La vida en la secundaria puede ser muy dura, para otros, es la mejor etapa de sus vidas. En algunos casos, los jóvenes pueden ser muy misteriosos o muy raros, como también simples o complejos. Cada persona es diferente, con ideales y comportamientos distintos. 

La persona en la que nos centraremos, es una chica, alguien querida por muchos. Muy dulce y tímida a simple vista, los chicos se volvían locos por ella y las chicas la amaban, claro, no todas obviamente. Los celos y envidia vienen de muchos lados, sobretodo de la gente con baja autoestima. 

Buenas calificaciones, buen rendimiento, excelente comportamientos, increíble estado físico. Era perfecta. Claro, según muchos, la perfección va de hacer todo bien y nunca equivocarse. Y desgraciadamente, el ser humano no siempre ve más allá del exterior.

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Royal Woods, Michigan. Una ciudad pequeña o un pueblo grande, da igual como lo llamaras, las dos eran correctas. En esta ciudad, vemos una escuela secundaria, seguramente llena de estudiantes, maestros y horribles exámenes. En unos de los salones, una profesora explicaba una lección con un libro en mano, la gran mayoría de alumnos miraban adelante, algunos prestando atención y otros sin entender nada. De todos estos, podemos ver a una joven en el fondo del salón. Tenía el cabello negro hasta los hombros, piel pálida, algunas pecas en su rostro además de un par de lentes cuadrados. 

La joven solo prestaba atención con total tranquilidad, aunque ese sentimiento no duró mucho, ya que sintió las miradas de algunas de sus compañeras. Susurros y chismes se escuchaban en voz baja, no sabía de qué hablaban, pero sintió que tenía algo que ver. Empezó a impacientarse debido a la intriga, por lo que miro a su derecha donde se encontraba su mejor amiga, una chica vestida con una falda azul y una blusa naranja, de cabello largo y blanco como la nieve, además de una pecas en su rostro. 

???: Pst.... Linka

Linka: Hmm.... ¿Que pasa, Maggie? 

Maggie: ¿Po-porque t-todos están mirándome? 

La albina sólo pudo echar un ojo al salón completo, y ver como la mayoria solo hablaban en voz baja mientras miraban a la tímida de su amiga. Se tomó unos segundos pensando, hasta que recordó los supuestos rumores que escuchó antes de entrar en clases. 

Linka: - sonriendo - ¡¿Con quien vas a salir?!

Maggie: ¡¿Eeeh?!

Profesora: - aclarándose la garganta - ¡Loud!, ¡Amery! ¿Algo que quieran compartir con la clase?  

Antes de que alguna respondiera, el sonido del timbre las salvo a ambas. La profesora solo suspiro, cerró su libro y habló. 

Profesora: Olvidenlo.... - acercándose a la puerta - La clase acabó 

Una vez que salió, la mayoría de chicas se levantaron y rodearon a la pelinegra invadiendola con preguntas. Linka solo miraba como se ponía nerviosa y agachaba la cabeza, su amiga era muy tierna, y a veces le costaba socializar a pesar de agradarle a casi toda la escuela. 

Chica 1: ¡¿Es verdad que saldrás con alguien, Maggie?! 

Chica 2: ¡Si es asi, debes contarnos! 

Chica 3: ¡Dinos, dinos, dinos! 

Chica 4: ¡¿Es hombre o mujer?! 

Chica 5: ¡En cualquiera de los casos, ¿es atractivo o atractiva?! 

Maggie: Y-yo.... yo no... 

Linka: Alto, locas. Esta información solo la compartirá con sus amigos 

Chica 2: ¡Vamos, Linka! ¡Deja que nos diga todo! ¡Esta información vale millones! 

Chica 5: ¡Si! ¡¿Quién será la persona que conquistara a la flor negra de la secundaria?! 

Maggie: N-nadie va a.... 

Linka: Lo lamento, esta es la decisión final. Las clases acabaron chicas, adios 

Acto seguido, tomó a la pelinegra del brazo y la sacó a rastras del salon. Ella también estaba emocionada, asi que queria saber todo con lujo de detalles. Mientras iban por los pasillos, Linka empezó su interrogatorio. 

