ⁿ ⁵¹. Encubierto.

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Taehyung jugó con sus manos en un gesto nervioso que Jungkook no pasó por alto; quiso borrar de un golpe la sonrisa burlona en el rostro de Daejung, pero se contuvo en el momento que dio un solo paso hacia adelante y pudo sentir como el menor lo tomaba del brazo para que volviera a ubicarse en su lugar.

Eran alrededor de las ocho de la noche y el cielo se encontraba completamente nublado con algunos relampagos viéndose aquí y allá, avisando que en cualquier momento la lluvia se desataría sobre la ciudad haciendo el ambiente aún más pegajoso y pesado de lo que ahora estaba.

Taehyung no quería estar en esa situación, pero estaba haciendo todo lo posible para quedarse en el lugar y no salir a correr, sus piernas estaban queriendo hacer eso desde que vio como su hermano mayor entraba a la habitación de hotel. Había un aura de incomodidad que lo hacía poner nervioso porque no sabía en qué momento jungkook y Daejung comenzarían a golpearse. No sabía la relación que habían tenido en el pasado, pero estaba seguro que había sido algo tensa y que se debían una buena charla, porque estar a la defensiva de la forma en la que ellos estaban, esperando que el contrario diera el primer golpe era algo molesto.

— ¿Y ahora qué? ¿Tengo que aplaudirte?—Tae puso sus ojos en blanco y clavó su mirada miel en Jeon. Notó como el mayor apretaba su mandíbula con fuerza y se dio cuenta que él estaba a nada de dar a conocer su verdadero rostro—. ¿Con qué lo compraste, Jugkook? ¿Con algún truquito boludo? Dale, mostrate como realmente sos. Un psicópata y obsesivo de mierda. ¿Cuánto lo acosaste Jeon? O mejor dicho ¿cuánto le mentiste para que te creyera toda la mierda que dijiste?

Daejung miró a Taehyung y de él volvió su mirada a Jeon cuando descubrió que su hermanito no iba a apartarse del lado del otro por más verdades que le gritara a la cara. Jungkook lo tenía comiendo de su mano y por lo que también había podido ver Taehyung igual. De alguna forma esos dos se querían y se complementaban, y no lo llegaba a comprender del todo. No sabía qué había hecho Jungkook, pero él iba a descubrir todo, no se creía el cuento de que él se había separado del todo de Donghwa, había algo oculto detrás de todo y él estaba más que dispuesto a descubrirlo. Para hacer sufrir a Jeon y para separar de una vez por todas a su hermanito de las malas elecciones que había hecho en un pasado.

—Mirá—Dijo Jungkook, llamando la atención de ambos hermanos que lo miraron fijamente—, a Taehyung lo quiero en serio, por más que vos no te la creas. Podés decir todas las mierdas que se te ocurran, pero yo no voy a dejar a tu hermano. Ya se lo dije a él y te lo digo a vos, a Taehyung voy a protegerlo con mi vida si es necesario, si yo tengo que morir para que él pueda ser libre y feliz, voy a morir Daejung. Porque vos sabés muy bien de lo que ellos son capaces.

Dae miró con algo de sorpresa a Jungkook antes de tragar saliva y desviar su mirada, podía estar empeñado en que su hermano no estuviera con él, pero podía ver que Jeon lo quería en verdad. Sus ojos se lo decían, la forma en la que brillaban cada vez que iban dirigidos a Taehyung era algo que a Daejung le aclaraba muchas cosas.

Él se había equivocado tanto con Taehyung durante mucho tiempo, durante tantos años había hecho tantas cosas que al día de hoy se arrepentía y por su culpa la vida de su hermano estaba en peligro, su cabeza tenía un precio grande y el único que estaba arriesgándose era Jungkook. Él no estaba haciendo absolutamente nada para imperdir que todo se calmara, para impedir que la muerte de Taehyung estuviera a la vuelta de la esquina. Era todo tan estresante y molesto que ya no sabía qué diablos hacer para que todo se terminara.

