■•---Capítulo 5: Leyenda---•■

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Goku y Vegeta observaban al sujeto que les mando una bola de fuego desde donde estaban, tenía un pelo negro y largo, unos ojos color perla con circulos extraños dentro de estos, un ropaje de protección especializado Ninja, además de una especide de Guitarra gigante según creía Goku.

Un guerrero ninja temido por las aldeas escondidas, capaz de derrotar un ejercito entero de ninjas de elite.

El nombre de este Ninja, perdura aún tras más de Cien años, el legendario ninja Uchiha, Madara Uchiha.

- No tiene un gran Ki, pero es extraño, es como si el Ki que sentimos no fuera realmente su indicador de poder- le dijo Goku a Vegeta, mientras se ponía en posición.

- ¿y qué más da? Acabemos con él en un segundo- le dijo Vegeta a Goku, mientras se lanzaba en estado base hacia Madara. Se acerco a él rápidamente, acertando golpes en el ninja. Pero todos sus golpes se bloquearon perfectamente, haciendo que Vegeta se sorprenda por su fuerza y velocidad.

- ¿Algo tan simple para intentar derrotarme? No me hagas reir- le dijo Madara a Vegeta, mientras lo jalaba de su brazo para traerlo hacia él, le propinó rápidamente un golpe en la nuca, otro en el estómago, uno en el brazo, y otro en la mandíbula, que hizo marear al Saiyan y que perdiese su estabilidad.

-¡Vegeta!- gritó Goku, volando para atacar esta vez a Madara él. Propino muchos golpes que el antiguo y legendario ninja pudo esquivar y bloquear, para acertar en puntos vitales de su cuerpo en un rápido movimiento-¡¡Ahg!!-

- Tienen mucha fuerza, pero no es suficiente, son rápidos pero no lo suficiente, son torpes con sus movimientos, y predecibles- le comentó Madara, mientras se preparaba para lanzar otra bola de fuego.

- Rayos...- se dijo para asi Goku, agarrando a Vegeta para apartarlos de ello. Ambos cayeron al suelo tras una gran explosión provocada por la nueva bola de fuego de Madara, el golpe contra el suelo hizo reaccionar a Vegeta de su trance.

- Es rápido y fuerte para ser un humano- le dijo Vegeta, a lo cual goku se quedo pensando.

- Me suena haber oído de él, fue el ninja de ese otro país que casi nos encierra a todo el planeta bajo un hechizo-

- ya me acuerdo, hasta yo caí en su hechizo...- le dijo Vegeta apenado, mientras miraba a Goku- me sorprendas que recuerdes algo así-

- Supongo que es porque me interesaba pelear contra él, aunque me dijeron que el...¿caguesage?¿Hokise?¿Hockage? Bueno, que él lo venció cuando era un adolescente.- le comentó Goku, mientras ambos se ponían de pie mirando desafiantes a Madara.

- Como sea, es muy rápido, y parece tener más entrenamiento cuerpo a cuerpo que los dos. Apenas pude seguirlo con la mirada, y parecia moverse de una manera muy rara, casi que podria jurar que en un momento torció su torso en una buelta 360° para golpearte. Pero esta vez, no nos tomara por sorpresa. - le dijo Vegeta- ¡¡Vamos!!-

Aumentando su Ki a la vez que iban a por Madara, este les esperaba tranquilamente, con una mirada impasible en su rostro. Ambos llegaron a la vez, produciendo una serie de golpes consecutivos que el Uchiha esquivo relativamente fácil, aunque cuando intento parar uno de los golpes, noto el mismo el considerable aumentando en las fuerzas de los dos Saiyans, estaban usando su máximo de fuerza en su estado base. Madara gracias a sus ojos, pudo fácilmente seguir sus movimientos, aparte de poseer una gran rapidez. Golpeo de nuevo a Vegeta en el estomago, y a Goku le pegó en la nariz, para después acertarle un golpe en la cabeza para hundir su rostro en el suelo.

-¡¡Bola de fuego!!- gritó el Uchicha, disparando una gigantesca bola de fuego sobre el Saiyan, que gritó por las graves quemaduras.

-¡¡INSECTO!!- le gritó Vegeta volando hacia él, intentando golpearlo por detrás de su espalda. Pero Madara le pegó con su "guitarra", para hacer que se estrelle contra una montaña.- Tsk- se quejo Vegeta, mientras se reincorporaba y mandaba una serie de ataques de ki que el Uchiha sorprendentemente, desvió con su herramienta-¡Mierdaaa!-

Vegeta se vio afectado por sus propios ataques, que Madara, con lo que parecia ser un guitarra pero realmente era una arma conocida como "Gunbai", había devuelto. Goku estaba con muchas quemaduras sobre la piel, si hubiera estado en su fase dios a lo mejor no le hubieran afectado, pero estaba en estado Base.

