Mujeres = Fastidio

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

NOTA: buenas a todos, ésta vez les traigo un fanfic del ship Shikamaru x Ino. Cómo siempre iré publicando tres capítulos por semana hasta acabar el fanfic completo, el cual será de 7 capitulos. Un último aviso importante, éste fanfic es la continuación directa del fanfic Almas Gemelas y Mirar A Tu Corazón, los cuales son fanfics también de 7 capitulos y obviamente ambos fanfics están en el mismo universo que éste nuevo de ShikaIno. Éste fanfic comienza dónde terminó el otro (el del NaruSaku), por lo que les recomiendo haber leído el fic Mirar A Tu corazón y Almas Gemelas para poder entender algunas cosas que pasen (y para que puedan disfrutarlo aún más). Ahora sí, los dejo con el primer capítulo del fanfic, que lo disfruten.

---------------------------------------------------------

Ser chunnin era un trabajo pesado... misiones con poca estrategia pero abundantes y a todas horas.

Ser Jounin era lo doble de misiones con más complejidad, además algunas, por no decir que en su mayoría, eran colaboraciones con otras Aldeas, lo que significaba recorrer largas distancias, estar más alerta, enfrentar ninjas más fuertes... más trabajo...

Hacer todo eso era muy molesto... pero no importaba, no ahora que acababa de terminar una misión de meses, ya había terminado los reportes y todo lo correspondiente, solo restaba acostarse a dormir. Pero no habían pasado ni dos minutos acostado en su cama cuando unos gritos que conocía perfectamente se escucharon en la planta baja.

Era su madre gritándole a su padre por el estado de ebriedad en el que había llegado. Esa situación ya se la sabía de muchas maneras diferentes, y sabía que no se terminaría hasta un par de horas después. No entendía por qué su madre se molestaba por unos cuantos tragos, era normal que su padre saliera de vez en cuando con sus amigos después de una misión agotadora, además no eran ningunos desconocidos para su madre, eran Inoichi y Chouza, amigos de toda la vida de su padre.

Lidiar con una mujer era más difícil y complicado que ir a misiones a otras Aldeas, eso era seguro.

Al día siguiente se levantó con más flojera que la de costumbre, le había costado trabajo dormir y para colmo lo sintió como si hubieran pasado solo unos minutos. Pero no tenía tiempo para lamentos, debía ir de nuevo a la oficina de la hokage y apoyarla en la implementación de nuevas estrategias para los exámenes chunnin que se presentarían en esos días.

Desayunó algo ligero y salió a la torre del hokage, al llegar escuchó un par de gritos preocupados, eso también lo conocía... suspiró cansado y abrió la puerta de la oficina solo para comprobar lo que ya sabía, Shizune regañando a Tsunade por haber estado bebiendo la noche anterior.

-¡Tsunade-sama ya habíamos hablado de esto! no me molesta que vaya y tome un poco pero apostar sabiendo muy bien su situación económica... ¡tiene que controlarse mejor!

-Si si, ahora vete y déjame dormir - respondió adormilada encima del escritorio -Tengo una cita de juegos en la tarde a la que no puedo faltar...

-¿¡Que!? ¿¡seguirá apostando!? - se llevó una mano a la frente con frustración -Por favor deme un respiro... ¡no sabe la angustia que pasé anoche buscándola por todas partes!

-Oye yo no te pedí que me buscaras. Mejor consigue un novio, es lo que necesitas para dejar de estar sobre mí todo el tiempo - dijo con una sonrisa dejando caer su cara en el escritorio.

-¡Tsunade-sama! - Shizune se sonrojó desviando la mirada, fue entonces que notó la presencia de Shikamaru - ¡Oh! Shikamaru, no te había escuchado llegar, eh... ¿que necesitas?

-La quinta hokage me dijo que al llegar de mi misión en la frontera arreglaríamos lo de los exámenes chunnin.

-¡Ah sí! ya recordé algo de eso... - se rascó la nuca avergonzada -Bueno, como ya verás Tsunade-sama no está muy bien en estos momentos... ¿te importaría darte una vuelta mañana? por hoy puedes tomarte el día. Sal, regresa a casa...

