Comienza el show

~~~Flashback/Skip Time~~~
***Narra XX***
---Cambio de escena---

[Nota: Las palabras y frases subrayadas son dichas en "español", recordar que se supone que están en Japón]

~~~Anteriormente enfrentamientos por equipos~~~

*Time Up*

Sonó el cronometro que marcaba el final del ejercicio, pero el silencio que había, tanto en la zona de prueba como en la sala de monitores se mantenía igual, nadie dijo una palabra hasta que el profesor salió del shock y solo atinó a decir – El equipo Héroes... gana.

~~~Y ahora~~~

El resto de los estudiantes observaban incrédulos el resultado de esta primera ronda de combates, ninguno se atrevía a decir nada, varios de ellos preocupados al ver el estado en el que había terminado su compañero peliverde.

- ¿Qué rayos fue eso? – rompió el silencio Kirishima, viendo las imágenes de sus compañeros en el suelo – los perdedores apenas si tienen un rasguño y los ganadores están por los suelos – señaló.

Y es que Iida apenas tenía unos cuantos raspones por la onda de choque y Bakugou se salvó de la caída con sus explosiones mientras que Uraraka básicamente estaba pegada a la bomba tras haber chocado con la misma, eso sin contar el daño que tenía del ataque que recibió antes; y por último Izuku, era el que más se había lastimado, ya que, aunque alcanzó a levantar el brazo para bloquear la última explosión de Bakugou, esto no le sirvió de mucho, cosa que se reflejó en la gran quemadura que ahora recorría todo su antebrazo. Sin embargo, el daño mayor fue el que se provocó el mismo en su otro brazo, producto del uso de su don, aunque, curiosamente se le veía ligeramente menos dañado en comparación a la primera vez que lo usó, solo que casi nadie podía notarlo.

- Perdieron la batalla, pero ganaron la guerra – declaró solemne Tokoyami a lado de una ligeramente más seria Tsuyu.

– Pero, ¿No se suponía que esto era solo un entrenamiento? – opinó la chica Rana algo confundida.

- A alguien eso le importó una miƏrda – gruñó Isabel molesta viendo la imagen congelada de Bakugou.

Un minuto después, el profesor ya estaba en el edificio, viendo como unos robots de mantenimiento transportaban a su heredero hacia la enfermería, el mismo, gracias a la experiencia, se había percatado del ligero y casi imperceptible cambio en los resultados del uso del One for All sobre su brazo, pero viendo el resto de su cuerpo, así como el estado de su compañera, se debatía si había valido la pena no haber detenido el enfrentamiento antes. Sin embargo, su atención se desvió al chico explosivo un par de pisos debajo, quien seguía mirando el agujero por el que cayó y como este continuaba hasta los cimientos del edificio, pues no se había movido ni un milímetro desde que acabó el ejercicio.

- Ese maldito nerd... - pensaba el pelicenizo mirando el resto de la caída de la que se había salvado – pudo bloquear mi derechazo... y encima de eso pudo encontrar una forma de ganar – el creía que todo fue planeado por el peliverde – ("tú eres una persona increíble... eres talentoso, inteligente, seguro y muchas cosas más, por eso quería ganarte") – recordó – ("pero, si de algo me he dado cuenta es que por encima de todo eso... tú... ¡Tú eres un gran imbécil!") – apretó sus puños con la ira creciendo – (ese maldito se volvió a burlar de mí, me engaño con uno de sus planes de nerd... y además) – mirando como el agujero frente suyo parecía no tener fin – (incluso luchando en serio fui superado por él...) – sí, el interpretó ese último intercambio, como que Izuku se jactó de lo fácil que era engañarlo, pero también se dio cuenta de lo poderoso que era "en realidad".

Viendo que, en vez de calmarse, su estudiante comenzaba a angustiarse más, All might decidió intervenir y tomarlo del hombro para llamar su atención – Vamos joven Bakugou, hay que analizar los resultados... - dijo mientras comenzaba a caminar con el rubio explosivo – no importa si ganas o pierdes, lo importante es aprender de las diferentes experiencias de la vida.

Ya todos reunidos en la sala de monitores, excepto por el Midoriya que se encontraba en la enfermería, los hermanos se acercaron a Iida y a Uraraka para revisarlos, mientras tanto, el maestro comenzó con el análisis – Bueno... está de más decirlo, pero, ¡el mejor de este encuentro fue el joven Iida! – declaró, sorprendiendo al nombrado.

- Pero, ¿esos no deberían ser Ochako-chan o Midoriya-chan? – preguntó Tsuyu sin comprender el razonamiento de su maestro – ellos fueron los que ganaron-kero.

- Hmm, tienes razón, ellos fueron los ganadores... ¿Entonces que podría ser?
¡¿Alguien sabe?!- preguntó el símbolo de la paz.

-Hai, All might-sensei – hablaron Momo e Isabel al mismo tiempo, dándole la segunda un tímido asentimiento a Momo para que hablara ella primero – es porque Iida fue quien mejor se adaptó a la situación.
A lo largo de la batalla Bakugou actuó por cuenta propia y se dejó llevar por algún rencor personal. Justo como lo dijo el profesor, usando ataques de gran alcance en el reducido espacio del área de prueba, lo cual resulta contraproducente, por no decir estúpido – explicó volteando hacia su compañera para cederle la palabra.

– Midoriya por su lado se arriesgó demasiado con su plan, considerando el daño que recibió, además del que ya le había infringido su oponente – describió viendo de reojo al chico explosivo – finalmente Uraraka que, a pesar de que pudo llegar a la sala de la bomba sin que la detectarán, descuidó demasiado sus alrededores, por lo que no pudo evitar el ataque, aunque bueno... aun si lo hubiera visto venir, ese ataque fue innecesariamente desmedido e irresponsable. Además de que la captura del arma fue algo descuidada, ya que, si no fuera de papel mache, hasta el más mínimo raspón podría ser peligroso – terminó visiblemente disgustada y por la mirada que le dio al pelicenizo todos podían imaginar el porqué.

- Iida fue el único que analizó la situación con cuidado y se anticipó a la llegada de sus oponentes – retomó la palabra Momo – Asumió que la pelea sería entorno al arma y a pesar de que no pudo actuar durante el clímax del enfrentamiento era el más preparado para una confrontación – describió mientras Iida sonreía visiblemente contento por la evaluación de su desempeño – el equipo Héroe solo ganó porque era un entrenamiento, pero en realidad rompieron casi todas las reglas.

El resto, con la excepción de 2 personas, miraban incrédulos entre las 2 féminas por lo bien que habían analizado todo el enfrentamiento y a los contrincantes de principio a fin, pero sobre todo, su maestro trataba de disimular su nerviosismo mientras pensaba desesperadamente en algo que poder agregar o decir

– (Dijeron más de lo que esperaba, ahora ya no tengo nada que analizar... ehhh).
¡Buenas observaciones! – dijo – Aunque de igual manera el joven Iida estuvo un poco tenso y ocupa el tratar de relajarse más ante la situación... pero, ¡Es correcto!

- El aprendizaje comienza por lo básico, por eso debemos de concentrar todos nuestros esfuerzos en ello – declaró la pelinegra con rectitud y confianza – de otra manera nunca podremos ser los héroes que necesitan las personas inocentes – declaró volteando hacia su compañera pelicastaña, misma que se encogió un poco en respuesta – es agradable ver a alguien tan bien preparada y comprometida, soy Yaoyorozu Momo, un placer – se presentó ofreciendo su mano a Isabel.

- I-igualmente Yaoyorozu-san – respondió la castaña ligeramente tensa ante la imagen más alta de su compañera, pero también tomando su mano y estrechándola – espero que nos llevemos bien.

- Vaya, aun con ese porte, esa chica le hablo directamente sin asustarla, y yo que creí que tendría que empujar a Isabel solo para que le respondiera – dijo Dan mirando la interacción.

- Te sorprenderías hermano, ella avanzó mucho mientras andabas de mochilero – le respondió Joseph con una sonrisa orgullosa.

- ¡Muy bien jóvenes, continuemos! – llamó el profesor para llamar la atención de los estudiantes y seguir con los ejercicios – primero, cambiaremos de lugar para el segundo encuentro, por mientras reflexionen en lo que hablamos.

