"— ¿Y que tal es? —sonrie con tranquilidad recargandose de la barandilla — ¿Te sientes diferente? —se inclina hacia él — ¿El poder corre por tus venas?

Divertido el azabache comienza a reír junto a aquel pelirrojo y mirándolo a su lado solo sonríe con calma.

—Es... Normal, por el momento —observa el horizonte —Pero esto solo es el título, falta probar el trabajo.

Divertido se abraza a si mismo mientras su sonrisa se desvanece, Lee se acerca manteniendo una cariñosa sonrisa aún en su preocupación.

— ¿Sucede algo Gaara?

—Solo... —suspira —No te Vi feliz, creo que te he obligado y eso... —lo mira —me molesta un poco.

—No me has obligado, me has dado el valor de hacer algo que debía hacer, porque debía hacerlo Gaara, de verdad debía —baja la mirada a la fiesta por debajo de ellos —Ellos creyeron que yo era una buena opción por algo, y tú mismo lo dijiste...

Se aleja nervioso sujetando la mano amiga mientras aquel pelirrojo con las mejillas teñidas de un leve atardecer lo mira con mil dudas en cara.

—Es un gran oportunidad para alguien como yo...

—Yo... —dice nervioso sintiéndolo acercarse —No trate de decirlo de mal modo Lee, yo....

Con una sonrisa aquel joven se acercaba rompiendo aquella leve distancia entre sus cuerpos, sujetando aquella fina cintura que se contraía con sorpresa del toque, y sonriendo con total calma y madurez aquel azabache tragaba saliva al verse cerca de aquellos labios de color durazno.

Inhalando besa aquella mejilla —Gracias por confiar en mí.

Y con eso se aleja dejando a un pelirrojo muy confundido sujetando su pecho mientras aquella mirada dudosa viajaba de sus ojos carbón hacia cualquier otro lado."

—Lee... Lee —se inclina molesto — ¡Hokage Lee! —Deja caer los papeles con brusquedad.

El azabache pega un leve brinco mientras abre los ojos de par en par y con una exhalación cansada Naruto lleva su mano a la nuca mirándolo.

—Ay amigo, ahora lo entiendo, debí ser tan molesto para Shikamaru todo este tiempo —sonrie animado.

Con una sonrisa deja los papeles de lado y toma los nuevos — ¿De los nuevos aparatos?

—Si, nadie está inconforme, pero podría ser un poco caro todo este tema, los científicos que han traído las cosas están pidiendo muchos recursos ¿Piensas que está bien?

—Bueno... Konoha se va expandir a mucho más que esto —tomando su sello sonríe a su ayudante —Tarde o temprano vamos a comenzar ha podar ciertas partes... No es que me agrade esta idea, pero es lo que hay.

—Igual he visto tu plan de reojo —sonrie con entusiasmo —Tienes buen ojo Lee, la maqueta se ve muy bien y has tratado de mantener las áreas verdes lo más posible.

Con una leve sonrisa asiente al elogio y solo toma sus papeles nuevamente, el chico rubio asiente para si mismo y jalando una silla toma asiento frente a su escritorio.

— ¿Sigues pensando de más en él? Gaara es fuerte amigo.

—Lo se —sonrie divertido.

—Pero no lo sientes del todo ¿Cierto? Puedo notarlo en tu cara, has estado tan perdido en tus ideas últimamente...

Algo avergonzado Lee baja la mirada observando sus papeles y Naruto solo entrecierra sus ojos mirando a aquel chico tratando de evadir el tema.

—Dime... —se acerca formando un medio circulo cerca de su boca — ¿Ya lo has besado o algo?

El sonrojo se hace del azabache que tragando saliva solo baja la mirada con prisa, divertido Naruto comienza a reír y solo toma asiento.

—Lo se, lo sé, es jodidamente vergonzoso hablar de eso, pero por tu reacción deduzco que no es así ¿Cierto?

Algo incómodo lo mira —Se que estás preguntando estas cosas para que mi mente se distraiga, pero no tengo ganas de hablar de esto... ¿No teníamos una entrevista hoy?

—Si, en dos horas más, pero si te quieres escapar de esta conversación podemos fingir que irás por un aperitivo.

Divertido Lee se levanta de su asiento mientras el rubio sale con prisa para avisar a la secretaria de fuera, deteniéndose en la puerta Lee observa aquel asiento y solo sonríe nostálgico.

"—Hoy es... La última vez que nos veamos por un tiempo —Dice desanimado sujetando su propia muñeca —Estoy feliz por ti Lee, por todo lo que has logrado... Quizá para cuando nos volvamos a ver hayas logrado mucho más.

El azabache lo mira con seriedad mientras nervioso el pelirrojo observa como a la lejanía sus amigos se despiden entre ellos.

