Pensó que se golpearía al caer por el pozo pero increíblemente no fue así, al contrario aterrizó lentamente hasta caer en la fría tierra del sitio. Miró a todo lado y sintió algo de miedo al notar que todo estaba oscuro cuando unas voces conocidas la sacan de sus pensamientos tomándole por sorpresa ¡Eran su hermano Sota y su abuelo! Entonces una luz de linterna se hace presente desde la parte de arriba del pozo y como lo sospechaba ahí estaban viéndole igual de sorprendidos.

-Te lo dije abuelo... Mi hermana cayó por el pozo y desapareció- le insiste Sota al abuelo.

-¡Abuelo! ¡Sota!- dice Aome entre sorprendida y feliz, al fin había vuelto ¡Increíblemente esta de vuelta en su mundo!

Ya a fuera del pozo solo se puso a contemplar el atardecer y todo lo que la rodeaba, estaba en casa con su familia. Había sentido mucho miedo cuando Yura la atacó con su espada pero por suerte logró salvarse y ahora había vuelto sin más que una leve cortada en la mejilla, sin embargo una parte de ella se sentía triste y vacía ¿Por qué?

-Aome ¿Qué te pasó en el rostro?- pregunta su abuelo llegando con Sota desde el templo y ella sin poder soportarlo corrió hacia el hombre de edad avanzada con lágrimas en los ojos y lo abrazo. Ahora lo importante es que había regresado sana y salva y tenía a su familia con ella.

~o~

Depositó a Kaede sobre la fría tierra del bosque, donde había hecho un pequeño hoyo del tamaño de ella para que sea más fácil ocultarla. Todos en la aldea había ido a refugiarse hasta que el peligro pasara y Yura sea derrutada, pero sabía que algo andaba mal ya que no persivia el aroma de Aome por ningún lado y eso le preocupaba, no sabría lo que haría si es que algo malo le sucedía.

-Bueno es lo menos que puedo hacer por tí- le dice Inuyasha a Kaede mientras comenzaba a cubrirla con tierra y hojas.

-Todavía no he muerto Inuyasha- le informa Kaede abriendo los ojos.

-Ya lo se... Vendré a sacarte de aquí siempre y cuando no se me olvide- dice el peliplateado terminando de poner las últimas hojas sabiendo que así la anciana no correría peligro, sin más se fue y comenzando a correr a toda velocidad buscan algún rastro de Aome pero nada. Decidió seguir el rastro de su aroma para así tratar de localizarla.

~o~

Después de darse un buen baño fue a su cama y se acostó boca a abajo pensando y lo que había pasado estos últimos días, pesando en... Inuyasha... Al recordar todo lo que había vivido con él esos días sintió su corazón doler al saber que quizás jamás podría volver a verlo ya que su abuelo le había dicho que había sellado la entrada del pozo por lo cual ya nadie podría pasar por ahí.

También recordó lo que pasó con Yura y como ella le había arrebatado la perla, seguramente Inuyasha se molestará por eso o quizás... No lo sabía, pensaba que a Inuyasha solo le importaba la Shikon no Tama ya que él trató de matarla por aquella joya el primer día que se conocieron pero ahora, todo era muy diferente, él se preocupaba por ella y miraba con cierto brillo en sus ojos que hacía que sus latidos se aceleraran y ahora que sabía que probablemente ya no volvería a verlo se sentía muy triste. Ella quería verlo una vez más... Quería ver a Inuyasha.

~o~

No supo por cuanto tiempo corrió en busca de Aome pero al darse cuenta de que su aroma lo había llevado al pozo y al ver la ropa de la azabache de un lado de éste supo que había regresado a su época y sin más saltó por el.

Entonces miles de recuerdos llegaron a su mente, por aquí siempre iba para ir por Aome cuando se tardaba o también... Cuando la extrañaba. Jamás lo admitía pero siempre que ella se iba de regreso a su época la extrañaba y se desesperaba cuando tardaba en llegar.

Aome se había vuelto su... Razón de vivir.

~o~

Miró el delicioso plato de sopa el cual había preparado su madre, se veía delicioso y no podía esperar para saborearlo, para ser sincera había extrañado mucho la comida de su mamá.

-Delicioso, delicioso- dice Aome sin prestarle atención a lo que su abuelo le decía.

De pronto escuchó unos pasos apresurados en el pasillo de la casa y sin previo aviso la puerta se abre y se sorprendió al ver a nadie más ni a nadie menos que Inuyasha ¡Inuyasha esta aquí! ¿Pero como?

