II. Muerte

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

―El miedo es el peor de los enemigos, es lo que te encierra, es aquello que mata al deseo, y sin el deseo no somos nada.

El ángel sirvió en dos copas el licor y se sentó en el diván. Esta chica, desde el día anterior, se había quedado acostada en su cama. Nomás se movió para sentarse ante esta visita. El ángel le aclaró que él jamás se habría rebajado a buscar a quien no se había dispuesto a buscarlo, pero que con ella haría una excepción, como si se tratara de un desafío.

―Pero vos ya lo sabías, siempre supiste que tenías miedo, y nunca hiciste nada al respecto. Eso es algo despreciable.

―Si te doy tanto asco, ¿por qué me dejás estar acá? ―Esta chica estaba experimentando, o más bien demostrando, su enojo por primera vez.

―No te confundas, que el asco no es lo mismo la decepción. Y no, no te reduzcas a menos porque te esté retando. Dejá de tener miedo.

―¿Cómo?

―Descubriéndote, descubriendo el mundo, haciéndote ver. Pero... tendrías que ser humana para eso.

―No quiero serlo. Soy una humana horrible.

―Entonces, será que ya estás muerta.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro