¿Se imaginan un Dark Backrooms?

Persona normal en los Backrooms: ¡Por favor! ¡Llamen a Dios! ¡Me están matando! ¡AHHHHHH!
Dark en los Backrooms: ¡Vacaciones!

Nivel 666: *Le muestra a Dark recuerdos de la masacre Uchiha*
Dark: *Prende el Rinne-Sakkagan Eterno*
Nivel 666: ¡Hoy es un gran día para dejar de existir*

Backrooms con las personas normal: Nadie me puede derrotar
Backrooms con Dark: ¡¿Como se mata a esta cosa?!

Dark: *Entra a un nivel*
Entidades: *se esconden*
Nivel: *Se vuelve seguro*

Dark: *Entra a The Blackout* La Novia, he venido por ti

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Madara llegando al infierno y viendo que su hijo es el Rey: ¡¿Pero que ha pasado!?

Heaven Ascension Dark y Sera juntos en el paraíso
Shisui llegando al infierno y viendo que su hermano no está: ...

Madara en su castillo viendo como Tobirama vive como un Random en el infierno: ¡Tómala puto!

Madara viendo que Dark vendió su alma: *Saca el cinturón*
Dark: Soy el Rey
Madara: *Guarda el cinturón*

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Lucy: Vente en mi si quieres vivir
Dark: ¿No querrás decir "ven conmigo"?
Lucy: ¿Y yo que dije?

Adán: Enana
Alis: Pensaba que serías más alta
Lucy: *Los humilla a las dos* Adán, tienes un cuerno por cada esposa que mi esposo te quitó y Alis, me avisas cuando dejes de vender humo

Hay pendejos que creen que Adán (HH) puede hacerle algo a Adán (SNV) y la invulnerabilidad de Adán (HH) vale verga porque los Dioses en SNV son invulnerables y Adán (SNV) puede dañar a Zeus sin Volund

Narrador Omnisciente

Lucy se encontraba en compañía de su madre, la poderosa diosa, Goddess. La joven ángel llena de entusiasmo, se reía a carcajadas mientras le contaba a su madre acerca de su última travesura. "¿Lo viste, mamá?" preguntó, con una chispa traviesa en sus ojos. "Logré que Eva, tu creación, comiera del fruto prohibido", dijo con orgullo, sintiéndose triunfante por su audaz acción.

Sin embargo, en vez de recibir una respuesta llena de alegría o complicidad, Lucy notó que la mirada de su madre se oscurecía gradualmente. Intrigada y un poco desconcertada, Lucy buscó alguna señal de respuesta en el rostro de su madre. "¿Mamá?" preguntó, su voz temblorosa reflejando su confusión y preocupación.

Sin decir una palabra, Goddess tomó firmemente las alas de Lucy entre sus manos. Un escalofrío recorrió el cuerpo de Lucy al sentir el contacto frío y amenazante de su madre. "¿Mamá?" balbuceó con voz entrecortada, incapaz de ocultar el miedo que comenzaba a apoderarse de ella.

En un acto de violencia inesperada, Goddess arrancó de un solo tirón las alas de Lucy. Un grito desgarrador escapó de la garganta de la joven ángel, mientras el dolor insoportable se extendía por su espalda. "¡Mamá, por favor!" imploró Lucy, su voz llena de angustia y desesperación. Las lágrimas brotaban de sus ojos, mezclándose con el inmenso dolor que la invadía.

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Lucy se encontraba arrodillada en el suelo, frente a su madre, con la espalda ensangrentada debido a que su madre le había arrancado brutalmente las alas angelicales. El dolor que sentía en ese momento era tan intenso que parecía insoportable. Con voz temblorosa, Lucy implora a su madre: "Por favor, mamá, no lo hice con mala intención". Sus ojos llenos de lágrimas reflejan su desesperación y su deseo de ser comprendida.

Goddess, con una expresión fría y distante, cruza los brazos sin decir una palabra. Su silencio es tan o más abrumador que el dolor físico y emocional que Lucy está experimentando. Lucy, desesperada por obtener una respuesta de su madre, levanta la mirada hacia ella, buscando algún signo de compasión. "Solo quería ser como tú", susurra Lucy, con la esperanza de que su madre pueda entender su anhelo de emularla. "Por favor, te lo suplico, no me expulses", agrega con voz suplicante, sus palabras cargadas de angustia y desesperación.