Un par de minutos después, en el edificio de combate B, los siguientes 2 equipos estaban listos para comenzar.

- ¡Bien, segundo encuentro! – anunció el maestro – los héroes son el equipo B, compuesto por los jóvenes Shoji y Todoroki – se veía en la entrada del edificio al joven de múltiples manos y a su lado estaba Shoto Todoroki, un chico con cabello peliblanco de un lado y pelirrojo del otro, pero lo más llamativo de este era el hecho de que todo el lado izquierdo de su cuerpo se encontraba cubierto de hielo – y los villanos el equipo I, compuesto por la joven Hagakure y el joven Joseph.

En otra pantalla, que mostraba el interior del edificio, se veía al chico de saco rojo revisando los alrededores del cuarto, como buscando algo específico, a su lado estaba su compañera Toru Hagakure, una chica permanentemente invisible debido a su kosei, la cual se preparaba para comenzar con el ejercicio – Joseph-kun – lo llamó – voy a ir en serio, así que me quitare los guantes y las botas.

- Esta bien – dijo sin dejar de mirar los alrededores – pero si regresas a la habitación avísame, no quisiera lastimarte por error Hagakure-san – declaró volteándola a ver, más bien, viendo sus zapatos y guantes flotando en el aire.

- Uh, no me mires por favor – dijo con vergüenza, extrañando a su compañero.

- Literalmente no puedo verte, pero está bien – respondió volteándose con algo de gracia.

- ¿Eh?, ¡Ahora sí puedo oírlos! – exclamó Kirishima frente a la pantalla.

- Precisamente, esta vez pensé en conectar los comunicadores a las pantallas – explicó, dejándole la duda a algunos de por qué no lo hizo antes – ¡Muy bien! el segundo enfrentamiento del entrenamiento de combate por equipos, ¡Comienza! – voceó el profesor mientras el contador arrancaba.

En la entrada del edificio, Shoji comenzó extendiendo los tentáculos de sus brazos y de uno de ellos surgió en la punta una oreja; su kosei Multi-brazos le permitía crear réplicas de las partes de su cuerpo en los tentáculos que se unían a sus brazos.

Tras unos segundos de escuchar, la oreja se transformó en una boca para poder hablarle a su compañero – Uno de ellos está parado en una esquina de la última sala del cuarto piso, está arrastrando algo, tal vez trata de confundirme o prepara una trampa – opinó mientras otra oreja surgía y escuchaba de nuevo – alguien más está caminando por el pasillo del mismo piso, descalzo, creo que la invisible pretende tendernos una emboscada – explicó, lo último dicho por una segunda boca salida de otro tentáculo.

- Ve afuera – mandó su compañero mientras se adentraba en la estructura – lo más probable es que intentarán forzar una batalla defensiva – razonó sin mucho interés al mismo tiempo que su mano se cubría de escarcha y tocaba con ella una pared.

El efecto del kosei del bicolor fue inmediato y vertiginoso, congelando toda la estructura en cuestión de segundos, de igual forma atrapando los pies de sus contrincantes, aunque solo se podían ver las siluetas de los pies de la chica invisible.

- Ok... eso sí que no me lo esperaba – dijo Joseph tiritando ligeramente, pero sin preocuparse mucho, al menos hasta que vio a su contrincante pararse en la puerta de la sala.

- Puedes intentar liberarte si quieres – dijo el joven de cabello bicolor con una sonrisa serena, pero confiada – pero no podrás pelear al máximo con las heridas que te provocarás al hacerlo – explicó con calma, mas, se detuvo al ver lo calmado que estaba su contrincante, el cual lo miraba con calma desde la esquina de la habitación con la "bomba" a sus espaldas.

- Jeje, lamento reventar tu burbuja Todoroki-san, pero no necesito moverme para enfrentarte – declaró levantando una de sus manos y mostrándole a su contrincante un par de anillos, uno en su dedo medio y el otro en su pulgar – déjame darte un pequeño concejo – dijo mientras unía sus dedos – si vas a inmovilizar a alguien, asegúrate de sujetar todas sus extremidades – terminó antes de chasquear sus dedos, desatando una llamarada que cubrió casi toda la habitación, obligando al chico de hielo a levantar un muro de hielo para cubrirse del impacto.

- Oh vamos – dijo Kirishima desde la sala de monitores – primero Bakugou y ahora Joseph, ¡¿Que no saben lo que es el autocontrol?!

- No amigo, no generalices – le respondió Dan, como si la injuria hubiera sido en contra suya – Joseph puede ser algo descuidado a veces, bastante seguido en realidad, pero no es ningún pirómano como el cabeza de granada aquí presente – defendió a su hermano ganándose un gruñido y una mala cara de Katsuki, misma que ignoro por completo – si no me crees, solo sigue viendo – señalando la pantalla.

De regreso en la batalla, el polvo de la explosión empezaba a despejarse, revelando una imagen que apoyaba la declaración del pelinegro.
La explosión había derretido el hielo y quemado levemente el piso, pero lo sorprendente era el patrón o más bien el área que se había quemado, pues además de parar con el escudo de hielo de Todoroki, esta también se detenía abruptamente unos centímetros antes de llegar a Joseph y formaba una curva perfecta, evitando tanto a su persona como al dispositivo que debía proteger.

- ¿Como hiciste eso? – exigió con seriedad Todoroki, luego de bajar su escudo y notando sus alrededores.

- Ehhh no es por ser payaso ni nada carnal, pero, eso es algo que solo te diré cuando terminemos aquí – respondió encogiéndose de hombros – en una situación real, solo los villanos que sean idiotas o arrogantes te dirán como hacen lo que hacen.

- Ah, eso que – se quejó Kyoka Jiro, una chica de apariencia rockera – yo quería saber cómo hizo eso – señalando la pantalla que mostraba el semi circulo que había formado Joseph a su alrededor.

- Sin embargo, el joven Joseph tiene razón en algo – llamó All might – en un verdadero enfrentamiento es poco probable que su enemigo se detenga a hablar con ustedes, mucho menos a decirles o explicarles algo como la naturaleza de su kosei – declaró – y como héroes se espera lo mismo de ustedes, no deben fanfarronear o podrían estar dándole a su enemigo la manera de vencerlos.

Entre tanto, de vuelta en la batalla, Shoto veía fijamente a su oponente como analizándolo y las opciones que tenía – (Aunque diga eso, ya me mostró algo de su don...
Al parecer necesita de esos anillos para activarlo o tal vez para controlarlo... pero, también podría ser un engaño, el mejor camino es congelarlo por completo, no debería ser difícil teniendo en cuenta que no libero sus pies) – pensó mirando que los pies de su oponente seguían atrapados – (lo malo es lo cerca que está del arma, es solo papel mache, pero me niego a repetir un error que acaban de señalar).

Joseph por su parte, solo veía a su oponente y esperaba a que intentara algo – (este chico se lo está pensando demasiado, en una situación real tu oponente no estará esperando, aunque eso es bueno para mí tampoco creo que se vaya a quedar ahí 15min... a menos que... lo retrase un poco más con una pequeña muestra mis movimientos) – pensó, ya con un plan en mente – muy bien amigo, no sé si estés planeando algo o solo analizándome – llamó sacando a Todoroki de sus pensamientos – sea como sea, te sugiero que te muevas, yo no soy como ese musulmán, pero eso no significa que vaya a ser blando contigo – declaró mientras juntaba sus dedos nuevamente y antes de que su enemigo pudiera responder exclamaba – Infernal mines – al mismo tiempo que chasqueaba los dedos.

En vez de otra llamarada, en esta ocasión surgieron una serie de bolas de fuego del tamaño de pelotas de tenis, dispersadas aleatoriamente por toda la habitación, pero varias de ellas alrededor del chico de hielo.

- Te presento a las minas infernales – anunció Joseph con dramatismo, como si presentara un acto de circo – un simple roce y liberarán una llamarada capaz de calcinarte en segundos... o bueno, así sería en términos normales, estas están rebajadas, igual que un refresco en bolsa de vendedor ambulante, pero no por eso vayas a creer que son inofensivas, ni mucho menos – advirtió mientras volvía a chasquear, y una de las minas explotaba, demostrando la potencia que tenía la misma.

