Taehyung.

Los pequeños focos de la piscina, reflejan el agua celeste en mi rostro mientras expulso por la boca el tóxico humo que retenía de la ultima calada que di al cigarro entre dos de mis dedos.

Ya ni siquiera recuerdo cuando fumar se convirtió en mi nuevo vicio, creo que llevo haciéndolo hace unos dos años, motivos he tenido.

A mi madre le disgusta por monto y aun así no sabe que consumo drogas, como tampoco pretendo que lo sepa.

Nada era lo mismo cuando de casualidad quería invertir mi tiempo en un rollo de papel sellado con nicotina dentro, y ella me exigía con pucheros que no lo hiciera, y yo, condenadamente dócil ante sus frágiles peticiones, obedecía, complaciéndola como tanto me gustaba hacerlo.

Mi madre más que nadie sabe lo mucho que me afectó la separación con Tn. También hay que decir que no he visto a los niños ni por fotos, con Eun he hablado por llamadas pero no es para nada lo mismo. Entiendo que la falta de comunicación y el largo tiempo sin verme y con otras personas atribuye a que se le oiga incómoda y sin palabras para decirme las pocas veces que hablamos por celular, y a mí se me parte el corazón cuando me dice que tiene que colgar. Yo soy más desenvuelto y le digo cosas lindas antes de que corte, a veces le saco una risita y todo, pero eso no quita que me duela cuando la pantalla me muestra que la llamada finalizó.

De Dae me espero en verdad un cambio total. No debe acordarse en lo absoluto de mí, tenía solo meses cuando lo vi la última vez.

Tn al parecer borró toda cosa que me pudiese relacionar, nunca más hemos cruzado palabra, ni siquiera por mensajes. De haber sido así estuviera un poco más informado.

Me pregunto que hará ahora, si me ha vuelto a pensar en algún momento del día luego de haberme visto en la mañana. Espero que sí, porque en serio ese momento no sale de mi cabeza.

Una sonrisa un poco amarga se aparea en mis labios, misma que se va poco a poco. Llevo tres años sin su ternura, sin sus besos, sus regaños y su pierna en mi cintura a la hora de dormir, sin su respiración acelerada y mi nombre llenando su boca, o su risa placentera contagiándome a cada que hacíamos el amor. ¿Es que puedo ser más imbécil? ¿Quién se arriesga a perder todo eso?

Veo un plato ser puesto en la mesita de cristal entre la tumbona en la que me encuentro y la otra.

-Concuerdo contigo, eres imbécil, y mucho, pero los imbeciles también comen, así que apaga esa mierda y nútrete.

-¿Además de que me lees la mente, me hablas como mi madre?, como te aprecio.- digo sarcástico, apagué el cigarrillo en el cenicero de cristal y tomé una rodaja de piña.

Sí, Park Jimin vino conmigo.

Renté una casa, el cual es el lugar en el que estamos ahora, está claro que me llevará más de un fin de semana conseguir el acercamiento a Tn así que necesito un lugar donde vivir.

-¿Qué harás mañana?- Jimin me mira sentado en la tumbona de al frente, con los codos en la rodillas.- Si conseguiste el negocio eso significa que tendrás que volver a ver al sujeto.

-Pasado mañana habrá una especie de gala por el aniversario de su marca, o eso me dijo- Jimin me dice que me escucha con un sonido.

-¿Irás?- levanta una de sus cejas-, ahí puede estar Tn.

-Me invitó, supongo que iré. Como también supongo que ella estará ahí.- inquirí pensativo.

-Es tu oportunidad de verla y que hablen.- me hubiera codeado de haber estado sentado a mi lado

-¿Y que él me la presente como su prometida y futura esposa?, no jodas- bufé rodando los ojos.

-Es la ocasión perfecta, y lo sabes- recalca haciéndome asentir y sacudir mi pelo en muetsra de mi frustración

No estoy preparado mentalmente para volver a verla con ese pedazo de idiota. A la mierda si es un buen hombre, a la mierda si la hace feliz, no acepto para nada que esté con él ni con ningún otro.

Me sigue pareciendo ayer cuando ella juraba ser mía, pero en realidad ha pasado mucho tiempo, tiempo que le alcanzó para comenzar una vida de la que estoy excluido. No es por nada que está comprometida, ya debe saber que se siente estar con otro hombre.

-¿Y qué me dices de Jung Hoseok, de qué va su empresa?

-Ni siquiera es su empresa, es de su padre.- dije con hartazgo

-¿Quién tiene más dinero, tú o él?, promete responder sin ego- me señala.

-Con ego o sin ego yo soy mejor, ¿qué no oyes? No tiene su propia empresa.