-¡Bebe y apuestalo todo! - exclamó Tsunade aún adormilada.

-¡Tsunade-sama por favor! - miró a Shikamaru -Olvida eso último y ve a casa, descansa.

Shikamaru asintió saliendo del lugar soltando un suspiro un tanto sorprendido. Tal parecía que hasta las mujeres eran un fastidio para las mismas mujeres.

De igual forma no era un día perdido, al contrario, lo aprovecharía para descansar y reponer todas esas horas de sueño que tuvo que sacrificar para la misión. Ya estaba de camino a casa cuando se encontró con Sakura y Naruto, ambos cargando unas cajas de gran tamaño.

-¡Ah! Shikamaru, ¿y ese milagro que no estás en un tejado durmiendo? - comentó Naruto con una sonrisa divertida.

-Pues, ¿cómo te explicó? los Jounin como yo estamos bastante ocupados atendiendo misiones, haciendo tratos con otras Aldeas y planeando los exámenes chunnin, los cuales por cierto no has presentado.

-¿¡Qué!? ¿¡tan pronto!? no me acordaba de eso.

-Mmh, es cierto, los exámenes serán dentro de poco, ¿cambiaron algunas cosas? - preguntó Sakura.

-La verdad no pude ver ese asunto, la hokage está un poco... indispuesta.

-¿Estaba tomando de nuevo? esa abuela no aprende - suspiró Naruto -Cuando yo sea Hokage eso de ir a tomar estará prohibido.

-Debió ser el estrés - dijo pensativa Sakura -Tsunade-sama siempre toma para poder relajarse.

-¿En lunes?

-¡No la juzgues! - Sakura le dió un leve golpe en la cabeza para después dejar las cajas que llevaba en el suelo -Es una mujer muy ocupada - miró a Shikamaru -¿Estaba muy mal?

-Pues... si, Shizune estaba teniendo algunos problemas para controlarla.

-Mmh, tengo que ir a ayudar - miró a Naruto -¿Puedes hacerte cargo de la mudanza?

-¿Que? ¡pero faltan muchas cosas!

-Usa los clones - se acercó y le dió un beso fugaz en los labios -¿Si?

-Está bien, pero regresa pronto.

-Te prometo no tardar - sonrió y se alejó a paso veloz.

Una vez que desapareció de la vista de ambos, Shikamaru soltó una risa corta.

-Vaya, unas semanas de casados y ya te tiene completamente sometido...

-¡No estoy sometido! - exclamó levemente sonrojado -Sakura-chan es mi esposa ahora, y como un buen esposo debo entender sus preocupaciones y ayudarla en lo que necesite.

-Me suena a pretexto - colocó las manos tras la nuca -Mi papá a veces dice lo mismo... pero que horror estar aguantando recibir órdenes de una mujer histérica... te compadezco.

-No es tan malo como piensas - bajó la mirada con una sonrisa -Puede que Sakura-chan tenga de repente arranques agresivos, pero es una buena mujer... y soy feliz de poder compartir mi vida con ella.

Shikamaru lo miró con duda.

-Cuando te enamores lo entenderás. Ahora, debo terminar la mudanza, no quiero que al llegar Sakura-chan se moleste porque no pude llevar todas sus cosas a casa. ¿Podrías colocar esas arriba de las que traigo?

El castaño suspiró y tomó las cajas.

-Te ayudaré. Ahora no tengo nada más que hacer, así que está bien.

Naruto asintió con una gran sonrisa, en el camino le contaba cómo fue que construyeron su nuevo hogar, Shikamaru lo escuchaba solo comprobando lo que ya había dicho; Naruto estaba siendo sometido, y lo peor era que ni cuenta se daba, y si lo hacía parecía no importarle... ¿cómo podía vivir así?

-Las mujeres son un fastidio, ni ellas mismas se soportan, debiste ver la cara de Shizune-san por no saber qué hacer con la quinta. Naruto, o eres un idiota o tienes mucho valor para haberte casado, en especial con alguien tan cambiante como Sakura.

El rubio sonrió al oír esas palabras.