Linka: ¿Dime que es verdad? Por favor, por favor, por favor 

Maggie: No lo es. No voy a sa-salir con nadie 

Linka: Ay, vamos, te conozco. Cuando te pones más nerviosa de lo normal, es porque escondes algo mi querida amiga de grandes pechos 

Maggie: - sonrojada - N-no me digas asi

Linka: Perdon, perdon.... ¿Y quien es?

Maggie: Nadie...

Linka: Esa respuesta esconde a alguien 

Maggie: ¡No es verdad!

Linka: Aiaja..... ¿Es chico o chica?

Maggie: No sabes cuándo rendirte, ¿verdad? 

Linka: Nop.... ¿Me vas a contar? 

Maggie: Son so-solo chismes, Linka. No tengo a nadie en mente, ni nada por el estilo  

Linka: Muy bien, ya no dire nada..... Pero, puedo intentar adivinar. ¿Es Eric?

Maggie: Detente 

Linka: Ada del club de arte, Chad el chico rebelde, oh, oh, ya se. Paul, el beisbolista 

Maggie: Ya te lo di-dije, no voy a salir con nadie 

Linka: Ahora me deprimí.....   

Maggie: No me p-pondrás triste con tu llanto falso

Linka: Amargada.... No es de la escuela, ¿verdad? 

Maggie: Linkaaaa

Linka: Te ves tan linda enojada, empiezo a entender porque todos te aprecian

Maggie: ¿Por que? Soy alguien simple 

Linka: Tienes buenas notas, buen rendimiento, eres buena con todos y eres hermosa. Aceptalo, maldición 

Maggie: - sonrojada - E-exageras...

Linka: Mira. Se empañaron tus lentes 

Maggie: Para por favor. No saldré con nadie y-...

Altavoces: Maggie Amery, se solicita su presencia en la oficina del Director de inmediato. 

Maggie: - sigh - ¿Que será esta vez? 

Linka: ¿Quieres que te espere? 

Maggie: No, está bien. Además tengo cosas que hacer más tarde 

Linka: - sonriendo - Tu citaaa... 

Maggie: - sonrojada - ¡Para ya!

Linka: Bien, bien, bien. Te veré mañana. Yo iré a ver a mi novio, o al menos intentaré encontrarlo 

Maggie: ¿Otra vez ocupado?

Linka: Seguramente, pero tengo un sistema 

Maggie: ¿Cual?

Linka: Si encuentro a mi hermano, lo encuentro a él. - alejándose - Nos vemos chica 

Su amiga se alejó por los pasillos, la pelinegra solo volvió a suspirar mientras sujetaba las correas de su mochila, tener que ver al director otra vez la ponía incómoda, pero no tenia de otra, ella era vista como alguien perfecta y tenía que mantener esa imagen. Camino por los pasillos bajo la vista de algunos compañeros los cuales la saludaban de manera alegre y ella respondía con una pequeña sonrisa. 

Maggie: *Lo último que me faltaba, tener que ver al anciano calvo que se la pasa viendo mis tetas* 

Saludo a la secretaría con normalidad y entró en la oficina, el director Huggins miraba unos papeles con calma hasta que noto su presencia. Su sonrisa era tan normal, pero sabía que escondía algo más detrás de ella, mas viendo como sus ojos bajaban rápidamente para después subir.  

Huggins: Ah, joven Amery, me alegra que llegara rápido 

Maggie: ¿Quería verme, director?

Huggins: Si, si, justamente. - levantándose - Verá, apenas llevamos pocos meses de clases y su rendimiento académico es perfecto, es el mejor, para ser exactos 

No lo estaba escuchando, solo miraba la oficina con algo de incomodidad. Ella sabía que estaba hablando, pero no le interesaba, lo peor era ver cómo sus ojos se centraban en su cuerpo, haciendo que ella comienza a impacientarse. 

Huggins: ¿Que me dice? 

Maggie: Eh? L-lo siento, no-... 

Huggins: - acercándose - ¿Se encuentra bien? Parece distraída 

Ahora lo tenía a un metro de distancia. Solo agacho la cabeza con nerviosismo, se maldecía internamente por no haber prestado atención. El hombre acercaba su mano con quien sabe qué intención, ella solo levanto la vista y vio esa sonrisa, incluso pudo escuchar su respiración algo acelerada. Por suerte, alguien golpeo la puerta haciendo que alejara su mano y volviera su postura recta. 