-(Este sujeto es muy fuerte, será mejor que empiece a tranformarme)- pensó Goku, adquiriendo el estado del Super saiyajin. Madara no se percato a tiempo de esto, recibiendo un golpe por distraerse. El Uchiha se sorprendio por la rapidez en la cual, Goku obtuvo tanto poder. Apenas aterrizo en el suelo por el golpe, Goku llego para intentar darle otro, pero Madara nuevamente logró esquivarlo. El uchiha empezó a moverse por el area, mientras Goku lo perseguía. Aterrizó en un planicie bastante extensa, donde utilizando un Jutsu, creó numerosos arboles con un grosor grande, que encerraron rápidamente a Goku. El Saiyajin hizo que su ki saliera rápido de su cuerpo, para que por el impulso, las raíces a su alrededor se destruyeran. Sin embargo, aparecieron unas detras de otras, envolviendolo en varias capas de madera. Goku empezó a golpear y volar hacia arriba, convertido ahora en SSJ2, para apresurarse y escapar. Pero apenas salió a la superficie, pudo ver algo perturbador cayendo sobre él .

Un inmenso Meteorito bajo de las nubes, en vuelto en fuego. Había sido bajado por el mismísimo Madara Uchiha desde el espacio exterior. Goku, viendo esto, solo pudo transformarse en modo dios para intentar destruir o detener el meteorito.

Golpeo este con su enorme fuerza logrando detenerlo. Pero en eso, algo igual de perturbador que lo anterior sucedió ante los ojos del Saiyan.

Aparecio por encima, otro meteoro traído por Madara, chocando con el anterior, agregando mucha más fuerza y peso.

De vuelta con Vegeta, este se levanto tras los ataques consecutivos que le regresaron.

-¡¡Maldición!!- gritó Vegeta frustrado y sintiéndose humillado- Nunca creí que un humano podría hacerme algo así, bueno, amenos no desde que me enfrente a ese calvo con capa- expresó Vegeta, buscando con la mirada a Madara- ¿¡¡Dónde estás, cabronazo!!?- gritó con gran potencia, su llamado, fue socorrido por quien llamo. Madara llegó corriendo, lanzando como antes, una bola de fuego. El saiyan dio una palmada con todo su ki para repeler el fuego, pero en medio de este saltó Madara atravesandolo, cayendo encima suyo con un golpe. Mas el ataque fue bloqueado por Vegeta para sorpresa del ninja.

-(¿cómo supo que saldría por aquí?)- pensó Madara. El ninja se movió agilmente para darle muchas patadas a una velocidad apenas perceptible para el rey de los Saiyajin.

-(Se mueve muy rápido, la unica manera de que alcance su velocidad...)- pensó mientras su pelo cambiaba a Azul-(Es aumentando mi ki!)-

Vegeta a unas velocidades que Madara no pudo reaccionar, brindo unos golpes totalmente demoledores al Uchiha, partiendole brazos y parte del tórax con unos pocos golpes.

-(¡¡Se mueve mucho más deprisa!!)- pensó Madara, mientras él era quien en esta vez chocaba contra una montaña-(Y su fuerza es...demasiada ahora. ¿¡Cómo aumentan ellos tanto su poder?)- pensó mientras se levantaba del dolor. Por suerte para él, tenía regeneración rápida, así que ya estaba preparado para volver a atacar. Mas viendo la asombrosa velocidad ahora adquirida, se dio cuenta de inmediato que su enemigo, había adquirido capacidades físicas fuera de lo normal. Vegeta llegó en un parpadeo frente a él, dandole una patada en el estómago que lo mando al cielo. Madara escupio sangre, y cuando estaba en medio del aire viajando hacia arriba, Vegeta llegó y golpeó fuertemente su espalda, haciendo que cayese nuevamente en el suelo en un enorme Crater.

- Parece que eres tú ahora quien está jodido- le dijo Vegeta, mientras bajaba lentamente hasta quedar frente a él.

- SUSANOO- gritó Madara, generando a su alrededor un Susanno que sorprendio a Vegeta, puesto que el guerrero nunca vio algo semejante.

El susanoo atacó a Vegeta con sus dos espadas a la vez, pero lejos de ser algo beneficioso, termino no siendo nada. Vegeta no tuvo dificultad en bloquear ambas espadas con las palmas de sus manos.

- Nunca he visto algo así, pero ¿esperas que esto derrote al gran príncipe Saiyan!?- le preguntó como si fuera un reclamo, mientras las alzaba sin dificultad.

- No, pero esto sí-

Abrió sus ojos al completo, observando fijamente a Vegeta. El saiyan al instante, quedo preso en una especie de hipnosis.