Goddess, sin cambiar su postura, levanta una mano en un gesto lento y deliberado. En ese momento, Lucy comprende que ha sido condenada al peor destino posible. La mano de su madre dicta su sentencia final: destierro al Infierno. En un instante, la vida de Lucy se transforma por completo. Ya no es un ángel, sino un ángel caído, condenada a vivir en el oscuro y tortuoso abismo del Infierno por toda la eternidad.

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En el castillo del infierno, Lucy despertó bruscamente, con su corazón palpitando aceleradamente por el sueño perturbador que acababa de tener. El sudor perlaba su frente y lágrimas salían de sus ojos.

En ese preciso momento, Heaven Ascension Dark, su amado y divino compañero, entró en la habitación con paso cauteloso. Sus ojos carmesí brillaban bajo su venda con preocupación mientras observaba a Lucy en su estado desolado. "Hola, cariño... ¿Estás llorando?" preguntó, su voz envuelta en una mezcla de ternura y preocupación.

Lucy, con sus manos temblorosas y aún sintiendo las humedades de sus mejillas, se tocó el rostro para confirmar la realidad. Sus lágrimas eran una prueba tangible de la intensidad de su sueño. "Soñé otra vez cómo mi madre despiadada me arrancaba las alas y me desterraba del paraíso", susurró en voz baja mientras se acomodaba en la cama, buscando un poco de consuelo y calma.

Heaven Ascension Dark, con una expresión de comprensión en su rostro, se sentó suavemente junto a Lucy, acercándose a su vulnerabilidad. "Tranquila, mi querida caída, solo fue un sueño", le susurró, su voz resonando con un tono reconfortante. Sus dedos acariciaron suavemente la cintura de Lucy, tratando de transmitirle su apoyo y protección.

Lucy, anhelando la cercanía y el calor reconfortante de Heaven Ascension Dark, se acurrucó en su pecho, buscando refugio en sus brazos. "Y ella está enojada conmigo por tener una hija contigo, no quiere verme feliz", sollozó desconsolada, dejando que sus lágrimas fluyeran libremente como un río desbordado.

Heaven Ascension Dark continúa acariciando suavemente el cabello de Lucy, transmitiéndole una sensación de seguridad y consuelo en medio de su angustia. "Estoy aquí contigo", le susurra con ternura, intentando tranquilizarla. "Nadie te hará daño mientras esté a tu lado", agrega, mientras seca con delicadeza las lágrimas que caen por las mejillas de Lucy.

Lucy, buscando refugio en el abrazo reconfortante de Heaven Ascension Dark, se aferra más fuerte a él, sintiendo cómo su presencia la envuelve y la protege del mundo exterior.

Una sonrisa tierna se dibuja en el rostro de Heaven Ascension Dark mientras observa a Lucy. "Al menos tienes algo que ella no", murmura con cariño, dejando que sus palabras se deslicen suavemente hacia los oídos de Lucy, llenándola de curiosidad y sorpresa.

Lucy levanta la mirada, encontrando los ojos profundos y penetrantes de Heaven Ascension Dark. "¿Qué quieres decir?" pregunta, sorprendida por la confesión de su amado.

Con un gesto suave pero firme, Heaven Ascension Dark hace que Lucy se siente en sus piernas, rodeándola con sus brazos protectores. "Tú eres mi esposa", declara con voz apasionada, dejando que sus palabras se desvanezcan en el aire cargado de emociones. "Y tienes una hija conmigo", agrega, su voz llena de orgullo y amor.

Un brillo de asombro ilumina los ojos de Lucy mientras procesa las palabras de Heaven Ascension Dark.

Con una mirada traviesa y juguetona, Heaven Ascension Dark se inclina hacia el oído de Lucy y le susurra con picardía: "Es hora de darle un hermanito a Charlie", dejando flotar la idea de expandir su familia con complicidad y deseo.

Lucy, totalmente ruborizada por las insinuaciones de Heaven Ascension Dark, se siente abrumada por una mezcla de emociones y deseos. La idea de tener otro hijo con el amor de su vida despierta en ella un fuego ardiente y una sensación de plenitud que no puede ignorar.

