¡Se salió la cadena!

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DJ era alguien que disfrutaba la tranquilidad sobre todas las cosas, y pensó que esta misma se encontraria más presente una vez la gente empezara a irse de la competencia, pero lamentablemente estaba lejos de ser el caso.

Entre las extrañas costumbres de Alejandro a la hora de dormir, el dramatismo de Harold, y los aullidos de Noah, la cabaña de los hombres era un constante drama; siquiera Duncan se salvaba a ese punto.

No obstante, había alguien que le molestaba más que cualquiera, y no era alguien de sus insoportables compañeros de habitación, sino una de las mujeres; Sierra, que se había hecho notar desde su llegada como alguien de todo menos agradable.

En un inicio estaba enfocada en Cody, pero sin este presente, las ganas de demostrar su superioridad habían empezado a afectar directamente al resto.

Lindsay era alguien que no solía estar sola, normalmente acompañada de Heather o Alejandro, pero en algunos momentos, esta quedaba vulnerable y Sierra pareció entender que era probablemente la víctima más fácil en ese montón de gente.

Lo estaba demostrando justo en ese momento, y DJ, por más que odiara involucrarse, no pudo evitarlo, interrumpiendo la escena.

—¿Está todo bien aquí? —Interrumpió la escena con cara de pocos amigos, cosa que de todos modos no parecía intimidar a Sierra.

—Nada que te incumba, ve a jugar con conejitos o algo. —Le respondió la chica, bastante molesta de que interrumpieran lo que para ella, era diversión.

El jóven no respondió, con ambos simplemente mirándose por unos segundos, desafiando al otro con la mirada, y siendo Lindsay al final quien más intimidada se sentía.

Luego de unos segundos, finalmente Sierra rodó los ojos molesta, y se terminó por retirar, no sin antes dar un jalón de cabello a la rubia.

—¿Estás bien? —Se sentó a un lado suyo, cuestionandose así mismo sobre la situación, después de todo, Sierra era agresiva y ruidosa, juntando las características que más odiaba del resto en una sola persona.

—He estado mejor, muchas gracias. —No estaba muy segura de que decirle, después de todo, apenas habían interactuado, y DJ sin duda era de las personas más imponentes que hubiera visto en su vida.— Creo que últimamente se ha ensañado conmigo, ¿Soy el eslabón más débil?

—Eres buena persona, y tus brazos son más delgados que un mondadientes, supongo que lo eres. —Habló con total honestidad, aunque de todos modos le terminó sacando una risa a la mujer con ello.— Pero eres muy lista, ¿No crees que podrías hacer algo con ello?

—Hago lo que puedo. —Se ahorró comentarios respecto a que podría haberla sacado antes, y que lamentablemente tras perder esa oportunidad, Sierra parecía haber hecho la suficiente conexión neuronal para esconder su botín de cosas robadas en otro lado.

—Bueno, quizá eso es suficiente... —DJ meditó un poco antes de proseguir con su charla, no quería comprometerse más allá de ello, pero sabía que si no tomaba cartas en el asunto, quizá nadie más lo haría.— Pero si alguna vez se te ocurre algo, estaría dispuesto a escucharlo.

Entonces la expresión de Lindsay cambió repentinamente a una sonrisa imposible de disimular, tan solo con imaginar la posibilidad y que quizá, no estaba tan perdida.

Aunque Sierra era hábil físicamente, así que habría que preocuparse de primera mano de que no tuviera posibilidad de inmunidad.

—No me malentiendas, no quiero comprometer esto como una alianza, se que no nos conocemos lo suficiente. —DJ aclaró al verla tan callada, pensando que esa era su preocupación.— Pero creo que podemos unir tu cerebro y mi fuerza para recuperar un poco la tranquilidad.

—Creo que puedo pensar en algo... —Finalmente terminó por acceder, estrechando su mano contra la de DJ en una forma de cerrar el extraño trato.

Realmente esperaba que si funcionara.

***

—Se que sería más inteligente enfocarme en sacar a alguien más, como Harold... —DJ se expresó en el confesionario, ya un poco más calmado luego de aquella confrontación.— Pero eso sería más complicado con el par de perros falderos que tiene, y es muchísimo menos insoportable que Sierra, lo cual es bastante teniendo en cuenta lo mal que me cae, ¡Pero prefiero soportar su sonrisa hipócrita a los gritos de esa loca!

***

Cuando fueron convocados al desafío, tuvieron que esperar bastante para que el anfitrión se presentara, con todos preguntándose si esto tenía que ver con una de sus clásicas entradas dramáticas que tanto disfrutaba hacer de vez en cuando.

Su respuesta llegó con Hatchet montando una motocicleta, haciendo incluso un par de maniobras antes de finalmente derrapar y detenerse frente a ellos, causando todo tipo de reacciones, probablemente siendo la más destacable la de Courtney, completamente enfocada en el vehículo.

—¿Vamos a conducir esa preciosura? ¡Este desafío es mío! —Celebró, acercándose rápidamente a esta misma y recibiendo como respuesta que Hatchet le abalanzara el casco por solo insinuar que los dejaría tocar a una de sus más preciadas posesiones.

—Ninguno de ustedes pondrá sus sucias manos sobre esta motocicleta o ninguna de las que tengo en mi colección, al menos que quieran irse a casa. —Aclaró inmediatamente, mientras bajaba de la misma y la acomodaba a un lado.— Pero en este desafío tendrán la oportunidad de tener algo parecido, por eso los traje aquí.

—¿Y si vamos a conducir motocicletas o no? —Katie fingió estar irritada solo para ocultar lo nerviosa que le ponía la posibilidad de que eso tratara el desafío.

—Parecido a eso, pero dudo que tengan cerebro suficiente para algo así... —Hatchet abrió la puerta de un cobertizo, lleno de piezas sueltas de distintos vehículos u objetos perdidos en general.— Así que tendrán que hacer sus propias bicicletas, no hay reglas, solo no excederse del límite de tiempo, ¡Así que espero que sean creativos!

—¿Entonces no hay motocicletas? Que alivio... —Katie soltó un suspiro, notando entonces como la quedaban mirando, cambiando su postura a una supuestamente desinteresada.— Alivio para ustedes porque les hubiera pateado el trasero inmediatamente.

***

—Lo más cerca que he estado de conducir fue la moto de agua de un desafío anterior, respecto a vehículos normales... No he tenido suerte. —Katie confesó bastante humillada frente a la cámara, teniendo varios recuerdos en mente que tenían que ver con su pésima experiencia en lo que manejar vehículos se refería.— Es solo que no me interesa lo suficiente, pero si quisiera, podría estar corriendo en carreras con los mejores... Es decir, ¿¡Qué tan difícil puede ser!?

