrozados casi al instante por una figura que llegó al lugar.

-¿¡!?- Chad vio a un sujeto de apariencia amenazante, con un cuerpo delgado, ropa elegante de color rojo y cara tapada por largas vendas blancas.

-...- Chad observo al sujeto con bastante precaución, mientras veía como hacía tronar sus dedos-(No parece un Arrancar o algo parecido, ¿quién será?)-

El sujeto empezó a moverse de un lado a otro mientras se hacía tronar sus dedos, lucia como un completo maníaco que observaba hacia todas partes, y se detuvo al ver a Chad. Saltó hacia él con sus brazos extendidos, y de inmediato Chad supo que él no era sin duda un aliado. Recibio el impacto con su brazo derecho, mientras veía que las vendas caían poco a poco y se veía su sonrisa maniática.

Rukia, Orihime y Renji empezaron a escuchar los fuertes ataques de ambos, yendo los 3 hacia el lugar de los hechos, uno de sus amigos estaba peleando contra alguien poderoso. Por mientras, Ichigo estaba muy alejado de los 4 para poder escuchar y sentir al maniático que llegó. Rodeado de Adjuchas enormes y "Menos grandes".

- ¡¡¡Tsk, no paran de venir!!! No importa cuantos corte- se quejó el Shinigami, blandiendo firme su espalda. A lo lejos visualizo como un Hollow se acercaba a un hogar familiar, y lanzó un ataque cortante desde donde estaba para cortar a la mitad al Hollow.- No permitiré que sacien su hambre, ¡¡Idiotas!!-

Corrió entre ellos, cortando a cada uno con su Zanpakuto, corriendo en enormes velocidades. Pronto, no quedo ninguno más por la zona donde estaba, solo quedando su ropa hondeando con la soledad del lugar.

- Aún queda mucho por hacer, debo ponerme en marcha- Ichigo se estaba dispusiendo a salir volando del lugar, para recorrer el resto de la ciudad en busca de eliminar esta gran plaga de Hollows. En ese momento de pleno silencio, empezó a sentir una gran energía viniendo hacia la ciudad.

-¿¿¡¡!!??- los ojos de Ichigo se ensancharon, sintiendo una inmensa energía espiritual llegando a una inmensurable velocidad.- ¿¡Qué!?-

En uno de los edificios cercanos, se estrello un sujeto de aspecto verdoso y con antenas en su cabeza, teniendo un gran agujero en su estómago, careciendo de un ojo y uno de sus brazos, junto a varias fisuras en sus brazos.

- Maldición...Ahrggg- el sujeto cayó al suelo mientras vomitaba sangre con sus ojos en blanco. Había recibido una paliza hasta dejarlo medio muerto, quedando inconsciente por el desmesurado dolor de sus heridas.

Ichigo fue rápido hacia él en un instante, tocándolo del hombro.

-¡¡Hey, ¿¡estás bien!?!!- le preguntó el Shinigami- mierda, me olvide que sigo en mi forma espiritual- se colocó en su posición al poco rato, apuntando su espada por el lugar donde vino- ¿¡¡Quién carajos eres!!?- le gritó al sujeto que avento al del color verde, mientras este se acercaba flotando.

- Soy el próximo gobernador de este mundo, pedazo de basura humana-

En egipto, todos los "aliens" del ejercito de Freezer que estaban en la ciudad del Cairo, estaban siendo reducidos uno a uno por el grupo Joestar.

- ¡¡¡HERMIT PURPLE!!!- gritó el anciano Joestar mientras usaba su Stand para rodear su cuello y empezar a asfixiarlo. El soldado no sabía que lo estaba ahogando, y aunque pudiera ver que era o agarrarlo, el Stand no podía sufrir ningún daño amenos que sea de otro Stand, por lo cual termino siendo asfixiado sin poder hacer algo al respecto.

- ¡¡Magicians Red!!- Avdol quemaba a muchos con sus llamas con extrema facilidad, gracias a sus altas temperaturas, era el que más facilidad tenía para acabar con sus oponentes.

