Reencuentros

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Tras haber ayudado a la maga de agua, además de hacer un contrato con ciertos espíritus estelares, el peli-azul se encontraba observando detenidamente, una pequeña lápida de piedra, la cual tenía grabado un nombre en específico.

Yandal: - continúa observando dicha lápida en silencio, hasta que escucha el sonido de pasos acercándose.

Dichos pasos pertenecían a cierto grupo conformado por, Lisanna, Gajeel, Levy, Wendy, Happy, Charles y Phanter Lily, quienes lo observaban con cautela y mucho cuidado.

Yandal: Que tan doloroso puede llegar a ser ... el pensar y creer, que la muerte de un ser tan amado, no fue nada más que por tu culpa - da medía vuelta para mirar directamente a la albina.

Lisanna: - se acerca rápidamente al peli-azul molesta, para así intentar darle una cachetada.

Yandal: - detiene la mano de la albina tomándola por la muñeca - Si quieres ver la verdad, primero quítate la venda de los ojos.

Lisanna: - lo mira molesta - Mi hermana no se merecía que la trataras así.

Yandal: Entonces, ¿por qué 'ella' culpo a Natsu de tu supuesta muerte?, cuando el responsable de ello, era tu hermano Elfman.

Lisanna: - lo mira sorprendida y en estado de shock.

Yandal: Sabes lo que pienso y sigo creyendo, es que la hermana que tú conocías, murió ese mismo día en el que tú, también "moriste", y en su lugar, no quedo más que una miserable cobarde, que para lidiar con el "dolor" y la culpa, con los que "cargaba" en ese momento, prefirió usar como chivo expiatorio, al primero que tuviera cerca y enfrente, ¿y que crees?, no resultó ser otro más que el hombre al que amabas.

Lisanna: - baja la mano pero aún continúa mirando lo molesta.

Yandal: Ódiame todo lo que quieras, pero no me arrepiento de lo que hice, porque por más que te duela, en el fondo, sabes que es verdad.

Lisanna: - agacha la mirada.

Gajeel/Levy/Wendy/Happy/Charles/Phanter/Lily: - se miran entre si.

Yandal: - suspira para después meter sus manos en los bolsillos de su campera - Ahora que ya hemos aclarado ciertos puntos en ese asunto, vayamos a lo importante, gracias a la traición de esos malditos, Natsu estuvo a punto de morir.

Dicha revelación sorprendió y aterrorizó a la mayoría del grupo excepto, a Gajeel, el cual sabía perfectamente a lo que se refería el peli-azul.

Lisanna : ¿Q-Que quieres decir c-con morir?.

Yandal: Creo que tu amigo - mira a Gajeel - Puede dar una mejor explicación de lo que estoy hablando.

Lisanna/Levy/Wendy/Happy/Charles/Phanter/Lily: - voltean a ver al azabache.

Levy: ¿A-A qué se refiere Gajeel?.

Gajeel: - suspira - Cuando un Dragón Slayer, es traicionado por la persona a quien eligió como su pareja para toda la vida, el destino de este es ... morir, debido a que la depresión, fuerza a qué la magia de su portador, lo consuma de dentro hacia afuera, matando lo lenta y dolorosamente, ya que dependiendo de que tan grave haya sido, puede durar horas, días, semanas, meses o incluso años, de un incesante sufrimiento.

Yandal: Y en el caso de Natsu - llama la atención de los demás - Solo se necesito de un mes entero, para hacerlo llegar a su límite, ya que los recuerdos de ese día, no eran algo que podían hacerse pasar por alto así como así, no cuando pueden ocasionar algo como esto - chasquea los dedos.

Tras hacer eso, tanto el peli-azul como el grupo de magos y exceeds, fueron teletransportados a una parte de lo profundo del bosque, dónde aparte de un intenso calor proveniente de un enorme crater, el cual estaba humeante, a su alrededor habían muchos árboles, los cuales en su mayoría, se encontraban quemados, mientras que otros.

Literalmente estaban hechos cenizas, sin mencionar los diversos charcos de roca fundida de color rojo encendido, tanto dentro como alrededor del antes mencionado crater, era como si una parte del mismísimo infierno hubiera salido a la superficie.

Gajeel: - observa con asombro y terror el lugar - N-No puede ser, este lugar.

