La chica de pelo negro, con un ropaje que hablaba, corría desesperada hacía la ciudad que había sido destruida por el Dragón negro. Estaba temerosa, asustada, y su temor, seguido de una gran desolación, experimentó al contemplar que de la ciudad no quedaba nada. Era imposible que solo un alma siguiese viva.

-No...Mako- pronunció ahogada en desesperación- No puede ser...ella no pudo- su mejor amiga seguramente quedo atrapada en la explosión, no podía haber márgen de error. Ella y toda la familia que la acogía. Un duro golpe para ella, que soltó unas lágrimas pequeñas.

-Ryuko...- su camisa parlante intentó hablar, mas no tenía las palabras adecuadas que decir.

-¿quién hizo esto?- preguntó la chica difícilmente.

-Una especie de...Dragón negro-

-¿Un dragón negro?- le pareció extraño, pero no quizo decir nada más. No había razones para dudar sobre la respuesta de su compañero- ¿Dónde fue?-

-Por allá, a tu derecha, más allá de las laderas de las montañas- le comentó a la peli negra, que se puso de pie.

-No le perdonaré, ¡¡Por esto!!- gritó, mientras agarraba algo que había en su brazalete, y jalaba una cuerda-¡¡¡VAMOS A POR ESE HIJO DE PUTA!!!-

La camisa parlante, empezó a chupar la sangre de la chica y cambiar de forma. Era una ropa con vida que comía la sangre de su propietaria y le concedía un gran poder. Su apariencia cambió a una mucho más atrevida, mostrando mucha piel con un vestuario sugerente.

-¡¡Vamos!!- gritó con enorme voz y potencia. Unas alas crecieron en su espalda, y salió volando hacía el cielo con una enorme velocidad. Estaba determinada a matar a ese Dragón fuese como fuese.

Por otra parte, el mismo Dragón negro se encontraba a unos kilómetros de una nueva ciudad para arrasar. Pero había recibido un ataque de fuego proveniente de otro Dragón rojo alargado. Abajo de este otro dragón rojo, estaba un chico de pelo extraño, que tenía un colgante en forma triangular.

-(Magia...)- pensó Acnologia, mientras el chico, llamado Yugi, ordenaba a su Dragón volver a disparar.

Los ataques mágicos de fuego fueron recibidos por Acnologia de frente mientras este avanzaba sin más. El Dragón rojo siguió disparando ataques consecutivos, en busca de derrumbarlo. Mas los ataques no tuvieron el efecto querido, sino que resultaron nulos para el dragón.

-(¿Cómo es posible?)- se preguntó Yugi Moto, mientras revisaba su baraja y invocaba a los otros dos dioses egipcios-¡¡Ataquen!!-

Estos dos, mientras el Dragón Rojo disparaba, volaron hacia el Dragón Acnologia. Humo se produjo con el choque primeros de las llamaradas, que nublaron su vista por el tiempo necesario para que los dioses egipcios se acercaran lo suficientemente y golpearan en ambos lados del cuerpo a Acnologia, el tercero, el Dragon rojo, golpeó de frente, y mordió la propia mandíbula del rey de los dragones. Los otros dos apretaban su cuerpo y le agarraban con fuerza. Estaban logrando aprisionarlo con sus fornidos brazos los otros dos dioses y su fuerza descomunal. No obstante, la fuerza de Acnologia lo era también por mucho. Logró zaparse del agarré usando sus garras, abrió el hocico encontra del Dragón Rojo, que incluso presionando con toda su fuerza, Acnologia partió su mandíbula y terminó por agarrar su cabeza y mordersela hasta reventarla. Los otros dos dioses por su parte surgieron lastimados, mientras el Dragón Rojo desaparecía por la falta de puntos.

-Maldito chico- dijo Acnologia a Yugi Moto, que empezó a sacar más cartas.

-(Esto es imposible, debió ser suficiente. Es como si sus ataques apenas tuvieran efecto, ¡incluso se cargó a Slifer de un mordisco! Como si se hubiera comido su magia...-)

Acnologia se había comido y dejado herido a algunas de sus cartas más poderosas, aún le quedaba dos cartas más de un gran nivel, pero debía buscarlas, en especial la última que estaba compuesta por 5 en total.

-¡¡Ganen tiempo!!- Ordenó Yugi, mientras los otros dos dioses acataban y intentaban retener al dragón, pero este se los quito encima con un movimiento de sus garras-¡¡Maldición!!- agarró rápidamente una carta, necesitaba algo para protegerse-¡¡Mago oscuro!!-

Acnologia disparó fuego, pero no directamente a Yugi, sino al edificio donde estaba. Jugada que no previno Yugi al esperar un ataque directo.

