Deporte X-tremo

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Después de la eliminación de Geoff, las cosas entre los Bagres Asesinos se tornaron realmente densas. Siendo inútil ya el ocultar la más reciente alianza, fue cosa de poco para que todos se dieran cuenta de la situación, y como siempre, las reacciones estuvieron completamente divididas.

DJ estaba irritado, realmente molesto porque su amigo fuera quien dejó el programa, y el como a cierta parte de aquel grupo parecía divertirle su situación no ayudaba ni un poco a su resentimiento.

Eva por el contrario, si bien se sintió usada por saber que la alianza con Duncan fue solo para llevarse su voto, no se lo tomó personal; así eran las competencias al final del día, y el pasado no se podía cambiar, pero podía aprender de este.

Al menos, en los breves momentos de tranquilidad, podía hablar de ello con Izzy, con quién siempre era un gusto pasar el rato y compartir experiencias del día a día.

—¿Así que eliminaron a Geoff? Era mi mejor paciente hasta ahora, es una lastima. —Izzy suspiró apenada por la noticia, aunque también le tranquilizaba saber que aquel rubio puso irse de la competencia en una sola pieza.— Seguro a DJ no le cayó bien todo esto, ¿Cómo lo está manejando?

—Para nada, intento hablarle de vez en cuando, pero creo que necesita su espacio para superarlo... —Recordó un par de intentos de charlas que tuvo con el hombre y las molestas miradas que le había dado, soltando una pequeña risa.— Pobrecito, espero que pueda sentirse mejor pronto.

Iban a continuar aquella charla cuando fueron interrumpidas por la repentina llegada de Heather, bastante agitada.

—Disculpen, no quiero interrumpir, pero necesito que Izzy vaya a ayudarnos con un pequeño problemita... —Se disculpó la recién llegada, con la enfermera simplemente asintiendo mientras buscaba sus cosas, ya estaba acostumbrada a esas emergencias con el pasar de los días.

—¿Con que animal se peleó Noah esta vez? —Consultó antes de salir, sacándole una inevitable carcajada a Eva al darse cuenta que era algo tan cotidiano para ellos.

—Con un grupo de aves que vino a ver a Justin, pero luego terminaron peleando con Noah por algún motivo, lo normal...—Apenas escuchó esto, Izzy se puso en marcha, con Heather aprovechando de sentarse en una de las camillas e intentar recuperar el aliento tras la improvisada mataron.

—¿Siempre hacen esas cosas?

—¡Ah, disculpa Eva, no te había saludado! Pero si, no es nada raro ya... —Nunca había convivido demasiado con ella, pero parecía una persona bastante agradable.— Es un grupo lleno de cualidades extrañas, ya sabes; Justin atrae a los animales, Noah se termina peleando con ellos, Katie lo anima, Lindsay intenta avisarme y se cae el camino, a veces es difícil asimilar que son adultos.

—Bueno, al menos eso es bastante variado. Actualmente mi equipo es como, uh... Un gigante enojado, una secta y yo.—Ambas terminaron por reír tras las burdas interpretaciones de cada grupo.— No se si encaje demasiado con alguien, pero hago lo que puedo.

—Bueno, encagemos o no, creo que al final lo importante es que nos esforcemos lo más posible.– Fuera cuál fuera su relación con los demás, no dejaba de ser agotador el tener que lidiar con los dramas de estos, sin gozar un solo momento pleno de paz.

Ese día no fue la excepción, tal y como si se dieran cuenta de que tenían un momento tranquilo, los altavoces resonaron para llamar a los campistas a un nuevo reto.

—Bueno, supongo que tenemos que volver, pero fue lindo hablar contigo, Eva. —Heather se levantó, ya sin saber que saldría de la retorcida y creativa cabeza de Hatchet.— Buena suerte con tu secta y el gigante enojado.

—¡Buena suerte con tus niños problemáticos!

***

—Es lindo hablar con alguien que no sea del equipo a veces, es incluso un alivio con la cantidad de problemas que hemos tenido últimamente. —Heather se sinceró frente a la cámara.— Al menos Lindsay y Justin pudieron arreglar sus problemas sin ayuda, pero Trent está más insoportable que nunca, Noah y Katie siguen metiéndose en problemas y Cody... Bueno, Cody es como el niño bien portado en estos momentos.

***

Una vez todos estuvieron reunidos donde les fue indicado, la confusión no tardó en hacerse presente, sin el presentador por ninguna parte, ni los dos internos que solían seguirlo.

—Muy bien, siempre que se demora es porque está apunto de hacer una entrada, ¿Qué creen que sea? —No era difícil darse cuenta del patrón de comportamiento de ese hombre, especialmente cuando eras alguien tan observador como Harold.— Quizá haga una entrada aérea de nuevo, o use un truco para aparecer como arte de magia.

—O quizá venga montando un oso, o con alguna explosión... —Courtney propuso su hipótesis, para luego voltear ambos a ver a Duncan.— ¿Tú qué piensas?

—Quizá se le hizo tarde, no ha pasado tanto rato después de todo.

—No es posible que seas tan aguafiestas... —Courtney frunció el entrecejo ante la poca creatividad de su compañero más reciente. No sé odiaban, pero sus personalidades chocaban entre si, y más ahora que tenían que convivir constantemente.

Courtney esos días confirmó para si misma que realmente le gustaba mucho más Duncan cuando sus interacciones eran simplemente molestarlo.

El sonido de una avioneta los distrajo, con todos elevando la mirada inmediatamente, y siendo obvio que en esta se encontraba el anfitrión. Realizó varios trucos en el aire antes de finalmente aterrizar de forma brusca, con ambos pasantes bajando rápidamente para ir a vomitar a los arbustos.

