- ¡Los de primer año! ¡Síganme! ¡Los de primer año! - llamaba con una voz gruesa y bastante imponente, aunque ya con estar allí parado ya imponía demasiado.

Camile, con una gran sonrisa camino rápidamente hacia aquel hombre alto que le era muy conocido, demasiado podía decir. El al verla formuló una sonrisa muy grande cosa que hizo que ya pareciera más agradable.

-Hola, Hagrid - lo saluda con una gran sonrisa.

-Hola pequeña Roxy - ella sonrió más ampliamente, él le decía así por el increíble parecido con su madre, excepto por los ojos y el color exacto de su cabello pero por las facciones y el físico eran casi idénticas. Hagrid se dirigió a todos los pequeños niños, algunos asustados y otros bastante fascinados por su entorno - ¡¿Están todos?! ¡Bien! ¡Vamos! ¡A los botes! - se dio la vuelta y comenzó a caminar seguido de todos los estudiantes de primer año.

- ¿Lo conocías? - la castaña la miró, ella asintió mientras George y Fred murmuraban algo de lo mucho que serviría su ayuda en sus travesuras.

-Por supuesto, Hagrid es mi padrino y muy buen amigo de Mamá - señala haciendo que los demás la miraran interesados.

-Tu cada vez pareces más interesante, Camile - dice Fred, todos asienten, ella sonríe.

-Ustedes desde el principio ya lo eran - se ríe un poco y sigue al grupo de alumnos de su mismo año hasta lo que parecía ser el lago negro, según lo que había leído en "Historia de Hogwarts", ese antiguo libro que su madre también había leído al iniciar su primer año, se sintió realmente muy alagada de que le regalara ese libro al recibir su carta. Llegaron a los botes, que tenían dos asientos de madera cada uno, los gemelos, Gabi y Cami se dirigieron a uno vacio para ir los cuatro, George le extiende la mano a Gabi para ayudarla a entrar al bote, Fred y Cami soltaron una pequeñas risitas mientras se sentaban tras ellos.

-Gracias, Georgie - se rió.

-Para mí es todo un placer bella dama - le hace una exagerada reverencia.

- ¿Gabi es una bella dama? - pregunta Fred con diversión, la nombrada lo mira mal, luego se gira hacía George.

-Es usted un muy noble caballero - le sigue el juego.

- ¿George es un noble caballero? - dice Camile haciendo que el pelirrojo le dé una no muy amigable mirada, todos terminan riendo.

Ya cuando están muy bien acomodados en el bote no se sienten en lo absoluto sorprendidos de que estos se estén moviendo solos, siendo Hogwarts se esperaban cualquier cosa. Gabi estaba jugando con sus dedos, cosa que ninguno de sus tres amigos se habían dado cuenta, tenía sentimientos encontrados dentro de sí, quería irse pero estar a la vez, era como una pelea interna de sus sentimientos. Los gemelos miraban los alrededores en busca de algo interesante, pero en ese lugar parecía solo haber una cosa, agua, y Camile, ella solo revivía una y otra vez los relatos del libro "Historia de Hogwarts", recordando y estando preparada para lo que se le presentara.

-Dios, que ganas - musitó nerviosa la castaña mientras mordía su labio inferior y ahora captando la atención de sus amigos quienes asintieron totalmente de acuerdo con ella.

-Que nervios - musita la rubia frotándose las manos sudadas y mirando hacia delante a la espera de ver por fin el inmenso castillo, que había visto en fotografías, a través de toda esa niebla que se extendía por todo el lago negro.

Pero aun así no se había percatado de lo lindo que era el lago, a pesar de tener ese extraño color carbón era muy limpio y cristalino, para algunos formaba curiosidad por saber las impresionantes criaturas que podría haber y para otros bastante miedo a lo desconocido, no así para aquellos cuatro amigos que les gustaba mucho lo que no conocían, les gustaba aprender, cosa que alejaba el miedo, no había espacio para el miedo en su mente. Luego de unos diez minutos más vieron al hombre gigante subir la lámpara y pronto toda la niebla dispersarse dejando ver en casi la punta de un acantilado un castillo victoriano con un centenar de ventanas que emitían mucha luz, todos lo observaron maravillados.

-Miren chicos, ¡Ahí esta Hogwarts! - señaló haciendo que todos salieran de sus ensoñaciones y miraran más que emocionados el lugar que por todo el verano se habían tratado de imaginar después de saber que asistirían a él, y al parecer este había superado las expectativas.

-Wow - emitió el gemelo a lado de la castaña con sus ojos verdes brillante mas vivaces que nunca, como si hubiera visto la cosa más maravillosa del mundo, su boca estaba un poco abierta.

-Mola... - también se encontraba boquiabierta a su lado.

-Por supuesto que mola... - mira el castillo mientras su acomodaba su cabello rubio oscuro detrás de una oreja para que no le molestase los mechones disparejos de su cabello al mirar.

-Es gigante - silba llamando la atención de su hermano - me perderé allí dentro

-Y que lo digas - silba mientras mira a Fred guiñándole un ojo, el rio, sabía bien que él se refería a pasadizos, trampas, algo... Un colegio grande debía tener cosas como esa y el y su gemelo lo descubrirían todo.

-A de haber muchos pasadizos - dice confirmando sus sospechas de a qué se refería.

-Podrían pensar en los estudios también - los mira la rubia, ellos ríen.

-Por supuesto que también pensamos en eso, Cami - dice Gabi mientras los gemelos se miraban con claras expresiones sarcásticas.

-Menudas bromas que haremos - Fred lo mira y chocan sus puños.

-Planeando bromas sin haber entrado, por eso te quiero hermano.

-También te quiero, hermano - se abrazan para que luego tengan que bajar de los botes, George se bajo con una rapidez impresionante y otra vez le estiró la mano a Gabi para ayudarla a bajar.

-Muchas gracias - murmuro ella mientras Fred y Cami los imitaban.

-Muchas gracias - trato de imitar el mismo tono de voz de la castaña pero obviamente no funcionó, los otros dos rieron.

-Estúpidos - el pelirrojo y la rubia se fijaron en ella y le sacaron la lengua mientras se reunían con ellos.

-Espero que estemos todos en la misma casa - dijo George apenas comenzaron a caminar hacia la entrada seguidos de todos los demás curiosos niños de su mismo año, Cami lo miró.

-Lo mismo le dije a Gab - suspiró notoriamente - sería esplendido...

-Lo estaremos, estoy seguro - empuja a las chicas junto a George para entrar rápido al castillo, lo que había dicho no podía estar tan alejado de la realidad.

La selección de casas era su peor miedo.

-Ugh, Fred, George - rio la castaña mientras se quejaba en voz alta - podemos andar solas, ¿saben?

- ¿Y eso de que sirve? Par de lentas - musitó George haciendo que las chicas se mostraran algo ofendidas, Fred volvió a empujarlas para que avanzaran.

-Les dijimos que no empujaran - le devuelve el empujón.

-Estaba de broma, Camile - frunció levemente el ceño mientras sobaba su brazo, todos se colocaron a reír mientras subían por unas escaleras de piedra maciza.

Al final de estas se encontraron con una mujer de porte serio, llevaba puesta una fina túnica larga y verde además de un llamativo sombrero del que sobresalía un impecable cabello negro recogido en un moño, a primera vista parecía una mujer exigente y estricta pero eso no quitaba el hecho de que también fuera una buena profesora, todos los estudiantes nuevos se comenzaron a amontonar delante de ella y pasaron unos minutos más para que guardaran silencio.

