- ¡Kiba!

El pelirrojo alza la mano con prisa sacando la bufanda que cubría su cabello rojo, con un ladrido Akamaru se hacía notar a la lejanía mientras Kiba alzaba la mano sonriente.

-Vayamos Gaara.

El pelirrojo asiente mientras aquella chica lo mira dudosa de su actitud.

-Oye... -menciona por lo bajo - ¿Cómo te encuentras? Sobre Temari, comprendo que debe ser difícil tratar con la muerte de un familiar... Yo...

-Agradezco tu preocupación -sonrie con calma -Pero no quiero hablar de eso justo ahora, de verdad sólo quiero concentrarme en encontrar a Kankuro.

-Lo entiendo -asiente -Vamos a centrarnos en ello entonces.

Con una leve sonrisa ambos siguen su camino entre una leve carrera hasta llegar al par de castaños que los miran con orgullo.

-Tengo un rastro -suspira -El rastro de Temari sigue por aquí -apunta hacia un cañón.

-Un cañón... Fuera sería muy visible -Dice confundida.

-Pero no solo son un par de cuevas... -Dice Gaara -En especial en ese cañón, entrar ahí sería perdernos con seguridad, ese cañón es una trampa total, hay tantos caminos que solo hemos podido anotar al menos tres, son confusos y largos.

-Hay posibilidad de perdernos -menciona Kiba -Quiza hasta los tuvieran alejados del otro, en ese caso encontraríamos donde tenían a Temari, pero Kankuro...

Dudoso el pelirrojo traga grueso cerrando sus ojos entre su pensar.

-Gaara...

Sus ojos se abren con prisa -Shukaku se está comunicando conmigo.

-Seguro Lee quiere saber cómo va todo -Menciona Kiba.

-Habla con él mientras analizamos la primer encrucijada, si Kiba logra distingir de que punto viene la sangre podemos intentar entrar.

Con un asentimiento mira como los chicos se adelantan, suspirando Gaara cierra los ojos sintiéndose estar solo con Shukaku, algo inquieto solo sonríe de momento.

-Oye Chico -suspira -Lamento lo que ocurrió con tu hermana.

- ¿Lo has visto?

-Puedo sentir tu tristeza -rasca su frente -El chico de cejas grandes.

- ¿Lee? -cuestiona dudoso.

-Si, ese chico, él... Quiere saber cómo te encuentras, quiere saber cómo va todo y... Bueno Naruto quiere decirte lo de frente para explicarte mejor.

-No... No quiero... Shukaku ¿Crees poder hacerme hablar con Lee un momento?

- ¿Con el cejon? Déjame un momento...

Mirándolo desaparecer el pelirrojo se queda solo suspirando y sintiendo su humor llenar el lugar, las propias voces de su cabeza comenzaban a resonar en el lugar, su miedo, su rabia, su preocupación, los ecos de su tristeza... La soledad...

[Oficina del Hokage]

Con impaciencia Lee observa a Naruto quien asintiendo abre los ojos mirando al azabache desesperado frente a él.

-Los Bijuus tienen el poder de sentir nuestras emociones y escuchar nuestros pensamientos... Shukaku me dijo que Gaara quiere hablar contigo, pero... -traga saliva con inquietud -Temari ha... Muerto... Esta triste, enojado... Tan inseguro.

Asiente -Lo comprendo, es delicado... ¿Puedo?...

Con una leve sonrisa le pide al azabache tomar asiento, Lee asiente mirando por la ventana el término del día, inspirando se relaja cerrando los ojos y siente la mano de Naruto sobre su hombro, para cuando se siente más relajado puede escuchar una voz conocida repartida por todos lados diciendo cosas diferentes en cada esquina, al abrir sus ojos se encuentra con la figura de aquel pelirrojo que cubre sus ojos entre sus sollozos, avanza con lentitud mirando a su alrededor como imágenes se pintan, recuerdos y la triste despedida.

-Gaara...

Ante esa vos todo se disuelve, las imágenes, las voces, y solo queda un chico con las mejillas llenas de lágrimas, tragando saliva y sin más Lee extiende su brazo hacia él halandolo contra su cuerpo, abrazando a aquel pequeño chico dolido lo siente derrumbarse a su lado.

-La perdí -se aferra con fuerza a la ropa del chico -La perdí Lee... No pude hacer nada... No lo viste... El maldito... Ese maldito que la tenía... El la abrió como si fuera cualquier cosa... La dejo sin ropa en la arena llena de sangre... La dejo ahí... Sola... Sin nada...

Con un suspiro el joven sujeta con fuerza aquel cuerpo acariciando su espalda y aquel cabello rojo.

-Respira, quiero que respires con calma... No es momento Gaara, comprendo que duela y tienes todo el derecho de estar triste, pero sabes que no es momento... Estoy preocupado y quisiera estar contigo, si tú me lo permitieras yo iría enseguida.

-No -se aleja limpiando sus lágrimas para sonreír -Gracias, solo necesitaba ésto... Necesitaba que me hicieras entrar en razón... Shikamaru ¿Has sabido algo de él?

-No... ¿Enviaste el cuerpo en arena o... Algo?

-No, ahí estaba un escuadrón de Suna, ellos... No me intentaron capturar, se la llevaron con un mensaje para Shikamaru.

-Gaara... ¿Podrás hacerlo? ¿Estarás bien? De verdad quiero ir a tu lado para asegurarme que todo...