—¡Espero que hayan recuperado sus energías porque el reto de hoy los llevará al extremo! —El presentador se asomó por la ventanilla, gritando a través de su adorado megáfono, especialmente pensado para ensordecer a los jóvenes.

—Empiezo a creer que los animales conspiran para gastar mi energía antes de los retos. —Viniendo de cualquier otro, sería una obvia broma, pero Noah hablaba totalmente en serio.— ¡Los odio tantooooo!

—Tú eres quien busca conflicto con ellos, no es su culpa. —Justin se atrevió a responderle, después de todo, e incluso si no se llevaban mal, normalmente tenían choques por esas situaciones.

—Bueno, no podría tener conflicto con ellos si no te siguieran todo el día. —Trent se metió en la conversación; luego de las primeras horas esperando que Justin llegara buscando otra oportunidad, sin resultado, le era complicado mantenerse callado buscando recuperar su atención de un modo u otro.— Al final, es tu culpa que ellos vengan hasta aquí.

—¡Cállense y presten atención! —Hatchet les regañó, sin poder creer que ese montón de personas ya eran mayores y no un salón lleno de pubertos insoportables.— En está ocasión les traemos tres retos, porque me siento bastante piadoso...

Incluso cuando nadie creía en su supuesta amabilidad, no pudieron evitar descolocarse cuando Blaineley llegó arrastrando a duras penas un sofá cama, sin ayuda de Chris porque este seguía vomitando.

—¡Vamos a empezar con el paracaidismo de sofá cama extremo! —Apuntó al objeto, el cual estaba en tan malas condiciones que incluso le sobresalían un par de resortes.— Por supuesto, ustedes se lanzarán desde mil pies de altura, pero usando un paracaídas, no somos tan salvajes. —Les aventó un par de estos mismos, de dudosa calidad y con un par de polillas volando de su interior.

Todos rogaron a lo que fuera que estuviera en el cielo por un milagro, esperando no ser los desafortunados elegidos.

—¿Podemos escoger a quien lanzar? Harold está tan delgado que podríamos dejarlo sin paracaídas y se lo llevaría el viento de todas formas. —A DJ no le molestaban los cuestionables métodos que el pelirrojo usaba hasta que estos le afectaron de algún modo. Ahora que si fue perjudicado, tomaría cualquier oportunidad de ponerlo en una situación desfavorable, seguro de que le resultaría hasta terapéutico.

—¿Cómo el bote se llevó a Geoff?—Por si parte, Harold no solía buscar conflicto de frente, pero al estar en una posición bastante más segura en la competencia, se dió la libertad de ello, sabiendo perfectamente como deseaban estrangularlo.— La diferencia es que él no volverá.

***

—¡Tiene una sonrisa tan jodidamente molesta! Nunca me cayó bien, pero ahora que no tengo con quien distraerme no puedo evitar fijarme en lo insoportable que es. —DJ se quejó ante la cámara, bastante irritado, incluso cuando apenas había empezado el día.— Voy a encontrar una forma de borrarle esa expresión tan molesta de su cara, y solo ahí, podré volver a sentirme feliz en esta competencia.

Solo debía idear una forma.

***

—El tiempo que he pasado en esta alianza ha sido curioso, he aprendido mucho de ambos... —Duncan confesó, incluso cuando ya estaba más acostumbrado a ambos, le parecía que no terminaba de encajar del todo.— Courtney es bastante agresiva, pero no es muy distinta a lo que esperaba. Harold puede ser mucho más cruel de lo que imaginaba, pero se ve bastante genial siéndolo... El punto es que me siento mucho más seguro ahora.

A veces pensaba en incluso lo mucho que le gustaría actuar un poco más parecido a los otros dos, pero se retractaba al imaginar que se vería ridículo.

***

—Usaremos el azar, para que vean que somos justos. —Los internos se apresuraron en acercarse corriendo cada uno con una ruleta, las cuales tenían las fotos de todos los del equipo.—Su segundo reto será con un viejo amigo al que no pudimos cocinar, ¡Rodeo de alce extremo! —Hatchet apuntó a un corral, dónde se encontraba el enorme animal que alguna vez hizo un desastre en el concurso de talentos.— Tendrán que durar al menos medio minuto, o caerán sobre una que otra sorpresa que le tenemos preparada.

Cuando el alce los escuchó a lo lejos y reconoció a Noah pareció enfadarse, definitivamente recordaba todo lo sucedido hace semanas.

Quería venganza.

—¡Y el tercer desafío será nuestro esquí acuático extremo, dónde tendrán que arreglárselas para tomar las banderas repartidas por el lugar! Todo eso mientras uno de sus adversarios conduce, así que no les tocará fácil. —Les dió un momento para procesar antes de soltar lo más interesante.— Por cierto, en vez de agua hay solo un montón de lodo.

—¿Es siquiera posible esquiar así? —Lindsay se atrevió a preguntar, aunque como siempre, para sus mil preguntas solo había una respuesta.

—Dije que sería muy difícil, niña lista, cállate la boca.—Hatchet concluyó inmediatamente el tema, pasando a algo mucho más importante bajo su punto de vista.— Tenemos un pequeño premio además de la inmunidad para el equipo ganador; ¡Una ducha movil multimasaje de la más nueva tecnología!

No tenían expectativas más allá de una cena decente, por eso cuando apuntaron a la recompensa, la mayoría no pudo evitar sorprenderse y recuperar repentinamente la motivación.

—¡Si no ganamos esa ducha voy a estrangular a uno de ustedes, no me importa a quien sea! —Katie se apresuró en hacer notar la importancia de esa victoria, totalmente ilusionada con la idea de tener aquella nueva adquisición.

—¿Y para que vamos a querer eso? Ya tenemos una cascada, es lo mismo. —Noah por otra parte, se sentía estafado por lo poco interesante que le resultaba todo.— Espero que al menos venga con esos jabones para burbujas o patitos de goma, me gusta morderlos.