Había reprobado al menos tres veces el exámen de conducir.

***

—Se que es raro que no sea bueno en algo físico, pero las bicicletas no son mi fuerte. —Noah dió a conocer su preocupación, recordando sus experiencias con estas mismas.— Normalmente me divertía más persiguiendolas que usandolas... Y creo que rompí una por intentar bajar de un monte con ella... ¡Aún tengo la cicatriz!

***

—El mejor diseño tendrá pase automático al último desafío, para que vean que soy bueno... —Les lanzó un enorme libro, que por suerte, DJ atrapó con una mano. —¡Ahora pónganse manos a la obra!

—Esta cosa tiene moho, que asco. —DJ dejó el libro en la mesa, tranquilo al saber que no era algo que realmente le fuera a complicar.—Se los regalo.

—¿Qué es moho? —Noah observó el libro, sabiendo que probablemente solo lo terminaría confundiendo más de intentar usarlo.

—Es un hongo que suele crecer en lugares húmedos, se reproducen por esporas y...—Como era costumbre, Lindsay llegó con las respuestas a la pregunta, sin ser escuchada más allá de las primera palabras.

—¿Es un hongo? ¡Me encanta la pizza con champiñones!

—Pero esto se ve asqueroso. —Katie comentó asqueada a la apariencia de este mismo, cambiando repentinamente a una sonrisa.— A ver, cómetelo o tienes miedo.

—Claro que no me da... ¡Ouch! —Noah fue interrumpido por un repentino jalón en su oreja de parte de Heather, aunque al final, su sorpresa más grande fue cuando escuchó a su amiga quejarse también, viendo que Alejandro se encargó de imitar el gesto con ella.

—Una vez fuimos a un cementerio abandonado y José quiso comer esa cosa, luego estuvo en el hospital por semanas.— Advirtió desde la experiencia antes de soltarle.— Nunca tienen que llevarse a la boca cosas que encuentren por ahí, ¡Incluyendo escorpiones! Se que son exquisitos, pero deben cocinarlos antes.

—¿Nos está regañando alguien que come escorpiones? —Katie preguntó a su amigo, quien solo se encogió de hombros, terminando mejor por ir ambos a revisar las piezas para intentar improvisar un vehículo.

Eran tantas que la mayoría no tenía idea de por dónde empezar.

—Ugh, odio ensuciarme las manos en esta clase de proyectos. —Harold se quejó mientras rebuscaba en las piezas, intentando darse una idea de lo que necesitaría para todo ello.

—No es complicado, cuando termine mi obra maestra puedo ayudarte. —Courtney por su parte iba bastante confiada en su búsqueda, observando con cierta superioridad.— Tienes que estar agradecido de tenerme en la alianza ahora mismo, porque si tuvieras solo al señorito, seguro estarías más perdido aún.

—¿Es necesario? Al menos podrías disimular que pretendes deshacerte de mi. —Duncan bufó bastante irritado, aunque tenía razón al señalar que tenía una clara ventaja en esos momentos.— Acá tienes suerte, pero en un desafío de preguntas de primaria, terminarías perdida...

—¿Me estás diciendo tonta?

—También eres sorda, al parecer.

—Cierren la boca o ambos perderán el desafío.— Harold finalmente intervino, logrando que tras una última mirada de pocos amigos, sus dos aliados volvieran a rebuscar entre las piezas.— Intentemos que al menos uno de nosotros gane en esto, ¿Bien?

—Ugh, bien... —Respondieron al unisono.

Definitivamente estaban en esos momentos donde no se soportaban.

Por su parte, DJ fue directamente a buscar las piezas escenciales para su vehículo, bastante confiado en el desafío al tener experiencia con las bicicletas desde la infancia, dónde las armaba con su madre en verano al no tener muchos amigos con quienes salir.

Hasta ahora sus jugadas se habían mantenido en no meterse con el resto al menos que fuera necesario, y le había funcionado, sin embargo, en ocasiones le era imposible no preocuparse mínimamente por ellos, incluso si no eran sus amigos.

Ese era el caso, luego de tener bastante avanzado su propio proyecto y notar a Noah y Katie haciendo un desastre sin forma en los suyos, suponiendo que si intentaban leer el libro, seguro se les fundiría el cerebro.

—¿Qué se supone que están haciendo ustedes dos? —No quería sonar demasiado duro, pero su voz era fuerte, y el par no pudo evitar sobresaltarse, sintiéndose atacados.— No puedes poner un pedal en el manubrio, ¿Nunca vieron una bicicleta o qué?

—¡Si vienes a criticarnos, vete! —Katie se puso a la defensiva, con DJ ignorandolos y agachándose para acomodar las piezas que ya tenían.— ¿¡Por qué estás rompiendo mi bicicleta!? ¡Eso es trampa!

Incluso intentaron atacarlo ante la falta de respuesta, aunque DJ parecía tan concentrado que siquiera le dió una palabra hasta pasado el minuto.

— ¿Te parece que la rompí, odiosa? —Se levantó, dejando ver una estructura cuanto menos decente, sin terminar, pero al menos encaminada de mejor manera.

El dúo se quedó mirando asombrado aquella bicicleta, sin poder creer que lo que ellos hicieron por media hora fuera superado en minutos por DJ.

—¿¡Cómo lo hiciste!? —Ambos gritaron al unisono, causando una mueca de molestia en DJ mientras se cubría los oídos ante el estruendoso ruido.

—Si se quedan en silencio, ayudo un poco al niño perro también, ¿Trato? — Cuando los vió asentir, se agachó nuevamente a la altura del intento de bicicleta, ayudándole tal y como prometió.

***

—Katie y Noah son insoportables, pero no son malas personas, así que espero que se vayan, pero no hoy... —DJ se encogió de hombros en el confesionario, sabía que ayudar a la competencia no era la mejor idea, especialmente cuando eran un par tan capaz físicamente, pero no podía evitar sentir cierta compasión por los patéticos intentos que habían realizado.—Hay que hacer buenas acciones a veces y eso...

***

—Bueno, quizá no es nuestro mejor momento en la competencia, y estoy casi segura de que es una especie de conspiración. —Katie justificó su ineficacia en esos momentos, mientras Noah garabateaba sobre una hoja de papel.— Pero aún podemos decorarlas, ¡Y somos muy buenos decorando! ¿No es así, Noah?

—Mi bicicleta se llamará la solitaria... —Dijo con un mal intento de misterio en su voz antes de soltar un aullido, mientras su amiga asentía con su cabeza.