{Hazbin Hotel}

Charlie, Vaggie y Angela se encontraban en el Hazbin Hotel de Charlie, el centro de evangelización infernal. En ese momento, se encontraban también Alis, Niffty y Husky, quienes se habían unido al peculiar grupo.

Vaggie, con una expresión de desprecio en su rostro, miró a Alis y le habló con voz firme y amenazante: "Escúchame bien, maldita puta. Si intentas hacer algo malo, te convertiré en la muñeca de pruebas para mi lanza." Mientras decía esto, Vaggie colocó la punta afilada de su lanza en el cuello de Alis, dejando en claro sus intenciones.

Sin embargo, Alis no pareció inmutarse ante la amenaza. Con un gesto tranquilo, alejó la lanza de su cuello con un simple movimiento de su dedo. "Vaggie, deja de lanzar amenazas vacías", respondió con indiferencia en su voz. Parecía haberse acostumbrado a este tipo de situaciones y no se dejaba intimidar fácilmente.

Charlie, preocupada por la tensión que se estaba generando, se interpuso entre Vaggie y Alis. "Por favor, no peleen", suplicó con voz apaciguadora, tratando de calmar los ánimos. Su objetivo era mantener la paz y armonía en el Hazbin Hotel.

Vaggie suspiró, dejando escapar toda su frustración. "Está bien", dijo finalmente, resignada. "Pero quiero que sepas que aún no confío en ti", agregó, sin ocultar su desconfianza hacia Alis.

Una figura divina se materializó ante ellos, revelándose como Heaven Ascension Dark. Heaven Ascension Dark dirigió su mirada hacia Charlie con una sonrisa en su rostro, saludando a su hija.

Angela, con picardía en su voz, se acercó a Heaven Ascension Dark y le dijo: "Hola, guapo. ¿Quieres un poco de esto?" Sus palabras iban acompañadas de una sonrisa pervertida, insinuando una posible atracción hacia él.

Vaggie, visiblemente molesta, miró a Angela con desdén y le respondió de manera agresiva: "Él es el padre de Charlie, maldita puta." No estaba dispuesta a tolerar que alguien se acercara de esa manera a Heaven Ascension Dark, considerándolo una falta de respeto hacia Charlie.

Angela, sin inmutarse por el tono agresivo de Vaggie, le respondió con burla: "¿Qué pasa? ¿Acaso él no puede tener un momento divertido conmigo?" Sus palabras estaban cargadas de ironía y desafío, dejando claro que no iba a permitir que Vaggie la juzgara.

Charlie, cruzando los brazos en señal de molestia, intervino en la situación. "Mi padre está felizmente casado con mi madre", dijo con un tono algo molesto en su voz. Quería dejar en claro que Heaven Ascension Dark estaba comprometido y que no había lugar para insinuaciones o provocaciones en su relación familiar.

Heaven Ascension Dark camina lentamente hacia Charlie, su figura imponente y poderosa contrasta con el ambiente que les rodea. Su mirada intensa se clava en los ojos de Charlie mientras sus pasos se acercan cada vez más. "Hace tanto tiempo que no nos vemos", susurra Heaven Ascension Dark con una voz profunda y llena de nostalgia, envolviendo a Charlie en un abrazo apretado que transmite tanto cariño como anhelo.

Charlie, sintiendo cómo su corazón se acelera, lucha por mantener la compostura y ocultar los sentimientos que se agitan dentro de él. Un ligero rubor tiñe sus mejillas mientras responde con voz temblorosa, "Gracias por venir, papá". Intenta aparentar normalidad, aunque en su interior sabe que hay algo más entre ellos, algo que no debería ser un problema en este reino de condenados.

Vaggie, observando la escena con respeto, se acerca a Heaven Ascension Dark con una mezcla de admiración y cautela. "Hola, Sr. Uchiha", le saluda con un tono respetuoso, reconociendo su poder y presencia divina.

Heaven Ascension Dark se separa lentamente de Charlie, sus ojos oscuros escaneando el entorno antes de dirigirse a Vaggie. "Hola, Vaggie", responde con calma mientras saluda a la novia de su hija.

Husky, quien hasta ahora había estado bebiendo su alcohol en silencio, no puede contenerse y deja escapar un comentario atrevido. "La princesa tiene un padre increíblemente sexy", dice sin pensarlo dos veces, su voz llena de picardía y deseo.

