El jaguar se levantó adolorido, sintiendo sus músculos tensos cuando el sol de la mañana pegó directo a sus parpados semi-abiertos.

Yoongi soltó un quejido, tomando la almohada que se encontraba a su lado y abrazándola, llenándose de ese peculiar aroma que lo seguía desde que inició su celo adelantado. Obviamente todo fue parte de su imaginación ¿Cierto?

El alfa estiró sus brazos y piernas, pareciendo por una mínima de segundo un tierno gatito, queriendo recibir mimitos de ese lindo omega con el que soñó. Aunque misteriosamente también soñó con Jungkook entrando a su departamento.

Que loco.

Sujetó la almohada, poniéndose de pie para tratar de ir al baño para asearse y lavar muy bien sus dientes, estaba tan adormilado que incluso se tropezó un par de veces en el camino.

¿Por qué carajos había usado botines y no los había dejado en su lugar despues de usarlos? Se reclamó mentalmente, entrando al baño de un portazo y dejando la almohada arriba de la repisa...

Espera ¡¿POR QUÉ CARAJOS LLEVÓ UNA ALMOHADA AL BAÑO?!

No tenía ni la más mínima idea, solo estaba volviéndose más estúpido a medida que seguía analizando la situación. Hace meses que no usaba botines.

Yoongi terminó de enjuagar su boca, observando su reflejo en el espejo y preguntándose porque sentía aun el poco calor del celo, el mareo, y el descontrol de su parte jaguar, aunque este último estaba más dormido que él.

Uff, por un momento pensó que seguía con el celo, pero no es así.

Eso era una buena noticia.

El mayor secó su rostro con la toalla más cercana, sintiéndose mucho más despierto luego de haber lavado su rostro con agua fría, ahora se podría decir que miraba al mundo de manera distinta.

Volvió a colocar su vista en la repisa en donde antes había colocado la almohada, y la tomó nuevamente, siendo testigo de como unos pantalones jean rasgados caían junto con una playera con un estampado cualquiera.

Eso no era de él.

Prontamente un montón de recuerdos fueron puestos en su mente, llevándolo a la verguenza total cuando recordó que le había ronroneado al bonito omega de cintura pequeña. Se supone que él debe ser alguien rudo, debía causar una gran impresión en el omega, y ahora lo más probable era que ese omega pensara que era un bueno para nada.

Bueno si, pero no tan bueno para nada. Al menos sabía doblar la ropa y cocinar arroz.

Yoongi abrió los ojos sorprendido, olvidándose de la suave almohada y empezando a caminar velozmente, casi pegando la mayor carrera de su vida.

El jaguar observó la sala, encontrando todo en orden y sin nada fuera de lugar. A pesar de que su olfato decía otra cosa muy distinta.

-Mmmh...Desayuno..- jadeo el felino, dejándose llevar por el aroma a tocino y posiblemente pan tostadito. Su favorito junto con la mermelada.

Sus papilas gustativas estaban llorando, cuando su nariz rechonchita pudo identificar los aromas y su corazón empezó a latir nervioso cuando pudo perfectamente olfatear otra fragancia que lograban confundirlo.

-Buenos días, alfa..- lo escuchó murmurar, y jaguar pudo jurar que casi se atragantaba con su propia saliva.

-Ammh...Y-Yo..- no tenía palabras suficientes cuando pudo estar consciente en ese momento.

El omega de sus sueño estaba en su casa, preparando el desayuno y estando vestido únicamente con una de sus sudaderas favoritas. Aquella prenda le queda muy grande, haciendo ver sus manitas tan adorables y dejando esa vista tan apetecibles de sus muslos descubiertos.

En ese instante se sintió un pervertido, pero eso si, un pervertido muy confundido por no saber como es que ese perfecto omega había llegado hasta su casa.

-Lo lamento por tomarme este atrevimiento, hyung, pero debía por lo menos hacer algo por usted luego de que aceptó que durmiera en su hogar..- respondió Jimin, apagando poco a poco la hornilla en donde estaba el sarten, para girarse y observar a su mayor.

Jamás pensó que podría llegar a enamorarse así de fácil.

Yoongi lo observaba atentamente, avergonzándose rápidamente cuando recordó los brazos delgados y tan cálidos que lo rodearon mucho antes de que cayera en un profundo sueño.

Ay por Dios ¿Había dormido con el omega?

Ya más que nunca se había dado cuenta de que este capítulo de su vida estaba lleno de preguntas, literalmente.

-Gra-Gracias...Emmh..- no sabía que decir, estaba tan nervioso que intentaba mirar hacia otra dirección, no quería volver a tener que aguantar los gruñidos de su parte animal.

-No se preocupe, hyu..- el pequeño omega fue interrumpido por una llamada entrante en su celular.

Jiminie sonrió estando sonrojado, atendiendo a la llamada y dejando a un muy confundido alfa.

-Buenos días, señor Min..- saludó, estando distante del ceño fruncido del alfa jaguar.

-Si, hoy iré a su casa, estaré preparando a los asistentes para la ceremonia, como usted lo había pedido...- canturreo el omega, soltando leves risillas a través de la línea.

-Está bien, iré con él..- contestó al final, colgando la llamada para luego observar al alfa.

Estaba con el ceño fruncido y una mueca de disgusto en sus delgados labios, parecía un gatito gruñón.

Estaba tan malditamente enamorado.

Espero que les guste, perdón si ven algún error uwu.

¿Que les pareció?

¿Preguntas?

Acabo de subir dos historias nuevas, y ya las pueden encontrar en mi perfil si desean.

La primera se llama Little Sassy y la segunda se llama Océano Efímero.

Empezamos el conteo:

- 4

¡Los amo! Cuidense mucho ^^

Sempai❤