- Un movimiento muy ingenioso, lo admito, pero debo decir que el que está subestimando aquí eres tú Joseph-san – dijo Todoroki mientras comenzaba a emanar más escarcha de su cuerpo – aún sí las hubieras cargado al máximo te puedo asegurar que no serían nada comparado con otro fuego con el que estoy familiarizado – declaró liberando una onda de viento helado, al mismo tiempo que tocaba el suelo y, además de formar una cúpula protectora a su alrededor, genero un pilar de hielo dirigido a su adversario.

- Si eso crees, entonces juguemos – exclamó el moreno chasqueando de nueva cuenta y liberando una llamarada para enfrentar el ataque de su contrincante.

- ¡Increíble! – exclamó Mina, observando el intercambio de los chicos en el monitor – Joseph-san es muy bueno con su kosei, aunque todavía no sé exactamente qué es.

- Su control sobre las llamas es admirable – reconoció Momo con un asentimiento – la manera en que cuido su espacio para evitar daños a la bomba y la creación de estas minas refleja un dominio considerable de su don.

- Y todavía no han visto nada – declaró Isabel sin dejar de ver el enfrentamiento – su kosei no siempre fue el más asombroso, al menos no al principio, pero a base de puro ingenio y mucha prueba y error, él ha podido crear algunos movimientos muy buenos – explicó dejando extrañados a varios, pues no veían como era que ese don podría no ser útil.

Regresando al edificio de combate, el choque de poderes por fin ceso, mismo que había generado que una ligera capa de vapor inundara el cuarto.

- Te dije que no tenías oportunidad -dijo el chico de hielo saliendo de su domo helado.

- De hecho, dijiste que te estaba subestimando, si seguiste hablando dentro de tu caparazón pues la verdad no oí nada carnal – regresó Joseph con una sonrisa.

- Te haces el gracioso a pesar de estar en desventaja – se quejó Todoroki – tu compañera está atrapada y Shoji no tardará mucho en venir luego de este último choque.

- Oso, oso, eso es mentira – dijo Joseph mientras negaba con el dedo y en la sala de monitores su hermana respondía algo como "es, oso, oso mentiroso" – si Shoji-san fuera a venir, lo habría hecho desde la primera explosión, además, ahora tú eres el que está subestimando a Hagakure, Todoroki-san.
Solo es cuestión de tiempo para que se libere, y por muy bueno que seas, dudo que puedas protegerte por delante y por detrás al...

- ¡Joseph-kun! – fue el grito que interrumpió la diatriba del moreno – ¡Estoy aquí, no me vayas a quemar! – se anunció claramente con sus guantes y zapatos, el problema era que, gracias al vapor que todavía estaba en el ambiente, se podía ver algo de su silueta, cosa que sonrojo a Joseph, quien se tapó los ojos y se volteó por reflejo, acto que aprovechó su oponente para congelarlo hasta el cuello. De igual forma volvió a congelar los pies de Hagakure y luego caminó con calma hasta llegar a la bomba y tocarla, terminando con el ejercicio.

- ¡El equipo de héroes gana! – anunció All might.

Sin inmutarse, Shoto simplemente libero una onda de calor que derritió todo el hielo, liberando a sus contrincantes para luego caminar hacia la salida, ignorando los la silueta de la chica invisible, quien fue corriendo hasta su compañero.

- ¡Joseph-kun, ¿te encuentras bien?! – preguntó preocupada por su compañero que mantenía la cabeza gacha, en la puerta, el chico de hielo pensaba que este seguro se sentía humillado por perder de forma tan vergonzosa.

- Jajajaja – se rio, sorprendiendo a todos, incluidos a los que veían el monitor, excepto por sus hermanos – no me lo creo, derrotado por el encanto femenino, que mal.
No te culpo ni nada Hagakure-san, no me mal entiendas – aclaró mientras se levantaba, todavía mirando hacia otro lado – pero sería buena idea que llevaras una gabardina o algo para cubrirte, además del vapor, creo que deben haber muchas cosas que podrían revelarte ante el mundo, si entiendes lo que quiero decir.

La chica invisible al escuchar lo que le dijo su compañero solo pudo sonrojarse, aunque no se viera claro está, y en el pasillo Todoroki chasqueaba la lengua con frustración, había algo en su compañero pelinegro que comenzaba a molestarlo.

Ya todos reunidos en la sala de monitores, Hagakure llevando la gabardina de Joseph luego de que este se la ofreciera para taparse, el maestro se aclaró la garganta para llamar la atención de sus estudiantes, puesto que varios veían a Hagakure y Joseph con miradas sugerentes.

- Muy bien, este fue un combate bastante informativo, ¿Cierto? – comentó tratando de romper el hielo – tal vez les sorprenda, tal vez no, pero aquí los mejores fueron el joven Todoroki y el joven Joseph, ¿Alguien sabe por qué? – preguntó, tensándose un poco al ver a Momo e Isabel levantar la mano de nuevo – eh, si, sé que tienen sus opiniones jóvenes, pero, también quiero escuchar a los demás... ehhh, sí, joven Dan – señalando al pelinegro enmascarado.

- Son los que mejor actuaron, hasta cierto punto, pues aunque Todoroki procedió con inteligencia y congelo el edificio, atrapando a sus contrincantes sin dañar el arma o a su equipo, su falla estuvo en entrar él solo y prescindir del apoyo de su compañero.
Joseph por su lado, a pesar de que se colocó en un buen punto, dónde pudo defender el arma y enfrentar a su oponente, falló en el hecho de que no tenía un plan claro y tampoco acordó nada con Hagakure más allá de que está anunciara su presencia para evitar dañarla por accidente – terminó de hablar, pues por la cara que puso, supo porque su maestro no quería que Momo o Isabel dieran la explicación.

- Precisamente, gracias joven Dan (En serio, gracias) – dijo y pensó All might – a pesar de que ambos supieron preparar el tablero, fallaron al no tener un plan a largo plazo.
El joven Shoji actuó bien al reconocer sus alrededores antes de entrar, pero su falla estuvo en no ir junto con su compañero y tampoco haberse involucrado tras notar la confrontación inicial – explicó haciendo asentir al chico de varios brazos – finalmente la joven Hagakure, ella tuvo una buena idea al tratar de emboscar a sus enemigos, lastimosamente esto no funcionó, ahora, muchos podrían creer que su error estuvo en el momento donde distrajo a su compañero, pero esto no es así, al menos no completamente, puesto que el desenlace de la batalla fue producto del error que ya señaló el joven Dan, pues tanto Joseph como Hagakure no se detuvieron a pensar en alguna forma de proceder.
El poder improvisar y adaptarse a la situación es bueno, pero no por eso deben de arrojarse sin ningún plan, a menos que la situación no les de él tiempo de formular alguno – terminó, recibiendo asentimientos de los presentes.

- Entonces... - dijo Kyoka – ¿Ahora sí podemos saber cuál es tu kosei Joseph-san?

- Jeje, no es nada impresionante en realidad – dijo mientras se rascaba la mejilla – originalmente creía que era una piroquinesis muy sencilla, pero actualmente está registrado como Infernal look (mirada infernal).

- ¿Look? ¿Significa que tiene algo que ver con tus ojos? – preguntó Tsuyu con curiosidad.

- Exacto, mi don me da la capacidad de controlar las llamas, o más específicamente el proceso de combustión, pero además de que no lo generó yo mismo – mostrando sus anillos – solo puedo controlar lo que está en mi campo de visión... más o menos.

- Por eso te llevaste la bomba hasta la esquina – razonó Momo – así podrías ver toda la habitación sin descuidarla.

- ¡Increíble! – opinó Sero – Me pregunto qué otras cosas puedes hacer además de esas minas de fuego.

- Eso debe requerir una gran cantidad de control Joseph-san – dijo Iida

- Muy bien, tranquilos jóvenes – calmó su profesor – después de todo los combates todavía no terminan – mostrando las 2 pelotas siguientes – en el edificio de combate C el equipo J con los jóvenes Koda y Kirishima como los villanos, se enfrentarán al equipo H con el joven Tokoyami y la joven Asui como los héroes – declaró mientras los nombrados se dirigían al lugar señalado.