-Aome...- dice Inuyasha desde la puerta.

-Inuyasha...- dice Aome sintiéndose muy feliz al verlo, no sabía como él había llegado pero estaba aquí. Sin poder evitarlo le sonríe provocando que Inuyasha se sonrojara

-¿Cómo llegaste aquí?- pregunta la azabache aún sin poder creer que Inuyasha estuviera aquí.

-Pues de donde más, por el pozo- responde el peliplateado acercándose un par de pasos.

-¡Estas mintiendo! ¡Yo selle el pozo con pergaminos sagrados!- dice el abuelo.

-Se refiere a este papel... Pues no funciona- responde el ojidorado mostrándole el "pergamino" y el abuelo se sorprende sabiendo que no habían servido de nada sus pergaminos sagrados.

Aome nota un pequeño destello en la ropa de Inuyasha y se pone de pie para ver de qué trataba dándose cuenta de que era un cabello.

-Inuyasha... ¿Y ese cabello?- pregunta la azabache pero el peliplateado le miró extrañado al no ver ningún cabello- ¿No me digas que no puedes verlo?

Aome le quito el cabello y notó como éste se movía por su propia cuenta, provocando que su mano sufriera un pequeño corte. En ese momento recordó lo sucedido con Yura y tuvo un mal presentimiento sobre lo que estaba pasando. Rápidamente ellos fueron al pequeño templo donde se encontraba el pozo y observaron como millones de cabellos aparecían desde el interior de éste.

-¡Hay no! ¡Los cabellos te estuvieron siguiendo Inuyasha!

-¿Aome que sucede?- pregunta su madre llegando con Sota y el abuelo a toda velocidad, la azabache sabía que ellos correrían peligro si entraban así que cerró la puerta advirtiéndoles que no entraran.

De la nada los cabellos salieron del pozo y rápidamente fueron hacia ellos, Inuyasha se puso frente a ella protegiéndola del ataque tratando de destruirlos sin embargo los cabellos eran muy veloces y lo sujetaron de brazos y piernas. Otra parte de los cabellos fue hacia ella pero con suerte logró esquivarlos agachandose, el peliplateado logró zafarse de los cabellos que lo sujetaban para más ellos fueron hacia él. Aome trató de buscar desesperadamente algo que pudiera ayudarlos a librarse los cabellos y ¡Bingo! Notó que uno de los cabellos brillaba y supo que ese era el que contralaba a los demás y tenía que destruirlo.

-¡Maldición, son demasiados!- dice Inuyasha tratando de destruir con sus garras a los cabellos que le sujetaban de los brazos. Aome bajó con rapidez a su ayuda, buscando aquel cabello que brillaba y cuando lo encontró lo sujeto con ambas manos.

-¡Inuyasha, destruye este cabello!- el mencionado regresa su vista a ella y sin pensarlo dos veces lo destruyó acabó así con los demás cabellos los cuales se volvieron polvo en cuestión de segundos.

Aome sabía que más cabellos podrían atravesar el pozo y llegar a su época, no quería que su familia salga herida así que supo que tendría que volver a la otra época para acabar con Yura y sus cabellos. En ese momento recordó que ella le había robado la perla y pensó que eso complicaría las cosas.

-Tenemos que volver... Yura me robó la perla y no quiero que le haga daño a mi familia- dice Aome mirando con determinación aquel oscuro pozo, el peliplateado asiente y se quita su haori colocándolo sobre ella provocando que Aome le regresará a ver con sorpresa.

-Es tela de las ratas de fuego, es muy resistente ante el fuego- dice el peliplateado sabiendo que con su haori puesto ella no correría mucho peligro. La azabache se sonrojo y asintió con la cabeza.

-Gracias...- y así ambos saltan al interior del pozo con destino a la época antigua.

~o~

-Inuyasha... Aome... Deben unir sus fuerzas para luchar en esta batalla. No hay tiempo para descubrir si se llevan bien, ambos necesitan la ayuda del otro- dice Kaede mientras se encuentra enterrada en el suelo cubierta por nada más que tierra y hojas secas.

~o~

Al salir del pozo fueron siguiendo un cabello el cual también poseía aquel brillo como el anterior que controlaba a los cabellos que fueron atacarlos. Inuyasha se ofreció a llevarla en su espalda para así llegar más rápido, en el camino se toparon con una aterradora escena, varios hombres decapitados recientemente con tratos de cabellos por todas partes. Aome tomó de sus cosas un arcos y flechas y sin más partieron hacia donde se encontraba Yura Sakasagami.