Con una leve sonrisa aquel pelirrojo lo mira haciéndolo callar sin necesidad de hacer algo, asintiendo Lee comienza a limpiar aquellas lágrimas secas y sujetando aquellas pequeñas mejillas se acerca con lentitud depositando un beso sobre su fina piel.

-Oye -susurra abrazandolo -Por favor, ten cuidado, por favor regresa a salvó Gaara.

Con el corazón inquieto el pelirrojo duda, pero solo se aferra a aquel cuerpo ocultándose en su hombro.

- ¿Crees que me dejen volver a mi villa?

-Aun si no es así siempre tendrás las puertas de Konoha abiertas -se aleja acariciando aquella mejilla -Regresa a salvó con Kankuro, se que podrás hacerlo, confío en tí Gaara.

El sonrojo se hace de las mejillas del pelirrojo que se llena de seguridad con esas palabras y abriendo sus ojos se encuentra con la preocupación frente a él, Kiba lo mira dudoso inspeccionando su estado.

- ¿Estás bien? -comienza a limpiar sus mejillas -Cuando volví estabas llorando y a pesar de que te hablé no...

-Ha... Lo siento -se aleja limpiando sus mejillas con la palma de su mano -Cuando estoy hablando con Shukaku puedo distraerme de este mundo ¿Que tenemos Kiba? -se adentra en la caverna.

-Hay cinco caminos, pero tengo el rastro -se acerca orgulloso al camino correcto -Por aquí está su olor muy fresco, pero debemos avanzar rápido, el sol está por ocultarse y el viento soplará.

-Las tormentas de arena podrían confundir el olfato de Kiba al jugar con el viento.

Asintiendo comienzan con su camino a paso rápido por el túnel.

[Oficina principal de Suna]

-Muy bien -golpea el escritorio con ambas palmas -Quiero a todo este grupo atento a lo que diré -colocandose un par de guantes los mira de reojo -Que quede claro, Matsuri la puerta -la chica asiente y actúa con prisa -Lo que estoy por decir es confidencial, no debería llegar a sus oídos -se saca el ropaje de Kage -Estamos buscando a dos individuos que causaron el asesinato de hace días, Gaara está encabezando esta búsqueda con solo dos ayudantes de una villa distinta -se coloca el chaleco ninja -No sabemos que intentan, apenas y sabemos dónde pueden estar con la reciente pista de... Mi esposa... -se gira a mirarlos -Son los únicos que han visto a Gaara de frente desde lo ocurrido y son los únicos que han escuchado estas palabras...

El grupo de Ninjas se miran confundidos y se comienzan a exparcir por la oficina dejando al centro a los Ninjas inseguros de lo que pasaría.

-Los quiero dentro de este problema ayudando al único Kazekage de la arena, Gaara está dando su vida por sus hermanos y por los que murieron sin razón ese día, si no están convencidos de trabajar con nosotros hay dos opciones... -Matsuri entrega unos papeles al azabache que los mira de reojo -Callarse y volver con sus familiar... O morir...

Las Kunais salían de los ninjas que estaban contra la pared dispuestos a avanzar con el mandato mientras los cinco al centro se miraban aterrados no seguros de tomar un arma.

-U... Usted no puede hacer esto!

- ¡Lo nombraron Kazekage! ¡Esto es inmoral! ¡Un Kazekage...

- ¡Yo no soy un Kazekage! -menciona enfadado -Vine aquí y tome este cargo por mi familia... Les estoy concediendo la oportunidad de seguir con vida, pero se que aún así solo irían a decirle a los altos mandos...

- ¿Co... Cómo podría saberlo? -mencionaba un joven aterrado -Si... Si queremos vivir... Simplemente... Simplemente nos...

-No son leales -Dice con firmeza tomando unos papeles de un cajón -Hicieron una promesa hacia Gaara cuando tomo el mando de la villa, aún así con el primer incidente que lo dejo con vida ustedes decidieron seguir las voces de los segundos al mando y culparlo... Gaara fue rescatado por unos amigos suyos, una vez conciente luego de un ataque que casi acabo con su vida escribió un reporte de lo sucedido -arroja nuevas hojas -Y si no les es suficiente con su palabra pueden simplemente preguntar a la segunda sobreviviente de ese ataque -avanza hacia la puerta levantando la mano sin importancia -La mujer está más traumada que nada, cambio su declaración más de cinco veces, ahí entre esos papeles se encuentran sus declaraciones y todo lo que necesiten saber de este caso, y... -se sostiene del marco de la puerta -Si van a decirle algo a los altos mandos -sonrie -Espero que sea "El chico Nara abandonó su puesto de porquería para proteger a la familia que le queda"

Y con eso el azabache abandonó la sala dejando a todos los ninjas dentro, los ninjas del centro miraban los papales mientras los demás salían en fila detrás de aquel exKage.

-Si... Hay algo que se muy bien sobre ese chico Nara -sube la mirada soltando su banda -Es que no hace las cosas de manera impulsiva, a pesar de ver a su esposa de ese modo... Su mayor momento de duda fue menos de un segundo -con un kunai raya su banda -Y Gaara actúa por amor a su gente y familia ¿De verdad creen que mató a su hermana y la dejo como está sin sentir una pizca de pena? Hace tiempo que dejó de ser de ese modo.

Dejando la sala limpia ella sale por la puerta con paso firme y el chico más joven de entre los cinco deja a su grupo para seguirlos en un camino de bandas dejadas atrás.