~~~Mientras tanto~~~
---Oficina del director---

Dentro de su oficina, el director Nezu revisaba y le hacía algunas correcciones de último minuto a los planes de estudio que presentaron los profesores para este ciclo escolar, no porque estuvieran mal claro, pero siempre se puede mejorar.

- Permiso – se anunció Aizawa desde la puerta.

- Oh, Aizawa-kun, me dijeron que querías verme, ¿ha pasado algo? – preguntó el roedor dejando a un lado los papeles.

- Es más una aclaración – respondió el maestro sentándose frente al escritorio del director – estaba revisando algunos archivos de la clase A, y me llamaron la atención algunas inconsistencias en los datos de los chicos Rodríguez.

- Sabía que tú serías el primero en notarlo Shota – reconoció Nezu un poco más serio, pero sin quitar esa sonrisa que siempre tiene – y supongo que crees que yo tengo algo que ver.

- ¿Me equivoco? – cuestionó el hombre desalineado.

- Pues sí y no – respondió sacando unos archivos propios de una gaveta bajo su escritorio – todo lo que hay en esos archivos, ya existía desde antes de que los jóvenes presentaran el examen de ingreso, lo único que yo hice fue intervenir un poco en el proceso de la inscripción de los jóvenes para generar la menor atención posible.

- Sabe que eso solo hará mayor el impacto cuando alguien además de mí u otro de los maestros lo descubra – afirmó con severidad Eraserhead.

- Para entonces espero tener respuestas, o por lo menos, una forma de resolverlo sin levantar un escándalo – respondió Nezu con un tono juguetón – por mientras, dime lo que tú has visto.

- No son muchas cosas en realidad – explicó mostrando los documentos en cuestión – pero hubo 3 que me saltaron por sobre lo demás – dijo buscando las hojas específicas – la primera es que en antecedentes penales la única que lo tiene vacío es Isabel, en el expediente de Joseph aparece una demanda por un incidente que involucró una explosión, pero los detalles están tachados, lo mismo sucede con Dan y algunos cargos por daño a un vehículo.
Pero, volviendo a Isabel – dijo tomando una hoja específica – ella es la que tiene los registros en norma y hasta tiene algunos reconocimientos académicos, excepto por algunas entradas tachadas en su historial médico, una revisión psicológica entre ellas, todo está en orden, pero lo que me llamó la atención es la cantidad de certificados que tiene hasta ahora – enseñándole la lista a Nezu – domina 3 artes marciales distintas; además de su natal español y el japones, tiene un nivel medio en inglés y chino mandarín; primeros auxilios, RCP, razonamiento deductivo, entre otras.
Pareciera que se ha preparado toda su vida para estar aquí, pero todos son de los últimos 5 años.

- Ciertamente es algo misterioso – respondió el director revisando los archivos él mismo – yo mismo me tuve que cerciorar de algunos de los detalles que hay en estos documentos, pero no pude encontrar mucho.
Las lagunas en los registros penales de los jóvenes Dan y Joseph fueron tapadas por ciertos canales que notarían inmediatamente si llego a hurgar demasiado – explicó – lo poco que pude averiguar fue que en el incidente que involucró a Joseph-kun, la demanda no procedió y los cargos fueron retirados, con Dan-kun, encontré que el incidente involucró daño a un vehículo de transporte público y a un auto particular, pero se resolvió de igual forma que con Joseph-kun, sin embargo, sospecho que todo lo que pude obtener fue dejado intencionalmente, pero tampoco creo que sea falso – opinó mirando la pila de hojas – algo que si pude obtener, más haya de datos sueltos, es que aparentemente Isabel-san tuvo alguna clase de altercado hace 6 años, como imaginaras los detalles importantes no están disponibles, pero por lo que pude comprender, ese fue el detonante en la serie de eventos que llevo a su familia a dejar su país y venir a Japón – reveló sorprendiendo levemente al profesor.

- ¿Dice que ciertos canales taparon los registros? – preguntó el pelinegro – eso significa que tienen alguna conexión con gente importante, pero eso también es raro – opinó Aizawa con confusión – por lo general, esa clase de arreglos eliminan todo y les dan un historial limpio, así que, ¿Por qué solo los censuraron?

- Como te dije, es un misterio – respondió el director volviendo a guardar los documentos – sé que probablemente ya tengas tus sospechas, pero hasta que sepamos más no debemos saltar a conclusiones – dijo mientras se levantaba – llámalo instinto animal, pero, algo me dice que no son malos chicos...
Ahora vamos, tomémonos un respiro hablemos de algo más alegre – ofreció mientras caminaba a la puerta seguido del pelinegro.

---De vuelta en el terreno de práctica Beta---

La batalla entre el equipo H y el equipo J había terminado, a pesar de la destreza que demostró Tokoyami en el uso de su kosei Dark Shadow (don que le permite manifestar un monstruo sombra inteligente de su cuerpo, el cual que puede materializar y contraer libremente), no había sido capaz de superar la defensa de Kirishima, afortunadamente la destreza de Tsuyu le permitió superar a Koda y tomar la bomba, terminando el ejercicio.

Una vez terminada la parte de análisis posterior al enfrentamiento, el símbolo de la paz anunció a los participantes del siguiente encuentro.

- Muy bien, para la 4ta ronda tenemos al equipo C con la joven Momo y el joven Dan como los villanos, se enfrentarán al equipo G con el joven Kaminari y la joven Kyoka como los héroes – anunció mostrando las pelotas – todos al edificio de combate D.

Poco tiempo después, y con los estudiantes en posición, el profesor dio inicio al enfrentamiento.
Kyoka usó los Jacks de sus orejas para ubicar a sus oponentes y luego se puso a pensar con su compañero en un plan; Dan y Momo por su parte ya se habían puesto de acuerdo y comenzaron su estrategia asegurando todas las entradas.

Momo uso su don Creation para sacar varias barras de acero que Dan colocó en todas las puertas, luego cubrió todas las ventanas de pegamento para que no se pudieran abrirse, además de pintarlas de negro para que no pudieran verlos desde fuera y por último hizo algunas bombas de humo solo por si acaso.

