C O L Í N
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Regreso a casa con mucho dolor de cabeza y una duda martillando en mi cráneo por las palabras de Avril. Calí no me dio mucha información y Oliver no se ve de la clase de persona que diría algo por el simple hecho de ser cuñados. Luego un recuerdo me golpea con fuerza y se quien me puede decir lo que esta pasando.

Mar Moon.

Voy a darme una ducha para pensar con claridad que le voy a decir a Mar y como debo actuar luego de nuestro beso. Por los dioses engañe a Calí, se que fue algo insignificante como lo es un beso pero sentí algo raro al probar los labios de Mar. Queria probar de nuevo esa sensación chispeante, el hormigueo en mis piernas y la falta de pensamiento racional.

- Colín Adams ¿Dónde y con quien pasaste la noche? - detuve mi caminar en medio de la sala para girar a un costado y ver a mi madre. Sentada en un sillón con un libro de cocina sobre su regazo y un vaso de wiski en su mano derecha.

- En casa de mi novia con tres chicas jugando a las escondidas - contesto de manera burlona pero sabiendo que estaba firmando mi sentencia de muerte. El vaso en manos de mi madre estallo pero eso no cambio su rostro de enojo.

- Mas respeto jovencito que soy tu madre, no sufrí de un parto natural para que tu vengas a hablarme como si fuera la vecina. Te dije que esa chica no es para ti Colín, aléjate de ella o me veré forzada a cortarte internet, salidas con amigos y poderes - ahora si trague en seco temiendo por que la furia de mi madre suba a escalas mayores.

- No entiendo que le vez de malo a Calíope que sea hija de dos titanes no la vuelve automáticamente en una mente perversa del mal - descargo mi furia con cada palabra porque no entiendo que es lo que busca mi madre.

- Todo lo que venga del tártaro es malo Colín y esa chica solo te llevara a la ruina - poniéndose en pie mi madre deja caer el libro que estaba sobre sus piernas - Escúchame cariño lo mejor para esa chica y para ti es que corten la relación. No puedes estar con alguien si en tu mente esta otra persona no es justo para ninguno. - me fue inevitable pensar en Mar en ese momento, tal vez mamá tenga razón.

- ¿Cómo es que sabes tanto del tema? - pregunte cruzándome de brazos, el príncipe Apolión me aconsejo que escuchara a mamá algo debe saber.

- Porque ya pase por una situación así antes hijo y te aseguro que lastimaras mucho a Calíope si no terminas esto ahora - quitándose unos cuantos vidrios de la mano mamá paso junto a mi para ir a la cocina a curarse. Sigo a mi madre hasta la cocina, por un momento me recordó a cuando era pequeño y la seguía a todos lados como patito tras su mamá gansa.

- Esa situación la pasaste con papá ¿cierto? - mi madre continuo con su expresión tranquila. Saco algo de jugo de frutas de la heladera y un poco de sangre de la abuela Medusa.

- Si pero no fue tu padre a quien lastime sino que fue a Ian el vocalista de Cloroformo - mi mandíbula se cayo al suelo mi madre estuvo con el vocalista de mi banda favorita. Ahora entiendo por que no me dejaron ir a el concierto que dieron en la ciudad hace algunos meses.

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Estaba demasiado tenso para hablar con Calí ahora pero tengo que hacerlo y por una vez escuchar a mamá. Llamo a la puerta que sin esperar demasiado me abre la misma ninfa de siempre. Ella apenas me reconoce me deja entrar pidiéndome que espere en la sala para avisarle de mi llegada a Calíope.

Me siento en uno de los sillones dándole la espalda al recibidor y observo la pintura de la familia de Moon. Están las diosa Nyx junto a su esposo Érebo¹ sentados tomados de la mano. A un costado del dios están los gemelos Tánatos y Hipnos junto a sus esposas e hijos. Por el lado de Nyx esta su hija Styx con Oliver, Éter² y Hemera³ junto a una chica que no conozco y Adonis junto a su esposa e hijas. ¿No se supone que Mar no conoce de nada a Oliver?

- El cuadro fue pintado por partes en distintos momentos. Al dios Érebo no le agrada mucho el hijo bastado de su esposa. - poniéndome de pie giro para ver a Calí, trae una camiseta de AC/DC metida dentro de un short negro de jean y converse rojos. Su cabello platinado esta atado en una coleta medio floja y su cara esta lavada pero se le ve algo pálida.