Jotaro había sido rodeado por varios de los aliens, quienes precavidos, intenteron mantener cierta distancia. Dispararon todos a la vez rafagas de ki que terminaron explotando frente a sus ojos, produciendo cortinas de humo que impedían ver claramente. Tras disiparse, solo se pudo ver cenizas en el lugar.

-¡¡Lo matamos, a ese humano de mierda!!- gritó uno mientras festejaba, pero en eso una mano invisible agarró su pierna, saliendo del suelo. La mano le agarró con tanta fuerza como para romper su pierna, y luego se acerco rápido para acertarle un golpe en su cabeza que la destruyó. Jotaro salió de debajo de la tierra, con su Star Platinium, había cavado un tunel en segundos.

- Yare, yare, daze...¿Vais a seguir?- les preguntó Jotaro, mientras estos aliens, se abalanzaron hacia él. Mas su Stand los recibio a todos con golpes mientras gritaba:"ORAORAORAORAORAORAORAORAORAORA" dio un último golpe al que quedaba, destrozando su pecho con facilidad "¡¡¡ORA!!" soltó en un último grito, mientras Jotaro se iba de ahí.- No sienten nada de miedo, ¿quién rayos o qué es su líder? Esto no es simple controlar Stand o controlar de lo que sea, y teniendo en cuenta la cantidad, ¿cuánto poder debe tener ese sujeto para realizar esto?-

El equipo Joestar tenía facilidad gracias a sus Stands, cada uno distinto al otro y muy útil, pero no es suficiente solo tener sus Stands. Ya que los que permite ganar no son sus poderes, sino principalmente el ingenio. Cosa que tendrían que utilizar dentro de poco, ya que cinco figuras se podían visualizar en el cielo, volando de manera sincronizada y cada uno de un distinto color.

El Reino de Liones, uno de los reinos más mágicos del mundo, a la par que el reino de Fiore, contando entre sus filas a poderosos guerreros y poderosas especies mágicas. Una gran diversidad de especies. Pero en este momento, tal magia era teñida por oscuridad, y cualquier gota de rocío, no era de agua, era de sangre pura.

Todo un castillo destruido, un reino devastado, gente muerta y aplastada por escombros, mientras dos personas mantenían un duelo a muerte entre ellos. Un caballero perteneciente a una elite de caballeros especiales, los 7 pecados capitales, peleando contra otro de esta misma élite, el mismísimo capitán.

-¡¡¡BASTA, CAPITAN!!!- le gritó con ira el caballero, cuyo pelo era blanco, con chaqueta roja y ojos carmesi, tenía sangre cayendo de su boca, algunos moretones y varios rasguños por todas partes. Estaba desesperado, ante la situación y ante la impotencia de hacer algo para salvar a su amigo. Hace menos de una hora, estaban todos teniendo una simple reunión en el reino para tomar algo, pero súbitamente, demonios salieron de la nada, y su capitán se descontroló por completo, matando a dos de los 7 caballeros que los acompañaban y eran parte de su banda, y a una adorable chica que los acompañaba.

El resto intentó detenerlo, ante la confusión y el enojo de todo lo que sucedia, pero su capitán tenía una fuerza casi infinita. Voló en su gran mayoria el cuerpo de uno de sus compañeros, que era en sí un muñeco con vida. Dejo muy malherido al colérico rey de las hadas que quería vengar la muerte de su amada gigante. Y por ende quedo solo él, intercambiando golpes en busca de detener al capitán Meliodas en su masacre.

Recibió un gran corte en el pecho, para luego escupir sangre tras sentir plenamente una patada que daño severamente sus organos. Salió disparado hacia varios edificios que atraveso como si fueran arcilla, y cayó de espaldas en una plaza.

- Maldición, *Arhhg*- vomitó sangre mientras luchaba por ponerse de pie. Unos demonios, de los tantos que también surgieron en el mundo, se acercaron a él para intentar devorar su alma. Pero con un solo movimiento de sus brazos, despedazó a todos a una velocidad sobrehumana.

