One

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

🦊🦊🦊

Mi nombre es Kim Taehyung, tengo 17 años y soy un híbrido de zorro.

Vivo entre los bosques con mi familia, escondidos del peligro y los cazadores, mi padre siempre me dice que debo tener cuidado, que no vaya solo lejos de la pequeña manada que habíamos formado con otras familias de zorros y usualmente le hago caso, mucho caso.

Pero ese día mientras correteaba tras una mariposa, me alejé demasiado y suelo ser bien conocido como un híbrido distraído así que no noté una trampa de cazador hasta que me encontré colgando de mis patitas traseras en la rama de un árbol.

Se lo que están pensando ¿Por qué simplemente no me transformaba en mi lado humano y así con mi peso rompía la soga? Bueno, está el pequeño detalle que no he podido transformarme en mi lado humano.

Nunca.

Mamá dice que probablemente fue porque cuando estuvo embarazada de mi, pasó la mayoría de los cinco meses de gestación en su forma animal y también fui concebido así, y si, nací en mi forma de zorrito igual.

Así que estaba jodido, lo único que podía hacer era lloriquear y agitarme con la espera de que me salvaran o de romper la soga.

Moriría sin saber cómo es mi cuerpo humano, sin dar mi primer beso o tener cachorros ¿Podía la vida ser más cruel conmigo?

Si, si podía.

O por lo menos lo confirmé al escuchar pisadas cerca mío, mi cuerpo se petrificó y dejé de quejarme de inmediato.

Entonces lo vi, un hombre alto y delgado caminaba hacia mí dirección, su atención parecía estar en el pasto y lo preferí así, tal vez si no me muevo no se de cuenta de mi presencia.

Pero de nuevo recordé que que la vida me odia demasiado y el hombre alzó la mirada hacia mí.

Dejó de caminar entonces y pude apreciarlo mejor, era joven y musculoso, su cabello negro le llegaba hasta las mejillas y su rostro era bastante atractivo, vestía con unos jeans azules desgastados, botas negras, camisa roja y una chaqueta negra.

¿Ya había dicho que es guapo? Porque lo es y mucho.

Pero eso no evitó que entrara en pánico cuando caminó hacia mi.

-Así que quedaste atrapado.-dijo el hombre y una vez cerca de mí, sostuvo mi cuerpo en una mano y la otra la usó para sacar una navaja de su chaqueta.

¿Va a matarme ya? ¿Así de pronto? ¡Estaba muy joven todavía!

Entré en pánico y volví a agitarme como loco mientras chillaba, el hombre guapo trató entonces de tomarme con ambas manos mientras me pedía que me calmara.

-Llamarás la atención de mi hermano si sigues así, pequeñín.-dijo con calma.-Voy a liberarte, pero tienes que calmarte un poco.

¿A quién le decía pequeñín? Yo no soy... Esperen... ¿Va a liberarme? ¿Realmente lo hará? 

Dejé de moverme y el pelinegro me sonrió, entonces volvió a tomar mi cuerpo, acercándome a su pecho ya que la soga no era ni tan alta, un aroma bastante masculino llegó a mi de inmediato y olfateé gustoso, olía a pino.

El hombre cortó la soga con facilidad y me encontré acurrucado en su brazo y apoyado contra su pecho, luego fueron ambos brazos los que sentí a mi alrededor  y me apretujaron con cuidado.

-¿Te lastimaste?-me preguntó, obviamente no podía podía responder, luego escuché como seguía murmurando.-Le dije a hyung que parara con las trampas, pero ya veo que no me hace caso.

¿Era extraño no sentir miedo a un desconocido? ¿Qué de colmo fue su hermano quien puso trampas para animalitos indefensos como yo? Voy a culpar al hecho de que es muy guapo y eso me distrae.

Me removí para poder ver su rostro otra vez y me encontré directamente con sus ojos, eran amables y cálidos, no sabía que alguien completamente humano podía tener ese tipo de emociones, yo solo había escuchado sobre hombres despiadados y crueles, que los cazaban para comer de su carne y quedarse luego con la piel.

Me estremecí con solo imaginarlo, justo en el momento en que el hombre empezaba a caminar conmigo todavía en brazos.

-Voy a adentrarte al bosque, estás muy cerca del pueblo y podrían capturarte fácilmente.-dijo con calma y me sentí agradecido de que me lo explicara.

Simplemente disfruté de la calidez que transmitía el hombre, era perfecto contrastado al frío que hacía en esa época del año, ni siquiera noté cuanto tiempo exacto pasó cuando el hombre guapo dejó de caminar y se agachó, entonces con cuidado me dejó sobre el pasto y no pude evitar el quejarme, estaba bastante cómodo entre sus brazos.

-Creo que estarás bien desde aquí, regresa con tu familia, pequeño y ten cuidado de ahora en adelante.

Ladeé la cabeza y cuando acercó su mano a mi cabeza, mi cola en automático y sin pedir permiso empezó a agitarse.

-Debo parecer un loco hablándole a un zorro, pero ya que.-murmuró divertido.

Pero yo lo veo bastante normal, no te atrevas a dejar de acariciarme.

Me quejé cuando mi orden fue ignorada, el hombre guapo alejó la mano de mi cabeza y luego se levantó.

-Adiós, amiguito, ten una buena vida.-me dijo y luego se dio la vuelta para regresar por donde venía.

Unas inmensas ganas de seguirlo me envolvieron, de hecho hasta di un paso para hacerlo, pero escuché un ruido tras un arbusto y pronto apareció otro zorro que conocía bien.

Mi hermano mayor que se llama por cierto, Namjoon, tenía un semblante entre asustado y molesto, me hizo un movimiento con la cabeza para que le siguiera y quise escapar, pero sabía que sería peor, así que me preparé para el regaño, no me importaba tanto ya que lograba contentarle con lo extremadamente tierno que soy, además, siempre se queja de que sentía que le hablaba a una pared ya que no recibía palabras de mi parte por obvias razones.

Caminamos el tramo que faltaba hasta llegar a la manada, no era que viviéramos en madrigueras o cuevas, de hecho papá y los representantes de las otras familias se organizaron para construir casas de madera y una cerca se supone que para proteger de extraños, pero nunca vi a nadie desconocido vagando a las afueras de la manada.

Avanzamos hasta nuestra pequeña casa, donde probablemente mamá y papá nos esperan para regañarme, justo en la entrada, mi hermano tomó su forma de hombre para así abrir la puerta y luego entró.

-Taehyung estuvo cerca del pueblo de los cazadores.-fue lo primero que dijo caminando desnudo hacia la puerta al fondo donde se encerró, era su habitación.

-¿Cómo has dicho?-preguntó mamá alarmada mientras aparecía por el umbral de la cocina a su derecha.

Caminé desinteresado hasta el sofá frente a la ventana al lado de la puerta principal y salté para hacerme una bolita y así dormir.

Como supuse, mamá empezó a regañarme y tal parecía, papá no estaba ya que si estuviera,  también estaría haciendo lo mismo.

Suspiré agitando mi colita con molestia ¿Yo que sabía sobre el pueblo de los cazadores? Simplemente me perdí y terminé ahí. Por suerte un hermoso hombre me salvó aunque era una lástima no saber su nombre.

Tal vez algún día pueda verlo de nuevo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro