Capitulo 3 (El Ninja y la Serpiente)

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Dato curioso: La Alien X del Chaquetrix es más fuerte que el Alien X del Carnitrix

Narrador Omnisciente

Wu, Nya, Lloyd y la Gran Devoradora se encontraban reunidos en el departamento, contemplando su nuevo hogar por ahora. Nya miró a Wu con sorpresa mientras preguntaba, sin entender, "¿Cómo los Ninjas pagaron esto?" Su expresión reflejaba su incredulidad ante la situación.

Wu, con una sonrisa enigmática, dirigió su mirada hacia la Gran Devoradora y respondió con naturalidad, "Digamos que tuvieron ayuda de una serpiente". Su tono de voz parecía restar importancia al asunto, como si fuera algo de poca relevancia.

Nya, aún desconcertada, volvió a mirar a Wu y preguntó con ironía, "¿Cómo ella ayudó a pagar esto? ¿Se ganó la lotería Serpentine?" Sus palabras estaban cargadas de sarcasmo, sin poder comprender cómo una serpiente podría contribuir financieramente.

Lloyd no pudo contener la risa ante el comentario de Nya y respondió con humor, "¿Vas a negarle al amigo de la serpiente que casi destruyó todo Ninjago un hogar? No, ¿Verdad?, el dueño de este lugar también estuvo de acuerdo con eso". Su risa resonaba en la habitación, creando un ambiente distendido.

La Gran Devoradora, con una expresión inocente en su rostro, fingió ojos de inocencia. Su gesto dejaba entrever que sabe porque les regalaron ese lugar, pero no quiere reconocerlo.

Lloyd acaricia con ternura la cabeza de la Gran Devoradora mientras le dice, "No te hagas la inocente". La serpiente responde sacando un papel que tenía a su lado y utiliza sus colmillos para escribir con su veneno, asegurándose de utilizar el veneno más inofensivo, a mínima peligrosidad para no causar daño a nadie.

Una vez que termina de escribir, la Gran Devoradora toma el papel en su boca y lo muestra a todos. En él se puede leer, "Aparecí durante tan solo medio día y pude haber destruido todo el mundo, pero no quise hacerlo". Sus palabras revelan un poder inmenso y la capacidad de generar una gran devastación, pero también un gran control y voluntad para evitar hacerlo.

Nya, con ironía en su voz, mira a la Gran Devoradora y pregunta, "¿Y por qué no lo hiciste?" La serpiente deja caer el papel y frota su cabeza contra la mejilla de Lloyd, como si quisiera transmitir su cariño y agradecimiento hacia él. Es como si hubiera encontrado una conexión especial con el joven ninja, lo que la llevó a tomar la decisión de no usar su poder destructivo sin motivo alguno.

Wu, tomando la palabra una vez más, habla con seriedad, "Tienes a alguien que te proteja mientras estés solo, solo asegúrate de que ella no mate a nadie". Con pleno conocimiento de la peligrosidad del veneno de la serpiente, Wu advierte sobre su capacidad para matar incluso a aquellos que son inmunes al veneno.

La Gran Devoradora, sintiéndose regañada, pone ojos de cachorro, buscando la comprensión de los demás. Sin embargo, Wu no se deja afectar por su mirada y continúa transmitiendo su mensaje con firmeza. "Eres una serpiente que es capaz de atacar y reaccionar en un picosegundo", dice, reconociendo plenamente la peligrosidad inherente de la Gran Devoradora.

La serpiente, esperando que Lloyd la defienda, dirige su mirada hacia él, mostrando los mismos ojos suplicantes. Parece buscar algún tipo de apoyo o protección en el joven ninja.

Lloyd continúa acariciando el cuello de la Gran Devoradora con ternura. "A ella le gusta que le acaricien el cuello", dice con una sonrisa en su rostro. Nya lo observa con sorpresa y pregunta sin comprender, "¿Cómo sabes dónde está el cuello? Es una serpiente". Lloyd sonríe y explica como si fuera lo más obvio del mundo, "Mediante la columna vertebral".

Wu toma la palabra con seriedad y anuncia que él y Nya tienen algunas cosas que hacer, por lo que Lloyd tendrá que quedarse solo por un momento. Lloyd asiente con confianza y afirma, "Ya estoy muy grandecito, puedo quedarme solo". Nya, con una sonrisa irónica, comenta en tono humorístico, "Tienes niñera", señalando a la Gran Devoradora.

Nya y Wu se marchan, dejando a Lloyd y la Gran Devoradora solos.

Lloyd y la Gran Devoradora observan desde la ventana del lujoso departamento mientras Wu y Nya salen, dejándolos a solas. Lloyd, con una sonrisa juguetona en su rostro, se dirige a la Diosa Serpiente

"Bueno, mi amiga, ¿qué podemos hacer mientras estamos solos?" pregunta Lloyd, lleno de humor y curiosidad.