Subieron toda una cuesta, la montaña era empinada y por todas partes se podías ver más y más cabellos dando a entender que se estaban acercando. De la nada varios cabellos se agrupan y toman a Inuyasha del brazo arrastrandolo hacia arriba provocando que ella cayera bruscamente al suelo.

-¡Inuyasha!- grita su nombre al ver como más cabellos lo sujetan nuevamente de brazos y piernas dejándolo inmóvil. En ese momento aparece Yura, la mujer de los cabellos, quién se posó sobre los cabellos mirando con una cínica sonrisa a Inuyasha.

-Tú debes ser Inuyasha... Me contaron que un hanyou estaba trabajando para una sacerdotisa para proteger la perla, la cual a vuelta a aparecer en este mundo...- ella suelta una pequeña risa mostrándoles una pequeña bolsita donde guarda la Shikon no Tama.

-Maldita ¡Yura, si no me entregas la perla juro que te haré pedazos!- le advierte Inuyasha.

-Vaya, parece que me conoces- se acerca a él mirándole directamente a los ojos sin quitar esa sonrisa malvada de su rostro.- puedo ver que eres un ser distinto, dime... ¿De dónde vienes? Puedo ver que no eres de por aquí

Aome quién se encontraba abajo observando todo, se sorprendió ante las palabras de Yura, no comprendió a que se refería. Inuyasha se tensa ante las palabras de la mujer ¿Cómo demonios lo supo? En un movimiento rápido Yura se posiciona atrás de él observando con detenimiento su cabello sujetando con otra de sus manos la katana con la que intentó matar a Aome.

-Habla... ¿Para que has venido aquí? Si me lo dices no le haré daño a la mujer que te acompaña.

Inuyasha frunce el ceño.

-¡Maldita! ¡A ella no la metas en ésto!- dice Inuyasha tratando se zafarse del agarre de los cabellos pero le fue imposible, Yura ríe y salta hacia el vacía cayendo sobre unos cabellos que impidieron que tocara el suelo e impulsandola con fuerza hacia arriba preparada para atacarlo con su katana haciéndole una cortadura no tan profunda en el abdomen.

Yura Sakasagami lamió el filo de su espada y sonrió con malicia.

-Prepárate porque te seguiré cortando hasta que me lo digas- advierte la mujer e Inuyasha gruñe sin comprender como es que Yura lo sabía ¿Acaso será posible que más personas sea capaces de darse cuenta con tan solo verlo a los ojos como había hecho ella?

Aome grito cuando Yura lo atacó con su katana y supo que tenía que hacer algo, no comprendía a que se refería esa mujer con Inuyasha pero ahora lo que importaba era ayudarlo. Se puso de pie y tomó el arco colocando una de las flechas en el, jamás en su vida había disparado y esta sería la primera vez que lo intentaría. Le apuntó a Yura y disparó esperando que la flecha de diera pero para su mala suerte la mujer se percató a tiempo de la flecha y la esquivó dándole a la telaraña de cabellos.

Para su sorpresa éstos comenzaron a perder su poder y a deshacerse mostrando los cráneos sin vida de todas las personas a las que una vez pertenecío ese cabello.

-No puede ser... Estas echando toda a perder- dice Yura y le regresó a ver furiosa tomando en sus manos una peineta roja- ¡Debo destruir a esa mujer!

Mandó una gran cantidad de cabellos hacia ella y con la peineta roja les prendió fuego. Aome se agacho en el suelo asustada y el fuego la cubrió completamente, la azabache grito y cerró los ojos asustada.

-¡Aome!- grita Inuyasha y mira furioso a Yura llevando su mano hacia su herida, la cual sangraba, y baño sus garras con su sangre preparado para atacar a la mujer de cabello corto- ¡Garras de fuego!

La mujer regresa a ver desprevenida y resive el ataque de Inuyasha cortandole la mano con la que empuñaba su katana. Yura se sorprende y regresa a ver su brazo sin mano.

-¡Mi mano!... Inuyasha recuerda que a las mujer se les trata con delicadeza, después no te sientas mal si otros se burlan de tí- dice Yura y las calaveras que se encontraban adheridas a los cabellos comienzan a reírse y una que otra a intentar atacarlo.