-¿Qué es esto?- preguntó Vegeta dentro de su cabeza, totalmente confundido. Intento lanzar ki, pero ninguno de sus ataques hizo algo. Por obvias razones.

Madara estaba frente al cuerpo del inconsciente Vegeta, que miraba hacia arriba con la mirada perdida. Había caído bajo su Mangekyo Sharingan, un jutsu mental milenario, que practicamente casi ningún ser vivo podría evitar o escapar de él. La mente de Vegeta era fuerte, pero un Jutsu de este calibre lo había derrotado por completo.

- Las mentes...son más fácil de atacar. Son increíblemente fuertes y rápidos, pero sus mentes son frágiles- comentó Madara, mientras salían chispas de electricidad de su mano- muy frágiles-

Madara iba a matar a Vegeta en ese estado de imposibilidad, donde el oponente no podía ejercer nada de resistencia. Pero en eso, termina saliendo volando hacia otra dirección, rompiéndose su quijada y parte del cráneo con ese golpe.

-¿¡¡!!??- Los ojos de Madara se exaltaron y casi pierde el conocimiento, recibió un golpe demoledor de Goku, quien llegó a un costado de su cabeza.

Dientes salieron disparados de su boca con sangre, a la vez que recorria una gran distancia golpeándose contra el suelo y rebotando como una piedra en el agua.

- ¡No te dejaré escapar!- le gritó Goku.

El saiyan estuvo apunto de ser aplastado totalmente por ambos meteoros en ese instante, pero gracias a su velocidad, logró huir rápidamente. Pero se vio alto afectado, pese a haberse alejado, no recorrió la distancia adecuada para evitar daños. Se encontraba con la ropa quemada, con algunos rasguños leves y moretones, pero aparte de eso, nada más.

-(Pude haber muerto si no hubiera estado en modo Blue)- pensó Goku, a la vez que se lanza de nuevo contra Madara.

-¡¡Maldito!!- le gritó Madara, iba a intentar usar sus ojos con él, pero Goku iba tan rápido que no lograba verle bien, recibió un impacto en su hígado, otro en la cara rompiendo su nariz, además de ser agarrado de las piernas y lanzado contra el suelo.- Ahggg- Madara vomitó sangre mientras estaba sin poder moverse, todos los huesos de su cuerpo habían sido rotos.

- ¿¡Qué le hiciste a Vegeta!?- le preguntó Goku a Madara, quien no respondió- ¿¡Qué le hiciste!?- le preguntó otra vez.

- Es-está inmovilizado, no podrá escapar de mi jutsu- le dijo Madara, quien en esos momentos, intentaba abrir sus ojos, pero el golpe a la cara de antes le produjo cierta "ceguera" temporal, aparte de habla tosco por los dientes salidos.

-¿Jutsu?- preguntó Goku confundido- Como sea, ¿lo liberas?-

- No planeo hacer eso- le dijo Madara orgulloso, aún en su posición de debilidad, no iba a ceder.

- ¡¡Liberalo!!- le gritó, amenazandolo.

- N-no lo haré- le dijo Madara, mientras Goku apretaba los dientes enojado.

-Como quieras, pero no te atrevas de nuevo a atacarnos..-

-¿?¿No me vas a matar?- preguntó Madara, a lo cual Goku se volteo.

- Yo no mato a no ser que sea necesario- le respondió Goku, volando hacia Vegeta para agarrarlo de loa hombros- ¡Teletransportación!- gritó, desapareciendo del lugar. Goku no conocía a Madara, no sabía de sus atrocidades, ni lo temible que podía ser. Solo sabía que lo atacó por alguna extraña razón, ligada lo más seguro a lo que dijo Kaio-sama. Sabía que era malvado, pero no tenía manera de saber que tan malo era aún con su ki.

Madara en el suelo, simplemente sonrió.

- Haberme dejado libre, ha sido su peor error- comentó Madara riéndose, ante la ingenuidad de Goku- Es hora de ir a por el diez Colas-

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En la ciudad donde se encontraban Ichigo y compañía, distintas peleas se estaban manifestando en distintos flancos de la ciudad. Por su parte, Ichigo se encontraba ante un sujeto imponente, cuya cantidad de energía espiritual era inmensa. Chad, Orihime y Ishida estaban frente a un sujeto de vendas bastante peligroso.

Rukia y Renji estaban a punto de llegar donde ellos, pero son interceptados por alguien quien no esperaban ver.

- Hola Renji- le dijo GrimmJow al Shinigami, mientras este solo apretaba su espada.