Si bien, les daría un breve momento para ir a desayunar, que en el fondo solo era para tenerlos nerviosos más tiempo, se encargaron de decidir inmediatamente a las víctimas de cada desafío.

Como si de una broma del destino para los internos se tratase, Duncan y Lindsay tendrían que enfrentarse en el primer desafío, poniendo de alguna forma a prueba cuál lado de la apuesta era más propenso a la victoria final.

Por el lado del alce y afortunadamente para este, tendría la oportunidad de enfrentarse nuevamente a Noah, y por otro lado a alguien igual de fuerte, como lo era DJ.

Finalmente, Justin y Courtney se encargarían de recolectar banderas en el esquí acuático, mientras Harold y Katie se encargaban de conducir.

***
—Es agradable poder tomarse todo esto con más calma, aunque claro, me aseguraré de que mi equipo gane esta vez, no podemos perder más gente... O lo que se supone que son Eva y DJ.—Harold se mantuvo tranquilo en la cámara de confesiones, teniendo bastante fé en el como se iba desarrollando la situación para ellos.— Viendo el lado positivo, siempre es buen momento de lucir mi conjunto para la playa.

Normalmente no solía bajar la guardia, pero esta vez, no se dió cuenta de cómo lo estaban escuchando a través de las paredes.

***

Luego de ese corto lapso de tiempo, ya preparados para la primer competencia, Duncan y Lindsay no tenían emoción alguna por subir a esa avioneta, siendo animados por sus respectivos grupos, cada uno a su manera.

—No te preocupes, nos aseguraremos de que caigas en el sofá cama. —Heather intentó subir los ánimos de Lindsay mientras acariciaba cariñosamente su espalda.— Solo recuerda que todo esto es para ganar, y lo mucho que podrías hacer con el premio.

—Claro, podrías ir a estudiar, tener un auto, y accesorios innecesarios para cualquier ocasión.—Agregó Justin, mientras la rubia asentía, intentando tomar la valentía suficiente para superar ese reto.— Ten cuidado allá arriba, de todos modos.

—Lo tendré. —Terminó por aceptar aquella responsabilidad, mucho más segura gracias a ambos.

Por otro lado, Duncan no podía decir que tenía un buen apoyo moral, todo lo contrario, era un desastre.

—Imagina que estás huyendo de la policía, y que si no saltas te atraparán y pasarás encerrado el resto de tu vida.—Courtney buscó animar a su manera, mientras el hombre solo frunció el entrecejo, preguntándose si de verdad alguien se sentiría inspirado por sus palabras.

—¿Por qué estaría huyendo de la policía para empezar? —Duncan buscó a Harold con la mirada, en un desesperado intento de palabras más convencionales para animarse.

—Porque nos ayudaste a enterrar un cuerpo o algo así, se creativo. —El pelirrojo se unió a la curiosa charla mientras sonreía, siendo definitivamente algo bastante alejado a lo que el hombre esperaba.— Bien, se que suena tonto, pero creeme que meterse en el personaje realmente ayuda.

—¿Mínimo puedo saber de quién era el cuerpo? —Se rindió, entregándose a las retorcidas ideas de sus compañeros, siendo lamentablemente interrumpido por la voz del anfitrión obligandolos a subir a la avioneta.

—Sería el cuerpo de Leshawna. —Incluso si no los escuchaba ya, Harold buscó la conclusión de aquella historia, con Courtney asintiendo.

—Definitivamente sería el cuerpo de Leshawna.

El tiempo pasaba sumamente rápido y en menos de lo que quisieran, se encontraban tan arriba que era imposible ver a sus compañeros, preguntándose si en verdad podrían caer en el lugar indicado, o más importante, si esos paracaídas funcionarían.

—No veo la zona de aterrizaje.—Duncan observó a la adversa, quien lucía igual de afligida que él por aquel problema.— ¿Puedes ver algo, Lindsay?

—Honestamente con los grados de miopía que tengo, no creo que ser la indicada para responder...

—Ustedes dos, necesito que firmen esto. —Fueron repentinamente interrumpidos por Hatchet, quien les entregó un par de documentos, confundiendo a ambos participantes.

—Pero ya firmamos unas planillas de seguro al inicio del programa. —Duncan respondió, tomando esos papeles para darles una leída totalmente superficial y aún así, espantandose con el contenido.— ¿¡Por qué firmaríamos para ser donantes de órganos, se volvió loco!?

—Niño, la carne está cada día más cara, necesito alimentar a los campistas con algo. —El presentador lo miró bastante ofendido por aquello, insistiendo con los papeles e incluso exteniendoles unos bolígrafos.— Prepararía un buen caldo al menos, no me vean así.

Varios metros más abajo de aquel horror, ambos equipos luchaban por acomodar lo mejor posible aquellas terribles zonas de aterrizaje, preguntándose si realmente servirían de algo.

—¿Creen que aquí esté bien? —Justin preguntó, observando a la avioneta que les sobrevolaba, agradeciendo enormemente que su desafío al menos fuera sobre tierra.

—¿No puedes enviar a uno de tus pájaros o algo para guiarla? —Lo que tomaron como un chiste primero, era una pregunta totalmente seria por parte de Noah.—Me han despertado toda la semana, pueden servir para algo bueno, ¿No?

—No puedo hablar con ellas, no así al menos, además dudo que lleguen hasta allá, o que Lindsay pudiera entenderlas. —Aclaró, sabía que si bien, no deberían odiarlo, estaba lejos de ser el favorito de muchos del equipo, así que al sobreexplicarse, se sentía un poco mejor consigo mismo.— Me encantaría poder ayudar con ellas, pero dudo que si entendimiento sea tan amplio...

