//Los capítulos con puntos en lugar del lobo hacen referencia a que son episodios del pasado, sin mencionar directamente a cuál de los chicos pertenece.

—Si lo haces con una herramienta con este filo será más fácil. 

Me acerqué hasta donde papá señalaba y tomé una hacha. 

—¿No prefieres un machete? Incluso puedo ofrecerte una Katana, a ti te gustan esas cosas japonesas— me susurró al oído mientras me abrazaba por la espalda, yo negué y admiré el arma entre mis manos. 

—Como prefieras. 

Apenas me soltó me acerqué al pedazo de carne, balanceando mis caderas alcé el hacha y la dejé caer. 

Solo se cortó la mitad del cuello. 

—¡Excelente mi amor! 

Lo miré en silencio, él parecía muy feliz y aplaudía con todas sus fuerzas. 

—No llegué a decapitarlo— murmuré decepcionado, aunque él demostraba todo lo contrario.

—Amor, para tu primera vez estuvo muy bien. 

Asentí levemente más animado y observé como uno de los matones de papá se acercaba a nosotros con las manos tras la espalda en señal de respeto. 

—Deshazte de él, nosotros estaremos ocupados en mi oficina; no nos molestes. 

El hombre, alto y fornido, asintió y enseguida cargó el cuerpo inerte para llevarlo a quién sabe donde.