Muchas gracias por todo❤

Comenten mucho por favor uwu.

💛💛💛

El mayor salió de la ducha, con una toalla blanca envolviéndolo
desde la cadera para abajo. Tuvo una larga sesión para poder apagar más que sea un poco el calor de su celo, sin embargo, lo único que pudo lograr es bajar un poco la calentura, pero las ganas de tomar al omega seguían en él.
Se sentía un sucio pervertido por pensar así, pero su parte animal le exigía recibir unos cuantos mimos del chico pelirubio.

El mayor suspiró, intentando calmar los dolores en su abdomen, y pensar en otra cosa que no sea el rubiecito de muslos acaramelados. Le estaba costando bastante aquello, pero lo estaba consiguiendo de una buena vez.

Aun seguía pensando, claramente en la estúpida jugada que le metió su padre en la cabeza, no podía creer que su propio padre lo halla comprometido con un mega extraño, alguien que él nunca había conocido y era muy difícil de imaginarse.

Solo pensaba en eso y en los lindos labios del omega pelirubio, también en esa pequeña cinturilla que quería tomar con sus pálidas manos. Estampar sus labios contra ellos era un sueño, pero no estaba tan seguro de lograrlo ahora.

El alfa se quitó la toalla, tomando algunas de sus prendas inferiores para colocárselas tranquilamente, y respirando de manera profunda. Los mareos de parte de su alfa interior eran muy injustos.

El mayor se colocó su pantaloneta, quedando su torso expuesto con su lechosa piel. El agotamiento y la fatiga hizo que el alfa cayera boca abajo en su gran cama, acurrucándose junto con dos almohadas para luego cerrar sus ojos. 

Su jaguar rugió atentó, y sus ojos se abrieron como plato, para luego volver a ponerse de pie.

¿Quien había irrumpido en su hogar?

Yoongi dio un par de pasos, intentando averiguar al dueño de ese aroma tan exquisito, muy curioso de todo aquello que en esos momentos lo interrumpía.

¿Lavanda, jazmín y....Canela?

¡Puta madre!

No puede ser, el lindo bebito pelirrubio estaba allí. Probablemente respirando su mismo aire y teniendo en cuenta su maldita existencia miserable. Podría  haber estado muy feliz de no ser porque también identificó el aroma de jungkook.

¿Y ese pendejo que hacía allí?

El mayor se colocó sus pantuflas, saliendo rápidamente de la habitación para observar el entorno, queriendo encontrar a los dos chicos que fueron a...Visitarlo, tal vez.

Yoongi se dejó guiar por su olfato, hasta llegar a la puerta de entrada de su casa y enseguida sus instintos felinos se abrieron paso.

-¡Grrrr!..- con un simple rugido el cuerpo de Yoongi se transformo en un enorme jaguar, con sus ojos denotando varios colores intensos, observando un solo objetivo.

Despedazar a Jungkook y quedarse con su omega para recibir mimitos, todo normal.

Jimin dio un pequeño saltó debido a la velocidad de la transformación, mientras que Jungkook solo se pegó a la puerta, algo nervioso.

Muy.

Nervioso.

-Y-Yo me-mejor me vo-voy..- titubeo, sintiendo la mirada penetrante de el alfa. La heterocromía era normal, pero ver como aquellos ojos disparejos lo miraban lo hacían atormentar.

-Jungkookie, sal de aquí..- murmuró el pelirubio, escuchando como el fuerte rugido del jaguar fue más  intenso.

Jimin tembló en su lugar, escuchando ronronear a su gatito, por más que la situación se vea tan arriesgada, él quería darle un besito al suave pelaje del animal.

-¡VETE!..- gritó, empujando a Jungkook hasta que salió, y él recibió todo el peso de el alfa cuando cayó al piso.

Ahora ya no estaba el feroz felino, ahora se encontraba un hombre hermoso, viéndolo fijamente con esos ojos que demostraban el sentimiento de la parte alfa.

Un ojo tan azul como lo profundo del océano, y el otro ojo un tanto verde con pequeñas pizcas de amarillo brillante. Su alfa estaba feliz de verlo.

-Omega~..- susurró en el oído del contrario,  posando sus labios en la mejilla derecha del pelirubio, tomándolo de las caderas para cargarlo.

Lo tomó y lo llevó a su habitación, dejándolo boca arriba para luego subirse en él y darle un pequeño beso en su cuello.

Lo miró como a su presa, marcando el territorio con su aroma, hasta que pasó lo inevitable. Yoongi se acercó peligrosamente al rostro del omega, besando la punta de la naricita del gatito, acurrucándose contra el cuerpo de su chico y quedándose quieto, para que después de aquello, Yoongi le entregara un diminuto piquito en sus rechonchitos labios.

No era nada más que solo eso, una sesión de mimitos para ambos.

Su gatito ya estaba ronroneando, y no era precisamente el de Jimin.

💛💛💛

Espero que les guste, otra vez wattpad no me dejó poner el separador :c

¿Que les a Pareció?

¿Preguntas?

Disculpen si ven algún error.

Muchas gracias por todo, enserio gracias, se que mi narración no es la mejor, pero espero seguir mejorando.

¡Los amo!

22 comentarios y actualizo.

Cuidense mucho, y quédense en casa. Traten de consumir bebidas calientes.

Sempai❤