- Te vez bien - murmuro algo nervioso viendo como ella se acerca hacia mi para darme un suave beso.

- Gracias a la sangre de tu abuela, tenias razón me ayudo mucho - sentándonos en el sillón la platinada toma mi mano entrelazando nuestros dedos.

Quiero mucho a Calíope, en verdad yo la quiero y me duele lastimarla. Pero se que no puedo estar con ella si ni siquiera se con quien quiero estar o que quiero para mi. Separando mi mano de la suya observo como su cuerpo se tensa de repente y el ambiente jovial de la sala cambia a uno mas tenso y frio.

- Calíope te... tengo algo q... que decirte - alejándome un poco de su cercanía la miro a los ojos. Esos ojos azules que tanto me gustan y reflejan el hermoso ser que estoy seguro vive muy adentro de Calí. - Es sobre nuestra relación - puedo ver como en sus ojos la desilusión aparece y su mirada se cristaliza por las lagrimas acumuladas.

- ¿Qué hay de malo con nuestra relación Colín? - pregunta ella con la voz quebrada y una lagrima rueda por su mejilla. Intento limpiarla pero ella la seca con brusquedad y se pone de pie alejándose de mi. - HABLA - me grita con enojo.

- Cálmate, primero quiero que sepas que en nuestra relación no hay nada de malo. Soy yo él que tiene la culpa de que esto no funcione y te quiero Calí yo te quiero mucho por eso quiero pedirte un tiempo - me pongo de pie intentando acercarme a ella pero me detiene rebabando su mano.

- Quieres decir que debemos ¿separarnos? - nuevas lagrimas mojan sus mejillas y una fuerte opresión en el pecho me hacen querer volver el tiempo atrás y decirle esto de otra forma. - Tu quieres dejarme luego de haberme ilusionado como una tonta, luego de haberte dado mi corazón para que ahora lo tires a la basura como si yo no significara nada - sus palabras hacían eco en mi cabeza y solo queria ir a abrazarla pero ella no me dejaba acercarme. - Vete, no quiero volver a ver tu cara de imbécil en la vida - hablo ella para irse corriendo escaleras arribas en un mar de llanto e insultos hacia mi persona.

- Que buen tacto tienes con las personas Colín - hablo para mi sintiéndome la peor persona que piso este planeta.

O L I V E R
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Saltando en el aire con su skate la pelirroja realiza una maniobra en el aire y cae con la elegancia de una felina. El chico que la reto cae al suelo de cara y sus amigos se ríen como retrasados. Red se pone a girar alrededor del chico montada en su patineta mientras se ríe, parece estar muy divertida queriéndose burlar del chico.

- Llora niño una mujer te gano - frenando su movimiento Red le enseña su dedo medio al chico que se limpia la sangre de su nariz. - Hasta luego perdedor - sus ojos chocolate se mueven entre la multitud hasta que conecta con los míos. Una sonrisa adorna su rostro y corriendo un mechón de su rostro se acerca hacia mi. Dando una patada a la punta de su skate la toma en el aire y la pega a su costado.

- Hola - miro hacia abajo donde la pelirroja me observa con un tinte de diversión. - ¿Cómo esta Apple? - pregunto no sabiendo muy bien como seguir con una conversación normal con esta chica.

- Ella esta bien se asusto un poco pero te manda esto - del bolsillo de su pantalón saca un dulce de chocolate y lo deja en mi mano - Te quiere agradecer por salvarla, es un chocolate que no coparte con nadie siéntete afortunado - guardo el dulce en mis bolsillos y miro a la chica que une sus cejas en la espera de que diga algo. Intento hablar pero ella me extiende su mano para que la tome, desconfiado tomo su fría mano y ella comienza a correr arrastrándome.

- Espera ¿Por qué corremos? - hablo sintiendo la falta de aire en mi cuerpo, comienzo a respirar de mejor manera.

- Apresúrate cuando lleguemos lo entenderás ahora cierra tu linda boca y sígueme - arrastrándome por cuadras enteras Red se detiene frente a un viejo edificio y me obliga a entrar. - Oliver estas a punto de ver algo que no le eh enseñado a nadie jamás. ¿Prometes no decírselo a nadie? - ella suelta mi mano y ciento un frio extraño recorrer toda mi espina dorsal. Su mano extiende un meñique cerca de mi cara y yo extiendo el mío entrelazándolo con el suyo.