-¡¡¡Rayos!!!¡¡Sácame de aquí, Mago Oscuro!!- su carta, agarró a Yugi entero, y saltó hacia otro edificio más bajo, siendo seguido por Acnologia, quien ya cargaba una potente llamarada nueva- No hay tiempo...- Yugi empezó a buscar más cartas en su baraja, en poco tiempo el Dragón ya los había acorralado, y estaba a punto de matarle.

Pero en eso, llega volando a extrema velocidad, con un cabello corto y una ropa extravagante, la chica de vestido parlante, Ryuoku, que impactó en un costado del Dragón con mucha fuerza, haciendo rugir a la bestia.

-¡¡¡¡BASTARDOOOOO!!!!- gritó ella, mientras usaba su arma con forma de media tijera para dañar mucho al dragón, produciendo cortes en su abdomen y estómago, para luego intentar apuñalarlo en el pecho. Acnologia entonces, empezó a conjurar un hechizo para evitar ser apuñalado, se hizo pequeño, a un tamaño mucho más humano. Ryuoko vió como cayó a la ciudad, en una forma humana de piel café y cabello largo azul.

-Me produciste unas buenas cortadas niña- le dijo el sujeto mientras se relamia la herida sonriendo juguetonamente- Parece que tendré acción tras taaaaaanto tiempo. Por favor, no me vayas a ganar por el poder de la amistad-

Ryuoko, bajó en picada a tal velocidad que resonó como un estallido al romper la barrera del sonido, prestó nula atención a las palabras del rey de los dragones, llegando a él con espada en mano.

-Me gusta tu actitud, ¡¡Sin palabras y directa!!-

-Te arrepentirás de haber abierto esa sucia boca...- advirtió Ryuoko, mientras apuntaba con el filo de su espada al rey de los dragones sin temblar. El rey Acnologia sonrió, y sin esperar, la chica saltó con su espada directamente a su rival.

El rey de los dragones agarró la espada con su mano desnuda, deteniendo con su fuerza la de la contraría, creando un gran cráter bajo sus pies. Acnologia abrió la boca, preparando un hechizo que iba a chocar contra la chica. Ryuoko entonces, le pegó directamente en la cara, cerrando su boca y haciendo que se cancele el hechizo. Luego, ella brindó tres patadas en el estómago al Dragón, y terminó por darle un golpe con todas sus fuerzas para terminar mandándole a recorrer varios metros en el pavimento.

La gente ya se encontraba huyendo de la escena, lejos de la pelea de ambos. Yugi Moto los veía desde el edificio donde estaba, sorprendido de las habilidades físicas de esa muchacha...y de su exposición exagerada de piel. Tenía la cara algo rojiza, pero se pegó en la cabeza evitando desconcentrarse, necesitaba buscar una carta ideal.

El Dragón se reincorporó y lanzó hechizos potentes los cuales Ryuoko desvió con su "espada", se acercó lo suficiente para darle un golpe, mas Acnologia reaccionó primero y le lanzó un derechazo justo en la mandíbula, para luego darle una patada que la hizo atravesar un edificio de abajo a arriba. Salió por el tejado del último piso, algo desorientada por el golpe anterior en su mandíbula.

-¡¡Reacciona Ryuoko!!- gritó su ropa, haciendo que retomará su conciencia. Mas el Dragón ya los había alcanzado, saltó encima de ella y con solo un brazo, hizo llover sobre ella centenares de golpes, terminando con abrir su boca y exhalar una ráfaga mágica.

Ryuoko terminó en el suelo, tras ser mandada a chocar ferozmente por Acnologia. Apretó sus manos, furiosa, y procedió a agarrar un gran escombro y lanzarselo a Acnologia, que ya estaba volando a ella nuevamente. Él destruyó aquel escombro sin dificultad, sin embargo, pronto muchos más escombros fueron dirigidos a él, como si fuera una lluvia de cometas. El impacto de estas hizo retorcer al dragón, no tanto por la dureza de la piedra, sino por la velocidad en la cual iba cada escombro. Ryuoko volvió al ataque, llegando a él y cortándole un costado y haciendo que sangre bastante. Después procedió a producirle más cortes a grandes velocidades, y esta vez, logró apuñalarle en el estómago.

Ambos cayeron al suelo, Acnologia sangraba y escupía sangre ante el dolor y daño causado por Matoi Ryuoko. Esta, solo miraba a su oponente con ira.