Yandal: Sip, bienvenidos a la tumba de Natsu, bueno, eso debería decir si realmente estuviera muerto.

Lisanna: Entonces - lo mira - ¿Dónde está?.

Yandal: En un lugar donde puedo asegurarte, que nadie y repito nadie, puede lastimarlo de ninguna manera.

Lisanna: Llévame con el.

Yandal: ¿Y porque habría de hacerlo?, dame un motivo - comienza a caminar lentamente alrededor de la albina en círculos - Una razón, por la cual debería llevarte directamente con el, es decir, ambos sabemos por todo lo que ha pasado y sufrido a manos de la mayoría de esos miserables, pero a diferencia de ti, yo no tuve miedo de encararlos y decirles sus verdades.

Lisanna: - guarda silencio.

Yandal: ¿Y bien? - deja de caminar en círculos alrededor de la albina para finalmente detenerse justo enfrente de esta - Estoy esperando.

Lisanna: - sigue sin decir nada.

Yandal: Muy bien, entonces - da media vuelta y comienza a alejarse de la albina caminando - Ya no tenemos nada de que hablar.

Lisanna: L-Lo ... amo - susurra.

Yandal: - se detiene a cierta distancia tras escuchar el susurro de la albina - ¿Disculpa?, ¿que fue lo que dijiste?, no te escuché bien.

Lisanna: - lo mira con una gran determinación en sus ojos - ¡Dije que lo amo! - le alza un poco la voz.

Yandal: - la mira fijamente y en silencio por un par de segundos para después sonreir de lado - Solo quería estar seguro - chasquea los dedos, haciendo que una puerta de madera de color blanco, se materializa un par de metros atras de la albina - Si cruzas por esa puerta, podrás reencontrarte con Natsu.

Lisanna: ...!!! - mira sorprendida al peli-azul y después a dicha puerta.

Yandal: Sin embargo, no eres la única - mira a los demás y de nuevo a la albina - Así que, dejaré que todos ustedes vayan con el, pero con una condición - se acerca a la puerta - Que no le dirán nada a Natsu, de lo que ocurrió hoy en el gremio antes y después de mi llegada, cumplan con la condición, y les daré una sorpresa como ninguna que hayan recibido antes - frunce el ceño - Hagan lo contrario - los mira por encima de su hombro, con una expresión fría y muerta - Y los sacaré de ahí tan rápido que no podrán decir ni una palabra, para que jamás vuelvan a ver a Natsu.

Lisanna/Gajeel/Levy/Wendy/Charles/Happy/P.Lily: - miran al peli-azul sorprendidos y después entre si para finalmente asentir.

Yandal: Bien - gira la manija de la puerta y la abre lentamente.

Conforme el peli-azul abría la puerta, el grupo de magos y exceeds, pudo observar como un resplandor blanco, salía del interior de aquella puerta, cuando dicha puerta estaba abierta por completo el peli-azul entro primero, seguido por los demás que trataban de cubrir sus ojos con sus manos mientras se acercaban para cruzar la puerta.

Una vez que cruzaron por dicha puerta, estos pudieron observar, que se encontraban en lo que parecía ser un enorme y vasto campo de flores, en el cual, podía sentirse una gran paz y tranquilidad, dónde leves corrientes de viento, los cuales hacían que diversos pétalos de las flores, fueran suspendidos en el aire para después ser llevados por dichas corrientes en direcciónes al azar, dejando maravillados al grupo excepto al peli-azul.

Yandal: - los voltea a mirar - Maravilloso, ¿verdad?.

Wendy: D-Disculpe - llama la atención del peli-azul - P-Pero ... ¿que es este lugar tan bonito?.

Yandal: Bueno pequeña - mete sus manos en los bolsillos de su campera - Se podría decir, que este lugar ... es el paraíso.

Wendy: - lo mira confundida - ¿El ... paraíso?.

Yandal: O más bien - se encoge de hombros - Una representación básica de el.

Gajeel: - observa con mucha atención el lugar - Me pregunto, ¿cómo es que Salamander, pudo terminar en este lugar?.

Yandal: La verdad, es que fui yo el que lo envió aquí.

Lisanna: ¡¿Tu?! - lo mira sorprendida - ¿Porque lo enviarías aquí?.

Yandal: Se podría decir - la mira - Que hice un trato con el.