- ¡Uf! – suspiró Momo – esas fueron muchas cosas, me gasté casi todo el azúcar de mi cuerpo – volteando hacia su compañero, lo vio meter la mano en su abrigo y sacar un paquete de osos de goma – ¿Y eso?

- El don de Isabel también necesita de calorías, por eso siempre llevó algunos dulces, en caso de que los necesite, y también llevo algunos para mí – explico despertando la curiosidad de muchos que ya habían visto juntos a los chicos, algunos ya formándose ideas propias al respecto – tu descansa, yo voy a reforzar las defensas.

El pelinegro entonces se acercó a uno de los muros que conectaba con el pasillo y levanto ambos brazos, una tenue aura azul impregno el concreto y se quedó así un par de segundos antes de desaparecer, a lo que Dan solo asintió y paso a otro muro.

- Esto, ¿Qué fue lo que hizo Dan-kun? – preguntó Uraraka.

- No lo sé – dijo Iida – Isabel-san, ¿Tú sabes?

- De hecho, sí, pero si les dijera arruinaría la sorpresa – respondió dejándolos con la duda.

En poco tiempo, Dan había manipulado no solo los 4 muros de la habitación, sino que hizo lo mismo con el piso y el techo, Momo se había recompuesto un poco con los dulces y sus contrincantes habían comenzado a moverse.
Kaminari subió un piso por encima de sus adversarios y Kyoka volvió a usar sus Jacks para encontrar el mejor punto de entrada, así como escuchar a sus oponentes y saber cuál era su plan.

- Ya estoy en posición Kyoka – dijo Kaminari por su comunicador – tú dices cuando.

- Espera – le respondió su compañera – no puedo escucharlos – dijo sorprendiendo al chico eléctrico y a los demás en la habitación, pues la habían visto ubicarlos fácilmente desde la planta baja.

- ¿Qué hacemos entonces? – preguntó su compañero, su plan requería que supieran ubicar a sus adversarios y atacarlos en su punto ciego desde 2 frentes.

- Espera, creo que si los entierro más – dijo Kyoka forzando a sus Jacks a hundirse más en el concreto, desgraciadamente aplicó demasiada fuerza y terminó atravesándolo, pero lo peor fue que algo la tomo desde el otro lado – demonios, me tienen.

- Entonces no queda de otra – dijo Kaminari lanzándose por la ventana, sostenido por la cinta de captura que había atado a una columna - ¡Aquí voy! – grito entrando por la ventana.

Al aterrizar vio que Dan tenía una mano apuntando a la pared de la que se veían sobresalir los Jacks de Kyoka, por lo que lo primero que hizo fue lanzarse hacia el pelinegro para intentar atacarlo, sin embargo, antes de podérsele acercar Momo le arrojo una bomba de humo cegándolo, y lo siguiente que supo es que había sido envuelto en la cinta de captura.

Los que estaban en la sala de monitores sí habían podido apreciar bien todo el movimiento y la captura de Kaminari, vieron como este aterrizaba y luego de que Momo lo cegara, tanto ella como Dan sacaron sus propias cintas y las lanzaron, envolviendo al chico eléctrico como un trompo antes de que el mismo cayera al suelo.

- Los héroes han sido capturados, la victoria es para el equipo C – anunció All might por el altavoz.

Una vez todos reunidos en la sala de monitores, el profesor comenzó con el análisis del enfrentamiento.

- Muy bien jóvenes, antes que nada, tenemos que felicitar al joven Dan y la joven Momo, son el equipo que mejor lo ha hecho hasta ahora – señaló con un pulgar arriba – ¿Alguno quiere decirnos por qué?... sí, joven Isabel.

- Tanto Momo como Dan se pusieron de acuerdo desde un inicio y aseguraron las entradas – comenzó la castaña – aunque Momo se sobre esforzó ligeramente, no fue demasiado para afectar su desempeño y Dan la apoyó con provisiones, ambos planearon y se prepararon para la confrontación.
A pesar de que Kyoka y Kaminari también planificaron antes de actuar, la diferencia estuvo en que, por un descuido, Kyoka fue capturada y Kaminari entro en pánico, por lo que se arrojó a la confrontación sin pensar bien lo que haría, por lo que fue fácilmente repelido y capturado – terminó su aporte, habiéndole dicho su hermano que tuviera consideración por el maestro primerizo.

- Exactamente joven – asintió el rubio mayor – ambos equipos se prepararon bien, la diferencia estuvo en la ejecución, es algo noble saltar para ayudar a tu compañera joven Kaminari, pero arrojarte de cabeza a la acción podría resultar contraproducente.

- Pero, yo aún me pregunto, ¿Qué fue lo que hizo Dan-kun? – dijo Toru – como fue que evito que Kyoka pudiera escucharlos.

- El insonorizó las paredes – respondió Joseph con simpleza.

- ¡¿Pero ¡¡¿cómo?! – preguntó Kyoka.

- Junté todo el polvo y la tierra que había en el muro y lo usé para tapar todos los agujeros del concreto, cada poro, cada grieta quedo perfectamente sellada.

- Eso es algo impresionante Dan-san – dijo Iida – debo decir que me impresiona el alcance de tu telequinesis.

- Y yo que creí que habían endurecido el muro o algo así, por eso apreté tan fuerte – se quejó Kyoka mientras se palmeaba la cara.

- Bueno, en realidad creo que Dan podría hacer eso... en teoría – opinó Isabel llevando su mano a su barbilla – pero de haber aumentado su densidad eso lo habría encogido ligeramente y, por ende, se habría desestabilizado la estructura, pero si pudiera aumentar su densidad a nivel molecular no tendría ese problema, pero para eso su telequinesis tendría que llegar a la escala atómica... - comenzó a razonar, sin prestarle atención a su alrededor.

Mientras tanto en la enfermería, un chico peliverde que seguía sin despertar, sintió un escalofrió en su columna (una perturbación en la fuerza), sentía como si alguien lo estuviera desafiando en algún sentido.

Pero regresando con el resto del grupo, el profesor sacó las últimas pelotas de cada caja, mostrando los roles para el enfrentamiento final.

- ¡Muy bien! – exclamó All might – para la 5ta y última ronda los jóvenes Sero y Mineta como los villanos, se enfrentarán a las jóvenes Mina e Isabel como las heroínas.

- ¡Vaya, terminamos con un, chicos contra chicas! – dijo Kyoka con una sonrisa desafiante – esto será interesante.

Una vez que los últimos equipos se ubicaron en el edificio de combate E, el maestro dio inició al enfrentamiento final.

Dentro de la sala de la bomba, Mineta optó por tomar todo lo que pudo encontrar para tapar las entradas, pegándolo con las pelotas de su cabeza, mientras Sero usaba sus cintas para crear algo parecido a una telaraña a su alrededor, luego ambos se colocaron a los lados de la bomba para vigilar su perímetro, claro que hubo algo de pánico entre ellos, principalmente de Mineta, pero eso ya se veía venir por la cobardía del pelimorado.

Las chicas por su lado, estaban pensando en la mejor manera de buscar a sus oponentes, hasta que escucharon el ajetreo de cosas moviéndose, por lo que no les tomó mucho ubicar la habitación.

- ¿Tienes alguna idea Isabel-chan? – susurró Mina viendo a su compañera.

- Más o menos, primero veamos, ¿qué sabes hacer? – cuestionó la castaña.

- ¿Yo?, bueno, mi kosei es "Acido" me permite disparar un líquido corrosivo de mi cuerpo, puedo controlar su solubilidad y viscosidad a voluntad, pero hay un límite de tiempo hasta que mi piel pierde su resistencia natural – explicó la pelirrosada soltando un poco de ácido que rápidamente comenzó a derretir el piso bajo sus pies.

