Los eventos posteriores fueron confusos, por decir poco.

Lance aun no tenía concepto del tiempo, y todo era bastante confuso, así que era difícil distinguir si estaba siendo cargado o arrastrado o hasta volando en algún punto. Había un montón de voces, revueltas, familiares y desconocidas - Keith, él siempre estaba ahí, luego Shiro, cercano y preocupado, después una aguda voz femenina y algunas ásperas masculina. Una vez, Lance creyó oír a Lotor gritando enfurecido. Aquello no era tan descabellado, pero afortunadamente aquel sonido no duro demasiado.

Luego estuvo inconsciente por un rato. Cuando despertó, estaba sobre algo suave y horizontal...Cama, cierto, así se llamaban esas cosas. Había un circulo de rostros a su alrededor. Lance los observo desorientado. Alguien poso una mano protectoramente sobre su frente - Hunk. Lance quería saludarlo, decir, te extrañe, pero su lengua estaba demasiado pesada y seca en su boca.

"esta sudoroso, y demasiado frio," dijo Hunk, su voz temblaba. "tenemos que llevarlo a un hospital y conseguirle una transfusión, inmediatamente."

La habitación estallo en un coro de objeciones. "¡No!" exclamo alguien, uno de los extraños...un vampiro, reconoció Lance, con ojos angostos y cejas pobladas. "No podemos. ¿Qué pensaran los doctores humanos cuando vean dos puntos en su cuello y severa pérdida de sangre?"

"¿un ataque de animal?" otro vampiro, una chica con largo cabello rubio, sugirió burlonamente. "¿o un asesino serial extraño?"

"No, harán preguntas; preguntas que no podemos responder fácilmente," dijo Shiro, frunciendo el ceño y cruzando los brazos.

"¡de otro modo morirá!" Hunk casi grito. "¿Eso quieres? ¿Simplemente lo dejaras morir?"

"¡Nadie dejara que Lance muera!" Keith exclamó.

"recuérdame quien fue el que lo mordió," Hunk respondió.

"¡chicos!" grito Pidge, llevando a todos al silencio. "Discutir no ayudara a nadie. No podemos llevar a Lance al hospital, tienen razón. No solo los doctores sospecharan, tomara demasiado tiempo, y no deberíamos intentar moverlo más de lo necesario."

"¿entonces cuál es tu increíble solución?" pregunto Hunk, y sonaba algo agresivo, pero más que nada desesperado y asustado.

"Se queda aquí, Shiro y Keith lo cuidaran," dijo Pidge. "podemos conseguir suministros médicos, comida, bolsas de sangre del hospital, lo que sea que necesiten, pero estará más seguro aquí -"

"¡¿seguro?!" Hunk levanto las manos. "¡No estará seguro con los vampiros, Pidge! Si algo aprendimos aquí, ¡debería ser eso!"

"Esta más seguro aquí que con los Galra o nosotros," contradijo Pidge. "Los Galra estarán molestos. Intentaran llevar a Lance de vuelta. Y no se tú, pero creo que Lance estará más seguro en una casa defendida por fuerzas rebeldes de vampiros, con dos que son nuestros amigos, y los cuales se preocupan pos su bienestar."

"Cuidaremos de él," dijo Shiro. "Por supuesto que lo haremos. Tienes razón, esto fue en parte culpa nuestra, Hunk, y parece correcto que tomemos la responsabilidad de la recuperación de Lance."

Hunk suspiro en derrota. "estaré cuidándolo," advirtió. "y será mejor que no haya otra marca en él, ¿escucharon?"

"Está a salvo aquí," dijo Shiro, firmemente. "Te damos nuestra palabra. No será dañado por nosotros."

"Confió en ustedes dos," Pidge acepto, "pero sin ofender, el resto de ustedes son básicamente desconocidos."

"comprendo," dijo el sombrío vampiro masculino con la larga trenza blanca y la cicatriz sobre su ojo derecho. "No es nuestro territorio, después de todo. Mantendremos nuestra distancia si es lo que deseas, Shiro."

"Si, Kolivan," Shiro asintió, "Creo que sería lo mejor. Desde ahora, ninguno de ustedes entre a este piso. Y para la tranquilidad de su mente," gesticulo hacia Pidge y Hunk, "Estaremos Keith o yo cuidando la habitación de Lance en todo momento. ¿les parece un acuerdo aceptable?"

"Si," dijo Pidge.

"Bien," Hunk dijo. "Pero aun asi lo visitare."

"sería imprudente de tu parte venir al bosque desacompañado," dijo uno de los vampiros parado junto a Kolivan, tenía impresionantes patillas, una buena barba, y largas orejas puntiagudas.

"¿estas ofreciéndote a escoltar a los humanos, Thace?" Pregunto Kolivan.

Thace inclino la cabeza. "Claro, sí."

"También yo," dijo el de cejas pobladas. Miro al vampiro junto a él, quien era el más alto y fornido de todos, con rostro curiosamente escondido por una amplia capucha, agachando el rostro. "¿Antok, nos acompañarías?"

El alto vampiro gruño en afirmación.

"¿Rolo, Nyma, he de suponer que no ofrecen apoyo?" Thace le pregunto al par de vampiros de pie alejados del resto, a la chica rubia y al temperamental chico con el desordenado cabello blanco.

Nyma levanto la barbilla, cruzando los brazos. "Lucharemos contra los Galra, es todo," declaro. "No vinimos a ser niñeras."

"Significa, no gracias," Rolo añadió.

"Entendido," suspiro Shiro.