—Hay muchas cosas que no puedes manejar y pretendes que creamos que puedes manejar esta competencia, ¿No te parece gracioso? —Trent no pudo evitar lanzar el comentario, sintiendo una punzada en el pecho al ver cómo este solo le sonría.

—Hago lo que puedo, pero si te parece gracioso, supongo que está bien.—Justin solo le dió una respuesta rápida, intentando en enfocarse en otra cosa, como el mapache a su lado que empujaba con sus patitas delanteras el sofá en busca de imitarlo.— Ten cuidado, está pesado. 

—Ahorrate los comentarios si no tienen nada que aportar, Trent. —Heather por su parte, terminó respondiendo bastante molesta por la actitud del hombre, aunque esté no parecía interesado en responderle.—Muy bien, creo que aquí es el lugar, esperemos que Lindsay pueda llegar. —Cambió el tema para evitar mayor incomodidad para los demás, volviendo la atención al cielo.

La verdad, si hubiera sido útil tener una paloma mensajera en esos momentos.

Por su parte, los Bagres Asesinos ya se habían instalado, simplemente esperando en el lugar como si no estuvieran a punto de lanzar a uno de los suyos a más de mil pies de altura.

—¿No es bonito que nosotros no tengamos que discutir tanto? —Eva intentó decir algo positivo para su equipo, un poco incómoda por el sepulcral silencio de DJ y el como Harold junto a Courtney solo soltaban un par de risas entre murmullos.

—Somos cuatro, y uno está a punto de estirar la pata, no es un gran logro la verdad. —Courtney respondió, alejando aún más lo que Eva buscaba lograr con aquel intento de conversación amigable.

—Más le vale no morirse, no quiero ser el único hombre del grupo. —DJ se sintió complacido al ver cómo Harold borraba la odiosa sonrisa de su rostro unos segundos.— Bien, señoritas, presten atención, parece que al fin van a saltar. —Volvió a clavar su mirada en las alturas, acto imitado por todos ellos.

Y tenía razón, con ambos concursantes allá arriba intentando animarse de algún modo así mismos.

—Está bien, Lindsay, solo tienes que ir un paso a la vez... —La rubia intentó animarse, para finalmente acercarse a paso lento, lo cual no sirvió de nada porque por los nervios se tropezó con sus propios pies y terminó cayéndose al vacío de pésima manera, soltando un agudo grito.

Fue realmente complicado abrir su paracaídas, y con este tan consumido por las polillas apenas sirvió para que la corriente de aire la alejara de la playa, terminando por caer bruscamente sobre un árbol en lugar de la zona de aterrizaje asignada.

Sus compañeros fueron a buscarla, pero como no sabían dónde había caído, fue realmente complicada de encontrar.

Por su parte, si bien Duncan no iba a echarse para atrás, luego de aquella terrible demostración, realmente quería un poco más de tiempo para prepararse mentalmente; algo que obviamente Hatchet no permitiría.

—¡Salta de una vez o te elimino, estás haciendo que perdamos el tiempo de programa! —Inclusó inclinó levemente la avioneta para arrastrarlo más al vacío.

—¡Bien, bien, deje de hacer eso! —Respondió, cerrando los ojos con fuerza antes de finalmente saltar e intentar abrir su paracaídas.

Su sorpresa fue cuando de su equipamiento siquiera salió uno de esos destruidos trozos de tela como fue en el caso de Lindsay, literalmente no tenía nada dentro, siendo una caída libre al sofá cama, con el que impacto con tanta fuerza que llegó a romperlo.

Logró darle el punto a su equipo, y a él, una visita a la enfermería sintiendo que algo se había quebrado dentro de él, literalmente.

***

—Solo espero que todo esto no sea en vano. —Un Duncan completamente vendado se encontraba dentro de la cámara de confesiones, sorprendido de haber sobrevivido a ello.— Bueno, ojalá a alguno le vaya peor... ¡No, eso sonó terrible, tampoco soy taaaan mala persona! 

Honestamente, le serviria para al menos no ser el más enfocado por la cámara aquel día, por más culpable que le hiciera sentir la idea.

***

Si bien, los competidores no solían estar realmente emocionados por ser los siguientes en enfrentarse a un desafío, en esa ocasión era distinto; era el rodeo sobre alce, y los dos elegidos tenían tanto confianza como motivos por los que esa prueba les parecía interesante.

Por otro lado bastante más peculiar, mientras los competidores se preparaban, Justin se las arregló para alejarse del grupo y acercarse al corral de aquel animal, no demasiado en un inicio para no alterarlo, pero de algún modo sentía que le debía una disculpa por su caótico primer encuentro.

—Hola, se que es tonto y quizá siquiera me entiendes, pero me gustaría pedirte una disculpa por nuestro primer encuentro... —Habló tal como si se dirigiera a otra persona, acercándose un poco más cuando este se quedó mirando sin realizar ningun movimiento agresivo.— Intentaba ayudar a un compañero, terminó muy mal, y entiendo lo enojado que debes sentirte, pero espero que podamos llevarnos mejor ahora...

Terminó por estirar su mano hacia el animal, con este respondiendo al apoyar su cabeza contra la misma, dando paso a la curiosa escena de Justin acariciando un alce de más de dos metros.

—¿Este es el alce al que se van a enfrentar? Es demasiado manso, será un reto regalado. —Katie se acercó, con el animal rápidamente cambiando de postura y tirando una patada que la mujer apenas logró esquivar.— ¿¡Qué mierda le sucede!? ¡Estaba bien hace poco!

—Lo asustaste, Katie...

—¿¡Cómo mierda yo voy a asustar a esa cosa, Justin!? Es como de dos Katies de altura.

Al parecer, estaba dispuesto a hacer las pases con Justin, pero no a ser amable con el resto.

***

—Creo que es tonto, pero me alegra haber hablado con el alce y saber que no se lo comieron. —Justin confesó con una risa, momentos así le hacían sentir aliviado de lo dura que se tornaba la competencia.— Creo que lo que más me preocupa de la posibilidad de irme es lo mucho que voy a extrañar a algunos animales de aquí, ¿Qué voy a hacer sin ti, Camille? —Concluyó, acariciando al ave que sobresalía de su cabello, era una pena el solo imaginar dejarla.

***

—Espero que conozcan las garrapatas, porque tendrán que imitar a una para no caer en este desafío. —El presentador llegó a la escena, observando a los dos competidores, más que listos para enfrentarse a la peculiar prueba.— Bueno, el niño perro definitivamente debe conocerlas.

Si bien, ambos jóvenes estaban más que dispuestos a empezar, la energía y entusiasmo de Noah fue lo que llevó a qué le dieran los honores, sin tardar demasiado en subirse al lomo del animal, quien parecía molesto desde el inicio.

—Por favor, ten cuidado... —Suplicó Cody, incluso si ya lo había visto pelearse con la criatura en el pasado, la situación no dejaba de ser preocupante.

—¡Si, no puedes perder tu única neurona! —Agregó Katie, la verdad ella estaba sumamente emocionada por ver que sucedería.

—Ya les he dicho mil veces que no he perdido ninguna neurona, no tengo idea de que son... —Iba a seguir hablando, interrumpido cuando sin aviso, abrieron el corral que mantenía al animal quieto, sujetándose como pudo cuando este empezó a sacudirse violentamente, intentando quitárselo de encima.

Fue una larga lucha para ambos, dónde Noah llegó incluso a usar sus dientes para aferrarse al animal; finalmente logrando un poco más de los treinta segundos necesarios antes de salir disparado por los aires, dándole un punto a su equipo.

Por supuesto, DJ estaba igual de decidido a ganar aquella competencia sin importar que, tronando sus dedos mientras esperaba que volvieran a encerrar al animal para empezar el espectáculo.

***

—Creo que es obvio que los animales pequeños son algo que no me agrada demasiado, pero este es oponente más que digno, ¡Y pienso ganar! —DJ estaba completamente confiado de que podría con ello, y estaba decidido a incluso intentar superar el tiempo de su oponente.— Ya van a ver, será pan comido.

***

Quizá la expresión de DJ estuvo lejos de ser acertada, pues apenas empezó con el desafío, aquel furioso animal fue con toda su fuerza a intentar derribarlo; pero aún así no fue suficiente para quitarse de encima al hombre, por mucho que luchara.

Todos parecían impresionados cuando logró superar el tiempo necesario, quedando unos segundos más atrás de la marca de Noah, pero aún siendo suficiente para ganar el punto, cosa que no pareció gustarle mucho al anfitrión, quien rara vez permitía un empate.

Claro, si alguien tenía soluciones rápidas para esas situaciones era Hatchet.

—¡Ustedes dos! —Apuntó a Heather y a Eva, sobresaltandolas.— Necesitamos un desempate para este desafío, prepárense para montar al alce. —Ordenó, con ambas sabiendo que discutir sería básicamente inútil al final del día.— Lo mismo, duren más de treinta segundos, le daré el punto a ese equipo.

Pronto, ambos equipos estuvieron claramente más preocupados, pues si bien, ambas tenían una resistencia física buena, el soportar un reto así estaba lejos de ser fácil.

Eva no pudo siquiera acomodarse sobre el animal antes de que esté empezará a correr, intentando aferrarse sin éxito, logrando unos miseros diez segundos antes de caer sobre una pila de ropa sucia.

Al menos en la caída encontró una camiseta que había perdido, así que se mantuvo positiva por ello.

Heather por su parte si bien, sabía que eso terminaría en una caída dolorosa, estaba decidida a darle el punto a su equipo, aferrándose con fuerza al animal, quizá excendiendose un poco con esta y causando que se enojara aún más.

—¡Vamos Heather, tú puedes! —Animó Cody, sin lograr elevar demasiado la voz al no estar acostumbrado, pero intentándolo de todas maneras.

—¡No intentes morderlo, solo se enojará más! —Aconsejó Noah, un poco antes de que la mujer terminara cayendo del animal, en un impacto doloroso, pero más favorable que el del resto.

Con treinta segundos exactos, le dió el punto del rodeo a su equipo.

—Lo hiciste muy bien. —Sorprendentemente, la felicitación vino de parte de Eva, quien le ayudó a levantarse a pesar de no ser de su equipo.— ¡Tienes más fuerza de la que esperaba, eso es genial!

—Ah, si, creo que se manejar personas más grandes que yo... O animales. —Soltó una risita, aunque el penoso recuerdo de ella peleandose en su adolescencia no hicieron más que avergonzarle internamente.

Ahora, el destino de ambos equipos dependía de lo que fuera a pasar en el último desafío, disponiendo de unas horas para recuperarse de los golpes y prepararse para este.

Si algo hacía Cody últimamente, era intentar ayudar a sus compañeros lo más que pudiera, incluso si los favores le resultaban complicados, por ello, no dudó demasiado en ayudar a Noah y Heather a remendar su ropa tras los daños del último desafío.

No obstante, no hubiera imaginado que la próxima persona que fuera a pedir su ayuda, fuese uno de sus rivales, y mucho menos uno tan amenazante para siquiera considerar el negarse.

—Oye, tú, necesito tu ayuda para un ajuste de cuentas. —DJ fue directo al grano, espantando aún más al adverso.— Deja de verme así niño, no te voy a golpear...

—¡Si, lo lamento mucho-!—Se forzó a sonreírle, sin saber cómo él podría ayudar a alguien así, y si eso podría involucrar la vida de una persona, dejándose llevar por su lado más catastrofista.— Dime qué necesitas...