Higgins: ¿Si? 

???: Director Huggins, ya está aquí. ¿Quiere que lo deje entrar? 

Huggins: Deme un minuto, por favor - viendo a la joven - Solo pienselo, ¿de acuerdo? 

Maggie: C-claro.... ¿Puedo irme? 

Huggins: - acomodando su corbata - Emm... Si, joven Amery. Gracias por su tiempo 

Mientras se alejaba, sintió la mirada del anciano clavarse en ella. Una vez fuera, vio a la secretaria y a un joven sentado en una silla en la esquina, no le dio importancia y se alejó para irse a su casa. No sabia que le dijo el director, pero supuso que solo la felicito por sus notas altas. 

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La tarde era hermosa en la ciudad, la gente salía de las escuelas, trabajos y demás. Los niños jugaban en parques, los adolescentes hacían estupideces y una joven de cabello negro se encontraba parada en la entrada del centro comercial. Vestía una blusa blanca junto con una falda negra a cuadros, y tenía un suéter lila amarrado a su cintura. Quizás lo que más contrastará eran sus enormes botas negras hasta la altura de los gemelos, pero a ella le gustaba esa forma de vestir. 

A decir verdad, si iba a salir con alguien. Un chico para ser más precisos. Lo estaba esperando justo en la entrada, la idea era tener un encuentro más casual que en la escuela. Al levantar la vista pudo verlo a lo lejos, venía sonriendo de manera sincera y calmada. Era alto, rubio, vistiendo unos jeans azules y una sudadera café abierta dejando ver una musculosa negra bajo esta. El solo se paro frente a ella con un notorio nerviosismo. 

???: Ey.... Hola 

Maggie: Ho-hola, Dylan 

Dylan: - suspiro - No te voy a mentir... estoy algo, nervioso 

Maggie: N-no eres el único.... Emm.. ¿qué quieres hacer? 

Dylan: Pues... no se. Podemos comer algo para empezar 

Maggie: B-bueno, vayamos adentro 

Dos adolescentes en una cita, eso era todo lo que eran. El tiempo pasó y ambos se encontraban comiendo tranquilamente mientras hablaban de algunas cosas triviales. 

Dylan: Así que... era mentira 

Maggie: ¿E-entraste al club de literatura, solo p-para esto? 

Dylan: Si, bueno.... No todo es mentira.... 

Maggie: Me i-invitaste a salir una se-semana después de que te recomendará el libro..

Dylan: Ya.... Pero aun asi lo empeze a leer. Me gusta hasta ahora. El protagonista es-... 

Maggie: - sonriendo - Muy directo. Dice todo lo que piensa 

Dylan: Y le da igual todo. Es como si supiera lo que sucede a su alrededor pero...

Maggie: No lo demuestra... Si lo leiste 

Dylan: Oye, no todos los deportistas somos tontos con musculos 

Maggie: Ay.... P-perdon, no quise-...

Dylan: No, no, esta bien. Y-yo.... lo entiendo. La mayoría de mis compañeros son algo...

Maggie: Torpes.... Sin animo de ofender 

Dylan: - sigh - Pues, algunos tenemos que jugar por las becas, otros por que nos gusta y otros solo por que se sienten bien con su fuerza y la quieren aprovechar  

Maggie: Je... Y t-tu caso cual seria?

Dylan: Las tres. Me gusta el deporte, aprovechar mi fuerza y sinceramente, necesito esa beca 

Maggie: Interesante...

Dylan: Hmph... Gracias

Maggie: ......

Dylan: ....... 

Silencio incómodo mientras aún comían, algo verdaderamente molesto, pero siempre pueden salir charlas sin mucho problema. 