Un repentino destello de luz lleno la habitación, y todos se giraron hacia la ventana - era de noche, pero había un leve, brillo desvaneciéndose fuera. "Luxia y Florona deben haber activado la barrera protectora," Murmuro Keith. "supongo que sus sellos funcionan después de todo."

"Mientras mantengan alejados a los Galra," dijo Kolivan.

Lance estaba teniendo problemas manteniendo los ojos abiertos, una oleada de mareo y nauseas lo invadieron. Se quejó, retorciéndose en la cama con molestia, e inmediatamente todos se fijaron en él. "Deberíamos irnos," decidió Kolivan, y camino hacia la puerta, mientras los otros vampiros seguían sus pasos.

"¿podrían salir ustedes un segundo, también?" Pregunto Pidge a Keith y a Shiro. "nosotros...necesitamos un minuto con Lance. Rápido, antes de irnos al hospital."

"Por supuesto," dijo Shiro antes de que Keith pudiera protestar, y los dos salieron también.

Tan pronto la puerta se cerró, Hunk simplemente se abalanzo hacia Lance, lagrimas se formaban en sus ojos mientras intentaba levantar a Lance contra una almohada para ayudarlo a respirar. Pidge colapso a un lado de la cama, su labio inferior temblaba. Se acercó y tomo la mano de Lance entre las suyas, y era un gesto tan inesperadamente afectuoso viniendo de parte de la agresiva Pidge que creo en él un breve momento de lucidez.

"Lo lamento tanto, Lance," Pidge susurro, quitándose los lentes de la cara y tallando furiosamente sus ojos. "Yo - solo quería descubrir que había en el bosque, pero no pensé...nunca creí que fuera a ser real. Nunca creí que realmente saldrías herido y lamento alguna vez haber bromeado sobre desear que lo estuvieras, yo -"

"está bien," Lance murmuro, con parpados pesados. "Vamos, no llores."

"No mueras, entonces," Pidge respondió desesperadamente. "¿bien? Tienes que quedarte con nosotros hasta que volvamos del hospital."

"Suena genial," Lance balbuceo.

Hunk no dijo nada, solo abrazo a Lance cuidadosamente, sus lágrimas caían sobre la ropa de Lance. Aun traía puesto la ropa de esclavo, reparo débilmente, pero estaba demasiado cansado para darle importancia. Lance palmeo la espalda de Hunk desorientado. "Shhh," murmuro.

"Estábamos tan asustados," Hunk sorbió. "Tan asustados de que...te dañaran. De no poder verte jamás."

Lance presiono un ligero y torpe beso en el rostro de Hunk. "Shhh," repitió, suavemente.

Pidge apretó su mano y Hunk le dio un último abrazo antes de apartarse. "Volveremos," Pidge prometió. "Espéranos, ¿sí?"

"Mmhm," Lance murmuro, girando la cara hacia la almohada y temblando. Estaba bastante seguro de que tenía fiebre de nuevo.

"Vamos," Hunk le dijo a Pidge, quien se limpió las lágrimas con la camiseta para marcharse con determinación.

Algunos minutos después, la puerta se abrió. Lance miro confuso. Shiro.

"Hola, Lance," dijo Shiro, usando una extraña, suave voz que Lance jamás le había escuchado usar. Casi como la voz que alguien usaría con un animal asustado. pero Lance no tenía miedo, y le sonrió ligeramente, sin reunir la fuerza para responder apropiadamente.

El ceño de Shiro se intensifico mientras se hincaba a orillas de la cama y levantaba algo frio hacia los labios de Lance -un vaso de agua. "Necesitas beberlo," dijo Shiro con el mismo tono. "Lentamente. Si, asi es, bien."

Lance no tenía la coordinación suficiente para tragar toda el agua, asi que un poco resbalo por su mentón, pero Shiro solo hizo sonidos alentadores y la limpio con su manga. El agua le ayudo a calmar su mareo, pero estaba mareado de nuevo cuando Shiro inesperadamente levanto a Lance de la cama en sus brazos. Lance no pudo hacer más que dejar escapar un pequeño grito de sorpresa, parpadeando confusamente hacia él. Shiro lo miro de vuelta, con expresión preocupada y seria. "Aun estas cubierto de sangre," Shiro le dijo suavemente, calmado. "vamos a limpiarte, ¿sí?"

"Mhm," Lance murmuro, hundiéndose inconscientemente en el pecho de Shiro. Shiro lo llevaba fuera del cuarto, por el pasillo hacia el baño. Había un nuevo cambio de ropa en el perchero de la toalla. Lance apenas lo entendió, y casi no noto cuando Shiro cerró la puerta tras él, posando gentilmente a Lance en la bañera.

Lance estaba triste de haber sido sacado de la suave cama, pero probablemente podría dormirse ahí también.

Comenzó a cerrar los ojos y Shiro comenzó a quitar la ropa de Lance.

Lance abrió los ojos de golpe. "Queee -"

"Tranquilo," dijo Shiro, quitando los restos sangrientos de la ropa de esclavo del cuerpo de Lance. "Solo...quédate quieto."

Lance lo miro y no movió ni un musculo mientras sentía el aire helado. Aun sin comprender, no hasta que estuvo desnudo y Shiro encendió la regadera.

"Oh," Lance dijo, sintiéndose estúpido mientras la bañera comenzaba a llenarse de agua tibia, y también, "Oh," porque maldición, se sentía muy bien, lo necesitaba.

Shiro le dirigió una pequeña, sonrisa ladeada. "¿está mejor, ves?"