Inuyasha vuelve a usar sus garras de fuego y la mujer en un movimiento saca su peinilla controlando manipulando los cabellos que sostenían a su mano cortada, atacando por atrás al hanyou con la katana, haciéndole una profunda herida en la espalda.

En ese momento los cabellos lo sueltan dejandolo caer al suelo, Yura se ríe y con ayuda se los cabellos vuelve a unir su mano a su brazo con dejar ninguna sicatriz. Inuyasha entonces recuerda la vez que enfrentaron a Yura en el otro tiempo y recuerda que ella tiene un punto débil ¡El cráneo rojo! Y alza vista notando que Aome se encontraba subiendo por el nido de cabellos y supo lo que planeaba hacer.

-Ahora me dirás ¿De qué tiempo vienes? Aunque no lo creas Inuyasha no soy la única que podría darse cuenta de pequeño detalle... ¿A qué has venido hanyou?- dice Yura e Inuyasha gruñe. De pronto regresa a ver hacia atrás percatandose de que Aome se encontraba subiendo por su telaraña de cabellos y fue hacia ella.

Inuyasha se levanta para ir a su ayuda pero más cabellos le sujetan de los brazos impidiéndole avanzar. La mujer de cabello corto llega hasta donde está la azabache y con su peineta envía varios cabellos a sujetarla de las muñecas, apartandola del cráneo rojo al cual había sido su objetivo.

-¿Por qué no puedo hacer daño?- pasa su espada por el cuello de la joven- yo te veo como una mujer ordinaria... Bueno veamos que tanto resistes- envía más cabellos a sujetar el cuello de la azabache con fuerza, Aome gimió de dolor y cerró los ojos sintiendo que el aire le faltaba.

Inuyasha logra liberarse de los cabellos y mira hacia arriba y al ver lo que Yura Sakasagami le hacia a Aome decidió atacarla usando nuevamente su ataque de garras de fuego. La mujer recibió todo el ataque soltando a la azabache, dejándola caer sobre los cabellos, entonces rápidamente fue a atraparla en sus brazos.

-¡Aome! ¡Resiste!- la depositó delicadamente sobre el suelo, ella comenzó a recobrar el conocimiento y sus miradas se cruzaron por un par de segundos. Después Inuyasha se gira dispuesto a acabar con ésto pero de la nada es atacado otra vez con la katana.

-Que no sabes que soy inmortal... Si no piensas hablar sobre tu secreto esta bien... ¡Los eliminaré a los dos!- dice la mujer preparándose para atacar cuando se paraliza al sentir un fuerte dolor en el pecho y regresa a ver dándose cuenta de que la azabache estaba tratándo de destruir su fuente de poder. El cráneo rojo.

-Maldita mujer- iba a atacarla con su katana pero antes de poder hacer algo el cráneo es destruido provocando que ella comenzara a desaparecer lentamente- no creas que podrás proteger a esa mujer... Ahora lo entiendo todo... Inuyasha tú viniste ha...- ella desaparece completamente sin dejarla terminar lo que iba a decir dejando solo su ropa y la bolsita donde estaba guardada la Shikon no Tama.

Inuyasha se quedó estático ante las palabras de la mujer, nadie debía saber la verdad, sobre el tiempo del que venía, sobre lo que venía a hacer y sobre lo que sabía del futuro. Nadie y mucho menos Aome. Sabía que algún día llegaría el momento en el que tenga que explicarle la verdad pero por ahora no era en el momento indicado, no sabría como reaccionaría la azabache al enterarse de que él venía del futuro y que sabía el destino que le de paraba si no eliminaba a Naraku antes de que el cumpla aquellas palabras.

-Recuperamos las perla- dice Aome contenta- oye Inuyasha...- él la regresa a ver saliendo de sus pensamientos.

-Perdóname... Te encuentras muy herido- baja la cabeza sintiéndose culpable.

-Tonta, ésto no es nada, anda regresemos- dice Inuyasha y ella asiente dedicándole una sonrisa para después ambos caminar de vuelta.

<<Aome... No se que vaya a pasar en el futuro... Pero prometo protegerte sin importar que me cueste la vida>>

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Inuyasha y Aome lograron derrotar nuevamente a Yura pero ahora que Inuyasha sabe que otros pueden darse cuenta de la verdad ¿Qué hará?

¿Cómo evitar que más sujetos como Yura Sakasagami se den cuenta de la verdad?

¿Aome se enterará de la verdad?

¿Inuyasha le contará todo?

Descúbrelo en el próximo capítulo de "Inuyasha y Aome: Caos en el tiempo" 😁