—Solo dame aguja, hilo, y una de esas cosas para deshacer las costuras, yo me encargo del resto. —Era fácil ver la duda en el rostro de Cody, pero con solo fruncir el entrecejo para amenazarle sutilmente, fue suficiente para que le entregará las herramientas.— Gracias, espero que no te saquen pronto.

—¿De nada? —Cuando lo vió retirarse, se preguntó cómo podrían relacionarse aquellos útiles con algo como una venganza, pero en cierta parte, tampoco quería saberlo.

Esa gente era aterradora.

Pasó el tiempo, y finalmente estaban todos reunidos para dar inicio al desafío de esquí acuático, el cual irónicamente siquiera tenía agua.

Al ser el reto que definiría todo, incluso los accidentados llegaron para presenciar el resultado, bastante nerviosos por este mismo.

—Oye, más te vale que estés preparado, el equipo depende de ti. —Katie se dirigió a Justin, quien se sobresaltó con su sola presencia, asintiendo.

—Al menos Courtney no es la que conduce, quizá no sea tan difícil... —El jóven intentó calmar a su compañera y así mismo con ello, aunque la presión del desempate era agobiante.

—No me confiaría mucho de todos modos, Harold me da una muy mala espina. —Luego de ello, clavó la mirada en el equipo contrario, específicamente en ese jóven y como estaba claramente aprovechando esa oportunidad para lucirse, como era habitual.— Aunque quizá solo es un idiota presumido, míralo, ¿Siquiera tenía que cambiarse de ropa para conducir?

La pregunta era una que también se hacía el otro equipo, específicamente Courtney, quien no tardó en aprovechar lo descubierto que estaba para picarle la cintura, buscando incordiarle.

—¿Desde cuándo los hombres usan camisas tan cortas? Ay pecas, no seas ridículoooo. —Honestamente a este punto ya siquiera le causaba desagrado como al inicio de la competencia, simplemente había algo en molestar al pelirrojo que le hacía extrañamente feliz.— Tienes una cintura mucho más pequeña que la mía, es aterrador...

—Concentrate en atrapar banderas, Court. —Se mantenía cruzado de brazos, intentando no sobrerreaccionar a los molestos toques sobre su piel.

Por un momento había perdido aquel conjunto, sin embargo volvió a encontrarlo poco antes de la competencia, con un ajuste bastante incómodo, y con aquellos pantalones cortos sintiéndose más holgados que la última vez que los utilizó.

Aún así, Harold tenía un largo historial sobre problemas con la percepción de su propio cuerpo, así que entre esa posibilidad y el poco tiempo que tenía, decidió atribuirlo a una especie de recaída en lugar de algo más.

— Necesito un favor.

—¿Qué quiere la princesita?

—Dios mío, eres insoportable. —Suspiró pesadamente antes de tomarle de la mano y arrastrarla lejos del resto, lo que menos quería eran mas problemas.—Dame tu navaja.

—¿Qué? —Debía admitir que la petición era algo que le tomó con la guardia baja, pero de todos modos terminó accediendo, entregándole esta misma.— Solo porque eres tú... ¿A quien vas a matar, desquiciado?

—Necesito un plan de emergencia en caso de que Cenicienta no quiere soltarse, nada interesante.—Tomó aquella navaja, jugando con ella unos segundos antes de esconderla en su bolsillo.— Vamos a ganar este desafío cueste lo que cueste, ¿Entendido?

—Me gusta como piensas.

Fueron interrumpidos por la voz del presentador, llamando al primer par de concursantes para empezar.

—Las reglas son simples, deben cruzar la línea de meta para que sus puntos sean contados, y el conductor no puede dejar de manejar para cruzar la línea de meta o serán descalificados, fuera de eso, son libres de improvisar sus jugadas tanto como quieran. — Hatchet explicó las reglas, observando divertido el terror en el rostro de Justin, que era el primero en esquiar.— En sus marcas, listos, ¡Fuera!

Harold no tardó en acelerar lo más que pudo, causando problemas desde el inicio para Justin, quien a duras penas mantenía su posición erguida sobre aquel par de esquíes.

Aún así, entre la presión que sentía por su equipo y la forma en que algunos de estos gritaban para animarlo, se las arregló para agarrar la primera bandera, logrando darle un poco más de seguridad a su persona y empezar a frustrar a Harold, quien aceleró aún más.

Incluso cuando este se llevó un par de golpes debido a la brusca manera de conducir, siguió aferrándose, y logrando agarrar otras dos banderas.

—¿Por qué no te sueltas de una vez? Alguien va a salir herido a este punto, y no seré yo. —Harold provocó, volteando unos segundos solo para presenciar como Justin terminaba agarrando una cuarta bandera, haciendo aún más tenso el escenario.

—¡No pienso rendirme, lo lamento! —No pudo responder mucho más antes de sentir como una rama le golpeaba en rostro, pero incluso con ello, siguió aferrándose, para el disgusto de su contrincante.

Una vez lo vió tomar la quinta bandera, supo que había llegado el momento de tomar medidas mucho más drásticas.

—Recuerda que intenté advertirte. —Harold sonrió con particular malicia en su rostro, olvidando por un momento el particular cambio de ajuste en su ropa, sin cuidar sus movimientos.

Sacó la navaja de un movimiento brusco, sintiendo la prenda rasgándose repentinamente y distrayendole lo suficientemente para no percatarse de una rama más adelante que terminó de hacer el trabajo al engancharse, exponiendo completamente su torso.

Justin se sobresaltó ante la repentina imagen, manteniendose aún lo más firme posible en la posición, cosa que dejó de ser posible una vez sintió restos de la tela cayendo sobre su rostro, tomándolo con la guardia baja y terminando por golpearse con una enorme roca en el camino que no logró evitar.

Quedó fuera del juego y con el rostro completamente acalorado por la vergüenza de la situación.