Lance asintió y dejo que sus ojos se cerraran de nuevo, relajándose en el agua y dejando la cabeza colgando contra el costado de la tina. Se tensó un poco cuando Shiro paso una esponja sobre su brazo, tallando las marcas residuales de sangre y la suciedad de la celda, pero Shiro era cuidadoso, lento y suficientemente metódico como para que Lance realmente comenzara a dormirse. Con los ojos cerrados, era fácil fingir que la mano de Shiro solo era agua, cálidas olas contra su piel. Distraídamente, dejo que Shiro quitara la venda de su brazo, limpiando la herida y poniendo alguna clase de bálsamo sobre el antes de poner una gaza nueva.

Cuando Shiro termino de limpiarlo, lavo el cabello de Lance, y eso hizo difícil ignorar su toque y lo injustamente bien que se sentía. Lance se recargo cansado en él, suspirando felizmente cuando las uñas de Shiro rasparon sobre su cráneo. Shiro rio, aunque sonaba forzado. Lance abrió los ojos después de que Shiro enjuagara el shampoo, y no estaba listo para ver al vampiro tan cerca, su amplia silueta tapaba la luz fluorescente y cubría a Lance en sombra, haciendo el agua manchada con sangre aún más oscura.

Lance trago; con la garganta seca como el desierto y labios agrietados. "¿Dónde está Keith?" dijo.

La expresión de Shiro cambio y retrocedió imperceptiblemente. "Esta...descansando," respondió Shiro, evasivamente. Cuando Lance miro sospechoso, añadió, "Keith está bastante abatido, Lance. No sabía si querrías verlo."

Lance frunció el ceño. "si quiero," murmuro. "claro que sí."

"Recuerdas lo que sucedió," Shiro dijo cauteloso, observando de cerca, "¿cierto?"

"Si," Murmuro Lance. "Le pedí que me mordiera."

Shiro parpadeo, lento e imperturbable. "Si. Y lo hizo."

La boca de Lance se torció en una pequeña sonrisa. "Era un murciélago."

Shiro ladeo la cabeza. "el poder en tu sangre acelero su primera transformación." suspiro. "Perdiste mucha sangre, Lance. Keith pudo haberte matado."

"No," Lance contradijo débilmente. "sé que no."

"Lance," Shiro dijo cansado, sacudiendo la cabeza y pasando una mano por su cabello. Desconcertado, Lance noto como sus manos manchadas dejaba un tinte rosa en su mechón blanco. "Tienes mucha suerte de estar vivo ahora. Vamos, hay que secarte y vestirte para que puedas volver a la cama."

Lance dejo que Shiro lo arrastrara fuera de la tina, tenía las rodillas tan débiles que no podía pararse solo sin ser invadido por horribles olas de vértigo. "te tengo," Shiro murmuro, sosteniéndolo derecho y ayudándolo a secarse lo suficiente para vestirse. Eran unos pijamas simples, y Lance estaba bastante seguro de que eran de Keith - descoloridos pantalones rojos de chándal y una holgada camiseta negra que colgaba de su cuerpo, haciéndolo sentirse incluso más delgado. Débil, como un palillo a punto de romperse en cuanto Shiro lo levanto de nuevo, llevándolo de vuelta a la habitación.

Lance protesto débilmente. "Aw, vamos, no de nuevo -"

"Silencio," Shiro respondió, su voz momentáneamente perdió su suavidad, adquiriendo un tono fuerte, algo brusco que tomo a Lance desprevenido. El tembló y Shiro lo noto, bajándolo en la cama y apartándose apenado. "Yo...debería dejarte descansar."

Se veía tan triste. Lance se puso las sabanas encima, girándose a un costado y espiando a Shiro, quien seguía de pie ahí, dubitativo. El cansancio y confusión comenzaban a regresar, y tal vez por eso fue que Lance dijo, "Conocí a Haggar."

Shiro se congelo, empuña las manos a su costado. Observo a Lance con ojos anchos. "¿Qué?"

"Ella me dijo," murmuro Lance. "'sobre ti. El campeón."

Shiro retrocedió, el horror reflejado en cada línea de su rostro. Dio un paso atrás. "Yo - yo -"

"Está bien," dijo Lance, confundido, intentando levantarse, pero fallando totalmente.

"No," Shiro susurro, "no, no lo esta."

"Asi que..." El cerebro de Lance trabajo lento. "¿Entonces ella dijo, la verdad...sobre todo?"

"Yo no," dijo Shiro, y se detuvo. "Deberíamos...hablar después. No ahora, Lance. No puedo...después."

Lance se encogió de hombros y bostezo. "Bien. Adiós."

"Buenas noches, Lance," Shiro se volteo, y salió rápidamente, cerrando la puerta demasiado fuerte.

*

Lance se despertó por un dolor agudo en su antebrazo y voces murmurando.

Pidge: "Es epoetina, la usan para los pacientes anémicos y gente que no puede recibir transfusiones. Incremente la producción de glóbulos rojos."

Shiro: "¿de dónde sacaste esto, dices?"

Pidge: "mi papá tiene conexiones, dejémoslo asi."

Lance siseo cuando sacaron la aguja. Alguien - probablemente Hunk - puso una bandita sobre la marca de inyección. Otro vaso de agua fue llevado a su boca, y Lance bebió ansiosamente.

"Hay galletas, jugo y fruta junto a otras cosas en la cocina," Hunk le dijo a Shiro. "Keith está guardando todo; tienes que hacer que Lance las coma en algún momento para que tenga más hierro y vitaminas en su sistema."

"¿cambiaron sus vendajes?" Pidge pregunto, sonando sorprendida.

