Las puertas del elevador se abrieron a la par, despejando la vista de Yoongi quien aun se encontraba nervioso.

El omega que se encontraba a su lado salió del ascensor, dejando que las demás personas entraran en el para ir a cualquier dirección.

Yoongi observó como el omega bonito se marchaba, preguntándose porque fue tan estúpido de no seguirlo si iban para el mismo piso.

-Disculpen, permiso..- musitó, intentando pasar en el tumulto de personas, para bajarse en el noveno piso.

-Perdón..- el alfa dio la vuelta, saliendo por fin del elevador y dejado a algunas personas molestas por la intromisión.

Yoongi le restó importancia un tanto avergonzado, terrible humillación se hubiese llevado si no fuese el hijo del gran jefe Min.

Por lo menos eso lo consolaba.

El jaguar empezó a caminar para ir directo hacia la oficina de su padre, a pasos firmes y seguros. Lo menos que quería era ver al arrogante de su padre, pero él quería por lo menos una misera respuesta de su parte.

El mayor continuó, quedando muy cerca del lugar, iba a ir directo a el pero se logró detener en seco cuando notó algo.

El hermoso omega de labios abultados había salido de la oficina de su perfecto padre con una gran sonrisa en la boca, en esa boca que alcanzaría a besar algún día.

Su rostro enrojeció de ira, la adrenalina empezó a recorrer sus venas, y los pensamientos confusos tomaron valor en su mente.

¿Acaso haber estado con su madre no fue suficiente?

Yoongi negó con su cabeza, rugiendo ferozmente para que su jaguar interior no quisiese salir y marcar territorio sobre el sexy rubio de muslos caramelo. Suficiente tenía con ser posesivo sin previo aviso.

El alfa retomó su camino, esta vez dejando en claro que tan enojado estaba, andando con el ceño fruncido y marcado. 

Entrando a la oficina de su padre con agresividad y refunfuñando, aun con su rostro en una mueca inconforme y con muchas dudas en su contra.

-¿Puedes quitar tu cara de perro? por favor..- escuchó como el adulto sentado en la silla giratoria pedía.

Yoongi se negó en silencio, tomando asiento frente a su padre, para luego seguir mirándolo con el ceño fruncido.

-Para que me querías hablar..- sus palabras salieron como filosas cuchillas, sin dejar ese tono serio y la mueca en su rostro.

-Bueno, no entiendo tu estúpido comportamiento, pero igual te diré..- Yoongi giró sus ojos, cruzando sus piernas poco a poco, para despues encarar a su padre.

-Estarás a cargo de mi empresa en dos semanas, pero solo cumpliendo una condición..- el mayor se dirigió a su hijo, dejando claro cual era punto de su llamado.

Donghae lo miró desafiante, elevando su barbilla cuando supo que su hijo estaba bajando la guardia lentamente.

-¿Cuál es?..-preguntó, separando su espalada del asiento para cruzas los dedos de sus manos entre sí, algo interrogante.

-Tendrás que casarte con el hijo del accionista mayor de Garden Studio, una de las agencias de tu madre. Y como sabrás, sus accionistas son mucho más capaces de ayudarme con los proyectos..- concluyó dong, observando como su hijo aun se encontraba sorprendido.

Sabía que su hijo se iba a negar, pero de cualquier manera terminaría aceptando, estaba muy seguro de eso.

-¡¿ESTAS BROMEANDO?!..- interrogó, y su disgusto denotó cuando vio a su padre negar.

Yoongi se levantó de la silla, ignorando el llamado continuó del mayor. Caminando rápidamente, y saliendo de la oficina bruscamente.

No podía creer lo que había escuchado, ni siquiera le interesaba saber el nombre de "su prometido".

No tenía ojos para alguien más en ese momento.

💛💛💛

Espero que les guste, perdón si ven algún error.

aquí la nueva actualización, espero que si halla estado bien, porque la verdad es que no me gustó.

¿Que les pareció?

¿Preguntas?

La próxima actualización será cuando completemos los 96 seguidos. Por favor, ayudenme con el sueño, solo dos personitas más.(la ilusión me mata).

Perdón si no ven los separadores, es que wattpad no me dejó ponerlos.

Por favor Cuidense mucho, no sean como yo que ya me enfermé, y aun sigo enferma.

¡Los amo! ¡Los amo a todos!

Sempai❤