- ¡Bienvenidos a Hogwarts! Yo soy la profesora McGonagall - guardo silencio, Camile recordaba que la nombraron en una parte del libro "Historia de Hogwarts" - dentro de poco ingresaran por esas puertas para reunirse con sus compañeros al banquete de comienzo de año pero antes de que ocupen sus lugares en el Gran Comedor pasaran por la ceremonia de selección para que sean seleccionados a sus respectivas casas - todos comenzaron a murmurar, aquella casa de su preferencia y esperando no quedar en la equivocada -, y según la casa a la que sean asignados, su casa será como su familia durante toda su estadía en Hogwarts. Tendrán clases con el resto de sus compañeros de casa y año, dormirán en dormitorios compartidos con ellos y pasaran sus tiempos libres en su sala común - los cuatro chicos se miraron con sonrisas cómplices: "sí, claro, el tiempo libre" -... Las casas son: Gryffindor, Hufflepuff, Ravenclaw y... Slytherin - esta última no la dijo con el mismo respeto que las demás - Cada casa tiene su propia noble historia como también cada una ha producido admirables magos y brujas con renombre. Por cada triunfo que tengan se le sumaran puntos, mientras que cualquier infracción de las reglas hará que los pierdan. Al final de cada año la casa que obtenga más puntos será premiada con la copa de las casas, que es un gran honor... - Fred les levanta el dedo pulgar a los demás, harían que Gryffindor ganara la copa ese año, si quedaban allí.

-Cool - dijeron al unísono las dos chicas haciendo que se miraran y rieran mientras que los gemelos cruzaban sus dedos para quedar en Gryffindor, la casa en la que habían quedado sus hermanos mayores y la mayoría de su familia.

La profesora McGonagall se fue diciendo que a su señal comenzaran a entrar en fila al Gran Comedor, seguramente a verificar si el sombrero ya estaba listo para ser puesto en la cabeza de todos aquellos alumnos de primer año.

-Que nervios - murmuro Camile ganándose los asentimientos de sus amigos, era normal sentir nervios en algo como eso más cuando estaba en juego una amistad, como la de ellos.

Pronto llega la profesora haciendo que se colocaran rígidos y se miraran con una expresión nerviosa mientras vagamente le colocaban atención.

-Ya todo esta listo, entren detrás de mi - dijo antes de que las puertas del Gran Comedor se abrieran para poder entrar.

Todos hicieron fila detrás de ella abriéndose paso entre las que parecían las mesas de Gryffindor y Ravenclaw, al entrar la multitud de niños comenzaron sus miradas curiosas viendo primero a todos sus compañeros que estaban ordenados en cuatro mesas según sus casas. El cielo raso parecía que se abría ante el cielo nocturno, lleno de estrellas brillantes y millones de velas volando flotando arriba de sus cabezas, todos los estudiantes tenían su mirada puesta en aquel pequeño grupo de niños que entraban nerviosos, ansiosos o temerosos de lo que pudiera pasar, todos con los gorros puntiagudos puestos. Finalmente se detuvieron frente a un taburete con un sombrero viejo encima de él, la profesora McGonagall se coloco a un lado de este y agarró un pergamino, y abrió la boca para hablar no sin antes lanzarles una mirada severa a todos.

-Los iré llamando a cada uno y cuando lo haga se tendrán que sentar aquí - señaló el pequeño taburete a su izquierda - y yo les pondré el sombrero para que sean seleccionados a sus casas - todos se paralizaron ante esta declaración:

¿Eso significaba estar delante de toda la escuela con un gorro viejo en su cabeza decidiendo el lugar al que aparentemente pertenecía?

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Nombraron a cuatro chicos antes que a Fred Weasley, quienes fueron a Ravenclaw, Hufflepuff, Slytherin y Slytherin respectivamente. McGonagall miró el pergamino entre los aplausos de Slytherin al recibir a un nuevo miembro,

-Weasley, Fred - el pelirrojo echó a andar hacia el taburete como si fuera mecánico, no se sentó con nada de dificultad por su correcta estatura, apenas se hubo sentado McGonagall le coloco el sombrero haciendo que una voz rasposa se escuchara dentro de su cabeza.

