Felix sonreía mientras HyunJin lo besaba en cortos lapsos, llevaban así cerca de media hora, sentados uno frente al otro en la inmensa cama, a la vez que se acariciaban.

—Bebé, ¿Tomaste un baño antes de que llegara? —Felix embriagado por las caricias del castaño se limitó a asentir —¿Y SeungMin? —Volvió a asentir.

—Sí, ambos. —Respondió, entonces HyunJin sonrió ladino.

Comenzó a pasear una de sus manos por las piernas del pecoso hasta llegar debajo del short que Felix traía puesto, haciendo a este soltar un jadeo, para después continuar con su otra mano, adentrándola en la camisa contraria palpando el níveo torso.

—HyunJinnie... —Murmuró el menor, a la vez que HyunJin retiraba lentamente la mano que se encontraba bajo su camisa y tomaba su barbilla para besarlo otra vez  —¿Vamos a...? —Sus palabras se ahogaron en un gemido cuando sintió cómo el mayor hacía un poco de presión sobre su entrepierna, haciéndole perder el aire.

—Eso depende, mi amor... —Susurró —¿Eso quieres? —HyunJin soltó una pequeña risita cuando Felix lo abrazó por el cuello —Creo que eso es un sí, ¿No es así? —Dijo roncamente cerca de su oído, mordiendo el lóbulo de su oreja en el camino.

Aunque HyunJin estaba a punto de retirar la camisa de su bebé, no pudo, no cuando escuchó a SeungMin llorar fuertemente y Felix corrió lejos de sus brazos.

HyunJin mordió su labio inferior sintiendo su pantalón apretar dolorosamente.

Vio a Felix casi caerse en el piso de madera, haciendo que le dé un mini infarto, y a pesar de la interrupción de la excitante situación corrió hacia su esposo.

Cuando llegaron al cuarto de al lado, encontraron a su hijo sollozando con sus manos hechas puños y la carita roja. Felix no perdió tiempo y lastimándose un dedo en el proceso, bajó los barrotes de la cuna para sacar a SeungMin, atrayéndolo a sus brazos.

—Ya, Hyun-bebé... —Le dijo, mientras HyunJin se acercaba a ellos.

—Mi amor, ¿Te lastimaste? —Felix no contestó de inmediato, estaba concentrado en dar caricias a la espalda de su hijo. SeungMin, al sentir aquello, cayó dormido otra vez, sintiéndose cómodo en los brazos de su mamá.

—No fue nada —Abultó sus labios cuando HyunJin le quitó con suavidad a SeungMin de sus brazos —. ¡No lo cargues así! —Exclamó, pero no lo suficientemente alto como para despertar a su hijo, observando a HyunJin sostener a su bebé con una sola mano.

El mayor quiso reír por aquello, mas no lo hizo.

—Confía en mí, bebé, no pasa nada... Ahora. —Tomó con suavidad la mano de su esposo llevándola a sus labios y besándola, para después atraer a un sorprendido Felix a su pecho en un abrazo.

—¿Sabes? —Comenzó —Me encanta tenerlos a ambos entre mis brazos —Sonrió —. Ustedes son mi más grande tesoro, lo sabes, ¿Verdad, bebé?

Felix metió sus pequeñas manos debajo de la camisa holgada que HyunJin llevaba puesta, haciendo contacto con la tersa piel del más alto, sintiendo el calor que esta emanaba.

—Lo sé, Hyun-Hyun bebé creo que también lo sabe, debe saberlo, ¿Cierto? —HyunJin suspiró contento susurrando un "Sí" como respuesta.

Sintió a SeungMin removerse un poco queriendo llorar, abriendo su boquita mostrando así sus rosadas encías sin dientes aún. Felix volvió a tomar a su bebé y al ver que este buscaba algo con su boca entendieron.

—Tiene hambre, Jinnie. —Avisó, viendo a HyunJin salir del cuarto en busca, suponía, del biberón de su hijo.

—Ya tomarás tu biberón, Minnie. —Le sonrió a su hijo, viendo cómo este se calmaba un poco y lo observaba fijamente, como si lo estuviese analizando, o quedando embobado. No era la primera vez que SeungMin lo hacía, a decir verdad, él solía mirar mucho, ya sean luces brillantes queriendo ir hacia ellas o cualquier cosa que se moviera, pero tal parecía que a Felix era lo que más le gustaba observar.

HyunJin regresó con la leche tibia en un biberón y se dispuso a dársela, sin embargo, SeungMin comenzó a llorar nuevamente, hasta que su llanto cesó cuando Felix lo cargó otra vez. HyunJin se sintió herido.

«Mi bebé pequeño me rechazó por mi bebé más grande».

Ah, pobre HyunJin.

Cuando SeungMin se durmió, pudieron apreciar cómo este se había aferrado a la camisa de Felix, haciendo al mismo sonreír. Ambos estaban sobre la cama, HyunJin abrazaba a su esposo por detrás, poniendo su barbilla en el hombro del menor para así los dos poder observar a su hijo, sin duda era uno de los instantes que más amaba HyunJin después de un día de trabajo.

Estar con sus dos tesoros.

에이브릴🌹