-Puede que te parezca una locura, supongo que cualquiera lo pensaría, pero cuando estás enamorado de verdad no importa si suena tonto, ridículo, o fastidioso... para ti es lo mejor que te pudo haber pasado... y no lo cambiarías por nada ni por nadie.

Shikamaru no pudo deshacerse de su expresión de sorpresa e incredulidad, no pensó que Naruto diría algo como eso, y menos con tanta seguridad... quizás podría ser verdad... quizás.

Le ayudó a terminar de llevar sus cosas, acomodar un poco y después se retiró, aún tenía su plan de regresar a descansar. Eso pensaba cuando se cruzó con su sensei, estaba por hablarle cuando vió que estaba acompañado por la líder del equipo 8; Kurenai Yuhi.

Ambos estaban caminando tomados de las manos, cada quien con la mirada al otro lado y completamente sonrojados, se veían bastante tiernos, y raros a la vez, ese tipo de comportamiento sería aceptable para niños o adolescentes quizás, ¿pero para dos adultos?... eso no era muy común.

En algún momento Asuma levantó la mirada y al ver a Shikamaru soltó al instante la mano de Kurenai como si estuviese haciendo algo malo, ella lo miró un poco confundida por aquella acción, él no se inmutó y fingió tranquilidad.

-¡Shikamaru! creí que estabas de misión.

-Lo estaba, regresé ayer por la tarde - bostezo un poco -Ahora iba a mi casa, ¿ustedes que hacen?, están de cita ¿no?

-Si/No - respondieron al mismo tiempo.

Shikamaru se quedó estático solo mirando como Kurenai miraba a su sensei con duda y molestia, aunque más molestia.

-¿No?

Asuma se quedó callado. Grave error; pensó Shikamaru recordando a su padre cuando hacía eso con su madre; unos buenos golpes estaban más que asegurados... pero como ellos no estaban casados no estaba seguro si eso aplicaba o no.

Kurenai sonrió levemente y asintió.

-Es bueno saberlo - dijo desvaneciéndose frente a ambos.

- No, Kurenai... - Asuma intentó detenerla pero ya era tarde, se había ido -Tch, maldición.

-No debiste quedarte callado - comentó soltando un suspiro cansado -¿Por qué lo hiciste? debiste pensar que eso solo la pondría más furiosa.

-¿Cómo iba a saberlo? ella me pidió que guardaramos discreción, no sabía qué hacer.

-¿Y por eso pensaste que negarla era una buena opción? - Asuma se encogió de hombros avergonzado.

-No es que la negara... me pidió discreción, pero no para de decirme que quiere salir a la Aldea a pasear, eso es como exhibirnos - suspiró -No sé qué es lo que quiere entonces, las mujeres son difíciles de entender.

-Y más difícil hacer que te perdonen - colocó una mano en su hombro -Créeme, he visto a mi padre hacer miles de cosas para arreglar las cosas con mi madre. Yo tampoco entiendo a las mujeres en lo más mínimo, pero estoy seguro que si tardas más de lo que ya lo haces ahora, te irá peor...

Asuma tragó grueso, Kurenai no era agresiva, pero podía ser muy cortante y fría si se lo proponía. Asintió nervioso y se fue en su búsqueda. Shikamaru negó con una leve sonrisa. Otro punto a su favor de querer evitar a las mujeres y sus constantes problemas.

Siguiendo su camino se encontró con Sai, él estaba frente a una fuente conmemorativa del Clan Senju y del Uchiha cuando fue la fundación de la Aldea, parecía que estaba haciendo uno de sus muchos dibujos. En un principio dudó en acercarse por lo raro que era, pero entendía que no era su culpa, después de todo él fue criado en Raíz.

-¡Sai! - exclamó llamando su atención.

-Hola Shikamaru - desvió la vista de la fuente para sonreir falsamente -¿Qué te trae por aquí?

-Iba de camino a casa, la misión que tenía se pospuso.

-Entonces fue un alivio para ti.

-De hecho si, vengo de una misión larga y ésta cancelación me viene de maravilla. ¿Tú también estás de descanso?

-Algo así - volvió la vista a su dibujo -Con la nueva reforma de la hokage a las normas de Raíz, las cosas han mejorado mucho para nosotros. Aún tenemos restricciones pero ya logramos tener más libertades.