- Bien Capitán, ven a por mi, ¡¡AHORA!!- gritó furioso, ante la silueta de su ex-lider acercándose a paso lento, parece que no tenía mucha prisa por matar realmente a Ban, estaba disfrutando de hacerlo sufrir-¡¡¡¿¿POR QUÉ TE COMPORTAS ASÍ??!!!¡¡REACCIONA PEDAZO DE MIERDA!!¡¡HAS MATADO A DIANE, A MERLIN, Y A TU PROPIA MUJER!!-

Esas últimas palabras cambiaron un poco su expresión, pero se contuvo rápidamente, saltando hacia Ban mientras este lo recibia con un gancho que lo mando contra el cielo mismo. Las piernas de Ban se ensancharon por la musculatura, saliendo volando hacia Meliodas y dándole un golpe tan poderoso que rompio seguramente todas sus costillas con su rodilla izquierda, y después le dio un golpe justo en la cabeza, que mandó a estrellar al ex-capitán contra la superficie de la tierra. Ban aterrizó alado, mientras que este simplemente se levantaba ya recuperado de sus costillas, su regeneración estaba acelerada, más de lo común, estando con un sonrisa landina ante la mirada impasible de Ban.

El zorro de la codicia no esperó nada para propinarle un fuerte impacto con sus piernas en su rostro que lo mando varios kilometros a lo lejos. Saltó hacia su dirección, donde el mismo lo recibió con un golpe que le sacó varios dientes y una patada que lo estrello contra el suelo, después Ban se movio a un costado porque Meliodas estaba apunto de perforar su pecho de un golpe, y robando mucha de su magia con su habilidad mágica, le impacto severos golpes por todo su cuerpo.

-¡¡¡REACCIONA, REACCIONA, REACCIONA MALDITA SEA!!!- gritó con fuerza, estaba desesperado por una obvia razón, su oportunidad de ganar era nula por completo. Si tuviera a su amigo, el rey Hada King, sus probabilidades serían más grandes, pero con la ira del momento, el mismo simplemente perdió por despiste. Ban no podía permitirse perder, su esposa podría peligrar, muchos amigos y amigas suyas podrían peligrar más de lo que ya estén en esos momentos, el mismo mundo podía perecer ante la fuerza y poder de Meliodas si lo dejaba irse.

Meliodas agarró los brazos de Ban con mucha fuerzaz, sintiendo el mismo pecado mucho dolor y retorciéndose por este. Llegó a arrodillarse por simple impulso del dolor, mientras Meliodas solo sonreía, viendo con mirada psicopata a Ban, estando a punto de arrancarle los brazos.

-¡¡C-capitán!!¡¡Quien sea que lo esté controlando, no le hagas caso!!¡¡como siempre hacías cuando ideabamos una trampa o una misión!!¡¡no le hagas caso maldita sea!!-

- No puedo ignorarlo, él es la solución ante todo el caos en nuestro mundo, en nuestros mundos, él debe matarnos a todos, para hacer este multiverso de nuevo, esta realidad denuevo- le dijo con sus ojos negros, mientras apretaba más fuerte.

- Un mundo... ¿sin elizabeth?- le preguntó Ban mientras sentía que levemente, aflojaba su apretón.

- No te atrevas a seguir insinuando ese nombre- le amenazó, notandose en sus ojos algo de dolor.

- La mataste, Capitán, la mataste, mataste a nuestros compañeros, ¡¡¿Por un pedazo de mierda que ni conoces realmente?!!-

- Él tiene la razón, él tiene la razón...- decía intentando autoconvencerse mientras aflojaba un poco más su fuerza, estaba dudando- Él revivirá a Elizabeth también, estoy seguro-

-¿Seguro?¿entonces porque estás llorando?- le preguntó incrédulo Ban, mientras Meliodas, que seguia con cierta mirada impasible, aún así estaba derramando lágrimas.-
Mentiroso de mierda, tú no eres Meliodas, el capitán nunca haría semejante estupidez-

- B-Ban...él no miente, él arreglara este mundo-

-¡¡¡Que estupidez, desde cuando me vienes con semejante porquería de filosofía!!!-

-¡¡¡Es la única manera ahora de que reviva!!!¡¡¡ya la mate, no hay vuelta atrás!!!- gritó con un poco de su voz desgarrada, el dolor lo estaba carcomiendo por dentro- El-ella, ella...dios, ¿cómo pude hacerlo?¿cómo pude siquiera tocarla...? Ahora que por fin podíamos ser felices...No puedo, no puedo vivir en un mundo sin ella- derramó varios lágrimas mientras se agarraba del pelo, soltando los brazos de Ban. El sentimiento de ira y descontrol, además del control mental de Kronos, era gigantesco, pero el sentimiento de profunda amargura, era el que predominaba en este momento.

