Aquel bol de fideos instantaneos estaba helado otra vez, no era para menos despues de todo lo que habia ocurrido.

Pasó más de una hora desde que subió con Lizy.

En su ultimo intento por almorzar,  colocó loa fideos en el microondas y lo programó en tres minutos. Solo debia quedarse sentada en la mesa sin moverse de ahi… No era algo muy dificil…

En lo que esperaba, escuchó unas enormes risas provenientes del living, eran tan fuertes que Loan tuvo que levantarse para ver de que se trataba.

Al revisar, vió que la unica en el living era Leia. Lupa tampoco estaba con ella. Aprovechó ese momento para preguntar por sus hermanas:

- Leia, en donde están tus hermanas? - dijo alzando la voz.

- aahh… No lo sé? Quizás están en su cuarto - contestó Leia sin quitar la vista de la pantalla.

Ante esa actitud, Loan tomó el control remoto y apagó la tele:

- Oye! Estoy viendo la final de Mister Universo! - exclamó Leia.

- Ya llevas más de una hora viendo la televisión. Deberias estar haciendo tus tareas, además te pregunté por tus hermanas y no me respondiste! - dijo Loan.

- Esta bien! - contestó molesta -  Lupa dijo que estaría en el patio trasero, quizas se llevó a Lizy con ella. Ahora puedo seguir viendo la tele? - preguntó Leia con una falsa sonrisa.

- Pues no! Lizy subió por las escaleras hasta el segundo piso. Sabes lo peligroso que pudo haber sido para ella? Apenas tiene tres años!

- si ya sabías donde estaba Lizy, por qué me preguntas por ella? - le replicó.

- Porque Lupa y tu tenían que cuidarla! Ahora ve a hacer tus tareas a la mesa! no quiero que despiertes a tu hermana alla arriba.

Loan no es de las que se enojan de manera frecuente, pero siempre termina peleando cuando se trata de Leia o de Lemy.

Leia solo le frunció el ceño a Loan mientras iba por sus cosas. Se sentó en la mesa y sacó un enorme libro de estudio.

Ya con un problema menos, solo debía encontrar a Lupa.

Al mirar hacia el patio por la ventana de la cocina, Loan observó como toda la ropa estaba colgada.

No sabía de que forma, pero Liena lo habia logrado.

Entre toda esaa ropa ondeando, logró distinguir la silueta de Lupa, sentada alla afuera:

- Lupa! Que haces alla afuera? - gritó Loan con todo su pulmón.

La chica se asustó tanto que rapidamente lanzó algo al suelo y luego lo aplastó con el zapato:

- N-no estoy haciendo nada, solo salí a tomar aire - contestó nerviosa.

- Ven en este momento! Tengo que hablar contigo.

Lupa se acercó hasta su hermana mayor, lenta y temblorosamente.

Antes de que Lupa pudiera decir una palabra siquiera, Loan sintió en el aire un intenso olor a humo:

- Acaso huele a cigarrillo? - preguntó Loan algo confundida.

- ehhm no, yo no siento nada. Estoy algo congestionada la verdad… - dijo Lupa tratando de escaquearse.

Pero Loan conocía muy bien ese olor, era el mismo olor que siempre tenía su padre al volver del trabajo. Un olor tan fuerte que se impregnaba en la ropa.

- Lupa… acaso estabas… fumando? - preguntó Loan atemorizada.

Lupa miró a su hermana, sabía que ya no había necesidad de ocultarlo más:

- Suspiro… si Loan, era yo. Estaba fumando - dijo culposamente.

- P-pero por qué!? Apenas tienes doce años! Por qué te has estado comportando tan extraño estos dias?  - Loan ya no sabía que más decir.

Hubo un largo silencio mientras su respiracion se calmaba.

Lupa giró la cabeza en todas direcciones para ver que no hubiera nadie escuchándolas, luego se acercó al oido de Loan y le dijo en voz baja:

- Crees que podamos hablar de esto en privado? - preguntó Lupa cabizbaja.

Loan, al ver el semblante de su hermana, supo que se trataba de algo serio. Sabía que por muy sombría que fuera su hermana, hasta ella podía tener problemas:

- ...Claro que si. Vamos a mi habitación - respondió más calmada.

Cuando ambas volvieron al comedor, observaron a Leia haciendo sus deberes como Loan le habia pedido.

Pese a su corta edad, Leia era una chica muy inteligente, solo que no le gustaba estudiar ni hacer sus tareas.

A su lado, tenía un bol de fideos instantaneos:

- Loan, encontré estos fideos que estaban dentro del microondas, espero que no te moleste que me los haya comido - dijo Leia con una sonrisa de malicia en el rostro.

Leia sabía que eran de Loan. Esta era su venganza por lo de antes.

La pobre Loan solo podía morderse el labio.

En este momento, el asunto con Lupa era más importante:

- Descuida Leia. Me alegra ver que estés haciendo tus deberes - contestó Loan.

Una vez dicho esto, ambas subieron hasta su habitación.