-Me alegra por ti, por ahí escuché que se pidió tu traslado definitivo al equipo 7. ¿Ya fue aprobado?

-No lo sé, no me han mandado llamar, pero Kakashi dice que es probable que si - miró nuevamente a la fuente -Aunque no se si pueda integrarme aún. Hay muchas cosas que no entiendo muy bien.

-¿Respecto a las misiones?

-No, a como debo portarme. He leído muchos libros de integración y conducta social pero... cada vez que intento aplicar algo parece que lo hago incorrectamente. He pensado en ya no intentarlo, pero cada que paso por aquí y miro ésta fuente... me dan ganas de esforzarme más hasta conseguirlo.

Shikamaru miró la fuente sin sentir nada en particular. Le parecía algo bonita pero nada más que eso. Si, Sai era un poco raro.

-¿Tiene algún significado importante para ti?

-Esperanza - respondió sin mirarlo -Alguien como yo que fue entrenado para no tener emociones que diga que siente esperanza puede parecer algo fuera de lo normal, pero por los libros que he leído ésto que siento es descrito así... esperanza. Los Senju del bosque y los Uchiha eran Clanes con costumbres y opiniones muy diferentes, pero aún así lograron adaptarse y fundar una Aldea... si ellos pudieron hacerlo... sé que yo también puedo llevarme bien con los demás - sonrió genuinamente.

Shikamaru no pudo evitar sonreír sorprendido, ahora se retractaba un poco de pensar que Sai era raro.

-Si, tienes razón - colocó una mano en su hombro -Sé que lograrás adaptarte. Si tienes duda en algo o necesitas un consejo, puedes decirme, te ayudaré en lo que pueda.

-Gracias, ahora que lo mencionas y si no te molesta, ¿puedo hacerte una pregunta? - dijo mirándolo de nuevo. Shikamaru asintió -¿Qué es lo que debo hacer para poder entender a una mujer?

El Nara lo miró con sinceridad y sonrió de la misma manera.

-No tengo ni la más mínima idea. Pero si sirve de algo, hasta ahora no hay nadie que haya podido hacerlo, ni siquiera las mujeres se entienden entre ellas mismas, créeme.

-Pero necesito entender a las mujeres para poder incorporarme a la sociedad y al equipo, muchos de los problemas que he llegado a tener es por no entender bien a Sakura-san. Debe haber alguna forma.

Shikamaru lo pensó unos segundos.

-Mira, no se si funcione o no, pero creo que si entiendes a la más problemática, fastidiosa y neurótica, no tendrás problemas para hablar o socializar con alguna mujer.

-¿Tú crees?... Mmh, podría intentarlo... ¿pero dónde encuentro a una mujer así?

-Oh, por eso no te preocupes, yo sé muy bien quien te puede ayudar con eso.

--Centro de Konoha, Florería Yamanaka--

-¿Una florería? - preguntó Sai confundido -¿Con flores puedo entender a las mujeres?

-No son las flores en sí, es la dueña a la que debes entender - explicó - si logras entender su comportamiento y tener una relación amistosa con ella, entonces las demás mujeres serán pan comido.

-Si tú lo dices entonces te creeré - sonrió falsamente -Sakura dice que tú eres uno de los más inteligentes de la Aldea así que te tomaré la palabra.

Ambos entraron a la florería en donde Ino estaba dándole una flor roja a un hombre alto de cabellos anaranjados, él la aceptó con un leve sonrojo. Sin saber el por qué, Shikamaru frunció el entrecejo levemente a la vez que sentía una presión extraña en el pecho.

-Oh, bienvenidos - saludó Ino haciéndose a un lado -En un momento los atiendo - entonces ella volvió su vista al hombre -Gracias por todo, fue lindo y gratificante platicar contigo, recuerda que si necesitas algo no dudes en pedírmelo, estaré encantada de poder ayudarte.

-Gracias, de verdad aprecio mucho la ayuda - sonrió -Ahora debo irme, cuídate mucho y me saludas a Inoichi.

-Claro, ten cuidado y espero verte pronto.