"si," dijo Shiro. "también hice un ungüento que debería ayudar a acelerar la curación y prevenir dolor y cicatrices."

"no parece que el de su cuello no vaya a dejar cicatriz," Hunk murmuro.

"habrá que esperar y verlo, pero estoy seguro de que funcionara," respondió Shiro. "esta ciertamente más estable ahora."

"lo está," Hunk asintió a regañadientes. "supongo que sabes lo que haces a pesar de todo."

"Algo asi," dijo Shiro.

"Keith sigue manteniendo su distancia," señalo Pidge. "¿Él está bien?"

"¿estas preguntando si quien hizo que Lance casi muriera está bien?!" Hunk exclamo.

"No fue su culpa," Lance balbuceo.

Los tres lo miraron sorprendidos. "No fue su culpa," Lance repitió. "Yo hice que lo hiciera."

"¿Cómo haces que un vampiro te muerda?" Hunk pregunto, dudoso.

"Puse su cara contra mi cuello," Lance murmuro. "Le dije que no tenía otra opción."

"Realmente no la tenía," dijo Pidge. "Lo estaban matando de hambre, Hunk."

Hunk continuaba frunciendo el ceño, pero suspiro y cedió. "¿Cómo te sientes, Lance?"

Lance bostezo. "Cansado. Algo frio."

"Traeré otra manta," dijo Shiro, y salió al corredor rápidamente.

"si es ansioso," Pidge remarco.

Lance observo culpa la puerta. Campeón. Probablemente no debería haber dicho eso, era demasiado tarde ya. Suspiro y froto sus ojos. "¿A dónde fueron todos los otros vampiros?"

"Oh, cierto," dijo Hunk. "creo que no te los presentamos aún. Se llaman 'espada de Marmora', son una banda rebelde de muy poderosos vampiros del norte. Shiro conoció a Ulaz cuando escapo del cuartel de Lotor, y se ha mantenido en contacto con él desde entonces. Kolivan es el líder, Antok es su guardia, Thace y Ulaz son tenientes o algo asi."

"Huh," Lance dijo. "¿ellos nos sacaron a Keith y a mí?"

"Sep," dijo Pidge. "Por eso tardaron una semana - Shiro estaba ganando aliados, aunque estaba listo para ir solo. Cosa que habría sido un suicidio, obviamente."

Shiro regreso con la manta. "Podría no haberlo sido," dijo. "podría haber sido mejor ir solo. Podría haber llegado a tiempo, antes de que..." suspiro y tiro la colcha en la cama. "Ciertos eventos podrían haberse evitado."

"No lo habrías logrado," Lance balbuceo.

Shiro cruzo los brazos y aparto la vista, tensando la mandíbula obstinadamente.

Hunk aclaro su garganta. "como sea, también están Rolo y Nyma, no son parte de la espada, son solitarios que viven cerca y tenían un asunto pendiente con los Galra. Florona y Luxia simplemente son agradables."

Shiro rodo los ojos. "Agradables, sí, pero solo porque quieren algo."

"¿A qué te refieres?" Hunk pregunto.

Shiro balanceo los pies. "Ah...pues, Luxia y Florona son únicas entre los vampiros porque son más sensibles a la energía y magia que la mayoría de nosotros. Las ayuda a canalizar su magia en sellos y amuletos mucho más fuertes que las pequeñas baratijas que yo hago. Según Luxia, la energía de Lance es particular -"

"Oh, no, nuh-uh," Hunk negó furiosamente, "¡no te atrevas a usar a Lance como carnada, aquí!"

Shiro lucia más que ofendido. "¿disculpa? ¡jamás haría tal cosa! Incluso les prometí que ninguno de los otros entraría siquiera en contacto con Lance, mucho menos morderlo. A lo que me refiero es que Luxia y Florona pueden beneficiarse simplemente estando cerca de Lance, asi de poderosa es su energía. Solo amplifica sus propios poderes, y no lastima a Lance de ninguna forma. Créanme, me asegure de eso totalmente."

"Maldición," Pidge murmuro, observando a Lance con ceño fruncido. "¿Por qué su energía es tan fuerte? ¿alguien tiene teorías? ¿Lance, hay algo que quieras decirnos?"

Lance se encogió de hombros e intento lucir inocente. "Es extraño," balbuceo. "No lo sé."

"Hm," dijo Pidge. "Tal vez deberíamos hacer pruebas cuando estés mejor."

"Tal vez," Lance murmuro.

"Oh, casi lo olvido," dijo Hunk, buscando en su bolsillo. "Esto se cayó de tu mochila en el asiento trasero de Azula...supuse que era tuyo porque tiene los colgantes de Keith, también." Saco el cristal con su cadena, y el corazón de Lance salto. Se estiro instintivamente, con manos expectantes, pero Hunk se lo quedo un segundo. "¿De dónde sacaste esta cosa, Lance? Se ve caro."

"Lo encontré en una tienda rara por ahí," dijo Lance, lo que técnicamente no era mentira. Le arrebato el collar a Hunk, con un extraño estremecimiento mientras lo hacía. Estaba tan absorto en tener el cristal de vuelta en las manos, que se perdió la confusa expresión desconcertada de Shiro cuando lo vio.

Lance paso el collar de nuevo por su cabeza, suspirando y recostándose en la almohada mientras el collar descansaba sobre su pecho, cálido y correcto. "Gracias," le dijo a Hunk, con parpados pesados de nuevo.

"Seguro," Hunk dijo, luciendo algo confundido también.