Gajeel: ¿Un trato? - llama la atención del peli-azul nuevamente - ¿Que clase de trato?.

Yandal: No necesitan saber eso ... por el momento - comienza a caminar hacia dirección en específico - Síganme.

Sin preguntar o decir nada más, el grupo comenzó a seguir al peli-azul, mientras admiraban cada detalle del hermoso paisaje, y al transcurso de unos breves minutos, estos se detienen cuando pueden observar al peli-azul, quien señalaba hacia enfrente, el grupo siguiendo con la mirada hacia donde señalaba el peli-azul.

Estos pudieron observar, al mismísimo Natsu, abrazando y sonriendo muy alegre a cierto Dragón, muy característico de dolor rojo que también le sonreía de forma alegre, y dónde fueron, Lisanna, Wendy y Happy, al verlo, fueron rápidamente hacia el peli-rosa, para finalmente derribarlo en un gran abrazo, mientras que, Gajeel,Levy,Charles y P.Lily, solo los observaban, de forma divertida y comprensiva, por la emoción que ellos tenían al ver al peli-rosa de vuelta.

Yandal: (¡Vaya!, si que estaban muy emocionados por volver a ver a Natsu) - sonríe de lado - (Pero ¿puedo culparlos por tener dicha emocion?).

Lisanna/Wendy/Happy: - encima del peli-rosa muy felices de verlo - ¡NATSU!/¡¡NATSU-NII!!/¡¡¡NATSHUUU!!!.

Natsu: - los mira sorprendidos - ¡¿Lisanna?! - mira a la albina  - ¡¿Wendy?! - después a la pequeña peli-azul - ¡Happy!- y finalmente al pequeño Exceed azul - ¿P-Pero que hacen ustedes aquí?.

Gajeel: ¿Que no es obvio? - llama la atención del peli-rosa, mientras se acerca junto con Levy,Charles y P.Lily - Hemos venido a hacerte una visita Salamander.

Natsu: ¡¿Gajeel?!, p-pero ... ¡¿como es posible que ustedes estén aquí?!, ¡¡¡QUE ALGUIEN ME EXPLIQUE!!!.

Yandal: Bueno, si dejaras de gritar, tal vez podrías escuchar la explicación con más claridad - se acerca.

Natsu: - lo mira sorprendido - ¡¿Tu los trajiste?!.

Yandal: ¿Que puedo decir? - se encoge de hombros - Tenían muchas ganas de verte, así que, ¿porque no?.

Igneel: ¡Ejem!, Natsu - llama la atención del peli-rosa así como del grupo.

Natsu: ¡Ah!... lo siento mucho Papá.

Igneel: Tranquilo - mira los amigos del peli-rosa, y su miraba se centra en Gajeel y Wendy - Así que ustedes deben ser los hijos de Grandeeney y Metalicana.

Wendy: - mira sorprendida al dragón rojo - ¿C-Como es que sabe eso?.

Igneel: Eso es muy fácil de responder pequeña, ustedes tienen impregnados, tanto el olor como la esencia, del tipo de magia de esos dos.

Sin embargo, antes de que alguien más dijera algo, las siluetas de dos criaturas voladoras, las cuales iban acercándose, dichas siluetas eran mas que familiares tanto para el azabache como para la peli-azul, que sin duda alguna, se habían quedado sin habla, por lo que sus ojos veían, ya que esas siluetas, pertenecían a Grandeeney y Metalicana, los dragones que habían acogido a Gajeel y Wendy, los cuales, una vez que habían descendido, se colocaron a ambos costados de Igneel.

Metalicana: ¡Vaya!, ¡Vaya!, pero que hermosa reunión familiar tienes aquí Igneel.

Grandeeney: Metalicana, ¡comportate!, tenemos visitas.

Metalicana: Hehe... no prometo nada, ¿Huh? - nota la presencia de Gajeel - ¡Vaya!, pero mira que trajo el viento, si no es nada más y nada menos que el mocoso impertinente de mi hijo - llama la atención del azabache - ¿Que?, ¿no piensas saludar a tu viejo?, ¿o acaso el gato te comió la lengua? Hahaha...

Gajeel: - sonríe - Ni en la otra vida, has dejado de ser, una chatarra parlanchina y presumida Metalicana, pero en fin es bueno volver a verte.