- Lo sé, Capitán- le dijo Ban mientras lo miraba triste, adolorido por lo que estaba por hacer- sé que no puedes vivir, en un mundo sin ella-

Atravesó a una extrema velocidad, los corazones que tenía Meliodas en su cuerpo en un parpadeo. Sus quejas habían sido aplacadas, mientras el dolor lo dominaba, cayó hacia adelante mientras era agarrado del hombro por Ban, mientras le soltaba unos "gracias" debidos.

- Adiós, Capitán- le respondió mientras también soltaba algunas lágrimas, por la muerte de uno de sus mejores amigos, o su mejor amigo en ese asqueroso mundo que siempre lo habia tratado como Basura. Soltó su cadáver, mientras lloraba desconsoladamente alado suyo.

En Japón, ante la mirada de Mob, avanzaba lentamente una figura de color blanca y con un cuerno bastante grande en su cabeza, con una túnica larga y blanca, unos ojos de azul marino y profundos, que penetraban su alma como puas.

- Vaya, hay un sujeto que no es basura aquí.- dijo el sujeto mientras caminaba lentamente hacia Mob, con aires de grandeza- Aunque todo tu poder no te salvará de mi, este mundo va a ser borrado por nosotros, o por el mismísimo Kronos cuando llegué. Así que resistirse, no es solo inútil, es solo alargar su sufrimiento-

Mob se puso de pie, dejando a su hermano delicadamente en el suelo, mientras su pelo se movia en el aire. No entendía lo que decía, ¿destruir el mundo?¿borrarlo? Era algo que nunca había escuchado, pero aunque no pudiera comprender eso, si podia entender lo fundamental. Sus amigos y su familia estaban en peligro, y eso era lo único que necesitaba entender.

-¡¡¡No toques a mi familia!!- le gritó Mob.

-68%-

-¿Me intentas dar ordenes? Los humanos son bastante orgullosos. ¿Y porque te molestas en proteger a esa basura?-

- Es mi hermano- espetó el chico cada vez más enojado

-¿?¿por que entonces lo...? ah, cierto, los humanos tienen esos estupidos lazos afectivos llamados familiares y sentimientos. Casi me olvido de eso. Supongo que mi mente sigue confusa tras revivir de hace poco-

- ¿humanos?¿acaso no eres humano?- le preguntó Mob, mientras el sujeto llamado Ulquiorra cerraba los ojos.

- Para nada, me daría asco si fuese uno- le dijo Ulquiorra mientras apuntaba con su dedo a Mob- la basura debe saber donde debe estar, y aceptar cuando es incinerada- el dedo se iluminó con mucha potencia, disparando un rayo que explotó y que provoco una gran cortina de humo. Se pudo escuchar el gran estruendo desde lejos, causando pánico en la ciudad.

Al disiparse la cortina, para sorpresa de Ulquiorra, Mob y su familia estaban intactos, protegidos por una barrera psíquica.

- Interesante, eres bastante fuerte. Soportaste el 10% de mi poder- Halago de cierta manera a Mob, sin embargo, en un instante, se encontro de frente a Mob, quien apenas pudo seguirlo con su mirada.- Ahora veamos como te va con mi 30%-

Uso su espada para chocar de frente con el escudo, haciendo que Mob tenga que aumentar el poder de este.

-78%-

El escudo aguantaba como podía, pero la potencia del ataque de Ulquiorra termino atravesando la barrera psíquica, produciendo un corte en el pecho de Mob. El psíquico vomitó sangre mientras retrocedía adolorido, sintiendo la sangre derramarse de su pecho, luchando por mantenerse pie. Ulquiorra fue hacía él, pateandolo en su herida, mandandolo a atravesar un edificio.

- Basura, simple basura- comentó Ulquiorra mientras se posicionaba para saltar otra vez, pero es agarrado de una pierna por el hermano de Shigeo, quien abrió un ojo para ver como podía a Ulquiorra.

