Capítulo 6

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

꒦꒷꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒷꒷꒦꒷꒷꒦꒷꒦

—Jennie. Quieren hablar contigo — La señora de rojos cabellos se acercó lentamente hacia la castaña, mientras colocaba su brazo en el hombro contrario. —Y cuidado con tus respuestas Quieres salir, ¿Verdad? Yuki, Kai, suban.

—Jennie ¿Todo bien?

—FBI.— Se escucharon voces desconocidas, habiendo que la actitud de Kai cambiará totalmente desde preocuparse por Jennie hasta querer salir huyendo de ahí.

—Yuki, es mejor que la dejemos sola.

—Pero-

—Ahora.—

—Estaré bien, Yuki. El que nada debe nada teme ¿Verdad? No te preocupes.—

La peli menta asintió para después subir junto a Kai y la trabajadora social. Algo no le daba buena espina de la actitud del moreno, pero lo dejó pasar, por ahora.

—¿Jennie Kim?

—Sí, un gusto...

—Somos los agentes Jisoo y V. Queremos hacerte unas preguntas.— Jennie asintió mientras se levantaba y les ofrecía los asientos de enfrente a ella, dándoles algo de seguridad a los agentes.

—Lo primero que queremos saber es ¿Por qué haz estado llamando al 911 sin decir tu emergencia?

Jennie abrió los ojos platos ante aquella pregunta de aquel agente. ¿Qué se supone que les diría?

—Preferiría no hablar de eso...

—Lo tendrás que hacer si no quieres que te llevemos hasta New York a entrevistarte.— Dijo V tratando de ser el oficial malo, como siempre.

—No te jugaremos, solo queremos saber eso. —

—No puedo decirlo. Enserio. Es muy vergonzoso.—

TaeHyung y Jisoo se miraron mutuamente. Tal vez el lugar en donde estaba no le dejaba hablar, tal vez se sentía cohibida. Tenían que llevarla a un lugar en donde se sintiera más presionada y menos vigilada.

꒦꒷꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒷꒷꒦꒷꒷꒦꒷

La sala de interrogatorios en Nueva York. El lugar en donde Jennie jamás creyó estar, al menos no siendo ella una sospechosa.
Estaba más nerviosa, sí, pero le daba un aire de protección el saber que la trabajadora social la vigilaba, o que sus amigos escucharían su triste pasado.

—Ahora, Kim, responde nuestra pregunta.

—No estoy segura de querer hablarlo con ustedes... No estoy metida en algo malo, es solo que es algo bastante fuerte para mi mente y no quiero compartirlo con nadie.— Afirmó la adolescente mientras miraba para abajo, jugando con sus pies.

—Puedes contarnos, Jennie. No te haremos nada malo si no estás metida en algo malo, queremos ayudar en lo que podamos.— Comentó Jisoo mientras veía a Tae, indicándole con la vista que saliera y fuera a donde Nam y Hwasa.

Acatando la mirada de su compañera, TaeHyung salió de ahí, dispuesto a ir a la sala de a lado, en donde monitoreaban la entrevista.
NamJoon y Hwasa yacían mirando y escuchando con atención a las chicas de la sala, esperando a que Jennie diera algo para comenzar una investigación.

—Ahora que estamos solas, puedes contarme.

—Yo- yo no quiero que les pase algo malo a mis hijas. Ella siempre me quiso hacer la vida imposible, desde que me presenté hasta el día en que me llevó de nuevo al orfanato.

—¿Ella? ¿Quién?

—Mi ex suegra. Es la peor mujer que pudo haber existido en la tierra. No sé qué intenciones tiene, pero se llevó a mi hija Sol, me persiguió, incluso me incendió la casa en donde vivía...

Hablaban desde la pantalla. TaeHyung miró con atención a Jennie, era bastante atractiva, pero tal parecía que tenía un pasado oscuro.

—¿A qué edad tuviste a tus hijas? Por lo que sé tienes 19.

—Las tuve a los 15. Fueron, vaya, sonará muy mal, pero fueron un accidente. Con mi novio nos veíamos, salíamos a comer o a pasear y terminábamos, eh, terminábamos en lugares no muy cómodos, si soy sincera. Un día yo me sentía muy mal y con náuseas y mareos, deduje que era un embarazo, pero como no tenía dinero para un médico decidí comprar una prueba de embarazo de 1 dólar. Cuando quise decirle a Jeikei, él ya no estaba en su casa, ellas me echaron y casi me golpean, salí huyendo para que no lastimaran a mis bebés.
Pero ahora son todo lo que tengo, no tengo familia, no tengo pareja, sólo tengo 2 amigos que dejaré de ver al irme del orfanato, son lo único que me queda.

—Vaya, eso es bastante profundo. Jennie ¿Por qué llamabas al 911 sin decir lo que ocurría?

—Yo tenía miedo. Ella me amenaza con hacerles algo a mis hijas si hablo con la policía, entro en pánico porque no sé como decir lo que ella hace en mi casa. ¿Ya mencioné que me incendió la casa? Y el seguro no da una buena pensión a los incendios, apenas y me alcanzó para remplazar la mitad de mis muebles dañados... No he tenido una buena vida. Es por eso que cuelgo, porque no sé explicar a la policía, de hecho ni siquiera sé cómo es que estoy pudiendo hablar con usted.

—Puedes decirme todo lo que esa mujer te hace, Jennie, yo me aseguraré que no te haga nada. 

—¿Cómo puedo saber que lo hará?— Preguntó con voz cortada —Ya he tenido muchas promesas rotas, no soportaría una más.

—Jennie, mírame. ¿Crees que luzco como alguien que rompería su promesa?— La chica que tenía al frente negó mientras hacía contacto visual con la pelinegra. Era no se veía como alguien mala, pero esos 6 años que estuvo sola aprendió a no confiar en nadie.

—No, tú te ves como una buena persona. Perdón si te ofendí, es solo que-

—No hay problema. Entonces, si puedes confiar en mí, dime todo lo que te haya pasado.

꒦꒷꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒷꒷꒦꒷꒷꒦꒷꒦

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro