¡RIINNNGGGGGGGG!

Tan pronto como sonó el timbre, Amai rápidamente empacó todas sus cosas. ¡Tenía que hacer esto rápidamente! Hoy tuvo un día muy ocupado y no quería perder ni un segundo.

Que ella tampoco quería quedar atrapada en las extrañas travesuras de sus compañeros de clase.

"Oye Nigai, ¿quieres agregar tu sangre al círculo?" Le preguntó uno de sus compañeros, mientras sus otros compañeros se cortaban las manos con una daga de sacrificio y añadían su sangre a un pentagrama que dibujaban en el suelo.

"¡No, lo siento, tengo prisa! ¡Adiós!" Dijo Amai mientras salía corriendo de la habitación tan rápido como sus piernas se lo permitían.

El niño se encogió de hombros. "Oh, bueno. ¡Saca el lanzallamas!"

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Cuando Amai salió se encontró con una limusina esperándola, con Sori delante.

"Hola chico, ¿cómo te fue en la escuela?" Preguntó Sori.

"Bien. Mis compañeros de clase están tratando de convocar al diablo o algo así, así que ¿podemos irnos de aquí lo antes posible, por favor?" Amai preguntó tan cortésmente como pudo.

"Claro, vámonos, niña", dijo Sori mientras abría la puerta de la limusina, revelando a Yami y Sakio adentro.

Inmediatamente Sakio usó su telequinesis para levantar a Amai y sentarla a su lado. "Hola madre."

El rostro de Amai inmediatamente estalló en un intenso sonrojo. "H-Hola Sakio. Hola Yami".

"Hola." Yami saludó con su habitual expresión inmutable. Sus ojos la miraban fijamente, haciendo que ella se sonrojara aún más.

Sori cerró la puerta y subió al frente, luego el auto comenzó a moverse.

"Entonces, ¿viste Witch Wars anoche?" Preguntó Sakio.

"¡Sí, fue tan bueno! Esa revelación para X-Ra fue increíble. Aunque me reí un poco de su nombre". Admitió Amai.

"Fue más bien... cómo se dice... en la nariz", dijo Sakio. "Puse los ojos en blanco un poco. ¡Pero el episodio aun así fue increíble!"

"No veo el problema." Yami se encogió de hombros. "La broma estuvo bien".

"Me alegra que me lo hayas recomendado. No escuché a nadie hablar de ello en línea, así que probablemente no lo habría encontrado si no me lo hubieras contado". Dijo Amai. "Realmente te gustan las brujas, ¿eh?"

Sakio asintió. "La magia es algo que me sorprende. Es genial, hermosa y poderosa al mismo tiempo. Y viene en muchas formas diferentes. Y me da nuevas ideas sobre qué hacer con mis poderes".

Luego, Sakio levantó las manos y pequeños fuegos artificiales estallaron entre ellas.

"Wow", dijo Amai, completamente impresionada por la pequeña exhibición de Sakio. "Sabes, siempre puedes crear tus propios objetos mágicos. No en la vida real, pero si le preguntas a Ken, él podría hacer que cualquier objeto mágico que quieras cobre vida en la pantalla".

"Mmm." Sakio pensó en eso. "No sé qué le pediría que hiciera".

"Puedes pensar en ello", le dijo Yami. "Tenemos tiempo."

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Finalmente llegaron a su destino, un refugio para personas sin hogar.

A pesar de estar situado en una zona bastante pobre de la ciudad, el refugio estaba en perfectas condiciones. Nada demasiado llamativo, pero sobresalía un poco en comparación con el área circundante.

La razón de esto fue que este refugio para personas sin hogar fue comprado y apoyado por la Fundación Midoriya.

Los niños salieron de la limusina y entraron al edificio y se encontraron con una mujer mayor.

"¡Yami, Amai! ¡Qué bueno verte de nuevo!" Dijo la mujer al verlos entrar. "Ah, ¿y quién es este?"

"Esta es Sakio, yo la creé", explicó Yami simplemente, mientras Sakio hacía una cortés reverencia.

"... Estoy bastante seguro de que no entenderé nada incluso si te pido que me expliques, así que simplemente no voy a aceptar eso y trataré de no pensar en ello". Dijo la señora. "De todos modos, ¿supongo que tú también viniste a ayudar?"

"Así es. Madre y papá. Quiero decir, Yami y Amai han estado haciendo esto por un tiempo, así que quería probarlo". Dijo Sakio. "Creo que a esto lo llaman una salida familiar".

'Voy a fingir que no escuché la parte de madre y padre.' Pensó. "Bueno, soy la directora, así que hoy estaré a cargo de ustedes tres. Es un placer conocerlos. Ahora bien, no perdamos más tiempo. Hay mucho hoy y mucha gente para ayudar".

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Resulta que las peculiaridades podrían usarse en las instalaciones, debido a que son propiedad privada... bueno, solo las personas aprobadas podrían usar sus peculiaridades.

Y afortunadamente, Sakio era una de esas personas.

"Eh." Dijo uno de los voluntarios del refugio mientras Sakio descargaba todos los suministros del camión con su telequinesis, mientras todos los demás observaban. "Bueno... ¿no somos inútiles?"

"Midoriyas. ¿Estoy en lo cierto?" Uno de ellos bromeó.

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"¿Por qué debo hacer esto a mano?" Sakio refunfuñó mientras lavaba los platos junto a Amai en la cocina.