***

Lindsay quizá no era la mejor en las destrezas manuales, no obstante, era rápida aprendiendo, y debido al libro que les facilitaron y un par de conocimientos previos a la competencia, su bicicleta estaba resultado cuanto menos buena, pero claramente le faltaría habilidad para llegar de las primeras.

Fue entonces que sintió que el daban un pequeño toque sobre la cabeza, elevando la cabeza y encontrándose con Chris, que hizo una seña disimulada para que le siguieran, aprovechando que Hatchet estaba buscando un par de cosas para el siguiente desafio.

—Puede que me esté jugando demasiado la vida aquí, así que espero que lo aprecies... —La apartó del resto para mostrar como había desmontado el motor de una de las motocicletas de su jefe, la más vieja para que no se diera cuenta rapido, pero seguia siendo bastante.— Así no hay manera de que no llegues primero, ¿Qué opinas?

Lindsay observó por un momento aquella ventaja, preguntándose si no estaban siendo demasiado descarados con esta misma por unos segundos.

La respuesta era obvia, pero en la competencia, uno cuestionaba todo.

—¿No sé darán cuenta?

—En el montón de piezas que tiene Hatchet hay piezas hasta partes yates, simplemente di que tuviste buena suerte buscando. —Serenó con una sonrisa, aunque rezaba porque no se hubiera saltado una cámara que le pudiera delatar a futuro.

—Somos gente muerta si se dan cuenta de esto, Chip...— Negó con su cabeza en un inicio, aunque al final, y observando cómo avanzaban todos, terminó por dejar escapar un suspiro.— Bueno, tampoco es que esté saboteando al resto, no es taaaan malo... Es decir, por los estudios y que no te quedes sin salario.

—Prometo que te contrataré cuando tenga mi propio programa.

—Y yo prometo aceptar el trabajo si me pagas un sueldo decente. 

Ambos soltaron una última risa antes de volver a lo suyo de la manera más disimulada posible, cosa que para la rubia no fue del todo fácil, pero nada que un poco de ingenio no pudiera resolver.

Lamentablemente al pasar de los minutos y aunque no la hubieran visto llegando con esta ventaja, Sierra terminó por percatarse de la presencia de la misma, acercándose a la rubia para jalarle del cabello repentinamente, como ya le era costumbre.

—¿De dónde sacaste eso? — Habló con molestia, después de todo, ella siquiera había encontrado algo interesante en el montón de basura en el que tanto había rebuscado.

—Estaba entre la chatarra, ¿Puedes soltarme? —Se quejó, esperando que Sierra se tragara la excusa, cosa que por suerte sucedió.— Ve a buscar, seguro hay otro o algo...

No obstante, y en lugar de tomar su consejo, la imponente mujer terminó por tomar en sus manos aquel objeto, llevándolo para su propia bicicleta.

—¡Oye, no puedes hacer eso!

—¡Pues mira como lo hago! —Y terminó de retirarse, dejando a Lindsay con la palabra en la boca, bastante molesta y Chris que se quedó mirando la situación, frustrado de no poder intervenir ya.

De todos modos, Lindsay no pensaba rendirse aún.

***

—Recuerdo cuando Beth estaba aquí, era de esas chicas que intimidan siendo crueles con palabras, pero Sierra es de las que van más allá de las palabras y directamente te golpean. —Lindsay intentó calmarse en aquella camara de confesiones.— Ella dice que todo se vale en la competencia, y tiene razón... Así que le tomaré la palabra.

Honestamente le ponía bastante nerviosa la situación, pero quería hacer algo.

***

Fue un periodo de tiempo aún más estresante de lo que muchos hubieran esperado, sin embargo, al final todos lograron construir correctamente sus bicicletas, o al menos lograr que se mantuvieran en pie.

—Que desastre... —Hatchet empezó con su labor de juzgar las apariencias, siendo la primera la de Noah, que gracias a DJ era mínimamente manejable, pero el resto no daba muchas esperanzas.— ¿Por qué tiene un dibujo de rata pegado adelante?

—¡No es una rata, es un lobo! —Frunció el entrecejo, bastante indignado porque desprestigiaran su parte favorita del vehículo, siendo ignorado por Hatchet mientras caminaba a examinar el resto.

—Creo que le faltó un poco de bicicleta a tu rosa. —Dió un rápido comentario a la creación de Katie, con un resultado básicamente igual al de Noah, por obvios motivos.— Al menos no le pusiste alas de murciélago como Alejandro, ¿No crees que es un poco exagerado?

— Lo describiría como un toque auténtico y misterioso. —Alejandro corrigió bastante confiado de su propia creación.

—Está horrible. —Hatchet siguió con el resto, mientras el joven soltaba un suspiro decepcionado; de todos modos se recuperó rápidamente cuando sintió que Heather palmeaba su espalda.

Pasó luego por la bicicleta de Lindsay, sin tener nada muy llamativo a simple vista, pero luciendo bastante aerodinámica, cosa que reconoció.

Contrastante a eso mismo, luego vió la creación de Sierra, la cual, tenía tantas cosas encima, que Hatchet no lograba descifrar que era lo que le parecía tan extraño de esta.

— Muy bien Courtney, se que sigues enojada por no hacer motocicletas, pero al menos pudiste darle una buena apariencia a tu bicicleta, felicidades.—  Llegó finalmente a una propuesta interesante, haciendo sonreír orgullosa a la dueña de esta.

—Solo lo mejor de lo mejor, espero que no se descepcione demasiado cuando vea el resto. —Incluso si sonaba como una simple manera de presumir, en cierta parte tenía razón, pues la bicicleta de Duncan se opacaba bastante a un lado de la suya.

No era mala, pero estaba lejos de destacar, era solo una bicicleta y ya.

—Que aburrido... —La pasó de largo, ahora topandose con la bicicleta de Harold, que para nada pasaba desapercibida con la enorme cantidad de brillo que tenía.— Me lastimas los ojos, ¿¡No conoces la expresión de menos es más, niño!?

—No mientras yo viva... —Al menos, Harold confiaba en que su bicicleta sería decente en rendimiento al tratarse en gran parte de trabajo de Courtney.

—Muy bien, Heather, tu bicicleta es... —Se quedó mirándola, también completamente normal, con la diferencia de que tenía una canasta en frente.— ¿Planeas ir de picnic luego con esa cosa?

—Solo creí que era un lindo detalle.

Finalmente llegó a la, probablemente más impresionante de todas las creaciones, tratándose de la bicicleta de DJ, tan bien armada que parecía comprada, y por un precio bastante alto.

—Muy bien, creo que tenemos un ganador. —Escuchó unos quejidos luego de ello, simplemente ignorandolos, como era costumbre a ese punto.— Pasarás directamente a la ultima ronda del desafío, el resto de ustedes, síganme por acá.