Lamentablemente para Harold, su mala suerte no acabó ahí, pues tras luchar por cubrirse de alguna manera, terminó perdiendo el control del vehículo, quien impactó contra otro de los muchos obstáculos, saliendo disparado hasta el barro con brusquedad.

Se levantó bastante aturdido por el golpe, percatandose por las miradas de todos, que la humillante escena era aún peor de lo que pensó, con sus pantalones habiéndo resbalado de sus piernas por el arrastre, ahora si, estando completamente expuesto ante todo el publico presente, en una de las escenas mas humillantes de su vida.

El estruendoso grito que soltó dejó corto a cualquier otro que hubiera sido escuchado en esa competencia.

***

DJ simplemente sopló sobre una de las herramientas que Cody le había facilitado, orgulloso de su trabajo.

—Honestamente, siquiera sabía si funcionaría, solo quería que se sintiera incómodo, pero eso fue mil veces mejor de lo que pensé. —Habia sido lo suficientemente humillante para que al menos ahora se sintiera en paz al convivir con el pelirrojo.— Ahora si podré trabajar en equipo, era un pequeño precio a pagar.

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—No creo que todo eso haya sido parte de la estrategia, pero lamentablemente sirvió para dejarme fuera... —Justin cubría su rostro, aún bastante apenado por la situación; incluso con ello debía decir que le daba más lastima lo humillante que resultó la situación para su contrincante.— Ojalá censuren eso, pobre Harold...

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—¿¡Qué clase de estrategia tan baja fue esa!? Harold es un sujeto patético... —Trent tuvo el descaro de cuestionar las jugadas de los otros participantes, con su sangre hirviendo de solo recordar la situación.— ¿Y como Justin cae en eso? ¡Ni que fuera algo tan impresionante el ver a alguien desnudo!

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—No hay comentarios. —Harold se mantuvo cruzado de brazos, vestido con una camisa prestada de Duncan y unos pantalones de Courtney, no iba a arriesgarse a usar su propia ropa hasta comprobar que no habían sido alteradas de igual manera.

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Luego de un rato para recuperarse de aquella particular escena, llegó el turno de Courtney y Katie, ambas con un aire competitivo tan grande como era habitual.

—Cuidado, no vayas a quedar como tu amigo. —Katie provocó mientras prendía la moto de agua, preparada para hacer aquello lo más complicado posible.— Seguro tienes menos que mostrar de todos modos...

—¡Agradece que no traje la navaja conmigo, preciosa! —Se aferró con fuerza, decidida a lograr que Katie se tragara sus palabras.

—En sus marcas, listas, ¡Fuera! —Finalmente dieron inicio a la última competencia, dónde la tensión era más que obvia en ambas competidoras, una intentando ser lo más brusca posible en cada movimiento y la otra aferrándose con tanta fuerza que era imposible perderla.

Todos mantenían sus ojos fijos en la competencia, completamente atentos a como una por una, aquellas banderas iban siendo agarradas por Courtney, sonriendo con superioridad cada vez que Katie volteaba a verla.

Claro, ella se negaba a dejarla ganar tan fácil, y al no tener otra opción para sabotear la inminente victoria de los Bagres Asesinos, aceleró para chocar bruscamente contra una de las piedras, causando que tanto ella como Courtney salieran disparadas por el impacto.

Aún así, la última terminó atravesando la meta con las banderas en la mano, logrando darle la victoria para su equipo.

—¡Los Bagres Asesinos son los ganadores, pueden ir a disfrutar su inmunidad y su nueva ducha!— Fue una celebración llena de adoloridos quejidos por la cantidad de heridos que habían, pero una celebración al final del día.— En cuanto ustedes, vayan pensando en quien sacarán de su equipo esta noche en la eliminación.

Cómo era de esperarse, la tensión se sintió inmediatamente en el grupo perdedor, observandose entre si; algunos con ideas propias, otros, esperando que algún compañero les diera la idea de a quien eliminar.

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—Le di la victoria a mi equipo, le gané a Katie, tenemos una ducha nueva, sigo en una pieza, y pude ver lolas, yo creo que fue un gran día. —Courtney soltó una carcajada frente a la cámara, bastante satisfecha con los resultados de aquel día.— A veces el señor le sonríe a uno, o como fuera que decía esa niña del otro equipo.

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Pasadas las horas y recuperándose del reciente golpe, Justin se encontraba entretenido con el libro de relieves que aún conservaba de hace varios desafíos junto al mapache que parecía igual de entretenido que él al verlos.

No obstante, el animal soltó un repentino gruñido cuando el libro se cerró por una tercera mano, con Trent haciendo acto de presencia.

—No puedo creer que te dejaste distraer por alguien como Harold, ¿Tienes estándares tan bajos? —Se sentó a un lado del adverso, decir que la escena le molestó era simplemente quedarse corto.—Ya hablé con varias personas hoy, así que déjame decirte que te quedan solo unas horas aquí... —Era mentira, pero aún tenía la esperanza de poder volver a tener de su lado a Justin de algún modo, quien le miró con nada más que una mueca apenada.

—¿Si? Que triste, con lo que me gusta estar aquí... —No le dedicó más palabras, y eso de algún modo, terminó desesperando más a Trent que al joven que supuestamente iba a expulsar.

—¿Pero aún te quieres quedar, no?

—Por supuesto, pero si votan por mi, no tengo opción.

—Muy bien, Justin,entiendo que solo estás confundido... —No pudo evitar tomar una postura más suave, pasando su mano como era habitual por el desarreglado cabello de Justin, quien si bien no se apartó, tampoco le dirigió la mirada, volviendo a enfocarse simplemente al libro.— Te daré otra oportunidad, les diré que no voten por tí, te llevaré tan lejos como quieras, solo...