-¿En serio crees que Tn te olvidó?- pregunta con simpleza llevándose un pedazo de fruta a la boca.- Es decir...- mira a otro lado encogiendo sus hombros

-No lo sé- respondí sacando de mi bolsillo un pequeña bolsa de nailon transparente en la que habían dos de mis pastillas favoritas en el mundo entero. Tomé una de ellas y la metí dentro de mi boca.

-Mierda, TaeHyung- Jimin me apuñala visualmente

-Disculpa- murmuro guardando el estuche en mi chaqueta otra vez, sintiendo el rastro que dejó la píldora al pasar en seco por mi garganta.

-Sabes cómo detesto que te tomes esa cosa en frente mío, pareciera que lo haces a propósito- sin dirigirle la mirada, cogí más fruta

Me quedo callado mientras mastico, segundos después lo miro y veo que suspira

-Me voy a dormir ¿ok?- me avisó, asentí y luego lo vi irse a dentro

(...)

Tn.

-Ya, pero si no te lo digo no te acuerdas- hablo divertida tratando de regular mi tono porque Dae duerme cerca. Estoy sentada cómodamente entre los cojines en el sofá junto a la ventana de mi habitación. Los cristales están cerrados pero las cortinas aún no, por lo que puedo mirar la vistosa ciudad de Londres mientras hablo con Hoseok al teléfono.

-¿Me estas regañando?- su conocido tono de voz se filtra por la bocina que va directo con mi oído

Solté una risita- ¿Mañana nos veremos?- pregunté mientras jugaba con el bordillo del short de mi pijama, lo suficientemente audible como para que oyera

-Puedo buscarte en la mañana, o lo que tu quieras, haré la excepción que sea.

-Uh, bueno mañana en la mañana no, pero- hago una pausa- si me vas a buscar por la tarde podemos pasar un rato juntos ¿qué dices?, podrías llevarme a cenar, no sé, a tu departamento. Tiempo de pareja, hace días no lo tenemos. Dime ¿La empresa te da besitos y te consiente?, es que parece tu nueva prometida.

-Me encantan esas ideas, y no, tú eres mi hermosa prometida, es a ti a quien quiero consintiéndome- contestó haciéndome reír

-¿Te das cuenta?, tengo que recordarte pedirme una cita, que decepción- comenté obteniendo carcajadas de su parte

-Mañana por la tarde soy todo tuyo, lo prometo.

-Vale. Voy a dormir, es un poco tarde- dije mirando a Dae en el centro de la cama pensando en que tendría que correrlo cuando me vaya a tumbar con él.

-Mhm, bueno, que descanses y que no sueñes con nada- me dice

-Sí, tu igual, te quiero- murmuré, escuché como me repitió la última frase y colgué la llamada.

Salí de donde estaba acomodando mis pantuflas en mis pies. Dejé el teléfono en la mesita de noche y me senté en la cama a mirar como mi hermoso niño descansaba sumergido en tranquilidad, ojalá no suele con nada malo.

Extendí mi mano para cruzarla con su cedoso cabello desaliñado color azabache. Soltó un suspirito que por mi pasó desapercibido cuando un flashback llegó de imprevisto a mente.

Taehyung...

Diviso con claridad la imagen de su rostro serio, su profunda mirada aboliendo la serenidad de mi persona segundos antes de que apareciera en mi campo visual como un completo intruso.

Era él sin dudas, yo no podía estar equivocada. No se equivocó el repentino disturbio que se instaló en mi estómago, ni tampoco la forma en al que mis labios se entreabrieron en busca del aire que era insuficiente entrando por mi nariz.

Sin pensarlo me levanté de donde me había sentado hacia instantes, y apagando la luz de la habitación, cerré la puerta con cuidado quedándome fuera de ella.

Avancé por el pasillo semi oscuro y llegué a la tercera y última habitación.

Giré la manija sin tocar encontrándome con el frío del aire acondicionado.

Las luces estaban encendidas. Veo que Lisa se encuentra cerrando las ventanas. Al sentir la puerta me mira, y yo paso sin decir nada.

-¿Tú despierta?- comenta con gracia

-Estaba hablando con Hoseok- le digo y ella me lanza una mirada pícara. Sé que en realidad se siente orgullosa por mí.

-¿Apagas la luz?- señala el interruptor y yo le hago el favor dejándonos con la pálida luz de afuera.

Ella desacomoda el tendido de la cama y se acoge al edredón. Por mi parte ocupo el espacio que resta. Se oye un suspiro, yo la miro y me dispongo a llenar el silencio de la habitación.

-No le dirigiste mucho la palabra a mi hermano, ¿puede ser que te ponga nerviosa todavía?- apoyo mi peso en mi brazo para mirarle la expresión, reprimiendo mi sonrisa.

-¿Yo?, pero si él es quien no me habla- bufó -No estás pensando en que todavía me gusta ¿o si?.

-No, quien sabe si seas tú la que lo piensa- dije molestándola y ella rodó los ojos- Te extrañé, tonta- acaricié su mejilla con un mohín en los labios.

