Thirty one

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🦊🦊🦊

Para este punto de mi vida, ni siquiera sé cómo todavía respiro.

Mamá dice que ha pasado un mes, pero yo lo siento como si fueran muchos años desde la última vez que vi a Jungkook.

Desde entonces no hago más que llorar en la cama de mi hermano, casi no como porque ni siquiera me da hambre y solo me levanto para ir al baño y hacer mis necesidades o bañarme.

En todo ese tiempo tampoco le he hablado a papá, teniendo la esperanza de que él se acercara primero y pidiera perdón o algo parecido, pero eso nunca pasaba.

-Tae, debes de comer un poco.

La voz de mamá de escuchó lejana, ni siquiera me moví, estaba de lado así que por suerte le daba la espalda.

-Tae...-me volvió a llamar.

No dije nada de nuevo y mamá suspiró, pensé que me dejaría en paz pero al poco tiempo sentí que la cama se hundía tras de mí y una mano se posaba sobre mi hombro.

-No puedes seguir así, ya lo hemos hablado, debes recuperarte  ¿Cómo crees que se sentirá Jungkook si te viera así?

Sentí como si mi pecho se aplastara al escuchar su nombre, mis ojos picaron y jadeé.

-Jung-Kook.-lloriqueé abrazándome a mí mismo.

Lo extrañaba tanto, todavía me parece todo tan injusto, lo peor era que Namjoon si podía ir a verlo porque papá le mandó a vigilarlo.

Aunque la única ventaja de ello era que Jungkook me mandaba mensajes con él o me pedía que hiciera cosas para que no me aburra, aveces lo hacía, aprendí a leer un poco con Nam porque Jungkook me lo pidió, entonces me envió libros para leer.

-Mantente sano por él, hijo, tu padre no estará molesto por siempre y...

-¡Mes!-exclamé sentándome de golpe.-¡Pasar un mes!

Mi habla no ha mejorado, más que todo porque casi no hablaba con nadie.

-Sabes que tu padre ha estado ocupado con lo que pasó con Hae.

Me quejé acostándome de lado de nuevo.

Externamente habían pasado algunas cosas, aunque lo más importante era que Jung Hae había muerto, papá le mató cuando lo encontró enterrando dos de los cachorros que habían nacido junto a Hoseok y porque encontró en un estado moribundo a su pareja.

Papá había entrado en un estado de ira pura y nadie le detuvo cuando empezó una pelea con él, el cual terminó con la muerte de Hae.

No sé que había pasado con la mujer, lo último que escuché hace unos cuantos días era que estaban arreglando y limpiando la casa dañada, para ella y la cría que quedó viva.

Me pregunto si Hoseok se quedaría con su madre o con Jungkook, durante todo este tiempo no he visto que lo trajeran aunque, qué iba a estar sabiendo yo sí ni salgo.

Sentí que algo peludo rozaba mis piernas y pronto frente a mí se posó un zorro pequeño de pelaje blanco, Jungkook lo salvó de la muerte y Namjoon lo trajo a casa, no era un híbrido como nosotros, era un pequeño animal que tuvo la suerte de ser salvado y desde entonces era parte de nuestra familia.

-¿Nam no volver?-pregunté mientras acariciaba el suave pelaje del zorrito.

Seguía despierto porque quería ver si Namjoon me traía algo nuevo, una cartita, un libro, me conformo con cualquier cosa que provenga de mi hombre.

-Todavía no cariño.

Puchereé.

-Cuando él venir yo comer.

Mamá no dijo nada al instante hasta que un rato después suspiró y dejé de sentir su peso en la cama.

-Prepararé algo para ti mientras tanto entonces.-dijo mamá suavemente.-¿Qué te gustaría...?

Mamá dejó de hablar cuando se escuchó la puerta principal siendo abierta.

-¡Ya volví!

La voz de Namjoon se escuchó seguido de sus pasos, me senté sujetando al zorro contra mi pecho y en ese momento Namjoon ingresó con algo en las manos.

Observé fijamente sus manos, parecía un trapo o no estoy realmente seguro, pero su aroma hizo que mi cola se agitara de emoción.

-Jung-Kook...

Namjoon suspiró acercándose a mí.

-Sé que papá se enterará por el obvio olor en la camisa, pero solo quiero que te sientas mejor.-dijo sentándose frente a mí en la cama y extendiendo la camisa negra que parecía envolver algo.-Ten cuidado, está cubriendo una cajita.

-¿Cajita?-repetí dejando al zorro sobre la cama y tomándo lo que me ofrecía con cuidado.

-Es un pastel.-dijo Namjoon.-Es de fresas, le conté ayer a Jungkook que no has comido bien en estos días y ahora me dijo que te preparó el pastel, es pequeño, una porción exacta para ti.

Mientras hablaba, empecé a retirar la camisa con cuidado hasta que una caja de plástico transparente apareció, llevé entonces la tela a mí rostro para oler el aroma de Jungkook y gimoteé, dejando que las lágrimas salieran libres por fin.

-¡Koo!

Lloré sin poder contener ninguna lágrima, me sentía tan mal, como si me estuvieran haciendo daño físicamente, yo solo quería que volviera, era lo único y así estaría bien de nuevo, todo estaría más que bien.

-Papá entrará en razón pronto Tae.-murmuró Namjoon.-Más pronto de lo que crees.

Gimoteé apretujado la tela contra mi nariz, la camisa que me había quedado cuando Jungkook se fue perdió su aroma y ahora por fin lo tenía cerca de nuevo.

Nadie dijo nada, me dediqué a llorar porque simplemente no podía detenerme, el zorro blanco al que había olvidado mencionar, se llama Baek parecía de igual forma muy emocionado olfateando como podía la tela, reconociendo el aroma de quien le salvó.

-Anda, come el pastel que Jungkook te mandó o se puede estropear.-murmuró Namjoon para luego observar a mamá.-¿Podrías traer un tenedor mamá?

Mamá asintió de inmediato y salió de la habitación, con las manos temblorosas dejé con cuidado la camisa de Jungkook  sobre mi regazo para luego quitar la tapa de la cajita, entonces vi que en ella había algo pegado, le di vuelta y me encontré con un dibujo.

Sonreí sin poder evitarlo, no era un dibujo perfecto, de hecho parecíamos unos niños con grandes mejillas, mi colita y orejas se apreciaban bastante bien, pero lo que me importaba era que en el dibujo Jungkook me abrazaba y besaba mi mejilla.

Espera por mi, decía en un costado y mis manos se presionaron con fuerza en el plástico.

No, Jungkookie, yo ya no puedo esperar, es hora de que tu esperes por mi.

Porque cuando tenga la oportunidad, saldría de casa para ir en tu búsqueda.

Hola buenas noches ^^
Saben, me doy cuenta que a la historia en sí no le faltan tantos capítulos, ya prontito termina :(

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