-Ah, otro de esos Weasley, ¿no se cansan, eh? - el apretó los labios en una línea fina evitando el decir: "No, y aun quedan más" - con que más, no me sorprende. Veamos, mmmm si, veo mucha sabiduría y un talento innato para meterte en problemas... Lealtad pura hacia los tuyos pero también veo mucha astucia, como la de una serpiente - frunció el ceño ante la mención de esto, primero se comía un moco de troll antes de quedar en Slytherin - ... Pero estas cualidades no serian posibles si no tuvieras ese innegable valor dentro de ti. Si, sin duda eres muy valiente... - se calló un momento -... Ya sé donde encajas bien, ¡¡GRYFFINDOR!! - esto último lo dijo en un grito que escucharon todos, el pelirrojo le suspiro y poco antes de dirigirse a su mesa le deseo suerte a su hermano con la mirada.

-Felicidades - dijo cortantemente su hermano Percy quien recibió una vaga mirada de agradecimiento por su parte para luego dirigir su vista al frente esperando también escuchar la misma casa para sus tres amigos, si, porque George también era su amigo además de su hermano.

¬¬¬¬¬

Los tres aplaudieron felices de que uno de ellos al menos fuera un Gryffindor, ya los niños que los acompañaban comenzaban a ser seleccionados y George comenzaba a preguntarse en qué orden estará aquella lista, si ya habían nombrado a su hermano se supone que él seguía después pero no fue así. Le echo una rápida mirada a la rubia y castaña a su lado quienes conversaban de algo bajito, realmente sería divertido estar los cuatro en Gryffindor, en la misma casa, Gabi era su amiga de la infancia y Cami apenas la conocía del tren pero ya comenzaba a tenerle un cariño especial aunque sorpresivamente no se comparaba en lo absoluto a Gabi. Mientras que Camile veía desde allí a la mesa de Gryffindor donde Fred le levanto los dos pulgares, ella sonrió para que luego viera a dos chicos más ir a Gryffindor. ¿Qué tan complicado podía ser quedar en Gryffindor? Su mirada se poso de soslayo en la mesa al lado de Gryffindor. Ravenclaw con sus elegantes colores azul y bronce, la casa en la que antiguamente había pertenecido su madre también parecía tentadora, sonrió hasta que sintió un codazo algo fuerte en sus costillas.

-Auch - se quejó hacia Gab quien le señaló hacia arriba donde la profesora McGonagall nombraba su nombre por segunda vez.

-Beckett, Camile - llamó algo más fuerte, ella rápidamente se encamino hacia el taburete donde le costó un poco subirse debido a su reducida estatura y casi al instante sintió la tela áspera del sombrero sobre su cabeza cubriéndole la mayor parte de su campo de visión y escuchando por primera vez una voz áspera dentro de su cabeza.

-Beckett, ¿eh? - Ella tragó saliva, claro, un apellido completamente muggle - pero si esta mente esta llena de cosas, una de las únicas veces que veo tantas cualidades en una persona - eso no le gustó mucho, ¿acaso eso lo haría tardar más? ¿Cuánto tiempo estaría sentada allí delante de todos? - veo una sed de sabiduría y mucha confianza de que lograras tus objetivos. Sin duda piensas lo que dices pero también eres muy impulsiva y valiente, también eres indudablemente inteligente, muy inteligente... Esto es difícil, difícil - el sombrero se quedo callado un largo rato, todos la estaban mirando y ella comenzaba a colocarse nerviosa, apretó el taburete - me gustan los desafíos como tú, pero realmente me la has puesto muy difícil... Veamos, lealtad... Pero no iras allí, claro que no, mucha inteligencia y astucia, pero no creo que ese sea tu lugar y tampoco allí... - ella miró hacia arriba como tratando de analizar lo que él decía, estaba como hablando consigo mismo - Ah, lo veo claro, tengo el lugar perfecto para ti... - ella hizo puños sus manos por un momento - ¡¡GRYFFINDOR!! - suspiro realmente aliviada, muy aliviada de al fin bajar de allí, creía tener la sensación de haber estado más de media hora delante de todos, la mesa de Gryffindor estalló en aplausos haciendo que ella corriera hacia el lado que Fred le había guardado, él le sonrió mientras los profesores y el director la miraban como si fuera algo "extraño y nuevo".