-Yo también, a todos ustedes. A Eun, a Dae, incluso a Jin. Me siento algo sola en Corea...

Disminuyo la sonrisa- ¿Por qué? ¿Lo dices por lo de tu abuela?

-Sí- admite triste-, la casa es pequeña y se siente enorme sin ella.

-Yo también la extrañaría.- asentí-. Pero tranquila, es normal que te sientas así. Después de que... pierdes a algún familiar, y muchísimo más con lo cercanas que eran la señora Minsok y tú; experimentas muchas cosas a la vez, pero se apacigua, hazme caso, sé psicología.- dije

-Está bien, doctora Park- dice arrugado la nariz con una pizca de parsimonia, pero sonriendo

- ¿Que tal las redes?, ni una idol te hace nada, ¿cómo consigues tantos seguidores?- le subo el ego haciendo que se ría un poco

-Solo soy genial, ¿qué puedo hacer?- dijo engreída- la verdad me va super, no entiendo como no intenté antes.

Suspiré y puse la mejilla en su pecho, pasando mi brazo derecho por su plana barriga.

-Háblame de ti, ¿cómo van las cosas con Hoseok?

-Es... muy...amable, cariñoso, tenemos... varias cosas en común.- solté una risita- bueno, ya ves, vamos a casarnos...

-¿Y.. . que de Taehyung?, todo muy rosa, lo sé, pero no creas que no voy a preguntarte.

La sola mención de su nombre me cambia la expresión. Aprieto los labios pasando saliva, evocando el recuerdo de hoy nuevamente.

Mirando fijamente hacia algún sitio de la habitación, me di tiempo a hablar- Taehyung.... él está aquí, en Inglaterra, estoy segurísima de que lo vi hoy.

Me voy separando de su pecho para sentarme cruzando y doblando mis piernas.

- ¿Cómo... hablas de que lo viste aquí?- Lisa hace énfasis señalando con su índice hacia abajo, mirándome sorprendida.

Asentí lentamente, como si tuviese mucho peso cualquier palabra o monosílabo afirmativo.

-¿Y? ¿Qué pasa, como te sentiste?

Su última pregunta me pone automaticamente a pensar. Miré mis manos como si recién las descubriera, jugando levemente con mis dedos.

- Bueno... yo estoy con Hoseok ¿no?. Ya sabes, me sorprendió infiernos verlo después de tres años pero no es como si me afectase demasiado.- Lisa nota la falta de seguridad en mis palabras

-Respondiste de todo menos lo que te acabo de preguntar- dice obvia - Sé sincera conmigo, si no me dices a mí ¿a quién vas a contárselo?, venga, desahógate más.

-¿Pero que quieres que te diga?- resoplo evadiendo sus peticiones.

-¿La verdad?.- me contesta con una pregunta irónica. Suspira y se sienta de la misma manera que yo. Decido mirarla atenta- No me voy a creer que te importó una mierda verlo. -su lenguaje vulgar no me quita la inseguridad, la incrementa- En otros casos sería muy creíble, o sea, estamos hablando de tres años. ¿Quién no supera una relación con todo ese tiempo?, ayuda el doble que tengas a otra persona en tu vida. Pero, hey, tu caso es jodidamente diferente, ¿Cuánto tiempo ha sido solo él? Mira hasta cuando esperaste para experimentar con otra persona, ese imbécil se llevó todas tus primeras veces.

En mi cabeza habían miles de cosas que no sabía como sacar, ni yo misma podría decírmelas.- Creo que estamos dándole mucha importancia al tema. Yo... voy a dormir.

Una vez estoy junto a Dae-hyun en la cama me pongo a su altura para abrazarlo, él inconscientemente me abraza acomodándose entre mis senos. Hundí la nariz en su pelo cuando dejé un leve beso y cerré los ojos, sabiendo que serían horas para conciliar el sueño.

Siguiente capítulo...

-Ella...- Hoseok me observa con adoración segundos antes de adularme, sin saber lo que hacía, sin percatarse de que mi corazón latía tan fuerte que podría salírseme en cualquier momento- ya ni siquiera puedo describirlo, lo es todo para mí.

-¿Ah, sí?- podía jurar que le hacía gracia, me miraba como si fuese una meta o le estuviesen poniendo un reto- Cuídala entonces... Ya sabes, mientras más valioso sea el objeto, tiene más codicia.

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AAAA. Juro que estoy amando escribir estoo
KDDJSDGSJ

Espero les haya gustado y si fue así no olviden dejar la estrellita 😊😊😊

Pd: Ustedes dirán '¿La rayis es doctora y Jungkook todavía estudia?🤔'
Recién me di cuenta de eso, y es que lo hice así porque entonces no iba a cuajar bien esto, de todas formas voy a ver como arreglo ese detalle :)

Graciasxleer♡