Todos obedecieron a Hatchet, que lejos de ir a un terreno plano para una competencia normal, solo caminó un par de metros hasta llegar a un complicado terreno, lleno de árboles y desniveles, los cuales sería complicados de esquivar teniendo en cuenta que iban en bajada.

—Espero que tengan frenos, porque su próxima competencia será bajar por esta pendiente, los que lleguen hasta abajo con su bicicleta mínimamente funcional, tendrán la oportunidad de competir por la inmunidad en la última ronda. —El anfitrión anunció la prueba, para nada alentadora, pero siendo lamentablemente algo que todos a excepción de DJ, tendrían que pasar.

Todos se colocaron en sus posiciones, la mayoría sabiendo que no pasaría los metros sin que sus creaciones colapsaran, pero esperando que al menos no se llevarán un golpe tan terrible en el proceso.

—Court, dime qué esto tiene frenos, por favor... —La voz de Harold, normalmente confiada, ahora llegaba a temblar ligeramente al presenciar la caída que tenía frente a sus ojos.

—Eh, bueno... ¿Quien usa frenos en una competencia? —Courtney palmeó su espalda, sin saber cómo darle la mala noticia a su compañero.— ¡Ya, no me mires así! No creí que fueran necesarios...

—¿¡Cómo no van a ser necesarios los frenos, Courtney!?— Fueron interrumpidos por la voz de Hatchet, solo poniéndole más nervioso.

Las cosas que uno llegaba a hacer por dinero y fama eran impresionantes.

—En sus marcas, listos... ¡Ya! —Dió la salida al gritar por su megáfono, empezando con una carrera cuesta abajo para los competidores donde sería difícil salir ileso.

Entre los gritos de algunos, e incluso los lloriqueos de otros, la primera eliminada resultó siendo Katie tras maniobrar mal y chocar contra un árbol, con ello, rompiendo su frágil bicicleta.

Por voltear a verla y terminar riéndose de ella, a Noah le fue peor, con su bicicleta chocando contra una roca y terminando por dispararlo en el aire, cayendo quien sabe dónde.

Heather se las había arreglado para esquivar la mayoría de obstáculos, llegando a ser su mayor complicación uno que otro golpe de rama en el rostro y lo difícil que era mantenerse concentrada cuando escuchaba las estrepitosas maneras en las que terminaban golpeados los demás.

***

—No me sorprende que Heather pudiera con esto, teniendo en cuenta que en la secundaria llegó a subirse a varias motocicletas y... —Un Alejandro con el pelo completamente despeinado, lleno de hojas y bastantes rasguños encima se encontraba en el confesionario, aún algo aturdido.— Muy bien, yo no tendría porque estar hablando de eso, disculpen me emociono hablando cuando algo me interesa, también podría pasarme hablando de pandemias, por ejemplo...

Quizá sabía demasiado, pero no era su culpa que los padres de la mujer decidieran contarle tantas cosas a un completo desconocido.

***

Por su parte, Courtney estaba totalmente enfocada en esa competencia, quizá demasiado consumida por el espíritu de esta, pues en una maniobra imprudente, terminó golpeando la bicicleta de Duncan, llevándolo a perder el control de la misma, terminado por estrellarse.

—¡Lo lamento, muñeco! —Gritó, aunque terminó soltando de igual manera una carcajada de todo menos disimulada, la cual fue escuchada por la mayoría.

—¡Se bien que no lo sientes, ya vas a ver! —Le gritó de vuelta, esperando en el fondo que ella terminara de estrellarse de alguna forma dolorosa, solo para repararle un poco el ego.

La risa de la mujer se detuvo cuando escuchó el grito de Harold, estrellándose contra Duncan, quedando ambos fuera de la competencia.

Probablemente iba a ganarse un regaño luego del desafío.

Sierra por su parte, llevaba el juego bastante bien, y eso empezaba a poner aún más tensa a Lindsay, quien estaba luchando por esquivar todos los obstáculos a tiempo, con la adrenalina siendo probablemente quien más le ayudaba en esos instantes.

Lamentablemente no fue suficiente, terminando por estrellarse un poco antes de la meta, y con ello, frustrando sus planes una vez más.

Pero no pensaba rendirse tan fácil.

Finalmente, Courtney fue la primera en llegar, seguida de Sierra, Heather y Alejandro.

—Muy bien, parece que son las únicas que lograron llegar a la meta, así que... —El presentador fue interrumpido por dos gritos, viendo a Noah y Katie llegando con los restos de sus bicicletas a cuestas.— Buen intento, pero dije que las bicicletas tenían que sobrevivir a la bajada, estan fuera.

—¡Pero podemos repararlas con cinta adhesiva! —Intentaron remediar la situación, sin éxito alguno.— Ay, por favor, no es justooooooo...

—¡Aprendan a rendirse, par de chamacos insoportables! —Se cruzó de brazos mientras el par se retiraba cabizbajo y con los restos de su vehículo aún encima.— Como les iba diciendo, ¡Felicidades por llegar a la última ronda! Esta vez, tendrán una carrera por el primer lugar...

—¿De nuevo con obstáculos? —Heather suplicó a sus adentros por un poco de piedad, intentando a duras penas arreglar un poco el desastre que quedó en su cabello luego de aquella prueba.

—Esta vez, ustedes serán quienes hagan los obstáculos. —Se ganó la mirada confundida de todos con eso último.— Se enfrentaran en una pista normal, pero tendrán una hora y media para mejorar sus bicicletas y si quieren, pueden jugar sucio y reunir objetos para lanzarlos sobre los demás competidores.

—¿Algo así como Mario Kart? —Cuestionó Chris que estaba a su lado, siendo callado inmediatamente por su compañera.

—No lo digas en voz alta, Hatchet no está pagando por la idea y tenemos que evitar demandas... —Ambos guardaron silencio cuando notaron la mirada de su jefe, simplemente soltando una risita nerviosa para disimular de lo que estaban hablando.

—Son libres de ayudarse entre ustedes o tener ayuda de sus compañeros eliminados, ¡Todo vale! —Terminó su aclaración, realmente emocionado de ver qué retorcidas cosas podrían idear ese montón de jóvenes.— ¡Ahora dejen de perder el tiempo y largo de aquí!

***

—Bien, fue mi culpa por confiarle trabajo a alguien más... —Harold dió un suspiro rendido a ese punto, no muy feliz del estado en que quedó tras ese golpe.— Viéndole el lado positivo, si Courtney gana, podremos sacar a otro que haya llegado a la última etapa...

Lo que más le importaba, era eliminar la competencia fuerte.