"Deberíamos dejar que Lance duerma," declaro Shiro. "Necesita todo el descanso que pueda obtener."

"Ha estado durmiendo como por un día," señalo Pidge.

"Necesita más descanso," Shiro insisto.

"Genial, bueno, cuando tengas ganas, Lance, deberías llamar a tu mamá," Pidge dijo.

Lance se congelo, abriendo los ojos alerta. "Oh, coño, carajo, ¡ella va a matarme!"

"Tu madre no te matara, Lance," Shiro le aseguro.

"Si, no te preocupes, mentimos en un par de llamadas y afortunadamente Hunk recordaba tu contraseña asi que pudimos responder sus mensajes, pero creo que se está dando cuenta," Pidge le dijo. "Aunque me alegra que no hayas muerto, porque sería más difícil de explicarle."

Shiro los miro de reojo. "Ha, ha," Lance gruño, presionando sus ojos con las manos.

"Aunque no ahora mismo," dijo Hunk, golpeando sus hombros gentilmente. "No te estreses, compañero. Concéntrate en mejorar."

Ansiedad y culpa golpearon duro contra su pecho, Lance sin decir nada las evadió y se hizo un ovillo, reuniendo las sabanas sobre él y su cabeza.

"supongo que es la señal para irnos," Pidge suspiro.

Lance intento no pensar en su madre, a más de quinientas millas, mordiéndose las uñas en ese hábito nervioso suyo mientras intentaba llamar a su hijo por quinta vez y solo obteniendo respuesta del buzón. Intento no pensar en que hubiera pasado si Shiro no los hubiera salvado o si...o si hubiera aceptado la 'oferta' de Lotor. Intento no pensar en los casos de personas desaparecidas y volantes con su rostro y la policía saliendo del bosque con ataúdes vacíos y -

El cristal zumbo contra su pecho, escondiendo su brillo con las sabanas, suave y reconfortante. Estas a salvo, parecía decirle. Estas vivo.

Lance se aferró a su luz, y durmió.

*

Se despertó sintiéndose más descansado que antes, la luz naranja de la tarde derramándose en la habitación, pero para su sorpresa, no estaba solo en la cama. Había alguien más, no acostado, recargado contra la cabecera, y acariciaba el cabello de Lance distraídamente, con toque ligero y titubeante. Se detuvo por completo cuando Lance abrió los ojos y se giró para encararlo, encontrándose mirando con sorpresa a Keith.

Por un momento solo observaron al otro, Lance sorprendido y feliz, y Keith totalmente mortificado.

"Hola," dijo Lance, sonriendo, y Keith cayo de la cama con un grito.

Lance parpadeo. "¿Keith?"

Keith se levantó con prisa y camino hacia la puerta lo más rápido posible.

"¡Keith!" Lance exclamo, su desesperación era dolorosamente obvia, invadiendo el cuarto. Keith detuvo sus pasos y se giró, aun con ojos ensanchados y apenado. "No te vayas," Lance imploro, suavemente. "Quédate, por favor."

"Lance..." Keith se giró casi por completo, hundiendo el ceño. "No pienso que-"

"Si," Lance dijo. "No pienses. Quédate."

Keith se mordió el labio, inseguro, y se giró totalmente para apresurarse a la puerta.

"Keith," Lance susurro tristemente, deprimido, un nudo se formó en su garganta. Enterró la cara en las almohadas, intentando controlar las lágrimas de frustración y rechazo. Claro que era inevitable, pero, Dios, Lance había esperado...deseado, tan, tan desesperadamente, y espera que quizás por querer tanto algo, podría tenerlo.

Pero por supuesto que asi no funcionaban las cosas. No podía tener a Keith. No podía tener a ninguno de ellos, y era tan estúpido de creer lo contrario.

La puerta se abrió nuevamente. Lance se sentó demasiado rápido, y parpadeo desorientado ante el imposible hecho de Keith regresando al cuarto, cerrando la puerta cuidadosamente y acercándose a la cama con un par de cajas de jugo y barras de granola en las manos. Lance lo miro extrañado mientras se sentaba a orillas de la cama y sin decir nada le tendía la caja de jugo, poniendo lo demás en la mesita de noche.

Lance tomo el jugo y hundió la pajilla por arriba, tomando pequeños sorbos, la azúcar lo despertó un poco. Keith mantuvo la cabeza agachada; evadiendo la mirada de Lance hasta que él puso el jugo medio vacío en la mesita de noche y puso la mano sobre su rodilla. "Mírame," Lance murmuro, con mas suplica que demanda, y Keith obedeció, con cejas unidad y boca torcida.

"te dije que lo hicieras, Keith," Lance dijo.

Keith inhalo entrecortadamente. "no debiste hacerlo."

"pero lo hice," dijo Lance. "Y me mordiste, las cosas son diferentes ahora. ¿no es asi?"

"Diferentes," Keith repitió amargamente. "¿te refieres a porque probé tu sangre? ¿Por qué cedi?" parecía lastimarlo físicamente incluso decirlo.

"Porque no dejamos que el otro muriera," Lance corrigió.

La boca de Keith se torció mas. "No lo digas como si te hubiera hecho un favor," Keith murmuro. "No lo digas como si ambos fuéramos algunos héroes. Uno de nosotros lo fue. Uno de nosotros fue un monstruo."

"No," Lance dijo. "No eres un monstruo, Keith." Su mano sobre la rodilla de Keith subió hasta su muslo, lenta pero notable. Si no hubiera estado tan nervioso estaría impresionado por su propio atrevimiento.

Keith tomo su muñeca, ensanchando los ojos. "Lance."