-Fuiste difícil al parecer - le revolvió el cabello mientras dos chicos igual de pelirrojos que él la miraban, Fred se adelantó a presentarlos - mira Camile, son mis hermanos Charlie y Percy - este el ultimo le dirigió una mirada de suficiencia.

-Un gusto - dijo con una voz cortante, ella frunció el ceño sin poder evitarlo pero el otro chico tomo su mano para besarla y sonreírle.

-Un gusto señorita hatstall - ella volvió a fruncir el ceño igual que Fred, Percy bufo casi inaudiblemente - se les llama así a los estudiantes que tardan más de 5 minutos en ser seleccionados y tu mi querida amiga has estado alrededor de 6 minutos arriba - ella abrió los ojos, eso era poco para lo que había pensado - el ultimo hatstall fue la profesora McGonagall y su selección fue hace un poco más de cuatro décadas, no pensé estar para ver la selección de uno - le guiño el ojo - suerte en Gryffindor - ella asintió y fijo su vista en Fred.

-Espero que George y Gab corran con la misma suerte que nosotros - y miró hacia la fila donde estaban ellos dos conversando vete tú a saber de qué.

¬¬¬¬¬

George y Gabi miraban hacia la mesa Gryffindor mientras escuchaban como algunos alumnos y los profesores susurraban algo sobre que Camile era un "hatstall" un término muy desconocido para ellos y mientras ella conversaba con Fred y de vez en cuando le mandaba ánimos a los dos, Gabi oscilaba de nuevo entre las casas, miró hacia la mesa de nuevo y estaba vez fue Charlie y Percy vagamente quienes le mandaron ánimos, junto sus dedos para que les tocara a los dos en Gryffindor al igual que sus amigos pero pronto su mirada se poso en la mesa del fondo, ella también quería estar en Hufflepuff, por su padre, sonrió.

Sería la decisión del sombrero entonces.

George era muchas cosas menos un miedoso, el no tenía en lo absoluto miedo de quedar en otra casa que no fuera la de su gemelo, y separarlos por primera vez... Ok, esta bien, quizás si tenía un poquitín de miedo de que eso pasara, ¡Además el que no lo nombraran y faltaran 3 niños más, él y Gabi lo ponía nervioso! Definitivamente no quería ser el último, tragó saliva cuando un niño de apellido Derrick se iba a Ravenclaw.

-Weasley, George - sintió un segundo pálpito en la garganta cuando lo nombraron y camino con pasos inseguros hacia el taburete, cuando logro sentarse la profesora le coloco el sombrero que pronto emitió un bufido dentro de su cabeza.

-Con que otro Weasley este año, ¿eh? Mmmm... - el miro hacia arriba como tratando de verlo mientras deliberaba - ah, pero tú eres diferente al otro, sí, eso veo... Más tacto con las personas pero igual de leales y valientes - se calló un momento - esa misma habilidad de meterse en problemas, me recuerdan a cuatro selecciones que ya hice hace años... Ya sé que haré contigo - el botó todo el aire que guardaba - ¡¡GRYFFINDOR!! - sonrió y se fue corriendo hacia su mesa al frente de su hermano, no sin antes desearle suerte a Gabi, al llegar choco los puños con su hermano.

-Bien hecho, hermano - le sonríe y dirigen su vista al frente donde se encontraba Gabi con tres chicos más.