-¡¡¿¿Cómo te atreviste a matarlos!!??- gritó, mientras clavaba más su espada. El rey de los dragones dejó entonces de escupir sangre, y sonrió landinamente pese a su situación prometedora.

-¿Alguna vez te has parado en pensar a cuántas hormigas has pisado?- preguntó con ironía el rey, haciendo que ella se enoje más.

-¡¡SERÁS...!!!- intentó responder, pero en eso Acnologia colocó su brazo hacia ella, y lanzó un hechizo tan poderoso que llegó a verse desde el espacio, atravesando las nubes del cielo.

Era un hechizo concentrado, con un gran poder, usando mucha de su magia para poder efectuarlo. Ryuoko estaba humeante, casi quemada, pero viva pese a todo. Ella dio pasos hacia atrás casi inconsciente, con mucha de su ropa destruida y casi exponiendo todo su ser.

Acnologia se levantó, sujetándose el estómago que seguía sangrante. Su mano echaba humo, producto del hechizo lanzado. Estaba sonriendo con orgullo, aunque al mismo tiempo sudaba un poco frío. Le había lanzado un gran hechizo suyo y ella seguía en pie. Él por su parte, no podía seguir así, solo le quedaba su magia para poder atacar, y eso es lo que haría nuevamente. Iba a a terminar con el trabajo. Colocó su mano hacia donde estaba ella, y preparó un nuevo hechizo.

-Me diste buena pelea, mocosa- el hechizo empezó a prepararse, haciéndose cada vez más grande, hasta que estuvo preparado para lanzarse hacia el oponente. Acnologia mando el ataque mágico, preparado para abatir a la chica que ya casi perdía la conciencia. Su fin estaba próximo, no podía hacer nada, aduras penas tenía fuerzas, y no podía moverse tan rápido como para esquivar ese ataque.

En eso el hechizo desapareció sin dejar rastro, como si nunca hubiera existido. Acnologia se quedo atónito, sin entender nada. Yugi Moto, bajó del edificio, con una carta especial en su mano.

-"Cancelador de Hechizos", como su nombre indica, cancela los hechizos en el campo de batallas- explicó Yugi a la distancia, mirando a Acnologia a los ojos.

-cabronazo, tú...- intentó hablar Acnologia furioso, queriendo saltar para desgarrar al humano tan descarado. Pero no tuvo en cuenta a la otra. Ryuoko había saltado con lo que le quedaba de fuerzas, y cayó sobre él apuñalando a Acnologia en su corazón. Sin magia, y estando tan herido y debilitado físicamente, no pudo hacer nada más que gruñir.

- Muérete, Bastardo- dijo Ryuoko Matoi, mientras Acnologia caía de espaldas con la espada incrustada en su corazón. Muerto en el suelo.

-Le has...matado- dijo Yugi atónito, quería derrotarlo, pero matarlo...era una solución que no planeaba para nada-¿Por qu..?-

Antes de poder hablar, la chica, abatida por sus heridas, se desplomó en el pavimento. Había caído desmayada, con mucha de su ropa destrozada. Yugi corrió para socorrerla, quitándose su chaqueta para darle más tela a vestir.

- Está muy herida...- Yugi agarró a Ryuoko para intentar cargarla, pero le resultaba imposible. Por lo cual, hizo que el mago oscuro la cargase, yéndose del lugar tan destruido.

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- La ha matado...- dijo el guardia real Pouf al ver el cadaver sin cráneo de Neferpitou, con su brazo atravesando hasta el otro extremo de Gohan.

-Pero a cambio hizo un gran trabajo- dijo el rey de las hormigas quimeras tranquilamente mientras se agachaba y retiraba delicadamente el brazo de Neferpitou- hasta el final, tuvo mis respeto-

Los dos guardias reales restantes y el rey habían llegado al lugar del ataque, donde antes habían visto ese enorme pilar de luz cruzar el cielo. Llegaron a la escena, encontrándose con la guardiana real muerta, y su víctima en el mismo estado.

El rey se agachó, y acercó sus manos al rostro de Gohan, para darse cuenta de que aún tenía lágrimas en sus mejillas.

-(¿lágrimas?¿lloró de la desesperación antes de morir?)- se preguntó el rey, mientras agarraba la cabeza, y la arrancaba de su cuerpo. Abrió grande su boca, y empezó a comerse su cráneo-¿¿¿¡¡¡!!!???-

El Nen del rey, su fuerza, velocidad, y demás atributos, crecieron exponencialmente al devorar la cabeza de Gohan. Sentía una gran fuerza, casi fantasiosa. Esos otros dos niños le habían dado un poder tremendo, ¿pero esto? Era una océano a comparación de aquella "gota" anterior. Se sentía inamovible, imponente, invencible.