"Quédate conmigo," Lance susurro de nuevo, y se movió para hacerle espacio en la cama. Keith lo miro. "Si...si lo quieres, hazlo."

Algo en la expresión de Keith cambio ante eso, y dejó escapar un suspiro antes de acostarse totalmente a la cama, y entonces, increíblemente, se metió bajo las sabanas hasta que estuvieron cara a cara, suficientemente cerca para que Lance sintiera el aliento de Keith sobre sus labios.

"Lo quiero," Keith le dijo, con ojos medio abiertos. "Lance, lo sabes."

"Como," Lance murmuro, "¿Cómo podría saber, Keith?"

"Porque, eres..." Keith se detuvo, sacudiendo la cabeza. "Tú," sentencio.

"¿Yo?"

"Si." Dijo Keith, y se estiro para tomar el rostro de Lance cuidadosamente. Lance se mantuvo totalmente quieto, su corazón golpeaba felizmente e incrédulo. "Lance, yo..."

"SI," Lance susurro, respondiendo la pregunta silenciosa e inclinándose para besarlo.

Keith lo alcanzo, tocando sus labios suave y cuidadosamente, como si tuviera miedo de romper la pequeña paz que encontraron en esta esquina del mundo juntos. Lance hizo un sonido contra la boca de Keith, silenciosamente alegre, y Keith sonrió ante ello, tomando la mandíbula de Lance con más firmeza, alineando sus cabezas hasta que sus labios encajaron más fácilmente.

Lance estiro la mano y dejo que sus dedos tomaran el cabello de Keith, hundiéndose en las suaves hebras oscuras y haciendo a Keith murmurar felizmente. El beso volvió mas descuidado cuando Lance dio un pequeño empujo y los labios de Keith se separaron en respuesta, un poco de lengua y oh, dientes también, la afilada punta de un colmillo atorándose momentáneamente en el labio inferior de Lance antes de que Keith se separara.

Su boca estaba húmeda y rosa, Lance no podía dejar de mirarla, aturdido.

"Mmm," Keith murmuro, abriendo los ojos lentamente, mirando a Lance entre sus pestañas.

"Si," Lance asintió, acariciándose tímidamente contra su mejilla. Keith se sonrojo, pero dejo que Lance se acercara, hasta que estuvieron acurrucados apropiadamente, y sip, a Lance le encantaba, era cien veces mejor de lo que podría haber imaginado. Los brazos de Keith estaban fuertes y seguros sobre su cadera y su aliento cosquilleaba contra el mentón de Lance y sus ojos eran oscuros y afectuosos, centrándose únicamente en Lance.

"Deberías dormir," Keith le dijo, pasando suavemente la mano sobre su espalda y dejándola en su cadera. "O podría traerte más comida, si quieres."

"Nah, estoy bien," Lance respondió, enterrando la cabeza en el cuello de Keith y cerrando los ojos. "pero será mejor que estés aquí cuando despierte, chico murciélago."

"¿Chico murciélago?" Keith repitió, divertido.

"Es tu nuevo apodo, acostúmbrate, chico murciélago."

Keith rio. "Como digas, Lance."

*

En algún punto de la noche - porque era noche de nuevo, Lance vio las estrellas por la abertura de las cortinas - se habían movido, así que Lance despertó con un sólido peso en su espalda y una respiración irregular en su oído. Le tomo unos segundos relacionar, pero cuando lo hizo Lance sonrió y se estiro, presionándose contra el. "Keith," bostezo, listo para volver a dormir...hasta que Keith dijo su nombre con un siseo y se movió intencionalmente contra el.

El aliento de Lance salió deprisa. "¿...Keith?"

"Quería," Keith murmuro, y cuando Lance grito el cuello Keith lo observaba con ojos amarillos, escabullendo los brazos por su cadera con una intención determinada. Keith presiono la mano entre las piernas de Lance y el salto con un tembloroso gemido ahogado, enroscando los dedos. "Hueles tan bien, todo el tiempo, joder, te ves tan bien, es una tortura," Keith gruño, y Lance, aun desconcertado, se encontró sobre su espalda, Keith trepaba sobre el, abriendo las piernas a cada lado de su cadera, poniéndose descaradamente en exhibición. "Yo quería, quería..."

"Que," Lance jadeo, tirando la cabeza contra las almohadas mientras las caderas de Keith se enterraban en el y sentía la caliente dureza de Keith a través de sus pantalones, los cuales ya estaban algo húmedos, chorreando contra la cadera de Lance. Lance se retorció debajo de el, su miembro salto y se lleno rápidamente cuando Keith paso la base de su palma sobre el, una y otra vez, con una insistente fricción. "¿Querías que, Keith?"

"Quiero chupártela," Keith susurro contra su pecho.

Lance gruño, su miembro se estremeció ante el pensamiento. Dios, ¿eso era seguro? ¿le importaba? No, no para nada; especialmente cuando Keith lamio solo algunos centímetros mas abajo del vendaje en su cuello, un largo camino de saliva, pasando la lengua sobre la clavícula de Lance y pasando la mano por arriba y debajo de su camisa.

"¿puedo?" Keith jadeo, levantando la cabeza. "¿Me dejarías chupar tu polla, Lance?"

"Si," dijo Lance, temblando cuando los dedos de Keith trazaron sus costillas, Ligeros. "Maldición, Si."

Keith sonrió, fascinado e incluso juguetonamente, y sin mas preámbulo bajo los pantalones de Lance. Bueno, los pantalones de Keith, técnicamente, pero Lance no podía pensar en aquellas variantes mientras los labios de Keith estaban entre sus muslos. Esto escalaba rápidamente, noto con debilidad, pero no se quejaba, porque santa mierda, que bien se sentía.