La Gran Devoradora, con su imponente cola, toma un control de la consola de Lloyd y se lo entrega con un movimiento grácil. Lloyd acaricia cariñosamente la cabeza de la Gran Devoradora, demostrando la confianza y conexión que han desarrollado en tan poco tiempo.

"Nos conocimos hace apenas unos días, y sin embargo, me conoces tan bien", dice Lloyd mientras se sienta en el sofá, invitando a la Gran Devoradora a unirse a él. Con una mirada llena de complicidad, Lloyd agrega: "Ven".

La Gran Devoradora se acerca al sofá, ubicándose detrás de Lloyd, y apoya su cabeza en el regazo de este último.

{Salto de Tiempo}

 Lloyd estaba sumergido en el mundo virtual de su videojuego favorito, disfrutando de la emoción de la competencia y la adrenalina que fluía a través de sus venas. Sentado cómodamente en el sofá, se encontraba absorto en su partida, ajeno a todo lo que sucedía a su alrededor.

Sin embargo, su amiga serpiente, la imponente Gran Devoradora, descansaba en silencio detrás de Lloyd, apoyando su cabeza en el regazo del joven. La Gran Devoradora la que antes fue una serpiente enorme y poderosa ahora es una serpiente de tamaño normal e igualmente poderosa, con escamas brillantes que reflejaban la luz de la habitación. Aunque su apariencia era intimidante para muchos, ella y Lloyd habían desarrollado una estrecha amistad en aquellos días después del despertar de la Diosa.

De repente, la Gran Devoradora levantó bruscamente la cabeza, sus ojos brillando con una mezcla de alerta y agresividad. Lloyd, sorprendido por el repentino cambio de actitud de su amiga serpiente, se giró rápidamente para enfrentarla. "¿Qué ocurre?", preguntó con confusión en su voz, sin comprender lo que estaba sucediendo.

La Gran Devoradora, en un acto de comunicación reptiliana, le lanzó un siseo feroz a Skales, que se encontraba afuera de la ventana, en una de las plataformas utilizadas para limpiar los cristales. Skales, un antiguo enemigo de Lloyd, había estado observando desde la distancia, esperando una oportunidad para causar problemas.

Lloyd siguió la mirada de su amiga serpiente y vio a Skales cerca de la ventana. Su corazón se aceleró mientras reconocía al enemigo de antaño. "¡Skales!", exclamó, levantándose rápidamente del sofá, dejando a la Gran Devoradora detrás.

Skales, con su cetro en mano que utilizó para abrir un agujero en la ventana, rompiendo el delicado equilibrio entre el mundo interior y el exterior. "Mocoso, vengo a secuestrarte", declaró con desdén, creyendo erróneamente que la Gran Devoradora era solo una serpiente común sin poderes especiales.

Skales

Lloyd sonrió con confianza mientras observaba a Skales entrar en el lugar. "Si fuera tú, no entraría aquí", dijo, sabiendo que Skales no representaba ninguna amenaza para La Gran Devoradora.

Skales, confiado en sí mismo, se dirigió hacia Lloyd y le lanzó una pregunta desafiante: "Ya has sido traicionado tres veces por los Serpentine, ¿por qué confías en una serpiente?". Se refería a los eventos pasados en los que Lloyd había sido traicionado por los miembros de las tribus Serpentine.

Sin embargo, La Gran Devoradora, lista para proteger a su amigo, respondió con un siseo agresivo, mostrando su determinación para enfrentar a Skales. Sus ojos chispeaban con ferocidad mientras se preparaba para atacar si era necesario.

Lloyd, sin embargo, no se dejó intimidar. Acarició suavemente la cabeza de La Gran Devoradora, transmitiéndole calma y confianza. "Ella literalmente detecta el peligro", le explicó a Skales con una sonrisa en el rostro. "Y por si no lo sabías, esta pequeña aquí es La Gran Devoradora". Lloyd estaba orgulloso de su amiga serpiente, y su nombre no dejaba lugar a dudas sobre su poder y habilidades impresionantes.

La Gran Devoradora, al sentir el cariño de Lloyd, emitió sonidos de felicidad, demostrando su aprecio y afecto hacia su compañero humano.

Skales se vio obligado a retroceder instintivamente ante la presencia imponente de La Gran Devoradora. "L-La Gran De-Devoradora", balbuceó con temor. "Pero si La Gran Devoradora debería haber muerto", dijo incrédulo, sin poder creer lo que veía.

Lloyd no pudo contener la risa ante la reacción de Skales. "No está muerta, ahora es mi amiga", dijo con diversión. "Y mira, no es agresiva conmigo", agregó mientras acariciaba la cabeza de La Gran Devoradora, demostrando la confianza que había desarrollado con ella.