- Hola pedazo de mierda, ¿te corto por la mitad?- le preguntó sarcastico, a la vez que sacaba su Zampakuto con Rukia- No tarderemos mucho, vuelve al puto infierno-


Por otra, Chad intentaba mantener un combate contra el hombre vendado, quien atacaba sin cesar al hombre de descendecia Mexicana, los golpes de tal hombre lograban provocar Dolores en su brazo, y si seguía así, fisuras. Por su suerte, llego Orihime y Ishida, quienes solo pudieron defender al muchacho.

Ishida le disparó una flecha que tomó desprevenido al vendado, recibiendola de lleno. Mientras Orihime, corría con sus "hadas" revoloteando encima suyo, para curar a Chad, quien ya sangraba de la cabeza.

- Da miedo- comentó Orihime, mientras veía al sujeto desquiciado, reirse y moverse con la herida de Ishida, le dolía, pero aún así se reía como una especie de broma.

- ¿Qué clase de Hollow es? No, más bien, ¿qué cosa es?- se preguntó Ishida viendo al mencionado, empezar a morderse los dientes.

- Si me salve de Shinigami-sama, puedo con ellos, si me salve de Shinigami-sama, puedo con ellos, ¡¡Puedo con ellos Jajajajjaa!!!!- rió, lanzándose sobre Ishida, que apenas pudo cubrirse con su arco espiritual. Rápidamente, el sujeto pateó su pierna para hacerlo caer, y darle un golpe con ambos brazos en el pecho.

-¡¡Ahg!!- vomitó Sangre mientras chocaba contra un automóvil.

-¡¡Ishida!!- gritó Orihime.

- Ohhh~ Creo que me pase Jeje- dijo juguetón el vendado, que se llamaba realmente Asura.

- Es más fuerte de lo que parece...- se dijo para si Ishida, mientras aparecia otro arco en su mano- Me costará eliminarlo-

Ambos se miraban entre ellos, detenidos en medio de un silencio acorde a un cementerio. Asura estaba sonriendo confiado, porque sabía que tenía la ventaja ya que se enfrentaba a un "Arquero". En cambio, Ishida, solo estaba pensando en acertar una flecha entre su ceja y ceja.

- Oye, oye, oye...- comentó alguien misterioso, llamando la atención de los presente- Asura, ¡¡Ya estás Armandola de nuevo!! Por dios, parece que sigues siendo igual que siempre-

- Esa voz, no me jodas- comentó Asura viendo de donde venía la voz.

- Cuando Shinigami me dijo que habías escapado de tu propia piel, me dijo que viniera a buscarte. Apenas han pasado 50 minutos, y ya estás matando tanto Humanos como espíritus. Válgame la redundancia, ¿no eres feliz? Porque si quieres...-

- ¡¡Te hago feliz por 5 yenes!!-

.............

......

En la ciudad del Cairo, el equipo Joestar llevaba ya unos 40 minutos dividido. Cada uno se encontraba ya muy alejado del resto, habiendo derrotado a todos los soldados de Freezer que llegaron a la ciudad.

- Por fin, parecían infinitos, ufff- se dijo para si Joseph Joestar mientras se secaba la frente tras tantas horas peleando- En fin, será mejor que nos reunamos Jotaro y los demás- comentó Joseph mientras se daba media vuelta he intentaba dar media vuelta por donde regreso.

-Vaya, interesante- comentó un sujeto extraño para Joseph que apareció delante suyo.

-¿?- se preguntó Joseph Extrañado, viendo al sujeto, media más de dos metros, con piel morada, teniendo dos cuernos en su cabeza que lo asemejaban a un demonio.-¿ Y tú eres?-

- Oh, perdona mi intromisión, soy el Capitán Ginyu de las fuerzas armadas de Freezer, y tengo la misión, de matarte, humano-

-¿Humano?¿Matarme?- preguntó Joseph confundido con el sujeto delante suyo.

- Bueno, no específicamente a usted, sino a todos los humanos y seres vivos. Pero ya que eliminaron a nuestro gran ejercito mandado acá, supongo que ustedes son nuestra prioridad ahora- comentó El Capitán Ginyu, sonriendo ligeramente.

Jotaro caminaba también por las calles, hasta llegar a una plaza amplia donde se detuvo para intentar posicionarse donde estuviera en la ciudad. Pero pronto, vio a un sujeto pequeño y regordete bajando en vuelo frente a él.

Frente a Avdol, apareció un sujeto con poco pelo y de color Rojo, muy alto y de musculatura compleja. Frente a Kakyoin, apareció un sujeto muy rápido de color azul y que se asemejaba mucho más a un aspecto "extraterrestre". Por último, un sujeto de pelo blanco y piel roja había aterrizado junto a Polnareff, quien estaba salvando a una chica en ese instante.

-¿?¿quién eres tú?- le preguntó Jotaro Kujo, mientras el alienígena sonrió ligeramente.

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