XVII

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

–¿¡Saben lo difícil que fué encontrarlos!?– gritó enfurecido el peli-naraja, emanando un notable olor a quemado.

–H-hola Noxo– el oji-verde sonrió nervioso al mencionado. Golden miró al elfo, sorprendido.

–¿Conoces a Noxo?

–Em... Si. Él es quién me cuida desde pequeño. No solo los grifos me criaron. ¿Como lo conoces tú?

–Él es mi guardián...– ambos intercambiaron miradas, confundidos, para luego mirar al más alto.

–Bueno, veo que ya se conocieron– habló– luego habrá tiempo para explicarlo. Ahora... – miró furioso al de piel morena, este solo tragó en seco– ¿¡Como rayos se te ocurre desaparecer de esta manera!?– el olor a quemado se hacía más fuerte. El rubio pálido se alejó de allí rápidamente– ¡Casi me da un infarto cuando volví y no estabas!

–Y-yo puedo e-explicarlo– sonrió con gran nerviosismo, haciéndose más chiquito en su lugar.

–¡Pués, me explicas en el camino! ¡Nos vamos!– agarró la oreja del chico y comenzó a arrastrarlo. Noxo crió a Bon desde que era un bebé, junto a los grifos, así que lo trata como si fuese su hermano menor, o incluso su hijo.

–¡Ay, ay, ay, ay! ¡Noxo, duele!– se quejaba el "prisionero". El de cabellos morados, furioso, se ató el cabello, acercándose al de ojos anaranjados.

–¡Ey, suéltalo! ¡No tienes porque tratarlo así!– se colocó frente a él, impidiendo que siguiera caminando.

–Bonnie, no te recomiendo hacer eso...– advirtió Golden, pero el mencionado hizo caso omiso.

–¿Y tú quién eres?

–Soy Bonnie, y no dejaré que te lleves a Bon– habló firme. Noxo soltó al peli-celeste, para luego cruzarse de brazos y mirar al más bajo.

–¿Ah si? ¿Y por qué?

–Porque... ¡P-porque no tienes derecho a hacerlo!– exclamó, algo sonrojado, pués la verdadera razón por la que no quería que se lo llevara es porque disfrutaba la compañía del elfo. Le gustaba estar con él, y no solo porque le recordaba a su maestro, ya que ambos tenían personalidades algo... Diferentes.

–Entonces... ¿Por qué te sonrojas?– lo miró interrogante. El sonrojo del oji-rojo aumentó.

–Nos dirigimos a detener al emperador– interrumpió Puppet, acercándose a ellos.

–¿Derrotar al emperador? Eso es imposible– soltó, serio.

–No con ellos. Son humanos, pero no humanos cualquiera. Ellos pueden detener al emperador– su expresión era seria, al igual que la del peli-naraja.

–Por favor, déjame ir con ellos– el de piel morena miró suplicante al más alto– sé que puedo servir de algo. Solo dame la oportunidad.

–No lo sé...

–¡Por favor!~– literalmente, se arrodilló frente a él– ¡Dejame ir con ellos! ¡Por favor, por favor, por favor!

–Ag... Está bien– no logró decir nada más, pués el de mirada esmeralda se había abalanzado sobre él para poder abrazarlo.

–¡Gracias, gracias, gracias! ¡Eres el mejor!

–Si, si, lo sé– correspondió al abrazo del menor, para luego mirar a Golden– puede que sea tu guardian, pero si algo malo le pasa a mi pequeño, TÚ te harás responsable de eso– le dirigió una mirada asesina, que podría congelar hasta al territorio del fuego. Cosa irónica, ya que Noxo es un ente de fuego. Golden tragó en seco.

–¡No te fallaré! Verás que seré de mucha ayuda aquí– sonrió alegre, contagiando al mayor.

–Como digas, salvaje– despeino sus cabellos cariñosamente.

–Noxo, no– rió, intentando acomodar su cabello. Notó que el peli-morado lo miraba, con una dulce sonrisa y un sonrojo en su rostro. Corrió hacia él, abrazadándolo– sabía que en el fondo me querías– habló sonriente, provocando un notable sonrojo en el menor.

–S-si... Supongo q-que sí.

–Um...– Noxo observaba detenidamente al peli-morado. Por alguna razón... Había algo en él que no le gustaba, y no eran los típicos celos de hermano o padre, definitivamente, algo no le parecía bien en él– bueno... Creo que es hora de irme. El territorio de fuego me necesita ya que Golden estará con ustedes– se acercó al elfo– toma, olvidaste esto– habló, sonriendo con dulzura, entregándole un pequeño conejo de felpa de pelaje plateado, notablemente viejo.

–¡Yinyin!– inmediatamente, soltó al de piel pálida, para luego aferrarse al peluchito. Notó las miradas divertidas de los demás posadas sobre él; avergonzado, guardó el conejo– q-quiero decir... G-gracias por traerla– soltó, avergonzado. Los demás solamente rieron. A pesar de casi tener 18 años, Bon puede ser algo... Infantil.

–Debo irme, mantenlos seguros, salvaje– abrazó una última vez al peli-celeste, mirando al peli-morado. Ambas miradas se conectaron.

–A-ah...– intimidado, Bonnie se hizo más pequeño en su lugar. Podría jurar que vió la muerte en esos ojos anaranjados.

Creo que alguien ya está en la lista negra de Noxo.

[…]

Em... ¿Hola?

Vaya, llevo tiempo de no hablar por aquí, así que... Iré directo al grano.

Sé que he estado muy desaparecida y todo eso, pero los bloqueos son fuertes. Estoy haciendo mi mayor esfuerzo por hacerles un buen capítulo.

También que estoy en época de exámenes. Ahorita solo me faltan tres, por suerte.

Y bueno... También decirles que... He tenido algunos problemas e inconvenientes en lo que es mi vida personal, y... He estado algo decaída. Siempre intento mantenerme alegre, pero igual es difícil.

Mi... Hermanita enfermó, y está realmente mal. Entonces, no me siento... Emocionalmente bien como para escribir mucho, pero igual intentaré hacer lo que pueda.

Espero que entiendan.

-Fiona 🐼

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro

#fnafhs