***

—Eso se ve doloroso, ¿Estás bien? —Courtney sonrió ligeramente nerviosa hacia Harold, desarreglado y con varias vendas que Izzy colocó sobre él luego del golpe que se llevó.

—Claro, Courtney, adoro golpearme en el rostro. —Buscó en su bolsillo un espejo, pero al abrirlo se dió cuenta que su mala suerte continuaba, pues este se rompió en el impacto; de todos modos usó el reflejo de los restos para arreglarse el cabello.— ¿Crees que puedas ganar la siguiente carrera por tu cuenta?

—No es por presumir, pero podría ganar lo que sea por mi cuenta, pecas... —Definitivamente estaba presumiendo, pero se lo dejaron pasar mientras analizaba la situación.— Si hay algo que hago bien es jugar sucio.

—Bien, juega sucio, pero asegúrate de que no sea lo suficientemente horrible, porque si pierdes luego de eso, serás el foco de atención... —Se apresuró en establecer, antes de ponerse de pie, ignorando el molesto bufido de parte de ella.— Puedes ser cruel si quieres, pero limita todo a qué no haya riesgos de muerte o algo tan llamativo, hay competidores fuertes en esa ronda, y seguramente alguien hará algo estúpido ...

—¡Le quitas lo divertido a la vida! —Se quejó mientras lo agarraba de los hombros y lo sacudía, sacándole un quejido.— Ah, lo olvidé, perdón pequitas.

—Ugh, bien... El punto es que, si bien me encantaría ver a alguien perdiendo el cabello de una explosión o algo así, tenemos que tener cuidado. —Terminó por acomodarse a un lado el vehiculo de la mujer.— Vigilaré tu bicicleta mientras buscas cosas, probablemente intenten sabotearla o hacerle algo raro si nadie más la está viendo.

—¿Cómo sabes que harán eso? ¿Estuviste espiandolos?

—Es fácil deducirlo porque es exactamente lo que yo estaría haciendo...

Razón no le faltaba, y es que ese fue uno de los pilares fundamentales del plan que Lindsay formuló tomando la oferta que DJ había hecho aquella mañana, sacando provecho a la ventaja que Sierra tenía contra ellos.

—¿Así que Sierra te robó un motor de motocicleta? ¿De dónde sacaste eso? —DJ no iba a juzgarla, pero honestamente le mataba de curiosidad en que momento había hecho todo.

—Es una larga historia... —Intentó quitarle el peso a la situación, cosa que no sabía si funcionaba, con la dura mirada del hombre aún pareciendo analizarla.— A lo que quiero llegar es que, ya que sabes tanto de mecánica, podrías, ya sabes, hacer algo con eso...

—No sería complicado, a decir verdad... —Asintió con su cabeza, aunque le era inevitable seguir preguntándose cosas al respecto de la chica frente suyo.— Uh, el diseño de tu bicicleta era bastante bueno también, no pasaste porque eres pésima conduciendo, pero...

—¿Gracias, creo? —No estaba segura de como tomarlo, pero elegiría verlo como un halago.

—Ugh, soy pésimo explicándome... A lo que quiero llegar, es que yo sé mucho de esto, pero nunca lo estudié de forma técnica, así que si quisieras darme un punto de vista así de mi bicicleta, creo que sería útil. —Las manos de DJ se movían nerviosamente mientras intentaba explicarse, pero al menos por la expresión de Lindsay, supuso que esta vez lo habia logrado.

—Claro, será un gusto. —Ambos sonrieron tras ello, poniendo manos a la obra con sus planes.

***

—Lindsay es extraña, muy extraña... —DJ la verdad seguía preguntándose de dónde había sacado todo eso, porque estaba seguro de no haber encontrado nada similar.— Pero es agradable y no grita demasiado, creo que somos un buen equipo por ahora.

***

—¿Qué estás haciendo con eso, Alejandro? —Heather se quedó mirando extrañada al jóven, quien estaba agarrando a las ardillas de un árbol y metiendolas en al bolso como si fueran simples rocas.

—Se las voy a lanzar a DJ cuando sea necesario, reuní cosas específicas para todos...

—Oh, eso suena interesante... ¿Puedo saber qué me lanzaras a mi, quizá? —Como respuesta, Alejandro simplemente uso la resortera para lanzarle una pequeña flor con la menor fuerza posible, sacándole una risa a la mujer.— Dudo que puedas derribarme con algo así.

—Jamás podría siquiera pensar en tratar de derribarte, Heather... —Un particular silencio se formó luego de aquello, cosa que evocó los nervios en el hombre, intentando distraer el tema al tomar una ardilla y lanzarla a Sierra, no muy lejos de ahí.— ¡Mira, funcionan bien! ¿No lo crees?

—Bastante bien, de hecho... —La táctica dió resultados, con la mujer bastante sorprendida de como el animal llegó sin problemas hasta la cabeza de la joven, de paso atacandola y causando que está corriera mientras maldecía al aire.

Normalmente hubiera corrido a ayudarla, sin embargo, en ese momento simplemente decidió fingir que no había visto nada; Sierra era una chica fuerte, se las arreglaría.

No tenían idea de que acababan de darle la oportunidad perfecta a DJ de tomar la bicicleta y llevársela lejos para poder intervenir en esta.

Entre todo ese alboroto, habían personas que no sabían que hacer, al ya haber quedado eliminados y sin un propósito el resto del día.

Era el caso de Noah y Katie, quienes miraban a todos trabajar, bastante aburridos; o eso hasta que tuvieron una idea.

—Oye Katie... ¿Te agrada DJ?

—Eh, no mucho, yo le gano. —Eso último lo aclaró rápidamente aunque siquiera fuera parte de la conversación.— Pero fue muy amable al ayudarnos hoy, aunque no sirviera de nada.

—Estaba pensando...

—¿Tú piensas?

—¡A veces! Bueno, estaba pensando en que de todos modos hay que ayudarlo ahora, es decir, para estar a mano... —Se acercó para susurrarle la idea, aunque absolutamente nadie les estaba prestando atención.— ¿Qué opinas?

—Claro, ¡Hay que hacerlo!

Con solo verlos a ambos riendo mientras corrían a buscar cosas al bosque, daban la idea de que algo malo estaban haciendo.

***

—Bueno, las bicicletas son importantes en esta ronda, pero creo que le daremos a DJ una ayuda mucho más importante... —Noah habló emocionado dentro del confesionario, mientras Katie sostenía en sus manos un extraño objeto.

— Decidimos preparar proyectiles para que pueda lanzar en la carrera. —La mujer sonrió, bastante orgullosa de su obra de ayuda al prójimo.

—¡Y son explosivos!

***

Aquel tiempo pasó mucho más rápido de lo que muchos hubieran querido para prepararse, teniendo que reunirse todos en la línea de partida de, lo que al menos ahora sí era un lugar apropiado para las bicicletas.