¬¬¬¬¬

La castaña le sonrió a George, se alegraba que estuviera en Gryffindor pero a medida que llamaban a los últimos chicos que quedaban ella iba colocándose más y más nerviosa, en parte también tenía miedo y no a la vez, quería estar con sus gemelos y con su nueva amiga porque si quedaba en otra casa, ¿tendría amigos? Realmente tenía miedo de no estar con ellos, de no tener las aventuras esperadas con ellos, George... Fred... y Cami, sabía que no la conocía de mucho tiempo pero sentía que ella no sería solamente su amiga, esperaba que su amistad creciera tanto como ellas a lo largo de los años, ella enserio lo esperaba con ansias.

De los que quedaban uno fue a Slytherin y otro a Hufflepuff, todos estaban aplaudiendo después del último chico seleccionado, ahora solo quedaba ella y otra chica más. Tenía la piel oscura, los ojos negros, no podía parar de mirarla ella sabía que quería quedar en Gryffindor, pero además de eso tenía el raro presentimiento de que esa chica no traía nada bueno consigo, ¿intuición? Puede que este "don" lo haya sacado de su madre, raramente podía casi saber en quienes podía confiar y en quién no.

-Johnson, Angelina - la niña subió mirándola casi con la misma mirada que le lanzaba Percy, como si ella fuera mejor.

Angelina... pensó mientras la miraba con el ceño fruncido.

- ¡GRYFFINDOR! - así que tenía actitudes para esa casa, con solo un vistazo pudo deducir que hubiera quedado mejor en Slytherin, luego de los aplausos la profesora McGonagall observo el pergamino notando el último nombre de la lista.

-Monroe, Gabriella - le sonrió un poco con el sombrero en su mano izquierda.

Se acercó temerosa, todas las casas estaban colocándole especial atención al ser la última niña en ser seleccionada, los nervios estaban aumentando. Se sentó en el taburete sintiendo como McGonagall le colocaba el sombrero, un silencio casi sepulcral envolvió la sala.

-Mira lo que tenemos aquí, otra Monroe en Hogwarts - ella tragó mientras intentaba mirar al sombrero - esto es complicado... Inteligente al igual que leal, bromista y audaz, con una clara y visible preocupación por los demás. Tienes características tan específicas de tus padres, cada uno de una casa diferente, que me hace dudar - se quedó callado un momento - difícil, me la has puesto difícil, aunque... Si, ¡exacto! Ni en esta, ni en aquella, ¡Sí! Lo veo muy claro, y estarás en... ¡¡GRYFFINDOR!! - vio como toda la mesa de Gryffindor le aplaudía, sobre todo los gemelos y Cami quienes le sonreían abiertamente, le quitaron el sombrero y fue corriendo a donde pertenecía, George y Fred la abrazaron fuerte, les devolvió el abrazo de la misma manera.

-Sabia que estarías con nosotros, todo el tiempo lo supe - le aseguró George, ella sonrió.

-No te librarás de nosotros tan fácilmente - le dijo Fred ella rió.

-No pensaba hacerlo - aclaró, miró a su amiga quien también se abalanzó hacia ella, apretujándola.

-Juntas por siempre - murmuró la rubia, ella asintió.

-Es una promesa - murmuró de vuelta.

- ¡Hey, Fred! Hacen promesas sin nosotros, no sé tú pero yo me siento apartado - ellas rieron.

-Y que lo digas, hermano. No es promesa si no participamos nosotros de ella - ruedan los ojos y los abrazan.

-Estaremos juntos para siempre... - dijeron al unísono.

-Y eso si que es una promesa - dijeron los gemelos a la vez, ellas se abalanzaron hacia los otros Weasley, si, también a Percy pero ya luego se arrepentirían, se sentaron junto a los demás, George con Gabi de un lado y Fred con Cami al frente de ellos, aquella chica morena de antes los miraba, la castaña decidió ignorarla por esa vez aunque no le daba muy buena espina.

Buenas, aquí teneis el segundo capítulo, esperó que os guste ya que a Cami y a Mí, nos alegra mucho, ya que nos esforzamos en hacerla ^^
Nos vemos en el siguiente capítulo , bye bye 😊😊😊😊😊😊❤❤❤❤❤❤
~Gemi ~