Grandeeney:

- se acerca a la pequeña peli-azul, mientras le da una cálida sonrisa maternal - Hola Wendy, me da mucha alegría volverte a ver, mi pequeña.

La pequeña peli-azul al escuchar la voz de madre, está sin perder tiempo se acerca rápidamente hacia el rostro de la dragona, para así darle un gran abrazo a esta, mientras empezaba a llorar de alegría, al reencontrarse con su madre.

Wendy: - derrama lágrimas de felicidad - N-No sabes cuánto te he echado de menos, Mamá.

Grandeeney: Yo también te he echado de menos mi niña.

Regresando nuestra atención hacia Gajeel y Metalicana, el dragón centro su atención hacia Levy, quien se sentía un poco incómoda por la mirada de este.

Metalicana:

- toma repentinamente a la maga de la escritura en sus manos - Así que está es tu novia, Eh... mocoso.

Gajeel: ¡Metalicana!, ¡¿pero que demonios haces!?.

Metalicana: ¡Tranquilízate!, ¡no es como si me la fuera a comer! - observa detenidamente a la maga de la escritura - Tienes buen gusto mocoso - deja a la peli-azul en el suelo, e inclina su cabeza hasta que su mirada estaba a la altura cerca de él azabache - Y yo que pensaba que eras del otro bando.

Gajeel: - pone los ojos en blanco mientras grita- ¡METALICANA! ¡MALDITA CHATARRA VOLADORA OXIDADA! ¡DEJA DE DECIR ESTUPIDECES SOBRE MI!.

Metalicana: - también comienza a gritar - ¡¿A QUIEN LE DIJISTE MALDITA CHATARRA VOLADORA OXIDADA?!, ¡MOCOSO INSOLENTE!.

Grandeeney: - con un vena pulsante en su frente alza mucho más la voz - ¡SUFICIENTE USTEDES DOS!, ¡ESTE COMPORTAMIENTO ES INACEPTABLE!.

Gajeel/Metálicana: - guardan silencio rápidamente.

Grandeeney: - se acerca al peli-azul - Así que tu fuiste quien los trajo a ellos aquí.

Yandal: - asiente - Así es.

Grandeeney: Te doy las gracias, por permitirme volver a ver a mi pequeña.

Yandal: No tiene nada que agradecerme, solo hago lo que es necesario en el momento que es requerido.

Grandeeney: Ya veo, ¿huh?... - mira detenidamente al peli-azul.

Yandal: - mira confundido a la dragona - ¿Que sucede?.

Grandeeney: ¿Me permites ver más de cerca, esos artefactos que llevas puestos en tus muñecas?.

El peli-azul, tras escuchar la solicitud de la dragona, a este le pareció un poco extraño, pero este sin poner objeción alguna, extendió sus manos hacia el frente, para que así la dragona, pudiera mirar con más detenimiento los anillos de este, y al observar el símbolo que tenían grabados la expresión en el rostro de esta, cambié  repentinamente, de un paso hacia atrás y luego haga una reverencia el peli-azul.

Metalicana: Oye Grandeeney - se acerca a la dragona - ¿Que haces?..

Grandeeney: ¡Shh!... - le da un fuerte golpe en la cabeza al dragón - ¡Cállate y haz una reverencia!.

Metalicana: ¡Ay!... - se queja - ¡¿PORQUE ME PEGAS?!.

Grandeeney: ¡Que te calles y que hagas una reverencia!.

Metalicana: ¡¿Y porque demonios tengo que hacerle una reverencia a este mocoso?!.

Grandeeney: Mira los símbolos de los artefactos en sus muñecas - le susurra.

El dragón de metal, tras escuchar las palabras de la dragona, este miro con detenimiento los anillos del peli-azul, y al ver el símbolo que tenían grabados, los ojos de este se abren grandemente de la impresión, para seguidamente, este hacer lo mismo que hizo la dragona, dando un paso hacia atrás y hacerle una reverencia al peli-azul.

Metalicana: - muy nervioso - L-Lamento mi insolencia, por favor le pido disculpas.

Igneel: ¡PFF! ¡HAHAHAHAHAHAHAHA! - comienza reír casi descontroladamente.