—Espero que tuvieran exito en su búsqueda y pudieran encontrar lo que buscaban. —Hatchet le dió una rápida mirada a los concursantes, ignorando como a su lado, los dos internos no perdían el tiempo en establecer una apuesta de quien resultaría ganador aquel día. —¿Están todos en sus lugares?

—¡Esperen! —Katie gritó, mientras Noah se acercaba y le entregaba el montón de armas a DJ, quien solo miró confundido, pero lo agradecía, al no haber tenido tiempo de preparar algo por su cuenta.— ¡Ahora si, sigan!

Todos los competidores estaban en sus lugares, mientras los eliminados se encargaban de hacer el ruido necesario para animarlos, tal y como si estuvieran en una carrera real.

—¿Preparada para tragar polvo, preciosa? —Courtney provocó como era habitual antes de cualquier competencia, con Heather simple soltando una risa, restándole importancia al asunto.

—Buena suerte con la carrera, Courtney.— Le deseó, mientras acomodaba un casco en su cabeza, algo le decía que lo necesitaría.— Podrías necesitarla. —Respondió ligeramente a la provocación al final, tomando con la guardia baja a la otra mujer.

Quería responderle, pero la voz de Hatchet se alzó, alertandoles.

—En sus marcas, listos... ¡Fuera! —Finalmente, la última ronda dió inicio, con todos apresurandose en conducir sus respectivas bicicletas tan rápido como sus cuerpos le permitieran.

Era una vuelta larga, no obstante, no pasaron más de unos metros para que las primeras jugadas sucias empezaran a hacerse presentes, con Courtney dando los honores con algo básico pero efectivo, como lo fue lanzar clavos al suelo para intentar pinchar las ruedas del resto.

Si bien, no terminó dando con nadie, si retrasó bastante a Heather mientras maniobraba para esquivarlo, causándole una sonrisa ganadora en el rostro a la causante.

Está se desvaneció cuando de la nada sintió una mordida en la cabeza, levantando la mirada y encontrado una tortuga mordedora aferrada a ella, un pequeño regalo de parte de Alejandro.

—¿¡Estás lanzando animales vivos, enfermo!? —Fingió estar ofendida para ocultar lo mucho que le frustraba no haber pensando en lo mismo.

No recibió más respuesta que el hombre intentando ahora darle a Sierra con una araña, pero esta logrando esquivarla a último momento.

Sorprendentemente para la mayoría, Sierra siquiera se molestó en lanzar un insulto por ello, pues estaba mucho más concentrada en encender su arma secreta, sonriendo cuando escuchó el sonido del motor activandose.

Sin embargo, este se apagó a los segundos, y por más que insistiera, no parecía querer colaborar, haciéndole gruñir de la rabia.

—Maldita sea, ¿Está tarada no pudo robar al menos un motor en buen estado? —Se quejó entre dientes, apresurando el ritmo de sus pedaleos, pero insistiendo con intentar encender aquel motor.

DJ estaba a la delantera, por lo que no disimuló la risa que le causaba la frustración de Sierra, incluso dudando por un momento si sería necesario disparar con aquellas creaciones que el par le entregó.

Lo dudó, pero terminó por hacerlo de igual manera al recordar lo mucho que le molestaba su presencia, esperando un golpe doloroso como máximo.

Cual fue su sorpresa cuando aquel pequeño objeto terminó creando una explosión bastate considerable, siendo evitada por mera suerte por Sierra, quien no pudo ocultar su rostro estupefacto ante aquello.

—¿¡Qué carajos!? —Courtney observó aquella escena, y luego aprovechó de acelerar, queriendo alejarse de DJ lo más rápido posible para evitar una explosión en su rostro.— Como me hubiera gustado tener mis propios explosivos... —Se lamentó de todos modos.

—Courtney toma la delantera, mientras DJ y Sierra están compitiendo bastate igualados, pero Alejandro amenaza con acercarse, y Heather lucha con salir del último puesto, ¿Cómo terminará esto? —Hatchet observó bastante emocionado la carrera desde las alturas, narrando cada suceso.

Al estar mucho más enfocados en los lanzamientos del otro, Sierra y DJ apenas se percataron cuando Alejandro los empató, y mucho menos cuando este lanzó una ardilla con su resortera, cayendo sobre aquel hombre.

Un grito no tardó en resonar por todo en los oídos de todos, con DJ perdiendo el control de su bicicleta al punto de estrellarse, quedando en el suelo y con ello, quitándole toda posibilidad de ganar.

Aún así, se negaba a dejar todo así como así, tomando rápidamente su resortera y empezando a disparar una por una aquellos proyectiles a Sierra, al inicio siendo esquivadas, pero al final, sin poder evitar que una de estas se estrellara contra su bicicleta, directamente sobre el averiado motor que tanto insistía con poner a funcionar.

Ninguna de esas pequeñas explosiones llegó a la mitad de como sonó esta, con todos cubriendo sus oidos y la onda expansiva incluso llevando a los demás competidores a tambalearse.

Sierra maldijo tras sentir que había caído al piso, insultando al aire cuando vió los restos de su bicicleta y el como había terminado fuera de la competencia con esto.

Fue la brisa la que le sacó de aquellos pensamientos, precisamente lo repentinamente fuerte que se sentía sobre su cabeza, llevando sus manos hasta esta, y encontrándose con una sorpresa aún peor.

Aquella explosión la había dejado con tantos sectores calvos que raparse era su opción más digna.

***

—¡Esto tiene que ser una maldita broma de mal gusto! ¿¡Qué clase de programa permite estás cosas!? —Sierra se miraba a un espejo, aún lamentándose por la perdida de su cabello, y de paso, la perdida de la inmunidad.

Terminó golpeando la pared del confesionario en un intento de calmarse, sin éxito alguno.

***

A la vez que Izzy corría para auxiliar a los heridos, los competidores restantes estaban intentando enfocarse en la carrera, con la línea de llegada cada vez más cerca, siendo debatida entre Courtney y su obvia habilidad en las carreras, y Alejandro, quien tenía proyectiles tan extraños que bajar la guardia seria error.

Luego estaba Heather, que probablemente no ganaría, pero quería mínimamente cruzar la línea de meta.

—¡Deja de lanzar cosas tan raras! Ugh, le dije a Harold que me dejara usar ladrillos... —Se quejó Courtney antes de sentir el golpe de un montón de ardillas nuevamente.— ¡Para con las ardillas, no soy DJ!