Keith pasaba sus dedos por el largo del pene de Lance casi delicadamente, solo tentándolo, pero con suficiente contacto para que Lance se arqueara mas. Keith enterró la cara contra el muslo de Lance, provocando que separara las piernas, haciendo complacido y graves sonidos con su garganta, Lance imagino que se sentiría malditamente bien alrededor de su pene.

"Tan bello," Keith dijo roncamente, su lengua trazaba únicamente la esquina de la cadera de Lance, mientras sus dedos pulgar y anular se escabullían hacia la punta de su pene, cerrándose despiadadamente a su alrededor haciendo a Lance gimotear.

"Lo dices," intento Lance, mirándolo con incredulidad. "tú, maravilloso chico vampiro."

Keith batió sus pestañas para el y la polla de Lance se estremeció. "Aww. ¿crees que soy lindo, Lance?"

"Uh - quiero decir- nngh, ¡Keith!" los ojos de Lance se ensancharon en cuanto toda la mano de Keith se cerro alrededor de su pene, deslizándola para hacer espacio para su boca. Lamio la punta, en lentos círculos húmedos, nunca rompiendo contacto visual con Lance, y Keith tenia una mirada tan sugerente. Era cómo. Si fuera a derretir a Lance en un momento, y el sentimiento solo incremento cuando Keith cerro los labios alrededor de la cabeza de su miembro, desplazando la lengua sobre el. Lance soltó un sonido ahogado.

Los labios de Keith se curvearon con satisfacción y se hundió mas, cerrando finalmente un poco los ojos, entre abiertos mientras se centraba en la tarea en curso. La tensión abandono a Lance mientras se percataba de que Keith era realmente, muy injustamente bueno en esto, y no había forma de que un colmillo curioso fuera a arruinarlo. Mantuvo sus labios sobre sus dientes, con la boca no mas que húmeda y apretada, y caliente, Lance tuvo que deducir que se había alimentado recientemente, debió de, para estar tan cálido, y aquel pensamiento no debería haberlo estremecido de la manera en que lo hizo.

Keith chupo e hizo algo mágico con su lengua, Lance tuvo que cubrir su boca para ahogar el sonido, saltando contra la cama. Keith balbuceo alrededor de el y si, definitivamente se sentía increíble, Lance hizo otro sonido super vergonzoso, aferrando sus manos a las sabanas e intentando desesperadamente de controlar sus caderas porque no iba a ser ese hijo de puta.

Pero luego Keith levanto la vista hacia el y tomo una de las manos de Lance por la muñeca, apartándola de las sabanas hacia su cabello y balbuceando de nuevo, con claro consentimiento. Lance maldijo y dejo su mano en el cabello de Keith, sostenido su cabeza titubeante. No era lo suficientemente atrevido para guiar los movimientos de Keith, aunque tal vez eso era exactamente lo que Keith quería.

Paso las manos entre las oscuras hebras de cabello, intentando acariciar, aferrando los dedos y tirando solo ligeramente cuando Keith se aparto de su pene, mostrando la punta ligeramente, brillando por la saliva antes de hundirse de nuevo hasta que la punta golpeo contra su garganta. Aparentemente, Keith no hacia arcadas. ¿era algo de vampiros o solo algo único de Keith?

¿podría Shiro, también?

Lance tuvo que cerrar sus ojos para no correrse.

Como si lo presintiera, Keith chupó a su alrededor y ahueco sus mejillas determinadamente. La cadera de Lance se levanto de la cama y Keith no lo detuvo, mas bien tomo sus muslos por detrás, manteniéndolo arriba, y luego su mano subió lentamente hacia el trasero de Lance y lo apretó. Lance dejo salir un gemido, finalmente captando el mensaje, y empujando suavemente contra su boca, balanceando las caderas, respirando cada vez mas rápido. La otra mano de Keith jugaba con sus bolas, oprimiendo y manoseando, haciendo a Lance estremecerse por la nueva sensación y repentinamente, más abajo.

Lance abrió los ojos mientras el pulgar de Keith presionaba atrevidamente contra su entrada y termino con un gemido ahogado, arqueando la espalda mientras se venia en la garganta de Keith, temblando. Keith Trago casi todo, se aparto antes y la ultima oleada se derramo sobre su rostro. Lance casi se puso duro de nuevo con solo ver a Keith con las tiras blancas en sus labios y mentón; Lance juraría que incluso había algo en sus pestañas. Keith se sentó sobre sus talones y lamio sus labios con arrogante satisfacción mientras Lance yacía abatido en la cama, sintiendo las piernas de gelatina, desorientado de una mejor forma que antes.

Después de varios segundos Keith limpio su boca y ladeo la cabeza. "¿Estas bien?"

Lance se rio ahogado. "Estoy...increíble, chico murciélago. Totalmente increíble. Solo dame un minuto. Mierda."

Keith fanfarroneo. "¿Tan bueno fue?"

"Bueno," Lance dijo, "La única mamada que he recibido, asi que, si, fue increíble."

Keith parpadeo. "Espera," dijo. "¿Que?"

Lance bufo. "supongo que debería estar alagado por que te sorprendas. Voy a quedarme virgen, o al menos iba, no se si eso cuenta."

Keith estaba algo conmocionado. "Yo - yo no sabía-"

"No es la gran cosa," Dijo Lance, a pesar de que lo era, y mentalmente se estaba celebrando a si mismo. "Hermano, cálmate. Aun no te has venido, ¿no?"