Metalicana: - mira a Igneel molesto - Se puede saber ... ¡¿DE QUÉ DEMONIOS TE RÍES?!.

Igneel: - deja de reír un poco - De la cara que pusiste, al ver los símbolos en los artefactos de ese chico.

Grandeeney: ¿Y porque tú no haces una reverencia también Igneel?.

Igneel: No es necesario que lo haga.

Metalicana: ¿Que quieres decir con eso?.

Yandal: Yo se los diré - llama la atención de ambos dragones - Verán la razón por la que Igneel, no me hace una reverencia, es porque no es necesario que lo haga y ustedes tampoco.

Grandeeney: Pero ... eres uno de los poseedores de un poder Infinito, ¿no es así?.

Yandal: Es cierto que lo soy, sin embargó, eso no quiere decir que yo los obligare a doblegarse ante mi, pero por la forma en la que reaccionaron, debo suponer, que ustedes debieron conocer a alguien, con un poder similar al mío en el pasado.

Igneel/Metálicana/Grandeeney: - asienten.

Yandal: Y me podrían decir, ¿cual es el nombre de esa persona?.

Grandeeney: No conocemos su nombre verdadero, pero si por como muchos a ella la llaman.

Yandal: Espera un momento, ¿ella?, entonces, es una mujer.

Metalicana: Bueno para ser más claros, la primera vez que la vimos, ella parecía ser sólo una simple niña, pero era más que eso al momento que nos enfrentamos a ella y nos mostró ... su poder, el cual, tu también posees, ya que cuando tuvo la oportunidad de matarnos, nos perdono la vida.

Yandal: Entonces esa es la razón por la cual ustedes reaccionaron así, al ver los símbolos en mis anillos, pero si no saben su nombre verdadero, entonces pueden decirme, ¿cuál es el nombre que la caracteriza?.

Igneel: A ella se le conoce como, La Diosa Dragón Del Infinito.

Yandal: Ya veo, (Así que es ella, no pensé que vendría a está dimensión, parece que tarde o temprano, nos encontraremos), y, ¿que pasó con ella después de que la enfrentaron?.

Metalicana: No lo sabemos, desapareció de la nada sin decir una sola palabra, desde entonces, nosotros acordamos que si alguien se aparecía, otra vez en este mudo con el mismo tipo de poder, no nos enfrentariamos a ese ser y le mostrariamos respeto.

Grandeeney: Pero tu eres diferente, por lo que veo, no usas ese poder, para tu propio beneficio.

Yandal: No ... ya no, porque he visto lo que podría pasar y las consecuencias que podría traer.

Igneel: Es por eso, que en nombre de todos los dragones, te damos las gracias, por permitirnos reunirnos con nuestros hijos nuevamente.

Yandal: Como les dije desde un principio, no tienen que agradecerme nada.

Y así el grupo de magos y exeeds, se pusieron al día, con el peli-rosa y el trío de dragones, a través de charlas y una que otra conversación, bajo la atenta mirada del peli-azul, procurando que la condición que este les habia implementado a dicho grupo, y al transcurso de un lapso de tiempo estos se despedían los unos a los otros.

Natsu: - abraza a la albina - Hasta luego Lis.

Lisanna: - corresponde al abrazo - Hasta pronto Natsu.

Happy: ¡Adiós Natshuuu! - abraza al peli-rosa - Cuando vuelvas, te estaré esperando con un enorme pescado.

Natsu: Así será compañero.

Happy: ¡Aye! - se aleja con la albina.

Después de que cada uno de los magos se despidieran, tanto de los dragones como del peli-rosa, estos siguieron al peli-azul hacia la puerta que conectaba ese mundo y el otro, ya que una vez que cruzaron dicha puerta, estos pueden observar, que se encontraban de vuelta en el mundo mortal.

Yandal: - cierra la puerta y voltea a ver al grupo - Ahora que saben todo, lo que ustedes hagan con esa información, ya es cosa suya.

Levy: ¿Y que harás ahora?, ¿a donde iras?.

Yandal: Por ahora viviré temporalmente en la cabaña de Natsu, después de todo no tengo otro lugar a donde ir y dudo mucho que sea muy bien recibido en la ciudad, por la paliza que les di a esas dos - gira sobre sus talones y comienza a alejarse mientras la puerta pocos a poco comenzaba a desaparecer.

Continuará...

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