El hombre asintió y caminó a la salida, se detuvo un momento frente a Shikamaru y Sai para reverenciarlos levemente y decir un "con permiso" muy amable. Ambos igual lo reverenciaron y se hicieron a un lado para dejarlo salir. Una vez que aquel hombre se fue, Shikamaru se acercó a Ino con una ceja alzada.

-¿Y ese quien era? ¿un nuevo pretendiente? ¿no crees que se ve un poco viejo para ti?

-Ja, ja, muy gracioso Shikamaru - contestó con sarcasmo -Pero dudo mucho que hayas venido hasta acá para preguntar eso, ¿qué se te ofrece?

-Sai necesita ayuda para poder entender a las mujeres - el nombrado se acercó con su sonrisa falsa, Shikamaru lo tomó por los hombros -Pensé que tú podrías ayudarlo con eso... pero quizás estas muy ocupada y no tengas tiempo.

-Oh no no, si se trata de ayudar lo haré con gusto - contestó al instante a la vez que miraba a Sai con una sonrisa radiante -Puedes estar tranquilo, yo te enseñaré todo lo que necesitas saber.

-Muchas gracias, de verdad necesito ayuda.

Shikamaru volvió a sentir esa rara sensación de incomodidad, quizás no había sido buena idea llevar a Sai con Ino. En ese momento, Ino se giró hacia Shikamaru con un brillo especial en sus ojos acompañado de un leve rubor en sus mejillas que lograron interrumpir los pensamientos del castaño.

-Entonces... ¿pensaste que yo sería una buena guía para poder enseñar a comprender los sentimientos femeninos de los demás?

El Nara desvió un momento la mirada a la vez que llevaba una mano tras su nuca levemente sonrojado. Ino se había visto un poco tierna ante sus ojos.

-Eh.. bueno, yo...

-No creo - dijo de pronto Sai pensativo - Shikamaru-san dijo que nadie podía entender a las mujeres como tal, pero que si lograba entender a la más problemática, fastidiosa y neurótica tendría una posibilidad. Lo siguiente fue que venimos aquí.

El sonrojo y el brillo de los ojos de la Yamanaka desaparecieron al instante, y un nerviosismo y miedo aparecieron en el Nara.

-Ah... así que eso era lo que pensabas realmente... - susurró apretando su puño con fuerza para después impactarlo en la mejilla de su compañero de equipo -¡Eres un idiota! ¡vete, vete de aquí y no regreses! - exclamó arrojandole todo lo que tenía a su alcance -¡Fuera, no quiero verte hasta que se presente una misión!

Shikamaru salió de la florería sobándose la cabeza pues unos libros y algunas cosas que no pudo identificar bien que eran habían logrado darle un par de veces. ¿Y así quería que no le dijera neurótica? pedía imposibles... como sea ya había cumplido su cometido del día; ayudar a Sai. Suspiró para después comenzar a caminar de nuevo a su casa, ya había tenido suficientes problemas en tan solo una mañana, claro que gracias a eso también había conseguido un bono extra al verificar lo que siempre había pensado hasta el momento... las mujeres eran un fastidio. Un fastidio del cual no quisiera lidiar, pero para su desgracia no podría evitarlo. No estaba seguro por qué, pero esa rara sensación de incomodidad al ver a Ino dándole esa flor a aquel hombre que hasta ahora nunca había visto, le daba un mal presentimiento que no se desvanecía.

Ino podría ser un fastidio algunas veces, pero también era cierto que la apreciaba mucho como para verla sufrir después por un sujeto que tenía cara de traficante de órganos. No quería involucrarse... pero Ino no era una persona que se caracterizara por su buen gusto en hombres dado que anteriormente se había fijado en Sasuke Uchiha; quien terminó siendo un ninja renegado y ahora buscado en varios países. Si algo malo le pasaba después no podría seguir viviendo en paz. Si, ya no había manera de no involucrarse, ahora debía investigar al tipo.

Si... las mujeres eran un fastidio...

--Fin del capítulo uno--

Espero que les haya gustado ésta "introducción", iré publicando el resto de los capítulos con el paso de los días. Publicaré tres capítulos por semana como ya dije hasta llegar al último, el cual será publicado al día siguiente del ante último cap.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro