◤The Walking Red◢

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Zombies y humanos se miraron. Tan sólo estaban separados por unos pocos metros, pero nadie movía ni un músculo. Elle ya estaba detrás de Pok, lista para usarlo de escudo humano en cuanto la cosa se pusiera fea.

Pero nada pasó. ¿Y por qué? Bueno, los chicos no podían apartar la mirada del zombie al que todos los demás sostenían en un trono sobre sus cabezas. Se trataba de una niña de no más de 10 años, de pelo largo y oscuro muy enredado y con el único ojo que tenía aún en la cuenca de iris marrón. Sobre su cabello se sostenía una pringosa corona de color rosita decorada con tres ojos que hizo que a Elle le entraran arcadas.

Con cuidado, los zombies bajaron a la que parecía ser su reina.

—¡¡¿RED?!! —exclamó Gem, llevándose las manos a la cara.

Su hermana sonrió y asintió.

—Hola hermanita —dijo.

—¿Los zombies pueden hablar? —preguntó Pok, apuntando con nervio a la niña con su lanzallamas.

—No, parece que soy la única... Por eso me han elegido de reina. Esto mola mucho. No sabéis lo ricos que están los cerebros.

Fugui tragó saliva.

—¿Y tu madre? —preguntó.

Red dio un par de palmadas, y entre la multitud de zombies apareció la madre de Gem y Red, con la piel verde y manchada de diversas sustancias. Hizo un par de ruidos que sonaron a gruñidos y se inclinó.

—Es mi guardaespaldas —explicó Red, con orgullo. Entonces, se paró a mirar con detenimiento a toda la gente presente—. Vaya, si estáis todo el grupito... Gem, Elle, Hamu, Pok, Muto, Jay y... —Su mirada se paró en Sully, quien empezó a temblar. La chica sonrió con malicia— Andaaa...

—Ay, nonono... —murmuró el más alto, aferrándose a su hacha-escopeta— NononONONO. GEM, CONTROLA A TU HERMANA ZOMBIE.

Red rio fuertemente durante unos instantes. Luego miró a Gem.

—Igual de tonto que antes. Nunca entenderé cómo pudiste hacerte su amiga...

La mayor de las hermanas se encogió de hombros.

—No, yo tampoco... —Antes de que Sully pudiera contestar, Gem señaló la cara de Red— ¿Qué ha pasado con tu ojo izquierdo, chiquilla?

Ella se llevó el dedo a la cuenca vacía, hurgando en ella y haciendo que todos esbozaran muecas de asco.

—Necesitaba un tercer ojo para mi corona. ¿No es preciosa?

—Qué asco... —murmuró Sully— Esto es incluso peor que... que... —De repente, pareció que una estúpida idea le había llegado a la cabeza— Que The Walking...

Sus compañeros parecieron ver sus intenciones, pues todos gritaron "¡¡NO!!" a la vez. Pero fue tarde, pues la última palabra ya salía de su boca:

—Que The Walking Red.

Se hizo el silencio. Red ladeó la cabeza, y con expresión seria señaló a Sully.

Los 100 zombies se lanzaron sobre el grupo, que gritó. Estaban tan asustados que no tuvieron ni ocasión de usar sus armas. Excepto Elle, que fue capaz de empujar a Fugui contra los zombies. Él chilló e intentó atacarlos, pero era tarde: ya le habían mordido.

—¡El chocolate! —exclamó justo antes de transformarse— ¡¡Usad el chocolate!!

—Ups... —dijo Elle.

Gem tiró del brazo de su amiga para apartarla de los zombies, y vio, al otro lado de la multitud, a Sully, Muto y Jay intentando defenderse. Los zombies iban sobre todo a por este primero, debido a las instrucciones de Red, que también intentaba atacarlo.

—Me voy a cagar en... —Gem miró a Hamu, Pok y Elle— ¡Id hacia La Ensaimada! ¡Nos reuniremos allí los siete!

Los tres obedecieron y salieron corriendo por donde no había zombies. Gem miró a su hermana y gritó:

—¡Red, deja a Sully en paz!

—NOOO.

—AGH.

Gem empezó a correr a través de los monstruos, atacando con su súper útil cortaúñas. Consiguió atravesar el pasillo de bichejos gracias a la potente arma, quedando así junto a sus amigos.

—¿¡Qué hacéis que no corréis!? —gritó, atacando con su cortaúñas— ¡Vamos!

—¿¡Hacia dónde!? —preguntó Jay.

Ella señaló con el mentón hacia la dirección contraria en la que se habían ido los otros tres.

—¡Id hacia allá y esperadme enfrente de la papelería! ¡Luego tenemos que ir a La Ensaimada!

Ellos se miraron y asintieron. Sin pensárselo dos veces, empezaron a correr hacia donde se les había ordenado.

—Pero mira que soy imbécil, ¡casi muero por culpa de ese idiota...! —gruñó, refiriéndose a Sully, tras deshacerse de los zombies y ser capaz de salir corriendo tras sus amigos— ¡Odiaré eternamente el día en que te conocí!

Se reunió con los demás frente a la papelería. Allí, Muto le pegó al escaparate con su espada y lograron colarse dentro.

—Decidme que tenéis el chocolate que mi padre os dio... —suspiró Gem, jadeando— Tengo hambre...

—Muto nos lo quitó y empezó a tirárselo a los zombies al tuntún. No sirvió de nada porque al comérselo volvían a morderlos... —dijo Jay, de brazos cruzados.

—Yo se lo di todo a Elle para que se sintiera más segura... —sollozó la chica— Maldita sea...

—¿Cómo vamos a llegar ahora a La Ensaimada? —preguntó Sully— Está todo plagado de zombies que quieren matarme por culpa de tu hermana.

—Sah —afirmó Muto.

Gem entornó los ojos y miró mal al más alto.

—Ojalá lo logren —susurró.

—Bueno, bueno, las demostraciones de odio dejémoslas para más tarde, cuando el apocalipsis haya acabado y todo eso —pidió Jay—. Ahora tenemos que pensar en cómo demonios reunirnos con los demás... Como les pase algo...

—Miedo me dan —dijo Muto, sentándose en el suelo a la vez que Gem—. Llevan a Pok.

—Nosotros te llevamos a ti, cacho imbécil —respondió la chica.

Él asintió frenéticamente con la cabeza.

—Llevas razón.

—Tampoco podemos estar mucho tiempo aquí... Pueden venir cuando menos lo esperemos —reflexionó Jay.

—Pues algo tenemos que hacer. Tenemos que encontrar a los demás —dijo Sully.

—Podemos esperar a que se harten de buscar a Sully. Conozco a mi hermana, terminará por aburrirse.

—¿Segura? —preguntó Muto, alzando las cejas— No sé yo...

Gem asintió con decisión.

—Sí, pero antes de nada... Creo que voy a descansar un ratito...

Tomó un libro cualquiera que le pillaba cerca y comenzó a leer ante la confusa mirada de sus compañeros.

—¿En serio, Gem? —preguntó Jay.

—Sep.

Los tres chicos suspiraron.

—Hagamos mientras tanto algo... —dijo Jay— Mucho que ha hecho la chavala para salvarlos la vida.

—Sah —dijeron a la vez Sully y Muto.

Así, todos menos Gem, comenzaron a moverse por la papelería, preparando cosas para llevar a cabo su siguiente plan.

PatataLaVenganza (Elle), ahora mi padre quiere matarte por

 lanzarlo contra los zombies. 

Ve con cuidado.