—Daejung, ¿qué querías? ¿Para qué viniste?—Preguntó Taehyung. Hablando por fin, mirando con desconfianza a su hermano. Era extraño que él quisiera verlo sabiendo el peligro que corría hacerse ver cerca suyo.

—Quería fijarme que estuvieras bien y que era joda que salías con este enfermo. pero parece que no, que es todo verdad y que te estás arriesgando más estando con él, ¿lo sabés no?

— ¿Qué ganas con eso? ¿Qué ganas con simplemente venir acá? Estás diciendo puras boludeces y siempre repetís lo mismo, Dae. Estoy con Jungkook ¿Sí? Y eso es algo que vas a tener que aceptar por más que no te guste.

—Déjame procesar esto. Yo... No entiendo, posta, no entiendo qué le ves. sabés todo lo que hizo, todo lo que está dispuesto a hacer y vos querés seguir con él. Y no estoy creyendo el cuentito de... me separé de Donghwa.

—Pero lo hice, Daejung. Meses después de que vos lo traicionaras y él descubriera a Taehyung, puso la orden de ponerle una bala en la cabeza ¿Y sabés lo que fue eso para mí? Mi cerebro hizo algún click y me di cuenta que a pesar de que yo era quien le seguía todos los pasos, y me dije que también lo quería muerto me di cuenta que no era así. Decidí que no iba a matarlo y me fui, dejé a Donghwa y todas esas cosas.

— ¿Estás trabajando con la policía?—Preguntó de repente y Jeon tragó saliva. Desvió su mirada unos cinco segundos antes de volverla a él. Taehyung no se dio cuenta de los movimientos de su novio, pero daejung que tenía una mirada fija en él pudo darse cuenta que había dado en el blanco—. Te vendiste  a la policía—Afirmó, burlándose—, ¿sos alguna clase de policía encubierto o algo así?

Jeon rió, con fuerza y como si toda la situación fuera demasiado graciosa. Su semblante cambió a uno más duro y luego encogió sus hombros, con uno de sus brazos envolvió la fina cintura de Taehyung y lo atrajo a su costado. El muchachito lo miraba con una ceja levantada, esperando que diera una respuesta a la pregunta que su hermano había formulado.

Un relámpago se abrió paso en el cielo, iluminando todo y segundos después un trueno resonó fuertemente rompiendo el silencio que había en el lugar, asustando a Taehyung y logrando que Daejung se removiera incómodo en su lugar al ver la sonrisa tétrica que se abría paso en los labios de Jeon. Jungkook suspiró y miró a Tae un largo rato a los ojos antes de soltar—: Soy policía encubierto desde mucho antes de que Donghwa me descrubiera y me metiera adentro de su círculo de confianza de mierda. Sí, soy policía y lo que estamos queriendo lograr es hacer que Donghwa caiga. Queremos derrocar el imperio que él formó—Un pequeño encogimiento de hombros y Taehyung se acomodó más en su cuerpo, apoyando un poco de su peso en el pecho de Jeon.

Y Daejung lo comprendió. Que a pesar de las cosas que Donghwa hiciera y todas las personas que estuvieran bajo las suelas de sus zapatos, en algún momento, él iba a caer. Y no solo él sino también todas las personas que lo seguían.

—Y aunque no lo creas Daejung, él está cayendo.

Un solo asentimiento de parte del hermano de su novio hizo a Jeon comprender que él podía hablar y ayudar en lo que sea, para acabar a Donghwa y su imperio, para acabar por fin con la amenaza que tenía la cabeza de Taehyung.

No sé a qué punto llegamos con Jeon policía encubierto, psicópata, asesino a sueldo y mucho más, pero dio un giro que me gustó ahre

Espero que el capítulo sea de su agrado y el final se acerca pronto.

Mañanas insoportables llegó a +70k de leídas y +7k de votos, más que agradecida con ustedes, por darme la oportunidad de traerles algo así.

Besos y muchas gracias a quienes siguen leyendo. 💚💜

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