- Bien, muy bien, ¿qué más? – respondió su compañera mirando el charco corrosivo y comenzando a pensar.

- ¿Más, a qué te refieres? – cuestionó Mina confundida.

- No pienses solo en tu don Mina-san, ¿tú como persona en que eres buena?
Eres rápida, fuerte, flexible, ¿Sigilosa tal vez? – explicó Isabel.

- Bueno – empezó un poco avergonzada Mina. 

– no es precisamente algo que sirva ahora, pero soy bastante buena bailando break dance, no creo que eso...

- Perfecto, significa que debes de tener un buen control del cuerpo, ¿cierto?
Por lo tanto, tus reflejos también deben de ser rápidos – razonó mientras miraba el cuarto con la bomba y comenzaba a formar un plan, esto sin notar un tenue sonrojo en las mejillas de su compañera, aunque, con su piel rosa, apenas si se notaba – ok, tengo un plan.

- Tomen nota jóvenes – dijo All might frente a la pantalla – este dato que dijo su compañera es cierto, si bien un kosei puede darles una o dos habilidades sorprendentes, nunca está de más tener algunas aptitudes extra.

- Me sorprendió que Isabel-san reconociera el hobby de Mina como algo útil en esta situación – dijo Kirishima un poco más calmado a como había sido todo el rato – por la forma en que analizó todas las peleas, creí que no la tomaría en serio cuando lo dijo.

Al mismo tiempo, dentro del cuarto, Sero y Mineta seguían girando alrededor de la bomba, esperando atentamente (por no decir con miedo el enano), a por cualquier señal de sus adversarias.

- ¡Ahí! – grito Mineta señalando la ventana al momento que por está entraba un chorro de agua, pero esta resulto ser una distracción, puesto que al mismo tiempo el muro en el lado contrario se derritió y por este entró Mina patinando sobre un camino de ácido que salía de sus zapatos.

Ambos chicos se extrañaron al ver a Mina comenzar a girar y realizar varias piruetas, pero esto demostró su utilidad al ver como esquivaba las cintas que había puesto Sero, además de las que el mismo trató de lanzarle, mientras disparaba su acido en direcciones aparentemente aleatorias.

Sin embargo, su sorpresa se convirtió en temor al ver como los chorros de ácido se detenían en el aire para después converger en una gran masa encima de ambos, finalmente convirtiéndose en una jaula que los atrapó junto con la bomba.

- ¡Yahooo! – exclamó Mina mientras se detenía con elegancia a un lado de la ventana, junto a Isabel, la cual había entrado luego de que Mina distrajera a sus oponentes – Eso fue increíble Isabel-chan, salió justo como dijiste.

- Las oportunidades se multiplican a medida que se aprovechan Mina-san – dijo Isabel mientras caminaba a la jaula – el éxito genera éxito, y eso fue justo lo que hiciste – expresó mientras metía la mano entre los "barrotes" y tocaba la bomba.

- ¡Los... digo, las heroínas son las ganadoras! – se corrigió All might, anunciando el fin del último encuentro.

- ¿Nos vamos? - preguntó Isabel a la vez que la jaula se derrumbaba, bañando a sus compañeros en el ácido, mismos que comenzaron a patalear y retorcerse.

- Ay, no sean dramáticos chicos – dijo Mina con burla – hice el ácido débil, lo máximo que les pasara es que les de algo de comezón.

- ¿Cómo polvo pica-pica o algo así? – preguntó su compañera comenzando a caminar hacia la salida.

- Más o menos, todo dependerá del tiempo que tarden en lavárselo – respondió Mina, por lo que ambos chicos se levantaron de inmediato y corrieron al baño más cercano.

Ya todos reunidos, el profesor revisó su reloj y, viéndose un poco apurado, empezó con el análisis mientras se dirigían a la salida del terreno de pruebas.

- ¡Bien! – comenzó All might – para finalizar con este último enfrentamiento, ¿Alguien quiere decir quien lo hizo mejor a su parecer?

- ¡Hai All might-sensei – dijo Momo, y por algún motivo, esta vez no pareció incomodar al maestro – es obvio que el mejor desempeño lo tuvieron Mina e Isabel, puesto que formularon y ejecutaron un plan de manera impecable, distrayendo a sus adversarios, confundiéndolos y atrapándolos en el menor tiempo posible – explicó apenando un poco a ambas chicas – Mineta y Sero pensaron bien y se atrincheraron, pero no pudieron reaccionar al despiste y se congelaron ante la confusión, terminando en su captura.

- Precisamente – dijo el maestro deteniéndose en la salida – hoy todos cometieron algunos errores, pero ese es el punto de aprender.
Afortunadamente, además del joven Midoriya, nadie más tuvo que ir a la enfermería, así que yo diría que lo hicieron muy bien considerando que es su primer entrenamiento – expresó con el pulgar en alto.

- Tener una clase tan optimista luego de la de Aizawa-sensei, se siente... raro – expresó Tsuyu, mientras la mayoría asentía de acuerdo.

- Bueno, después de todo, ¡Aquí en Yūei los profesores tienen la libertad para hacer sus clases como mejor les parezca! – dijo el maestro rubio – por hoy será todo, vayan a ducharse para continuar con sus clases, mientras yo iré a revisar al joven Midoriya para compartirle los resultados, me voy... ¡Como una persona normal! – exclamó a la vez que salía corriendo, viendo por encima del hombro a Katsuki – Joven Bakugou... estás lleno de orgullo, ira y resentimiento... y ese es un veneno que te puede intoxicar, si no te lo tragas a tiempo, pero justo ahora, no me queda tiempo – pensó con impotencia mientras comenzaba a liberar vapor antes de desaparecer tras una puerta de servicio.

- ¿Por qué tendría tanta prisa? – preguntó Dan revisando su reloj – todavía falta media hora para el siguiente periodo.

- Seguramente está preocupado por el estado de Midoriya – dijo Isabel viendo la puerta por la que desapareció su profesor – después de todo, terminó como si lo hubiera atacado un animal – mencionó, haciendo énfasis en la palabra animal, pero eso no pareció afectar al chico rubio a quien le lanzó la indirecta, al menos no visiblemente.

---En las duchas---

- Lo sabía, ¡Las profecías eran ciertas! ¡El paraíso está a nuestro alcance! – parloteaba Mineta mientras veía una de las paredes de las duchas.

- ¿De qué hablas Mineta? No te habrás vuelto loco con ese baño de... – le preguntó Kaminari, solo para quedarse estático al ver lo que el enano le señalaba – acaso... ¿Acaso eso es lo que creo es?

- ¡Oh sí amigo mío! – asintió el pelimorado – un regalo de nuestros predecesores, una ventana al cielo, un camino hacia el Nirvana... un agujero de gloria hacia el lado de las chicas – terminó llamando la atención de varios, pero más de 2 de ellos – a través de este obsequio divino podremos observar las bellezas que se ocultan tras estos muros, el enorme busto de Momo, la perfecta retaguardia de Mina, sí hay suficiente vapor la misteriosa figura de Hagakure, y por supuesto, la espléndida tez color canela de Isabel, todo aquí por... - se detuvo al sentir que era elevado, y se congeló al ver la mirada de pocos amigos que le dirigían Joseph y Dan.

[Nota. Les recuerdo que todo aquello que esté subrayado, será dicho en "español"]

- Escúchame bien maldito enano cabrón, en otras circunstancias te dejaría hacer lo que quieras, ya que lo más seguro es que las mismas chicas te arranquen los cojones en cuanto salgas de aquí – dijo Joseph con una sonrisa oscura.