—Gaara yo... —traga saliva nervioso — ¿Que pensarías si yo... Tuviera una chica en mi vida?

La sorpresa en sus ojos confundidos desciende, sus labios dudaban de hablar y cada vez apretaba con más fuerza su propia mano.

—Se... Sería... Normal... —lo mira.

—No me gusta ser normal —sonrie acariciando la mejilla de su amigo —Gaara, te escribiré cada día o cuando pueda, por favor... Sigue estando a mi lado guardando nuestro secreto.

Más calmado sonríe y llevando su dedo índice a aquellos labios lo mira con calma —Siempre guardaré nuestro secreto, confía en mí Lee.

Con el pecho agitado el azabache traga saliva mientras asiente a aquella cara angelical frente suya."

— ¡Es hora chicos! —se levanta inhalando con profundidad su valor —Debemos avanzar cuanto antes, pero ahora mismo debemos elegir cuál será nuestro rastro.

Ambos jóvenes se miraron y asintieron, Akamaru y Kiba sonrieron con prisa —Se que no será algo muy cómodo, pero nuestra mejor marca es la orina de Akamaru, no será fácil de borrar sin dejar otra marca sobre ella.

Comenzando a servir agua en un trasto especial, Akamaru cargaba su cuerpo mientras recibía caricias del pelirrojo.

—Por mi parte destruiré las paredes como lo hice anteriormente —posando sus dedos sobre la piedra la arena lo seguía marcando el lugar.

—Muy bien —Decia tranquila la rubia —Por mi parte utilizaré mi kunai para marcar mi camino y si cualquier cosa llegará a pasar utilizaré pintura para reafirmar.

Dejando la muestra la chica sonríe a ambos jóvenes y asintiendo entre si se dividen los tres caminos de frente. Gaara suspira avanzando lo más rápido posible por los pasillos.

[Cañon Suna alguna parte]

—Deja de llorar como un niño débil —menciona una voz no tan gruesa —Vamos, vamos kankuro —rie con locura afilando una daga —No seas más un niño llorón, ella lloró mucho menos que tú cuando saque todo su interior —cubre su boca divertido —Hasta trató de hacer un trato conmigo, aunque bueno... No me apetece nada de los hermanos de la arena, estoy harto de ustedes, lo único que quiero es verlos morir... Y claro... A alguien más.

Entre su llanto de furia kankuro seguía intentando safarse de los grilletes que detenían su movimiento, la poca visibilidad de los vendajes mojados apenas y le permitían ver una silueta delgada un tanto alejada de él, quizá dándole la espalda.

— ¿Quién más?

— ¿Que? —deteniendose se gira divertido.

—Dijiste... Que me querías a mi y a mis hermanos... Y a alguien más.

—Oh... —sonrie con diversión —La conoces... Sakura Haruno de Konoha... Ahora mismo deben estarla capturando, solo espero que no sea demasiado problema para él —mirando el filo de la daga se acerca a una silla —Te contaré cómo mate a tu hermana y luego te mataré, quería que el menor de ustedes también los viera morir, pero el estúpido niño logró huir y esconderse... Jamás pensé que fuera tan maldito como para abandonarlos.

—Eso es lo mejor, no quiero que venga a ver lo que has hecho, prefiero mil veces que esté lejos de un maldito loco como tú.

La sonrisa en el rostro de aquella persona se notaba divertida y mientras jugaba con aquella daga comenzaba a relatar la muerte de la hermana del castaño que lleno de rabia solo podía llorar impotente.

Con paso rápido el grupo de Shikamaru avanzaba lo mejor posible mirando alejarse un poco el tornado de arena, sujetando el hombro de Matsuri Shikamaru sentía sus pies ser sujetos por la arena, las corrientes de aire eran fuertes y la única manera de mantenerse con los pies en la arena era que está les sujetará los pies, con algo de cansancio Matsuri soltaba el agarre notando como el segundo líder del escuadron les señalaba el lugar, acercándose los miembros más descansados creaban un domo de arena.

—Falta poco —mencionaba cansado sacando el exceso de arena de sus ropas —Una vez adentro seguiremos en grupo hasta donde lleguen sus marcas, luego comenzaremos a dividirnos para expandir la búsqueda.

—Como ya saben este cañon es una trampa total, los caminos pueden llevarnos al inicio sin darnos cuenta, o nos podrían hacer salir en otro lugar del desierto, quiero que avancen con precaución y las únicas parejas que se van a separar son las de los nuevos de la hoja, ellos iran justos así que ustedes dos vuelvan a formar pareja apenas entremos.

Con un asentimiento y todos sus ropajes sacudidos comenzaban a alistarse para salir y continuar su camino.