-No...toques a mi hermano- le amenazó Ritsu con una mirada decidida, a lo cual Ulquiorra respondió, levantando su espada.

- ¿?¿por?¿que tiene de especial ese mocoso?-

- ¡¡Es mi hermano!!- le gritó Ritsu, mientras apretaba más su pierna.

- Que estupidez, nunca entendere esa clase de argumento y sentir de los humanos-

- Se nota con tan solo mirarte que no entiendes que son los sentimientos-

- Los humanos siempre están hablando sobre los sentimientos, como si lo tuvieran en sus manos. Pero mi ojo puede verlo todo, nada puede escaparse de él. Lo que no vemos no existe, asi es como siempre he luchado, ¿qué es el corazón? Si te abro el pecho,¿ lo podre ver?- le preguntó, mientras bajaba su espada y lo cortaba por la mitad. Ritsu abrió grandes sus ojos, dilatandose sus pupilas hasta desaparecer. Había muerto en el acto.- vaya, no veo nada, entonces, si te abro el craneo, ¿lo encontraré ahí?- Ulquiorra bajó nuevamente su espada, destrozando el craneo del hermano de Shigeo. La sangre se embarro en su espada, y Ulquiorra solo vio esto con indiferencia- aun no veo nada-

Shigeo se levantaba, vomitando más sangre que la otra vez, sentía un fuerte ardor en el pecho, apenas podía respirar bien.

-Eh...- un niña estaba callada mirando atonita a Mob, quien se dio cuenta que había terminado en una casa por el golpe. El hermano de la niña, alejó a su a hermana del muchacho, bastante asustado.

- Tranquilos, yo no voy a lastimarlos...- habló como pudo, mientras se ponía de pie, en eso sintió un ataque espiritual de Ulquiorra viniendo hacia ellos, creó un gigantesco escudo que los protegió del ataque. Los niños vieron esto desde donde estaban asustados, confundidos, sin entender lo que sucedía. Solo habían salido sus padres un segundo y ahora estaban con esta situación en si hogar.

-(No puedo permitir que estos niños sean lastimados, ese sujeto no es humano, no debo contenerme)- pensó Mob mientras elevaba su poder. Se aventó volando hacia Ulquiorra, quien lo esperaba callado, impasible. La expresión del Arrancar, cambió cuando sintió una gran presión que logró en su mayoria movilizarlo, y aventarlo contra varios edificios y kilómetros. Ulquiorra paró en medio de un edificio que estaba en via de construcción por suerte, tras recorrer varios metros, con una mirada de sopresa debido al gran poder de Mob. En ello, Mob llega volando, dando un golpe con su brazo rodeado de una barrera que daña profundamente a Ulquiorra y lo hace escupir sangre, el Hollow resiste el golpe elevando su energia espiritual, contraatacando con un golpe en la nuca del mismo muchacho que casi queda inconsciente, le golpeó con el mango de su espada, estrellandose en el pavimento de la calle.

- Que sorpresa, tu poder está aumentando mucho- le dijo el Hollow, mientras aterrizaba sobre su espalda, provocando que se quejase por dolor y le agarraba de la cara.- vamos, muéstrame más, o te cortaré como hice con el otro-

Las pupilas de Mob se ensancharon mucho, ante las palabras del Arrancar.

-¿Q-que?- le preguntó Mob, a lo cual Ulquiorra simplemente mostró su espada ensangrentada.

- Tú "amigo" me quiso detener antes, y tuve que matarlo por intervenir- le dijo de forma cortante a Mob, cuyos ojos empezaron a tornarse rojos.

-¿Q-que?-

-86%-

-No, no me digas que te refieres a...-

-93%-

-No, dime que no-

-SI- respondió cortante Ulquiorra, mientras apuntaba su espada a su cuello- lo corte por la mitad, a ese insignificante humano-

Los ojos de Mob, se encogieron bastante, llorando ante la horrible noticia de Hollow, que solo estaba callado, desinteresado en el tema. Apuntando su espada al cuello de Mob. No espero mucho, movió su espada a velocidad ultrasónica al cuello del psíquico, buscando decapitarlo.