- Lo prometo - una sonrisa aparece en su rostro y comenzamos a subir por unas escaleras de mármol blancas. El edificio por dentro se ve mas limpio y prolijo que por fuera.

La pelirroja se detiene frente a una puerta y sacando una llave la abre se mete dentro y tomándome del canguro me empuja dentro para cerrar. Encendiendo la luz puedo ver el cuarto lleno de materiales finos creados con hierro y otros materiales hermosos. En cajas de cristal hay joyas y coronas, colgadas en la pared están las espadas y cascos de guerreros.

- ¿Qué piensas? - la chica junto a mi camina por la habitacion hasta que se detiene en una de las paredes y saca una espada. Una hoja con un acabado fino, con inscripciones griegas en la hoja y un mango de lo que parece ser oro solido.

- Este lugar es impresionante pero ¿Quién hace todas estas cosas? - no puedo dejar de mirar el cuarto esta lleno de artefactos únicos de los cuales no me molestaría probar alguno.

- Yo las hago el caos no es lo único que herede de mis padres - la chica se acerco a mi con la espada que me extiende - Hice esto para ti - tomo la espada con cuidado de no lastimar a la pelirroja. No es pesada pero al momento de golpear un mueble el filo corto parte de este, tiene un buen agarre y no es incomoda de llegar.

- Gracias yo no se... podría besarte ahora esta espada es una belleza - al percatarme de mis palabras me giro para ver a la chica que me mira con la cabeza un poco ladeada.

- Acabas de decir ¿Qué quieres besarme? - habla ella sonriendo y acercándose un paso hacia mi sin dejar de verse adorable.

- No, es decir si, pero no... - mis palabras son interrumpidas cuando la pelirroja me toma del cuello del canguro y me cincha hacia abajo para que la bese. Nuestros labios están en un compas queriendo dominarse mutuamente, cuando entreabre su boca meto mi lengua explorando mas de lo debido. Sus manos viajan a mi nuca y las mías a su cintura soltando la espada en el proceso que cayo al suelo generando un ruido peculiar. Con los ojos cerrados caminamos hasta chocar contra una pared y una risita se le escapa a la pelirroja. Nos separamos sin dejar de ver los ojos del otro, me gusta sentir el calor de Red en mis manos y el perfume de su piel esta tentándome.

- Oliver no quiero arruinar este momento porque de verdad me gusto el beso pero... ah - un gemido de dolor se le escapa a la pelirroja - Tengo una espada pinchando mi columna dorsal puedes soltarme - obedeciendo a su petición me alejo soltando su cintura. Ella se aleja de la pared frotando su espalda con una liguera mueca de dolor.

- Perdón no debí empujarte contra la pared - ya no sabia ni que decir o como actuar frente a esta chica. Es tan diferente a las demás personas que e conocido y eso me confunde pero a la vez me gusta.

No. No puedo dejar que ella me confunda, tengo una misión una clara misión que cumplir en nombre de Cronos.

- Oliver tranquilo solo fue un beso tampoco significa el fin del mundo - mis ojos se abrieron en grande ante las palabras de Red es como si ella me hubiera leído la mente.

- ¿De que estas...

- Tu mente es un caos por eso pude leer tus pensamientos pero no todos eres alguien muy misterioso - ella dio un paso hasta donde me encontraba y me miro a los ojos pude ver como el color de su iris cambiaba del chocolate al verde. - Eres alguien muy amargado para tener dieciséis años - su frente se arrugo un poco y uno de sus labios se curvó hacia un costado formando una sonrisa.

- No soy un amargado se divertirme y ser sociable cuando quiero. Solo que aquí no estoy en mi ambiente - hablo mirando hacia abajo donde Red alza una ceja sin dejar de sonreír.

- ¿Y cual es tu ambiente Wisdom? - quedo mudo porque no se que responder.

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#FelízJuevesDeEscamas

1 Érebo era un dios primordial, personificación de la oscuridad y la sombra. Esposo de Nyx.
2 Éter es la personificación de la luminosidad y el brillo. Es el dios del cielo superior y representación de la luz.
3 Hemera es una diosa primordial y personificación del día o del amanecer.