-(¡¡¡Cuánto poder!!!¡¡¡Que sabor!!!)- gritó casi extasiado el soberano, mientras seguía comiendo. Pero al seguir masticando, al seguir tragando, empezó a pensar algo extraño-(Este sujeto era miles de veces más poderoso que Pitou...¿entonces cómo pudo ella tomarle desprevenido?)- se preguntó, empezando a masticar algo más lento al pensar en eso.

-Mi rey...- dijo Pouf, el guardia real con forma de mariposa- Debo informarle de qué, aparte de esto, hemos visto una presa igual de interesante-

El rey terminó de comer, para luego mirar a su guardia real y preguntarle.

-¿Hacia dónde?-

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Goku, uno de los guerreros más poderosos de la tierra, llegó teletransportandose hace unas horas a corporación capsula, donde Vegeta fue depositado en una cápsula de recuperación creada al estilo de Freezer para que este se recuperará. Mas, Bulma no tenía ni idea de si iba a funcionar, el daño no era en el cuerpo, era en la mente. No veía como poder ayudarle. Se sentía cada vez más abrumada, no solo porque en cuestión de horas su corporación entera, exceptuando su residencia, había caído por la crisis tan repentina.-¿Dónde estás...Trunks?- se preguntó Bulma mientras lloraba un poco.

Goku por su parte, empezó a volar hacia la torre Karin. No podía teletransportarse, habían tantos Ki malignos que era imposible poder a estas alturas localizar al maestro Karin o a alguien en el templo de Kami-sama. En su vuelo, pudo ver mucho caos, pero también muchas personas peleando para su sorpresa, muchos de ellos con un poder extraordinario o habilidades extrañas, le pareció ver a unos chicos peleando contra Zombis y un sujeto musculoso, un barco con forma de León en una isla llena de caos, etc.

-Todo el mundo está peleando, debo ir a por las semillas y luego buscar a los demás- dijo para si Goku, mientras seguía volando, aproximándose a la torre de Karin, sin suponer que alguien más pudiera estar ahí.

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El almirante Fujitora caminaba por las aridas tierras desérticas de una civilización post-apocalptica. No estaba así debido al caos actual, sino que desde hace décadas que era así. Había ocurrido en el año 199X, una gran destrucción que arrasó todo ese pequeño continente y toda la civilización ahí se convirtió en una muy caótica, donde la gente iba en coches recorriendo los paramos áridos y usaban ropas salvaje, armaduras de hierro y armas como lanzas, hachas, y algunas más poderosas. Era gobernado actualmente por un reino bastante poderoso, el reino de King, un sujeto de gran fuerza y habilidades extrañas.

No era un reino muy querido, pero sí muy rico y tiene grandes relaciones con el gobierno mundial. Fujitora, almirante de la marina, tras haber venido de otra isla donde mató a un mago de color rojo, arribó al lugar, en busca de salvar a las personas inocentes que necesiten ayuda y brindar su apoyo.

Llegó solo al reino enmedio del desierto, ningún marine le acompañaba ya que murieron en la anterior batalla, estaba solo. El almirante caminaba por la ciudad semi destruida, había sido casi arrasada al completo por alguien.

-Escucho los últimos suspiros de la gente...- comentó Fujitora entristecido, mientras seguía caminando. Escuchaba que muchas personas estaban agonizando justo cuando llegó, por lo cual, quien sea que destruyó casi todo ya se había ido hace un rato, dejando a varias personas en estado crítico. El almirante no podía hacer nada por la gente herida, no era un doctor, y menos podía brindarse la virtud de pedir medicina al cuartel de la marina, pero amenos ayudaría a retirar escombros por donde pudiese haber gente apretada.

Localizó a alguien debajo de grandes escombros, concretamente un niño de 10 años. El almirante iba sacando su espada, cuando alguien se adelantó, un hombre de casi dos metros de altura agarró el escombro donde estaba el niño apresado y lo retiró usando sus dos manos. Tenía una mirada seria, camisa azul oscura, y unos pantalones con ciertos agujeros.

-¿En qué te has lastimado chico?- preguntó el hombre, mientras el niño lloraba y señalaba su pie. El hombre adulto entonces clavó su dedo rápidamente en la rodilla, y como si hubiera sido arte de magia, el pie junto toda la pierna se sentieron como nuevas, y eso que se la había fracturado.

-¡¡Gracias señor!!- le dijo el niño, mientras lo abrazaba del cuello.