-100%-

Una gran luz cubrió los ojos del Hollow, mientras su espada era detenida derepente por un gran poder, los ojos del chico se habían vuelto no rojos, sino blancos profundos, su aspecto cambió a uno más oscuro, y su pelo revoloteaba en el aire, moviéndose como un enorme fuego cada pelo de su cabellera.

-170%-

-290%-

-790%-

-1000%-

La espada de Ulquiorra se detuvo a escasos segundos de penetrar en su garganta, y con facilidad, salió volando de las manos del Arrancar. Ulquiorra recibio entonces un poderoso golpe que le aflojo varios dientes, saliendo disparado hacia varios edificios. Mob estaba llorando, pero al mismo tiempo estaba histérico, furioso, una sensación combinada de ambas. Llego a donde habia aterrizado Ulquiorra, quien se levantaba apenas del ataque. Junto a él, trajo todo el edificio que estaba en vias de construcción para usarlo y aplastarlo con él. Ulquiorra termino bajo las enormes toneladas del edificio, y como si no fuera poco, Mob hizo que todos los escombros se apretasen y encerrasen a Ulquiorra bajo una infernal presión, que hizo crujir sus huesos. Luego, hizo que el Hollow chocase contra un enorme edificio, desplomando este mismo sobre él, y terminando con un disparó de energía psíquica que lastimó todo su cuerpo.

-(este niño...)- el Hollow seguía vivo aun tras ese demoledor poder, pero estaba gravemente lastimado, el increible poder de Mob lo había tomado totalmente desprevenido.-(Parece ser que me he equivocado con él totalmente, Basura no es)-

Mob caminaba hacia él con un aura tenebrosa, con sus ojos blancos y aspecto negro. Sus manos se abrían y cerraban con ganas de agarrar el cuello de sus adversario, deseando estrangularlo. No obstante, el sujeto que creía haber reducido, se levanto nuevamente, con un aspecto realmente demoníaco.

-

Espectacular, nadie más a podido prácticamente pelear a mi nivel, a excepción de Ichigo Kurosaki. Tú eres el segundo humano en lograr esto.- le dijo mientras volaba hacia él- Veamos, a cuanto llegas-

Ambos volaron hacia el otro, chocando a ataques por todo su cuerpo. Mob estaba en un estado donde no le importaba lo más minimo la ciudad, destruyendo todo lo que pudiera en su camino con la simple intención de matar a Ulquiorra. El mismo, lanzaba ciertos ataques concentrados que lograron atravesar su barrera y perforar los hombros del joven, pero no necesitaba mover por si solo sus articulaciones si contaba con su propio poder psíquico para poder hacerlo. Mob elevaba cientos de edificios que tenían como intención aplastar al Arrancar con todo su poder. El mismo, volaba entre los escombros, disparando potentes rayos de energía espiritual que destrozaban cualquier proyectil mandado hacia él.  Llegando hasta Mob y comenzando una lluvia de golpes, cortes y energía Psiquica e espiritual que chocaba continuamente en lo que se convirtió en un festival de luces en el cielo. Ambos se mantenían igualados, amenos al principio. El arrancar se dio cuenta de algo aterrador mientras seguia luchando.

El poder de Mob crecía cada segundo sin parar, elevándose con un ritmo desesperante. Pronto sus ataques dejaron de surtir efecto, y solo recibía él el daño brutal.

-(Me he metido, con un chico muy peligroso, más peligroso que ese Ichigo. Vaya...por primera vez, creo que no pensé claramente)- pensó mientras le atravesaban los brazos, las costillas, y por último, su propio cráneo.  Mob vio caer el cuerpo del arrancar, mientras flotaba en el aire, respirando agitado pero sin quitar esa presencia aterrador. Su poder, estaba en un punto aterrador.

-???????????%-

Podría destruir todo, el planeta, o prácticamente la galaxia o via lactea con su energía infinita. Pero en esos momentos, recibió mucho daño, sentía sus organos muy dañados, sus hombros perforados, y todo adolorido. Aún con su increíble poder, no contaba con regeneración para curarse de todo ello. Por lo cual, termino descendiendo poco a poco, hasta quedar inconsciente, y chocar contra el techo de un edificio.