Dylan: Maggie.... Cuéntame algo de ti 

Maggie: Eh.... Bueno yo... No creo tener mucho que contar

Dylan: Pe-perdona.... Seguramente te puse incomoda.... - tomándose el rostro - Soy imbécil 

Maggie: No... Es solo que... nunca tuve una ci-cita como tal y... n-no se, sinceramente de qué hablar 

Dylan: Bueno... Yo tampoco tuve una... - sonrojado - cita real, o algo por el estilo 

Estaban nerviosos, el chico solo vio como ella agachaba la cabeza, sintió que la había cagado y en grande, aunque ella solo escondía un leve sonrojo. Pasaron unos segundos sin decir nada, hasta que ambos se miraron y hablaron. 

Dylan/Maggie: Yo...... Perdona, habla tu..... No, habla tu...

Tras decir eso, solo pudieron reír. Sintieron como los nervios se alejaban levemente para poder seguir con su salida. Más tiempo pasó y ambos solo recorrían el establecimiento, viendo varios locales con diferentes cosas. Ropa, comida, entretenimiento, incluso pasaron por una biblioteca donde vieron más libros de la autora que le gustaba a Maggie. La estaban pasando bien, hacían cosas juntos conociéndose un poco más. 

Decidieron salir del edificio y recorrer la ciudad. El atardecer daba una linda imagen del parque en donde terminaron, caminaban bastante juntos y en calma. 

Dylan: No sabía que Queen Ri tenia mas novelas. Y sigo pensando que su nombre es raro 

Maggie: Ti-tiene melodramas y romances. A excepción d-del libro que te recomende. Re-respondiendo a lo otro, más que un n-nombre es un seudónimo, nadie sabe c-como se llama en realidad 

Dylan: "El paraíso perdido".... Si lo piensas bien, es como un contraste con todas las obras que vimos hace unas horas 

Maggie: Tu solo leelo.... Ya ve-veras el resto... 

Dylan: Jeje... Esta bien, esta bien. - suspiro - Wow, ya es de noche 

Maggie: Su-suerte que los focos del parque están e-encendidos

Dylan: Te.... ¿asusta la oscuridad? 

Maggie: - frotándose el brazo - Algo..... 

Dylan: Ups.... Perdona. Si te hace sentir mejor a mi me dan miedo las arañas, con esas, patas horribles

Maggie: Jajajaja.... 

Dylan: Oye... 

Maggie: Ay... Disculpa, es por c-como lo dijiste... jejeje 

Dylan: Jajaja. Si. Supongo que es bastante cómico, aunque las odio mucho 

Maggie: A m-mi tampoco me hacen mu-mucha ilusión...

Dylan: See.... Sabes, ya es muy tarde, quieres que....- sonrojado -  Digo, si no te molesta, te acompañe a tu casa  

Maggie: C-claro... ¡Es decir! Gr-gracias, Dylan. Me sentiría más tranquila 

Dylan: Oh, dios...

Maggie: ¿Su-sucede algo? 

Dylan: Emmm.... Bueno, miralo por ti misma 

Centro su mirada en la misma dirección que el rubio, había un tumulto de personas a una distancia considerable, estaban reunidas en un círculo mientras gritaban y alentaban. En un punto solo algunos gritaban cosas, mientras los demás se quedaban callados con rostros de horror. 

Maggie: ¿Q-q-que es eso? 

Dylan: Veras.... seguramente no lo sepas pero, algunos grupos de la secundaria pelean aquí. Ya sabes, los angeles, las cobras, entre otros 

Maggie: ¿Di-dices que estan p-peleando un par de facciones ahí?

Dylan: Eso parece.... digo, es de noche, no hay mucha gente y-.... 

Antes de que pudiera seguir, los gritos se hicieron más fuertes. Los pocos que tenían rostros de horror empezaron a gritar piedad hacia el centro del círculo. Era obvio que había dos personas luchando, pero no se podían ver bien. Pero la sorpresa no fue esa solamente, aparecieron policías, entraron corriendo gritando que se detuvieran. Todos empezaron a dispersarse como cucarachas, algunos pasaron cerca de la pareja casi golpeandolos. 

Maggie: ¿Q-que les pasa? 

Dylan: Creo que también deberíamos correr.... 

Maggie: ¿Eh...? 

La tomó del brazo y salieron corriendo de ahí, los oficiales los persiguieron confundiendolos con unos de los jóvenes que peleaban hace unos segundos. Al doblar en una esquina, terminaron escondidos entre algunos árboles con sus cuerpos demasiado cerca. Se mantuvieron en silencio esperando a que los oficiales se fueran. 