Aunque Husky no lo dice abiertamente, sus palabras insinúan que Heaven Ascension Dark es una figura irresistible, capaz de despertar pasiones y deseos ocultos.

Heaven Ascension Dark, al escuchar el comentario de Husky, levanta una ceja y dirige su mirada hacia ella. Sus ojos se encuentran y en ese instante, él reconoce el deseo que arde en el interior de Husky.

Heaven Ascension Dark observa a Charlie y Vaggie mientras se acercan, su curiosidad se despierta y no puede evitar preguntar: "¿No me vas a presentar a tus empleados?" Su voz suena intrigada mientras su mirada se posa en ellos.

Alis, con una sonrisa pícara en los labios, se adelanta para presentarse. "Mi nombre es Alis, soy la demonio de la radio", dice con seguridad. Luego, con un tono juguetón, añade: "Quizás hayas oído hablar de mi programa de radio, ¿lo sabes? Soy un poco famosa por aquí".

Heaven Ascension Dark niega con cortesía, dejando claro que en el paraíso no tiene acceso a programas del infierno. "En el paraíso no puedo escuchar ni ver programas del infierno", responde con amabilidad, aunque su curiosidad por el programa de Alis sigue latente.

Alis escucha atentamente las palabras de Heaven Ascension Dark y no puede evitar preguntar, llena de curiosidad: "¿Paraíso? ¿Eres un ángel?". Su mirada brilla con intriga mientras espera la respuesta.

Heaven Ascension Dark niega con humildad, dejando en claro su verdadera naturaleza. "No, no soy un ángel. Soy una divinidad", responde. Su tono de voz es sereno y tranquilo, como si estuviera acostumbrado a responder a esa pregunta.

Niffty, la pequeña demonio roba Kills de un solo ojo, se acerca a Heaven Ascension Dark con entusiasmo y se presenta con alegría. "¡Yo soy Niffty!", exclama con una voz animada. Su energía positiva es contagiosa y su presencia llena el lugar de alegría.

Niffty se acerca más a Heaven Ascension Dark con una mirada llena de deseo y entusiasmo. "Soy la limpiadora y cocinera del hotel", dice con un tono sugerente. Su voz revela un anhelo oculto, como si deseara más que una simple relación laboral con él.

Husky, dejando a un lado su botella de alcohol, se presenta, "Soy la barman y recepcionista del hotel". Aunque su tono puede tener un toque de amargura, se nota cierta satisfacción en sus palabras al saber que Heaven Ascension Dark podría convertirse en una presencia frecuente del lugar.

Angela se acerca a Heaven Ascension Dark y le susurra al oído con un tono provocativo. "Soy una de las que busca redención, pero ahora solo quiero hacerte pasar un buen rato", insinúa claramente su deseo de ser la Jinchūriki del onceavo Bijū de Heaven Ascension Dark. Su actitud sugiere que está dispuesta a explorar una conexión más íntima y apasionada.

Sin embargo, Charlie, interviniendo entre Heaven Ascension Dark y Angela, deja en claro su posición. "No, definitivamente no", dice firmemente, dejando en claro que no está dispuesta a compartir a su padre con nadie. Su postura es protectora y deja en claro que su relación con Heaven Ascension Dark es sagrada y no será comprometida.

Charlie mira con molestia a Angela y le repite con firmeza: "Angela, te lo repito, mi padre está felizmente casado con mi madre. Y si vuelves a insinuarle algo así... ¡Te mandaré al paraíso! ¡Pero de una patada en tu culo!". En ese momento, Charlie adopta su forma demoníaca, dejando en claro su determinación y protección hacia su familia.

Alis, aunque se estremece ligeramente, disimula su sorpresa al ver la faceta agresiva de Charlie. No se imaginaba que la amigable Charlie pudiera mostrar tanta ferocidad.

Luego, Charlie voltea hacia Heaven Ascension Dark, su padre, y con una sonrisa en el rostro le pregunta: "Y dime, papá, ¿qué te parece?". Su tono refleja la confianza y el deseo de saber la opinión de Heaven Ascension Dark sobre la situación.

Heaven Ascension Dark, quitándose la túnica Rikudō y quedando solo con su elegante traje negro, responde con calma: "Me gusta tu hotel". Luego, con un gesto amable, le entrega su túnica a Niffty, que la guarda con mucho gusto.

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