—No lo haré, Trent, lo lamento. —Detuvo sus palabras, con una voz suave, pero decidida; luego del último conflicto, se dió cuenta que si bien, quería ganar, para él habían cosas más importantes.

Incluso si ya lo había rechazado antes, esa segunda vez le parecía aún más difícil de creer, y eso estaba desesperando a Trent, especialmente porque en el fondo, genuinamente no quería que él fuera eliminado.

— ¡Te acabo de decir que esos idiotas van a eliminarte, Justin!

—No quiero irme, pero no pienso ganar así, no me haría felíz... —Cuando subió la mirada hasta la contraria, era imposible ignorar lo consternado que estaba.— Me gustas, pero no haré nada de eso, y si no lo entiendes, supongo que no hay nada más que decir...

—¿Vas a dejarme por esas dos? No puedes dejarme, Justin... —Tomó sus hombros en un acto desesperado por escuchar su arrepentimiento, sin recibir la respuesta que tanto anhelaba.— Dime que vas a quedarte aquí conmigo, voy a asegurarme de que te quedes, solo dímelo...

—No, Trent, lo lamento... —Guardó el libro, retirándose y dejándolo con la palabra en la boca, conjunto a una sensación más desesperante que  cualquier ruptura que hubiera experimentado.

Siquiera se levantó luego de eso, simplemente esperando la ceremonia mientras procesaba todo, sintiéndose tan vulnerable que le asqueaba.

Las ceremonias de eliminación eran inevitables, y como siempre, bastante incómodas, tensas y con la gente esperando que acabarán tan pronto fuera posible, y esta vez no era la excepción.

Todos observando de manera nerviosa al presentador y el como revisaba los votos con una sonrisa, antes de acercarse y tomar la bandeja de malvaviscos en sus manos.

—Ustedes votaron y tomaron una decisión, así que ya saben que viene; mi parte favorita, y probablemente la que ustedes más odian... —Tomó el primer malvavisco en sus manos antes de empezar a lanzarlos uno por uno.— Noah, Cody, Heather, Katie, Lindsay...

Cuando la situación se quedó entre Justin y Trent, el aire se sentía tan denso que podría cortarse con tijeras; aunque incluso un corte en el cuello de estas mismas sería más agradable que la sensación.

—Trent, parece que tu mala fama está empezando a ser algo considerado por los demás, y Justin, realmente tu séquito animal empieza a ser un problema, ¿No es así? —Jugó un par de segundos más antes de finalmente lanzar el último de aquellos dulces.— Trent, te quedas esta vez, Justin, empaca tus cosas, eres el eliminado de esta ocasión.

La mirada de Lindsay y Heather rápidamente se posaron sobre su amigo, quien a pesar de sentirse decepcionado en una primera instancia, terminó simplemente asintiendo, era el fin de una competencia, pero no de una vida.

Incluso cuando Justin tardó bastante en terminar de arreglarse, por motivos bastante específicos, sus dos amigas le esperaban en el muelle, siendo detenido por Trent antes de llegar, quien de algún modo, quería tener un final menos caótico para todo aquello, algo extraño incluso para él.

—Tengo que irme ahora, no quiero más discusiones...

—No vengo a discutir, se que fuí algo lejos. —Admitió parcialmente la culpa, cosa sorprendente, aunque eso no era ni la mitad de llamativo que los rasguños que tenía tanto en el rostro como en la mano que le extendió con el un ave constantemente atacandole hasta que notó a Justin y se apresuró a posarse en su cabello.— No puedes dejar a Camille acá, vendrá a buscarte en las mañana y Noah se la terminará comiendo...

No tenía idea de que hacer para despedirse, y el ave pareció una buena excusa, teniendo de respuesta una simple sonrisa, dejándole un agridulce sabor de boca.

Mañana buscaría nuevas opciones de alianza, pero ahora, siquiera podía procesar en que momento terminó escapándose de sus manos.

Una vez llegó al muelle, las dos mujeres se ahorraron las preguntas al respecto, simplemente dedicándose a despedirse, bastante conmocionada por perder a aquel chico.

—Lamento mucho que te tengas que ir, realmente te extrañaréeee. —Lindsay no tardó en expresar su tristeza, incluso más deprimida que el mismo Justin, que soltó una pequeña risa ante la escena.

—Está bien, ya he sobrevivido hasta ahora, creo que podré arreglarmelas de algún modo allá afuera... —Buscó calmarla, dejando cuidadosamente su maleta en el bote.— Saber que las veré de nuevo luego de esto es suficiente para mí.

—¡Por supuesto que si, no tengas dudas de ello! —Heather no tardó en afirmar, intentando que incluso con lo triste que le resultaba esa despedida, supieran que era solo algo temporal.— Te queremos, Justin.

—Buena suerte con la competencia, Linds, también para ti Heather, también las quiero.—Terminó de despedirse antes de subir al bote, de forma algo torpe, esperando que estuvieran más alejados para finalmente soltar un suspiro de alivio y revisar bajo su sudadera.

Dos mapaches, varias ardillas e incluso un par de ratas se mantenían aferrados a él, escondidos para poder escaparse junto a él.

—¿Están bien ahí? Ah, es un alivio, no había podido encontrar a Camille...—Les habló como si pudieran responderle, sobresaltandole cuando escuchó la voz del conductor preguntando con quién hablaba.— ¡No es nada, me gusta hablar solo!

Si había podido arreglárselas hasta el momento, podría con ello también.

Justin se fue, y se llevó bastante con él, metafórica y literalmente; pero la competencia aún no está cerca de terminar, ¿Qué conflictos se desarrollarán en los siguientes capítulos? ¿Qué sorpresas les esperan a los participantes de parte de la producción? ¿Harold se volverá tendencia por su particular escena? Probablemente, pero para saber esto y mucho más solo queda seguir sintonizando.

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