Maggie: Dy-dylan.... P-por q-....

Dylan: Shhh.... Lo siento, pero ya eh visto que pasa si estas cerca de un encuentro, la policia no es muy correcta que digamos.... 

Maggie: - sonrojada - B-bueno pero, es-estamos muy p-p-pegados

El joven solo la observó, tenía sus pechos contra su abdomen, su rostro era tan inocente y lindo. Empezó a acercarse con cuidado, a lo que ella respondió de igual manera acercándose más y más. Terminaron besándose con algo de calma, sin lujuria ni nada de ese estilo, se separaron cuidadosamente con sus rostros completamente rojos. Los policías ya no estaban, al parecer se alejaron por ruidos a la distancia.

Dylan: Maggie 

Maggie: Emm.... Si, Dy-... 

La callo con un beso, uno muy feroz y morido, movía su lengua como un animal mientras acariciaba su trasero. La joven intentó alejarse rápidamente. Cuando logró soltar su boca para gritar, una mano la sostuvo sin dejarle oportunidad.  

Dylan: - susurrando - Vamos, Maggie..... Tu tambien deseas esto, yo se que si 

Era tan tierna e inocente, ver sus lágrimas lo incendiaron. Terminó empujándola al suelo para después subirse sobre ella, acariciaba sus pechos por sobre sus blusa mientras sostenía su boca para que no gritara. Aunque de un momento a otro, sintió un leve dolor en su abdomen. 

Dylan: Uhgg..... Que mierd-.... 

Al bajar la mirada, tenía un cuchillo clavado en sus estomago. Se levantó aterrado mientras el dolor se intensificó por el movimiento, sin lograr ver como la pelinegra pateó su rodilla haciendo que se hinque en seco. La joven se levanto y tomo el mango del cuchillo para sacarlo rápidamente, la sangre empezó a brotar y el joven se arrastró hacia atrás con pánico hasta chocar contra un árbol. Solo se sujetaba el estómago mientras el miedo se le salía. 

Maggie: Ohh... ¿Acabas de orinarte? Que patetico eres, Dylan. Seguramente te divertiste acariciando mis tetas, ¿verdad? Al igual que con las de Sasha y Anna 

No entendía nada, la chica ya no parecía la de antes. Hablaba de manera muy seria y fría, sin contar que sus ojos no eran iguales, estaban tan afilados que sentía como penetraba dentro de su ser. Tenía miedo, eso era seguro. 

Maggie: No me mires asi, niño bonito. Los rumores de lo que tu grupo y tú le hacen a las chicas no es novedad. ¿Tan estúpida me crees? 

Dylan: ¡E-estas loca! 

Maggie: No aceleres tu respiración, morirás más rápido. Tampoco te recomiendo pedir ayuda, si la policia sabe de tus intenciones, ¿a quien crees que le creerán? 

Dylan: ¡Perra de mierda! ¡Estas jodidamente enferma! - snif -

Maggie: Tengo mis razones.... Como seguramente tu tienes las tuyas, claro, hablamos violar a esas chicas, o no? 

Dylan: ¡Yo no hice nada! - snif - ¡No tuve nada que ver con ellas!

Maggie: ¿Y como sabes que es verdad que las violaron?

Su rostro fue suficiente respuesta, el pobre se había entregado solo, por lo que su sentencia estaba firmada. Maggie hizo un movimiento rápido con el cuchillo cortale la garganta, la sangre empezó a salir de manera exagerada, el cuerpo del joven solo se quedo estatico. Viendo bien la escena, una puñalada en el estómago y el cuello degollado. Un intento de robo, como mucho. La joven observó como la sangre llegó a manchar levemente su blusa, por lo que tomo su suéter y se lo puso con cierre y todo. Guardó el cuchillo manchado dentro del suéter en un pequeño bolsillo interno para que nadie lo viera y se alejó de ahí, dejando el cuerpo solo. 

Una lastima que no se diera cuenta de que hubo testigos, alguien había visto toda la secuencia de principio a fin, y todo esto, desde las sombras. 

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FIN DEL CAPÍTULO.