- Sorprendete mi buen amigo...- saludó el almirante mientras se acercaba a este.

-¿Quién es usted?- preguntó el hombre serio, mientras el niño se alejaba- No parece de por aquí..-

- Sí, mis disculpas, soy el almirante de la marina del gobierno mundial, Fujitora-

-Gobierno mundial...por lo visto es del extranjero-

-¿Y usted es?-

-Kenshiro-

-Kenshiro...es un nombre muy único. ¿Qué ha ocurrido aquí?- cuestionó el almirante, en busca de información.

-Un sujeto de gafas llamado "Toguro" vino acá para retar al rey, y al lograr matarlo, se puso a matar a todo el resto de la población...-

-¿y dónde fue ese sujeto?-

-Al más allá- respondió sin importancia Kenshiro- Yo lo mate-

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Ya habían llegados todos los necesarios, los hombres más poderosos del mundo entero. Los reyes y líderes mundiales que eran galardonados. El rey mago del reino de Trebol; los dos héroes número 1 de sus organizaciones de héroes: All Might y Blast; Mansam(Lider de la organización Gourmet), Issac Netero; el recién llegado Mariscal "Akainu" que logró llegar en un barco rápido; y por últimos los demás líderes de las aldeas ocultas como Gaara del desierto. Junto a estos, estaba los zodiacos, los restantes reyes del mar, y algunos héroes más.

-

Ya están todos- habló uno de los cincos sabios, encargados de los consejos y del control del gobierno mundial- Que bien que hayan logrado llegar. Estamos aquí reunidos para aniquilar a los monstruos que atemorizan ahora mismo nuestro mundo. Pero también, reunimos aquí a los más poderosos para poder defendernos del causante-

- El causante, ¿es ese tal Kronos, no?- preguntó All Might, mientras el sabio asentía.

- No tenemos mucha información de él, los caballeros de Atenea parece ser que partieron a pelear contra él sin saber casi nada y no han regresado con vida. Pensabamos que ellos podrían...-

- Muchos de sus miembros tienen habilidades únicas y poderosas- dijo Blast con los brazos cruzados- Entonces lo que viene es nivel planetario o galáctico-

-Puede que incluso mayor- advirtió otro de los sabios, ganándose la mirada de todos- ha matado a deidades. Sin embargo, podemos tener una oportunidad...-

-Al enfrentarse a tantas deidades- continuó otro sabio, siguiendo con su exposición- seguramente haya perdido mucho de su poder original, así que, a lo mejor en estos instantes no sea tan poderoso como al principio. Aunque sigue siendo muy peligroso-

-Los humanos más poderosos del mundo están aquí, los seres espirituales y un dios restante también, tenemos una oportunidad. Los demás miembros que no estén ni en primer o segundo lugar, deberán abandonar la sala y encargarse de los otros sujetos sueltos en el mundo. Será prioritario Kronos para salvar nuestro mundo, pero si los demás lo destruyen antes, no servirá de nada-

Algunos miembros, como algunos de los 12 Zodiacos o héroes clase S debajo de ranking 1 y 2, abandonaron la sala, yendo a matar a las otras bestias.

- Tenemos un grave problema con todo esto...- dijo Netero mientras se tocaba la cabeza- ¿Dónde está el mocoso demonio de pelo amarillo, el Hockage de la aldea de la hoja, y más?-

- No hemos podido dar con ellos, han desaparecido. No han contestado ninguno algún mensaje o han dado respuesta de vida. Podemos suponer que ellos ya han...muerto- contestó otro sabio, mientras Gaara y Killer Bee apretaban sus puños. Conocían al Hokage de la aldea de la hoja de cerca- En fin...solo podemos por ahora prepararnos para el combate, pero antes, dejenos presentarles a los hombres más poderosos del mundo, y que os ayudarán en el combate-

Se abrieron dos puertas de par a par, saliendo de estas 3 personas. Una de ellas tenía un pelo rubio y una cicatriz con tres rayas en un ojo.

Otra de ellas, tenía una gran figura, un pelo azul largo, y un gran sombrero blanco que era más grande como su cabeza.

Y por último, una figura muy imponente, un sujeto de pelo negro y tipo afro, conocido mundialmente como el hombre más poderoso del universo, cuya fuerza fue tal que venció antiguamente a "la cucaracha" llamada Cell. Con una gran musculatura, y un gran reconocimiento, estaba ahí, el gran...

Mister Satan

-Ellos son, nuestras más grandes fuerzas para vencer a Kronos- finalizó el sabio de explicar. Dando grandes esperanzas de triunfar.