#Capitulo-2

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Luego de recibir la aprobación de los mandatarios y antes de cortar comunicación, el primer ministro de Japón tiene una última petición para la Teniente General O Neil.

-Un momento Comandante O Neil-, decia el joven Primer ministro Mikogami.

-Ministro-, decía la Teniente General O Neil...

-Si tienen como blanco las princesas Caballeros del reino de Kuroinu autorizo a que las traigan a Japon para que continúen su tratamiento y que estén a salvo en nuestro mundo-, decia el joven primer Ministro.

Sandra- Ya lo oyó Teniente General, luego de esto planearemos bien un contra ataque para reestablecer el reino de Kuroinu primero debemos de pararle los pies a Zorzal y a su sequito y autorizo también la operación de rescate tanto para los miembros del senado Imperial que fueron encarcelados, como del resto de nuestros aliados dentro del Imperio eso incluye a la Princesa Piña y a su padre-, ordenaba la Presidenta de los Estados Unidos.

Sarah-Si señora de lo por hecho-, decía la Teniente General O Neil, mientras la video llamada se cortaba en aquel momento en la sala de conferencias.

Y en Washington D.C en la casa blanca, en el salón oval...

-Aun con todo esto creen que puedan lograr toda la operación de rescate-, preguntaba la Presidenta Akmal.

-Por supuesto que sí, de no haber sido por la aparición de los GATES nuestros países, no, nos habríamos unido más como los países que somos compartiendo nuestros recursos y conocimientos-, les explicaba la Presidenta Hernández.

-Es cierto yo mismo pude comprobarlo durante lo que fue mi visita a la región Especial-, le explicaba el joven Primer Ministro Mikogami a la ahora Presidenta Afganistán.

-Y ahora que hemos visto lo que ese desgraciado de Zorzal ah hecho, va a desear no haberse metido con nosotros y con nuestra gente incluido nuestros aliados-, le decia la Presidenta Hernández a sus colegas mandatarios los cuales estaban de acuerdo, mientras la Presidenta estadounidense, tenia su mirada puesta junto a sus colegas en las calles de Washington D.C.

Sandra-Sera mejor estar listos para lo que sea pues algo grande se vendrá-, les dice la Presidenta de los Estados Unidos.

De vuelta en la región Especial en la base Arnus...

-Guau la Presidenta y los demás mandatarios, sí que estaban decididos a apoyarnos-, decía Hazama a la Teniente General.

-Pues si Koichiro, porque luego de esto y viendo que las cosas aquí se van a poner al rojo vivo, ademas Lawell y la Uno, Cuatro, no se van a alegrar mucho por la noticia, muy bien todos tómense un reseso de una hora, luego nos reuniremos aquí para planificar la operación de rescate, señores esta será una operación en conjunto que ese príncipe idiota no lo vera venir y no se lo esperara-, decia la Teniente General O Neil a sus colegas Comandantes, quienes concordaban con ella.

-Deacuerdo señores conocen sus órdenes, nos reuniremos aquí en una hora, un momento Teniente Coronel Goyo-, decía la Teniente General al líder del ejército argentino.

-Si Comandante, decía el Coronel del Ejército Argentino a su oficial al mando.

-Necesitar de tu ayuda déjame contarte-, le decía la Comandante de la OTAN.

Luego de eso y a muchas distancias de Arnus, por la ruta que llevaba a Italca, Capitan Price, Gaz,Bobby, Grey, Zenith, Roxy junto al resto se encontraban detenidos un momento mientras chequeaban el mapa para asegurarse de llegar a Italca y de ahí contactar con la base.

-Bien y según el mapa debemos estar en el camino correcto, hacia Italca-, les dice el Sargento Garrick a todos.

-Bobby-, si por suerte no, nos hemos topado con esos idiotas cabezas de perro-, decía la agente del SAD de la C.I.A quien apuntaba su Cuatro, diecisiete montando guardia.

Y en lo que montaba guardia a un costado de la carretera Zenith, lo veía a Price muy pensativo cosa que la aventurera rubia, curandera pero sobre todo madre y abuela, entendía como el sentía al respecto ya que esa era la misma, mirada que tenía durante todo el camino.

-Capitán, es decir John va todo bien-, preguntaba la primera de la matriarca de los Greyrat al Capitán y líder de la Fuerza Operativa.

John-Eh si estoy bien, va es que no debí dejarla sola a Piña, Zenith-, decía Price algo preocupado a su "amiga".

-John puedo entender la preocupación que sientes por la Princesa es la de un padre hacia su hija-, le dice Zenith.

-Si tal vez sea ese sentimiento que tengo por Farah, es decir ambas aún son jóvenes y tienen toda una vida por delante yo-, le dice Price, en lo que este sintió la mano de la rubia sobre su hombro en aquel momento, lo cual calmo al capitán del SAS.

-Aun así no había nada que pudieras haber hecho para evitarlo yo también esto preocupada por Norm, Lilia y a Aisha, mis nietos, eh incluso por mi esposo, mi hijo y mi nuera la madre de Lucy a quienes no veo hace muchísimo desde lo que fue el incidente de la tele transportación y aunque al principio las cosas no fueron bien para mi y Roxy, ni para mis hijas y mis nietos, comenzaron a surgir cosas buenas de todo esto-, le dice Zenith a Price.

-Cosas buenas-, se sorprende John por las dulces palabras de la Greyrat

-Si y una de las cosas buenas de todo esta fue, el conocerte a ti a toda la Uno, Cuatro, Uno y a las Fuerzas de la OTAN y fue gracias a todos que nos pudimos reencontrar con Lilia y Aisha-, le dice Zenith felizmente a Price pues era cierto una cosa, pues tal como estaba la situación actual y anteriormente, todo fue mejorando desde la llegada de la Fuerza Operativa y de las Fuerzas de la OTAN, pero sobre todo desde que Zenith y su familia comenzaron a trabajar con la Uno, Cuatro, Uno y las Fuerzas de la OTAN, pues ya era la primera vez que la familia Greyrat, tenían un lugar al cual podían llamar hogar y que los miembros de la Uno, Cuatro, Uno sean parte de su familia.

Asi como a cada persona, o soldado que han conocido comenzaron a formar parte de su familia de corazón, entonces en ese momento Zenith siente en aquel momento como Price, lo abrazaba cálida y dulcemente dicha acción hizo que Zenith se sonrojara cálida y dulcemente en aquel momento ante tal hermoso cariño.



...Continuara...

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