La Gran Devoradora emitió sonidos de felicidad, disfrutando de los cariños de Lloyd y permitiéndole solo a él acariciarla. La conexión entre ellos era evidente y única.

Lloyd, volviéndose hacia Skales, afirmó: "Te lo advertí". Dejó de acariciar a La Gran Devoradora, pero sus ojos seguían brillando con complicidad y confianza en su amiga serpiente.

La Gran Devoradora, con sus ojos rojos fijos en Skales, parecía casi capaz de mirar directamente en lo más profundo de su alma. Su presencia imponente y su relación especial con Lloyd dejaban claro que no debía ser subestimada.

La Gran Devoradora dio un siseo fuerte mientras abría la boca, mostrando sus colmillos que goteaban veneno. Manipulando la intensidad de su veneno, lo convertía en el más peligroso del mundo. Una sola gota de ese veneno sería suficiente para matar a cualquier ser vivo.

Al mismo tiempo, La Gran Devoradora emanaba un aura que llenaba de terror a Skales. Su miedo era tan intenso que ni siquiera podía moverse. Se quedó paralizado frente a la presencia imponente de la Diosa serpiente.

Lloyd, al ver la reacción de Skales, retrocedió un poco. Sin embargo, su sonrisa reflejaba confianza en su amiga serpiente. "Amiguita, ataca", le dijo a La Gran Devoradora, animándola a actuar.

La Gran Devoradora obedeció de inmediato y golpeó a Skales con su cola. El impacto fue tan poderoso que Skales quedó noqueado instantáneamente, demostrando la fuerza y destreza de La Gran Devoradora. Era indiscutible que ella era la Diosa y la Reina de los Serpentine.

La Gran Devoradora, con su presa a merced, la temible criatura abre su enorme mandíbula para devorarlo de un solo bocado. Sin embargo, en ese preciso instante, Lloyd se acerca a la Gran Devoradora con cautela.

Con una destreza asombrosa, Lloyd logra cerrar la boca de la criatura con suavidad, impidiendo que consuma a Skales. "Serpiente mala, no debes consumir a nadie", le reprende con un tono de regaño, dejando claro que no tolerará su comportamiento voraz.

Después de asegurarse de que la Gran Devoradora no pueda hacerle daño a Skales, Lloyd se aleja lentamente, manteniendo una distancia prudente. La criatura, sintiéndose derrotada, voltea su mirada hacia Lloyd, mostrando unos ojos que reflejan tristeza y arrepentimiento, casi como los de un cachorro regañado.

Lloyd, con un corazón compasivo, no puede resistirse a la mirada de la Gran Devoradora y suspira resignado. "Ay, no puedo enojarme contigo", dice con ternura, reconociendo que, a pesar de su ferocidad, la criatura también merece compasión.

En ese momento, Wu junto con Nya ingresan al lujoso departamento donde se desarrolla la escena. Nya, confundida al ver a Skales inconsciente, pregunta con curiosidad y preocupación: "¿Qué pasó?"

Lloyd, con una sonrisa irónica, responde con calma: "Me quiso secuestrar", como si fuera una simple anécdota, dejando en claro Skales había sido casi aniquilado por la Diosa Serpiente.

Wu, después de reflexionar por un momento, expresa con determinación: "Ya sé qué hacer con él", mientras dirige su mirada hacia Skales, quien yace inconsciente en el suelo. Sin embargo, antes de que pueda dar más detalles sobre su plan, la Gran Devoradora abre la boca, mostrando sus afilados colmillos de los cuales gotea su venenoso ácido.

Ante esta visión, Wu niega con seriedad y firmeza: "No vamos a deshacerlo con tu veneno ácido", dejando en claro que no recurrirán a medidas tan extremas para castigar a Skales. La Gran Devoradora cierra la boca, mostrando su decepción por no poder utilizar su veneno para acabar con él.

En ese momento, Nya, curiosa por la relación entre la Gran Devoradora y los Serpentine, plantea una pregunta intrigante: "Técnicamente, los Serpentine son tus hijos, ¿verdad?". La Gran Devoradora asiente, confirmando la conexión que tiene con estas serpientes.

Nya continúa cuestionando, sin poder contener su incredulidad: "Entonces, ¿por qué quieres derretir a Skales?". La Gran Devoradora dirige su mirada hacia Lloyd, buscando una respuesta en su rostro. Lloyd, con una sonrisa enigmática, responde entre risas: "Supongo que su cariño hacia mí es superior", insinuando que Skales ha mostrado un interés especial en él.

Wu asiente, reconociendo la validez del argumento de Lloyd. "Eso es obvio", reafirma lo sobreprotectora que es la Diosa con el Ninja Green.

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