Cada semana era más difícil soportar al anfitrión desquiciado que solo se dedicaba a hacer de sus vidas una miseria propensa a asesinarlos de grotescas maneras, siendo su afición esa oración que tanto repudiaba.

"¡Nada de lágrimas, porfavor! Es un desperdicio de buen sufrimiento ~ cómo cuando Gwen y Bridgette se enfrentaron cómo fieras por un admirador secreto." El líder soltó una carcajada ofendiendo a la gótica y a la surfista, que se cruzaron de brazos mientras se miraron mutuamente antes de dedicarse una curvatura. La batalla entre Gwen y Bridgette no le interesaba del todo, ella hasta estuvo en peligro por aferrarse a un alce y le afectó gravemente la eliminación de Harold. ¿Aún así creían que algo de lo demás le dolía? Para nada, estaría completamente a salvo y más por estar consciente que la carta era para ella y ninguna de las dos antes mencionadas. El tiempo de calidad era muy valorado, así que estaría bien en esa pocilga por más que ni siquiera pudiera tolerar a Heather.

Antes de que su buen humor se evapore recapituló su estrategia; exterminar a Heather. Ella sería una verdadera amenaza por sus tendencias manipuladoras específicamente por Lindsay, estaba más que segura que hablar mal a sus espaldas era lo que exactamente expresa su desdén para poner a todos en su contra.

La somnolencia era extrema. No dormir causaba aquella fatiga, pero debían mantener sus párpados abiertos si deseaban no ser probablemente envenenados en medio de su descanso sabiendo de lo capaces que eran los creadores del programa.

Estos mismos se reían sin darle importancia a la incógnita de la morena, mientras anunciaban sobre ser los últimos diez aunque eso de combinar los equipos no sonaba del todo... Bien.

Osea si, mudarse a la cabaña de los topos para que solo hayan féminas era agradable pero no si múltiples dramaturgias se ejecutaban. El repertorio de chistes negativos de Chris la abrumaba pero la falta de eliminaciones la alegró debido a la jovialidad experimentada con algunas mujeres... exceptuando a Heather, que fue su rival desde el inicio y sus embelecos a Bridgette, junto con la de prendas negruzcas alarmando a la rubia.

Las interacciones entre el fiestero y la vegetariana antes que McLean la arrastrara eran adorables, pero le rememoran a Harold... ¿Por qué?

Aunque esa misma dama se espantó cuando confrontaba a Heather. ¿Pero qué más podía hacer? Sus budines habían marcado la ausencia y no dudaba de que hubiera sido Heather, la cual admitió su fraudulenta esencia.

La lucha se extendió mientras Gwen y Lindsay estaban atónitas, aunque la primera le brindaba palmaditas a la de genuinos propósitos con eso siendo su propulsor al contento.

Al percatarse de la bipolaridad de Heather la razón se impactó en su juicio, además de su irreal bienvenida con su concuerdo con Gwen. Pobre de Summers, aquella que era engañada...

El impedimento de la charla entre Bridgette con las demás era ofensivo. El engaño que sufría Lindsay era consolado por las sentencias de Gwen mientras ella mantenía su impresión en Heather. Otro enfrentamiento se hizo con el ejército que se dividía con la cinta de Heather, ejerciendo su voluntad en permanecer con Gwen y Leshawna.

Aunque con un latir solidario sonrió mientras Bridgette cruzaba el muro, antes de retirarse.

Nuevamente esa confusión sobre el desayuno... era peculiar eso de que los platos serían recientemente entregados y no más tempranos, aunque definitivamente no serían naturales por la burla de Chris. Cedía a la tentación sin embargo; aliviar la tensión era propicio.

La inseguridad se desprendía en los poros de Leshawna mientras ella examinaba los platos asquerosos que el denominado Chef les otorgaba con su ceño fruncido. Su fulminante aspecto la agobia sin duda, y demasiado.

Owen sería el mayor sujeto que los estremecería para saciar su estómago, aunque hasta el primer alimento los hizo tragar con dificultad. El bovino estaría melancólico en ese caso seguramente justo cómo DJ respecto al fanatismo a los salvajes.

¿La teoría de Heather sobre sabotear en cuanto al rencor? Ni qué hablar; ella comprendía que Bridgette por más que quisiera no podría masticar siquiera por su nula tolerancia a la carne, pero la insistencia de Heather era aterradora.

Geoff socorriendo a su Bridgette aún le tendía esos trayectos con el de bermejas hebras, pero la puntualidad no era contraproducente al menos.

La pizza con insectos también era repugnante y hasta una sombría escena por las anchoas aún con su oxígeno intacto, su repulsión a Chris y su reducida empatía eran tan descomunales mientras apartaba el elemento blanquecino de ella, así siendo hostigada por Heather pese a no anhelar consumir ello.

Los pescados debilitaban a Bridgette que convivía con el mar cómo su confidente, además de su meditación con Lindsay que era mucho más calmante.

Adquirir el disgusto a los gusanos y esa brizna cabelluda sometida a su paladar contraído era algo opaco para su estrella interior, la sopa era peor y así iban en ascendencia. Su apetito se erradica con cada asquerosidad en decadencia, el dolor intenso era la percepción alterada.

Los delfines eran una presión, esclavizando sus emociones mientras el refresco de cucarachas era lo faltante para drenar su sanidad... Porque reconocía que la sabiduría no estaba en entender el misterio, si no en aceptar que no se puede. De todo lo que se le había arrebatado en ese show; lo que más extrañaba es su cordura.

Digerir ese fluido fue lo culminante contra Owen; no soportaba más ni hasta después de la victoria del de peso obeso mientras una sustancia iba en rumbo a sus papilas gustativas, antes de comenzar a esparcir sangre en la superficie plana.

La atención estaba en ella mientras expulsaba todo lo que resguardó ese carmesí que elevó su certificado temblor. Era de destacar que su óbito se avecina sin ausencia involucrada, ese diluido y espeso rojizo era la prueba definitiva que las denuncias quizá se presentaran.

No le incumbe el viaje en el yate, solo el escenario que era de afligir por ser la atracción que guiaba a los demás en la compañía con el vómito; Heather con el movimiento era su satisfacción personal, le deleitaba la podredumbre a la que tanto estimaba aversión pero quizá abrigaba una revuelta nube porque ella era un avance en la pandilla.

"Bien, eh... No es por nada, ¿Pero no van a ayudar a la bestia gorda?" Se giró en torno a Chris que solo sonreía mientras escudriña con lejanía el ahora cadáver de la vigorosa competidora inventando un plan grave en caso de que su movilización no estuviera pegada a un breve atisbo de asentimiento.

"Pues... Ya no está viva." Atinó Chris mientras suspiros espeluznantes rellenaban el ambiente, con el mutismo propinando un molino de desagrado en los demás. "Sabían que además del dolor estomacal, ¿Ese sería uno de los efectos?"

"¿Esto estuvo... Planeado?" Repleta de agonía se alejó la de esa miel ámbar acendrada, con la bienvenida de una brisa veraniega que viajaba por sus pómulos pero sin barrer sus inseguridades.

"Quién sabe..." Las risotadas compartidas entre él y Chef arquearon el regreso con todos, además del susto permanente... Un fortuito asesinato sucedió y nadie pudo hacer nada por ser espectadores. Uno de los mismos testigos era Chris que ni siquiera se retorció, pero así era su vibra, ¿no?

Labomba explotó ☹️