- Pero si planeas espiar a nuestra hermanita, entonces ahí si tendremos un pedo – le siguió Dan, sorprendiendo a la mayoría, menos a Iida – así que déjame darte un concejo, deja de pensar con el miembro si no quieres que te lo aplasten.

Aunque Mineta no entendió algunas de las palabras que habían usado sus compañeros, el mensaje le quedó claro, así que en cuanto lo bajaron se tapó sus partes nobles y se fue a otra ducha.

En el otro lado, las chicas se bañaban de lo más normal, pero Momo se detuvo al notar que Kyoka tenía uno de sus Jacks conectado a la pared que daba hacia el lado de los chicos.

- ¿Sucedió algo Kyoka? – preguntó fijándose en la mirada impactada que tenía su compañera.

- ¿Los chicos están comparando tamaños? – preguntó Mina sonrojando a Momo.

- No es nada, solo era el pervertido de Mineta que quería espiarlas – respondió mientras palpaba sus propios atributos con decepción – pero Dan y Joseph lo detuvieron.

- Gracias a dios – dijo Momo con alivio – es bueno saber que todavía existen los caballeros.

- Pues... no fue tanto por eso – agregó la chica rockera – fue por Isabel – señaló, haciendo notar que ella estaba en una regadera algo apartada y sin mirarlas – cuando Mineta la nombró ellos saltaron y básicamente lo amenazaron con arrancarle su hombría.

- Ohoho – dijo Mina sonriendo hacia la castaña – alguien ya es popular entre los chicos.

- No es eso Mina-san – corrigió Uraraka nerviosa – ellos solo defendían a su hermana.

- ¡¿Hermana?! – preguntaron Toru y Momo.

- Si, ¿Qué ninguna lo había notado? – se jactó Uraraka con un tono presumido, sacándole una pequeña risa a Isabel.

- B-bueno, en retrospectiva creo que había algunas pistas – se excusó Momo – pero creo que no me fije en ellas.

- Ohhh – se quejó Mina – y yo que ya me los había imaginado, compitiendo entre sí por el amor de su amada, igual que en las películas.

- No metas esas imágenes en mi cabeza – pidió Isabel con una mueca – quisiera conservar mi almuerzo muchas gracias – declaró mirando a la chica rosada, quien tenía una mirada que prometía seguir molestando – no me provoques Ashido.

- jajajaja, muy bien no diré nada – declaró la pelirrosa – no quiero que me encierres en una jaula como a los chicos

- ¿Cómo? – preguntó Toru – ¿Qué no fue tu acido lo que encerró a los chicos?

- Exactamente – respondió Mina con una gran sonrisa.

- No comprendo-kero – habló Tsuyu.

- Yo disparé el ácido, pero fue Isabel la que lo usó para formar la jaula – explicó Mina.

- No fue la gran cosa, tu hiciste la mayoría del trabajo – desestimó la castaña mientras se rascaba la mejilla avergonzada.

- ¿Cómo es posible?, creí que tu don era controlar el agua – cuestionó Momo.

- Casi, mi kosei es Tobirama (una puerta entre mil), se llama así porque tengo la capacidad de controlar cualquier cosa que se encuentre en estado líquido, el agua es lo más sencillo y el elemento que más domino, pero con algo de esfuerzo puedo manipular otras cosas – explicó mientras formaba una esfera de agua y otra con su shampoo, haciendo a la de agua cambiar y convertirse en varias cosas, mientras que la de shampoo hacía lo mismo, pero con menor fluidez y más despacio – entre más viscoso o solido es, más me cuesta controlarlo, además de que su uso constante gasta mi energía corporal.

- Hmm, es por eso que tú y Momo pueden comer tanto sin engordar, eso es muy injusto a mi parecer – dijo Kyoka algo celosa, avergonzando a ambas, lo que provocó algunas risas en las demás, mientras seguían hablando de varias cosas.

Por su parte, en el lado de los chicos, los hermanos tenían su propia sesión de preguntas y respuestas, aunque en su caso los únicos interesados eran Sero, Kirishima, Kaminari e Iida, el resto estaba metido en sus propios pensamientos, uno más por el susto que le dieron, aunque eso no quitaba que escucharan algunas de las preguntas más relevantes que se hacían.

- ¿Entonces cómo te encuentras ahora? – preguntó Sero – aún faltan algunas clases, pero si no te sientes bien...

- Estaré bien – respondió Dan – solo empiezo a sentir malestar luego de 4 o 5 horas seguidas de usar mi don constantemente, y se me quita fácil.

-Y yo que creí que podía golpearte para que soltaras a Kyoka – comentó Kaminari con decepción – aun sí Momo no me hubiera cegado podrías haberme detenido.

- No es seguro que lo hiciera, pero si, probablemente sí – opinó Dan.

- Si tu kosei se relaciona con tu vista, sería buena idea que le pidas concejos a Aizawa-sensei para evitar cualquier daño o riesgo a largo plazo – le sugirió Iida a Joseph.

- Sería buena idea, aunque ya tengo mis propias medidas – respondió el moreno – cada noche me pongo gotas de manzanilla para lubricar y limpiar mis ojos, además de que yo sí puedo parpadear cuando uso mi don, las cosas que hago solo desaparecen si dejo de ver completamente.

- ¿Cómo lo que paso con Hagakure-san? – preguntó Kirishima.

- Eso fue... desafortunado, pero lo bueno es que ahora sabe que hay cosas que pueden "revelarla" por decirlo de algún modo, así tendrá más cuidado en el futuro.

- Hablando de – dijo Kaminari codeando a Joseph – que caballero, dándole tu abrigo a Hagakure.

- Bueno, cuando salimos noté que ella igual seguía cubriéndose con sus guantes, así que supuse que aún se sentía expuesta – explicó el pelinegro con calma – y ahora que se las mañas de cierto enano pelimorado, me alegro de haberlo hecho – agregó alzando un poco la voz mientras señalaba con la cabeza al susodicho.

---Enfermería---

En la sala médica, el joven portador del One for all descansaba con un brazo vendado y el otro enyesado por completo, a su lado, Recovery girl acababa de tener una conversación con el símbolo de la paz, en primera instancia lo había felicitado, creyendo que el entrenamiento que tenía para el chico daba resultados tan pronto, ya que, como médico notó de inmediato los pequeños cambios en las heridas del peliverde, por pequeños que fueran. Sin embargo, cuando este negó haberle dado algún entrenamiento luego del examen de ingreso esta lo regaño fuertemente y le ordenó ir a comenzar a pensar en un régimen de entrenamiento. A veces olvidaba que, a pesar de ser el hombre más fuerte del mundo, seguía siendo tan imbécil como muchos otros, creyendo que era buena idea dejar al chico experimentar por su propia cuenta con su nuevo don, sin guiarlo apropiadamente.

Desde ahí, el resto de las clases transcurrió con normalidad, excepto por Aizawa, que no se mostró muy contento cuando le dijeron la razón de que Izuku no estuviera.

Ya por la tarde, justo un par de minutos después de que sonara la campana de salida, caminaba hacia su salón un peliverde con su traje arruinado y un cabestrillo sosteniendo su brazo derecho, perdido en sus propios pensamientos.

- ("Por ahora no puedo tratarte más, regresa mañana temprano, ¿De acuerdo?") – recordó las palabras de la enfermera con desgano, con esas heridas le esperaba un buen regaño de su madre que, aunque le había demostrado que lo apoyaba con su decisión de convertirse en héroe, seguía siendo su madre, y como tal, se preocupaba de todo lo que le pudiera pasar - *suspiro* (terminé perdiéndome las clases de la tarde, Aizawa-sensei se va a molestar mucho) – pensó mientras abría la puerta.

- ¡Oi, es Midoriya! – exclamó Kirishima emocionado - ¡tú sí que estás loco amigo!, pero igual lo hiciste increíble, bien hecho – lo felicitó acercándose junto con Sero, Mina, Tsuyu y el trio de hermanos – no sé de qué hablaban tú y Bakugou durante su pelea, ¡pero fue realmente intenso!

- Es cierto Midoriya – lo secundó Sero – luchaste de igual a igual contra el que quedo 1ro en el examen de ingreso.

- ¡Tus movimientos fueron increíbles! – lo alabó Mina – esquivaste todos sus ataques como si los previeras.

- El resto de los combates no fueron tan intensos como el tuyo, pero con la demostración que dieron los demás igual nos esforzamos en darlo todo – agregó Isabel – creo que aun tienes problemas con el uso de tu don, pero demostraste lo capas que eres aun sin usarlo.

- Exactamente – declaró Dan – pero eso no quita el hecho de que tienes que mejorar ese aspecto – señalando su yeso – lo mejor sería que le pidas ayuda a los profesores.

- Fuera de eso estuviste genial carnal – opinó Joseph con una gran sonrisa – justo estábamos terminando eso de los análisis, por si quieres checarlo.

El peliverde estaba algo pasmado al recibir tantos elogios y comentarios positivos, pero al mismo tiempo se sentía bien, no recordaba la última vez que alguien lo felicitaba por algo.

Luego de algunas presentaciones, el pequeño grupo seguía socializando, mientras que el resto de la clase estaba en sus propios asuntos; Iida le reprochaba a Tokoyami el que estuviera sentado sobre la mesa de un pupitre mientras este hablaba con Kyoka, solo para que el chico cuervo lo ignorara y la rockera le cuestionara su forma de moverse; Todoroki por su lado, revisaba sus notas y veía ocasionalmente a Joseph, todavía sentía esa incomodidad que le provocó su primer encuentro.

De pronto, por la otra puerta del salón entraron Uraraka y Kaminari con unas copias de material didáctico para una de las clases, con el rubio eléctrico tratando de invitar a la castaña a salir, solo para ser ignorado en cuanto su compañera se dio cuenta que el peliverde había vuelto.

- Deku-kun, ¿Te encuentras bien?, tus heridas no se han curado – cuestionó claramente preocupada por su amigo.

- Esto, lo que pasa es que no tenía la suficiente energía para que me curaran, pero... - se detuvo al notar que la banca donde se sienta Bakugou estaba vacía – pero, más importante... Uraraka-san...

- Intentamos detenerlo, pero, en cuanto acabaron las clases se fue sin decir nada – le respondió Uraraka a su pregunta no formulada.

Sin responder nada, el peliverde salió corriendo, necesitaba hablar con su amigo para aclarar las cosas, ya que, pensándolo bien, gran parte del enojo que demostró su compañero ese día, había sido por el hecho de que este creía que él lo estuvo engañando todos estos años.

Su mente todavía trataba de darle una explicación a la agresividad del pelicenizo, le había prometido a All might guardar el secreto, pero esto era algo que sentía que tenía que hacer... no se lo diría todo, pero estaba seguro que si le explicaba a su amigo que no lo engaño, aun habría esperanzas de recuperar su amistad como la recordaba, o más bien, como quería pensar que fue alguna vez.

- ¡Kacchan! – gritó llegando a la entrada de la academia, viendo a lo lejos al chico explosivo - ¡Kacchan! – volvió a gritar y el nombrado se detuvo, pero sin voltear a verlo.

- ¿Qué? – respondió el rubio a secas y sin voltear todavía.

- Yo... - con un nudo en la garganta Izuku trataba de pensar por donde debía comenzar o que debía decir – hay... hay algo que necesito decirte... es... sobre mi kosei... es... es algo que yo...

- Guárdatelo nerd – lo cortó Bakugou volteando un poco la cabeza – me importa una miƏrda lo que me tengas que decir.

- Pe-pero... solo deja que te explique – intentó decir el peliverde.

- ¿Qué me expliques qué? – preguntó aún con ese tono serio – ¿Que una comadreja radioactiva te mordió, que un viejo loco te hizo un suero extraño, que un dragón salió de cubos mágicos y te cumplió un deseo solo porque sí?
¿O que acaso un total desconocido te hizo su heredero solo por tu "gran corazón" y determinación? – enlistó sin notar como Izuku se tensaba ante lo último y guardaba silencio sin saber cómo responder – sabía que lo primero que harías sería tratar de excusarte con alguna estupidez, como que tu don era reciente o que algo o que alguien te lo dio, pero no creas que soy tan idiota para tragarme una historia como esa...
¿Quieres que me sienta peor que antes?, ¡¿Eh?! – preguntó volteando por completo y soltando su mochila molesto – hoy me ganaste, ¡ESO ES TODO!, te las arreglaste para arrastrarme a una de tus tretas de nerd...
Tú y tu estúpido librito se llevaron una victoria – despotricaba recordando al peliverde y como este le echó en cara que tenía anotaciones incluso de él en su dichoso cuaderno – y no solo tú, el tipo de hielo, la pƏrra con cola de caballo e incluso esos 3 malditos que resultaron ser hermanos, todos demostraron su habilidad...
Varios de ellos incluso me hicieron pensar que no tendría oportunidad contra ellos... ¡miƏrda! ¡lo que dijeron esas malditas en serio me llegó! – recordando el análisis de Momo y las indirectas de Isabel, mientras se volvía a dar la vuelta – no soy tan necio para no darme cuenta... pero tú – mirando a Izuku por encima de su hombro – ni creas que me voy a tragar tus excusas, ¡Esto es solo el comienzo! ¡¿Me oyes?! – gritó antes de tomar su mochila y volver a colgársela - ¡No importa cuantos trucos tengas, igual voy a vencerte... y seré el #1 – declaró reanudando su caminata a la salida – No volverás a vencerme Deku.

Sin más el pelicenizo se fue e Izuku dejo caer su mirada, no había podido aclarar las cosas con su amigo Bakugou, pero al menos ahora sabía que este no lo odiaba, o al menos eso entendió.

Al mismo tiempo, en la entrada del edificio, el símbolo de la paz veía impasible a su sucesor, llegó casi al final de su intercambio, pero se notaba que habían llegado a alguna clase de conclusión, al mismo tiempo, algunos de sus compañeros los veían desde una ventana, no sabiendo bien lo que hablaron y sacando cada uno sus propias conclusiones; y sin que ninguno lo supiera, una persona que había seguido al peliverde desde que salió del salón, había visto todo, y en cuanto All might se acercó a Izuku, esta se retiró en silencio y regreso al edificio.

Las clases apenas comenzaban y los alumnos ya se estaban desenvolviendo, pero este solo era el inicio del largo camino que tendrían que recorrer para poder convertirse en héroes, sin contar que todavía no se topaban con los obstáculos que ya se estaban gestando desde las sombras, esperando el momento para salir y hacer de las suyas.

Además, los secretos de los 3 hermanos comienzan a llamar la atención de algunas personas, nadie sabe lo que encontraran si siguen cavando, ni mucho menos el cómo reaccionarán una vez que descubran el pasado de estos chicos y el camino que los llevó hasta donde están ahora. 

2do capítulo, traído hasta ustedes gracias al equipo de computo y a la red de la Universidad Autónoma de Chiapas.

Todavía voy a esperar otra semana antes de seguir publicando una de las demás historias, pero ahora tendré que hacerlo entre semana, al menos hasta que consiga arreglar el problema que tengo con el Office en mi lap.

Joak0Pie fuera, PAZ!!!