—¡Con lo que me costó atraparlas quiero mínimamente usarlas! —Respondió Alejandro, ahora sacando su artillería más pesada, con todos preguntandose de dónde demonios pudo sacar la gelatina verde, y como se las arregló para crear proyectiles con esta misma.

Courtney palideció cuando vió esto, no obstante y lejos de hacerla detenerse, solo le hizo pedalear con tanta rapidez que parecía inhumano.

Sin darse cuenta, Alejandro le dió el impulso a su rival para que terminara cruzando la línea de meta antes que el resto, ganando con ello el desafío y la inmunidad por ese día.

Claro, el pánico también la llevó a seguir conduciendo luego de ganar, terminando finalmente por tropezar y caer al agua.

Alejandro dejó de pedalear, soltando un suspiro derrotado, aunque su expresión cambió repentinamente cuando vió a Heather sobrepasandole, aún en la bicicleta.

—¡Heather, ya perdimos! —Le avisó por si no era obvio.

—¡Bueno, aún puedo tener el segundo lugar, al menos! —Se encogió de hombros antes de cruzar la meta, quizá no ganaba nada, pero siempre servía para el orgullo tener un puesto más alto en la competencia.

Alejandro se encogió de hombros e imitó aquello, terminando por reclamar en tercer lugar, en caso de que por milagro Sierra y DJ se levantarán y quisieran terminar la carrera.

—Viendo que los dos últimos concursantes fueron afectados por una explosión, declaro este desafío por terminado, ¡Y a Courtney como la ganadora de la inmunidad, felicidades! —Hatchet anunció con una sonrisa, observando cómo la ganadora salía del mar, temblando de frío, pero arreglandoselas de todos modos para celebrar por su victoria.— Ahora, todo el resto está en peligro de eliminación, así que vayan pensando en eso y prepárense para votar esta noche.

***

—No gané nada, pero mi bicicleta sigue casi intacta, y un segundo lugar no está tan mal. —Heather estaba tranquila tras esa competencia, sin saber lo que estaba por venir antes de esa noche.— Me pregunto si podré llevármela a casa luego, es bonita.

***

Luego de aquel desafío, la mayoría, por no decir todos, se encontraban intentando recuperarse de los daños causados, o mínimamente del cansancio, como era el caso de algunas de las chicas, a una hora de la votación, pero sin energía para siquiera moverse por un rato.

—Ugh, tengo que bañarme, me quedó el cabello hecho un desastre luego de todo eso... —Se quejó Katie, principalmente porque eso venía conjunto a la acción de levantarse.— Noah se llevó mi acondicionador una vez y lo gastó todo porque no sabía usarlo, ¿Alguna me puede dar? Quizá Sierra, ya que no lo va a necesitar...

—Solo por eso no te voy a dar nada. —La mujer bufó, aún bastante molesta de solo recordar aquella humillante escena.

—Te presto mi trece en uno, es jabón, champú, acondicionador, desodorante, pasta de dientes... —Courtney empezó a nombrar tantas cosas que Katie no tardó en negarse, espantada de pensar en lo horrible que resultaría eso.

—Ugh, olvídalo... ¿Lindsay, me haces el favor? No quiero ir a pedírselo a Heather, su remolque está muy lejoooos...

—Su remolque está a menos de cien metros, pero claro, está en mi maleta... —No pensó demasiado la respuesta, más enfocada en lo confiada que estaba en la votación de esa noche, hasta aliviada de solo pensar en la futura ausencia de Sierra.

Su tranquilidad acabó de golpe cuando Katie elevó repentinamente su voz.

—¿¡Por qué tienes tú mi brillo labial!? —Se quejó repentinamente, confundiendo a la rubia, que rápidamente se levantó para comprobar la situación.— Nunca te lo presté antes, ¿¡Por qué estaba en tu maleta, Lindsay!?

—¿De qué estás hablando? — A pesar de las acusaciones, la mujer no parecía alterada, aunque la confusión era más que evidente en su rostro una vez se asomó y notó que efectivamente, Katie había encontrado aquello en su maleta.

Todas olvidaron su dolor por un momento para reunirse y presenciar la escena.

—Dime que hacias con él, ¿Por qué hiciste eso? —No tardó mucho en voltear hacia la adversa, dando un par de pasos que la hicieron retroceder, completamente intimidada.

—¡En verdad no tengo idea, Katie! —Cuando escuchó la risa de Sierra, frunció el entrecejo, dándose cuenta de que sabía mucho más de lo que parecía.— Sierra tenía todas estas cosas, ella debió...

—¿Disculpa? Estaban en tu maleta, no es mi culpa. —Intervino finalmente la tercera, haciendo sentir a Lindsay aún más acorralada.— No me eches la culpa a mi, ladrona.

—¡Sabes bien que yo no lo hice! —Aún así, la presión empezó a ponerla nerviosa, a un punto que sentía que cada acción le hacía ver culpable de alguna manera.

—¿Pensaste que sería fácil robarnos? ¡No eres la única lista aquí, para que sepas! —Courtney estaba bastante indignada, pero lo nerviosa que estaba Lindsay le hizo tener un mínimo de piedad para no sacar su navaja.— Normalmente a los ladrones los atamos a un poste de luz desnudos... Pero no tenemos postes de luz.

—¡Pero les juro que yo no lo hice! El otro día en el juego del escondite ví todo en la maleta de Sierra y...

—¿Ah si? ¿Y por qué no dijiste nada? —Sierra sonrió por el pánico en el rostro de la jóven, quien lentamente se acercaba a la puerta, pareciendo un pequeño conejo asustado.

—Es que si lo decía... —Lindsay sentía que a ese punto no le salían las palabras de la boca, aterrada.— Iba a decírselos, pero...

—Toda la evidencia apunta a ti, ¿Qué crees que voy a pensar? —Katie se acercó nuevamente a la maleta, abriendo esta y exponiendo tantas cosas robadas que Lindsay siquiera se explicaba como había logrado guardar.

Con todas las miradas sobre ella, Lindsay terminó por darse cuenta que estaba entre la espada y la pared, entrando en pánico.

—Yo no hice eso... —Suspiró por última vez antes de salir de la cabaña, sintiendo que se ahogaba por la falta de aire que le provocó aquello.— Esto es malo...

Se quedó pensando unos momentos, sabía que podía contar con DJ, también con Heather y Alejandro si les explicaba todo, pero seguía sin ser suficiente, por lo que recurrir a pedir ayuda seria inevitable.

Fue entonces que vió a lo lejos a Duncan, recordando la obvia alianza que este tenía con Courtney y Harold.

Estaba segura de que esa mujer no la quería ya en la competencia luego de todo, pero había notado la particular rivalidad que tenía con este joven, así que supuso que no sería tan descabellado pensar que pudieran votar por distintas personas, y quizá hasta lograba convencer a Harold de apoyarle.