"No," Keith dijo, y dio un pequeño alarido cuando Lance lo tiro sobre de si, quedando a horcajadas sobre la cadera de Lance e inmediatamente moviendo la cadera, rozando su miembro contra su estómago, jadeando.

"Quiero tocarte," Lance le susurro en el oído, valiente ante el estado necesitado del vampiro. "Tienes demasiadas prendas, chico murciélago."

"Quítamelas," Keith siseo, mordiendo el lóbulo de la oreja de Lance y ahí estaban sus dientes, sin sacar sangre pero aun asi picándolo.

Lance no perdió el tiempo en sacarle a Keith la camisa, porque el necesitaba sentir la firmeza de su pecho con sus propias manos, pero Keith comenzó a impacientarse con la estupefacción de Lance con sus músculos y se quitó los pantalones el mismo, pateándolos hacia abajo hasta que su pene estuvo contra el estómago de Lance. La camiseta de Lance seguía puesta, lo cual era algo ridículo, enrollada hasta sus axilas y enredada con el cristal, pero Keith estaba completamente desnudo y aquello era glorioso.

"Creí que ibas a tocarme," Keith gruño, literalmente gruño, y Jesucristo, Keith era algo mandón en la cama. Eso no era exactamente desalentador.

"Si, Capitán," Lance murmuro, aun mareado por el orgasmo y recuperándose de la perdida de sangre, envolvió las manos alrededor de la polla de Keith, admirando su tamaño y su color comparado con la pálida piel del cuerpo Keith. Keith emitió un sonido roto y empujo contra su agarre, apoyándose contra Lance y siendo inesperadamente dócil, respirando sobre la línea de la mandíbula de Lance y jadeando mientas Lance movía su muñeca. Lance intento hacerlo bien, tratando de imitar la forma en que se tocaba a si mismo, y se lo dijo a Keith, quien gimió y se corrió con un movimiento trabajoso, echando la cabeza hacia atrás antes de desplomarse sobre Lance.

Lance parpadeo, más adormilado que antes, y palmeo la espalda de Keith. No se había percatado lo cerca que Keith había estado solo por chuparlo. Wow.

Keith jadeo contra la camisa arrugada de Lance. Probablemente estaba manchándola toda de semen, pero era su camiseta asi que a Lance no le importaba demasiado. "Definitivamente deberías tomar ese jugo ahora," Keith dijo.

"No es como que yo fuera quien gasto mucha energía," señalo Lance, pero tomo la caja de jugo aun asi.

"No justo ahora," Keith rio, sacudiendo la cabeza y se levanto hasta que estuvo sobre el rostro de Lance. "¿Puedo besarte?"

"No tienes que preguntar eso, chico murciélago," Lance murmuro, y tiro de Keith para besarlo, mas desesperado y descuidado que el primero, mas lengua que labios. Keith sabia a sal y amargura. Lance presiono mas su lengua, tratando de encontrar algún toque de hierro también. Todo lo que encontró fueron colmillos, no estando lo suficientemente cerca para cortarlo pero si para hacer que el pulso de Lance se acelerar.

Keith fue quien rompió el beso, mordiendo ligeramente el labio inferior de Lance antes de suspirar y apartarse de Lance. "Voy a limpiar y traerte una toalla para eso," dijo, asintiendo al desastre que había dejado sobre toda la mano derecha de Lance. Lance bostezo y le mostro el pulgar con dicha mano. Keith lo observo, inseguro, y luego se hecho para delante y dejo un beso sobre la mejilla de Lance. "Lamento haberte despertado en mitad de la noche," susurro.

"Te disculpas demasiado," Lance le dijo con un suspiro. Le sonrió ladeadamente. "Y, por cierto, creo que eres lindo, chico murciélago." Atoro un mechón detrás de la oreja de Keith y tuvo el placer de ver a Keith sonrojándose y sonriendo de vuelta.

"Yo también pienso que eres lindo," Keith le dijo, levantándose de la cama, ofreciéndole a Lance una fantástica vista de su increíble trasero antes de subirse los pantalones de nuevo. Lance dudoso hizo lo mismo también. "Vuelve pronto," Keith murmuro, y salió por la puerta.

Lance bostezo de nuevo, sonriendo para si en la oscuridad. Oh, hermano, iba a dormir tan bien después de aquello. La única cosa que podría hacerlo mejor seria Keith acurrucándose con el. Y seria agradable si Keith se apresurara con aquella toalla.

Lance salió de su sueño levemente por un golpe seco contra la pared fuera de la habitación.

Parpadeando, froto sus ojos con la mano limpia y miro la oscuridad, desorientado.

Había voces. Shiro, firme y resignado. "Hueles completamente a el."

Keith, asustado y molesto. "No podía - él era tan - lo lamento tanto, yo -"

"Keith, no. No te disculpes, hablamos de esto. ¿recuerdas? Esta bien. ¿Me oíste? No me molesta."

"pero...nosotros..."

"El te eligió," dijo Shiro.

"Shiro..."

"No, me alegra. Estoy feliz por ti. Creo que ustedes dos son buenos para el otro."

"¿y que hay de ti?"

Hubo un momento de silencio.

"Takashi. Por favor, ayúdame, aquí. No...no se que hacer."

"Confío en ti," Shiro murmuro. "Lo sabes. Y estoy aquí para ti, siempre que me necesites."

"Siempre," dijo Keith, tan suave que Lance casi no lo escucho.

"Si."

Las voces disminuyeron, y Lance dejo que el sueño lo envolviera.