¿Qué tenía que perder a ese punto?

—Uh, Duncan... ¿Podemos hablar? —Se acercó algo agitada aún, relajandose un poco cuando este asintió calmadamente.— Verás, acaba de haber un pequeño problema en la cabaña, ahora todos piensan que soy una ladrona y...

—No suena a algo pequeño desde que mencionas la palabra ladrona. —Interrumpió, algo sorprendido del inicio de aquella historia.—  Disculpa, continúa...

—Se que es difícil de creer, pero en resúmen, Sierra a estado robando nuestras cosas y me inculpó poniendo todo en mi maleta...

—¿Honestamente? No suena complicado de creer. —En el inicio de la competencia, Duncan lo hubiera encontrado una excusa ridícula, pero a ese punto y viendo las estrategias que su propio equipo llevaba, no le parecía descabellado.— Entonces, ¿Quieres que vote por Sierra?

—¡Si, por favor! —Suplicó, sintiendo su pecho más liviano cuando lo vió asentir.— Y si pudieras convencer a Harold... Podría pedírselo yo, pero... —No encontraba la manera de explicar que Alejandro y DJ no le intimidaban ya, pero Harold le parecía completamente aterrador pasara lo que pasara.

—Está bien, no te preocupes, creo que puedo convencerlo. —O eso esperaba, alentandose a él mismo mentalmente.

—¡Muchas gracias, en serio!

Luego de que la chica se retiró a hablar con sus dos amigos, Duncan fue a buscar a Harold, dando la coincidencia de que justamente Courtney tambien parecía acabar de encontrarlo, pues ambos le llamaron al mismo tiempo.

—¿Qué tienen en mente ustedes dos? —Harold tenía una sonrisa como siempre en sus labios, curioso de lo que parecía afligir a sus aliados en ese momento.

—¡Pecas, tenemos que votar por Lindsay!

—Harold, hay que sacar a Sierra.

Ambos hablaron nuevamente al mismo tiempo, terminando por mirarse luego de ello, entre descolocados y molestos por la posición del otro, empezando a discutir y defender sus respectivos puntos.

Harold se quedó mirando, cruzándose de brazos y preguntándose cuando sería el día que esos dos pudiera ponerse de acuerdo en algo.

Sin embargo ignoró aquellos argumentos, solo le pensando en cual de las dos mujeres era la mayor amenaza para sacarla en esa oportunidad.

Realmente trabajar con ese par se tornaba imposible en ocasiones.

***

— Sierra es fuerte, pero no tiene tanto cerebro, en cambio Lindsay es débil, pero muy lista... —Harold meditó, honestamente, ambas eran buenas opciones para votar a ese punto de la competencia.— No estoy seguro de quien se vaya, sería divertido ver la cabeza calva de Sierra un tiempo más, pero Lindsay...

***

—Quiero votar por Sierra, pero Katie me ha estado diciendo que vote por Lindsay y honestamente no entiendo nada de lo que está sucediendo. —Noah siquiera había entendido que se suponía que pasó en todo ese rato, encogiéndose de hombros.— Al menos no me voy yo.

***

—Si Sierra se va hoy, le daré más oportunidades al trabajo en equipo... —DJ estaba algo agotado luego de aquel día, pero al menos, no podía negar que había sido interesante.— Si se queda, supongo que tendré que aprender a hacer explosivos yo mismo...

***

La tensión alrededor de la fogata se hizo presente como siempre, con algunos notablemente más preocupados que otros, pero nadie indiferente al final del día.

Quien más lo disfrutaba era Hatchet, jugando con los malvaviscos de la bandeja mientras se aseguraba de ponerlos nerviosos a cada uno de ellos con la mirada.

—Ya saben cómo va esto, ustedes votan, uno se va, ¿Para que hacer esto más largo? —Tomó el primer malvavisco, esperando un par de segundos antes de empezar a lanzarlos uno por uno a los participantes.— Courtney, Heather, Harold, Duncan, Alejandro, Noah, Katie...

Cómo era de esperarse, Lindsay y Sierra terminaron siendo protagonistas del momento más tenso de la noche, dedicándose una rápida mirada mientras suplicaban por recibir el último malvavisco.

—Lindsay, tuviste me contaron que tuviste una acusación bastante fuerte el día de hoy, y Sierra, pareces despertar sospechas de igual forma, y de paso tienes una calva muy fea... — Dejó pasar un momento, antes de finalmente lanzar aquel último dulce.— Lindsay, te salvaste esta vez, apenas, Sierra, es momento de que hagas tus maletas, eres la eliminada de esta noche.

—¡Todos ustedes son unos hijos de puta! —Sierra se levantó de golpe, pateando el tronco donde estaba sentada y disimulando luego a duras penas que eso le dolió.— Bueno, nadie quiere estar en este programa de mierda de todos modos, ¿¡Por qué querrían!? Es una perdida de tiempo... —Gruñó mientras se retiraba a hacer sus maletas, completamente enojada.

Lindsay a pesar del alivio inicial, aún sentía las desconfiadas miradas sobre ella, haciéndole saber que no podría quedarse tranquila tan fácil.

Todos se quedaron en silencio, hasta que escucharon cosas rompiendose en la cabaña de las mujeres, con varias levantándose a intervenir antes de que destruyera todo.

Cómo era de esperarse, la partida de Sierra fue presenciada por gran parte de los campistas, algunos riendo, otros aliviados, y otros pensando que era una injusticia dada a la situación.

Aún así y fuera de esas posturas, la partida de esta misma, daba a pensar que las cosas podrían ser más tranquilas.

Grave error.

—Ugh, este programa es estúpido, es más, me hacen un favor al sacarme. Al menos las cosas quedaron tensas para esas idiotas... —Sierra comentó ya desde el bote, aprovechando que nadie le escuchaba.— No pude recuperar el suéter de Cody luego de lo que pasó en la tarde, pero al menos pude llevarme otras cosas... Su culpa por no revisarme bien antes de irme. —Se acomodó el sujetador, dónde había guardado varias pertenencias pequeñas.— Las venderé en linea luego.

Cada vez menos concursantes quedan presentes en el juego, y con la final cada vez más cerca, también las tensiones se vuelven cada vez más complicadas de soportar, ¿Qué nuevos problemas tendrán que enfrentar los campistas? ¿A qué clase de retorcidos desafíos serán sometidos? ¿Courtney y Duncan competirán aún más luego de esa votación? ¿Lindsay podrá volver a desviar los focos de atención? ¿Tendrá Sierra una compensación por la perdida de su cabello? Definitivamente no, pero para el resto y mucho más solo queda seguir sintonizando.

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