"Porque cuando intentaste usar tu don para lavar platos la última vez, rompiste algunos", dijo Yami mientras preparaba un poco de sopa junto con los otros cocineros.

Sakio hizo un puchero. "Al menos podrías dejarme cocinar".

"La última vez que cocinaste algo, tuvimos que matarlo". Señaló Yami.

"Lo siento mucho", dijo Amai, sonrojándose intensamente de vergüenza al recordar sus propios intentos de cocinar. "Lo siento mucho."

Sakio levantó una ceja, pero por alguna razón consideró mejor no preguntar.

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"Aquí tienes. Come." Dijo Amai mientras le entregaba un dulce feliz a un hombre.

Mientras tanto, Yami y Sakio hicieron lo mismo, entregando dulces a las personas de las bolsas que Amai les había dado.

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Unas horas más tarde, se hacía tarde. El sol ya se estaba preparando para ponerse, cuando los tres se fueron y regresaron a la limusina.

"Bueno, eso fue divertido", dijo Amai mientras se sentaban y se abrochaban los cinturones de seguridad.

"Hmm", respondió Yami.

"¿No fueron solo tareas domésticas?" —Preguntó Sakio.

"Sí, pero lo hicimos para ayudar a la gente". Señaló Amai. "¿Eso no te hace sentir bien?"

"Fui creado para hacer eso y así es. Pero prefiero ayudar a la gente de la manera que mi padre pretendía". Dijo Sakio antes de levantar su puño y hacerlo brillar con energía. "Deshaciéndonos de nuestros enemigos".

"La hice para eso", confirmó Yami.

"Ya sabes. Tu discurso ha mejorado mucho desde que conocimos a Yami". Señaló Amai mirándolo con orgullo. "Creo que eso es realmente genial. Y Sakio, siempre fuiste muy buena hablando. Aunque recién naciste... en realidad podrías ser mejor que yo ahora que lo pienso".

"Fui creado con ese conocimiento y conocimiento sobre cómo usarlo. Así que es natural". Dijo Sakio, con una sonrisa orgullosa.

"Mmm." Luego, Yami comenzó a acariciar a Sakio en la cabeza, y la niña se inclinó silenciosamente hacia él, disfrutando del afecto.

Amai, sintiéndose un poco excluida, levantó la mano para comenzar a acariciar a Sakio también, pero dudó por un momento, mientras un sentimiento de duda e incertidumbre la invadía por un segundo.

Pero entonces Sakio tomó su mano y la colocó sobre su cabeza, sin subarrendar, animándola a comenzar a acariciar.

Y entonces, Amai simplemente decidió hacerlo, disfrutando un poco de la expresión encantada de Sakio.

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"¿Seguro que quieres hacer esto?" Preguntó Yami mientras él, Sakio y Amai estaban afuera de las puertas de una casa grande, con carteles y rodeados por un gran grupo de personas.

"¡Mutantes, no bestias! ¡Mutantes, no bestias!" Gritaron las personas a su alrededor. La mayoría de ellos eran mutantes y también sostenían carteles.

"Ajá. Estas personas están tratando de ayudar a otros mutantes protestando". Dijo Amai. "Así que quiero ayudarlos".

"No tienes que preocuparte por su seguridad, tenemos muchos hombres vigilándonos y protegiéndonos. Y yo estoy aquí. Así que podemos protestar como queramos". Dijo Sakio, antes de volver a centrarse en la mansión. "¡Ve a chupar un huevo viejo! ¡Renuncia y espera a que te lleve la parca, deja de molestarnos!"

"Suena como tu charla basura." Señaló Yami, para gran vergüenza de Amai.

"Oh, no, lo es", dijo Amai, poniéndose rojo brillante.

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Después de la protesta, los tres regresaron a la casa de Amai, donde rápidamente se dirigieron a la habitación de Amai y agarraron algunos controladores.

Al iniciar Super Hero Bash, Sakio y Yami decidieron enfrentarse a Amai dos contra uno.

"¡GAME!" Gritó el locutor.

"¡Uf! ¡Maldiciones! ¡Madre, por qué eres tan buena en esto!" Sakio gruñó mientras agarraba su control.

"Je. Lo siento. No me contengo. Ponte bien". Se burló Amai, dándole a Sakio una sonrisa arrogante. "Aunque ustedes dos realmente me hicieron intentarlo un poco. Tienes talento para los juegos, Sakio, pero no tienes experiencia".

"Grrrr. Padre, hemos perdido cinco veces seguidas, ¿¡cómo no estás frustrado!?" Preguntó Sakio, haciendo un puchero mientras lo hacía.

"Simplemente me gusta pasar tiempo con ustedes dos". Yami se encogió de hombros. "Incluso si estoy perdiendo, jugar con ustedes dos. Es muy divertido".

El rostro de Amai explotó en un enorme sonrojo como lo había hecho por enésima vez hoy, y Sakio simplemente hizo un puchero más fuerte.

"¡Mmmmm! ¡Padre, es difícil enfadarse cuando dices cosas así!" Se quejó Sakio.

"Mmm." Yami dejó su controlador y se levantó. "Voy a buscar bocadillos".

Y con eso, Yami salió de la habitación, dejándolos a los dos solos.

Hubo unos segundos de silencio mientras los dos se recuperaban del subidón emocional posterior al juego.

Y entonces Sakio habló. "Mamá, ¿me amas?"

"Uhhhhhhhhhh." Amai se congeló, mientras su cerebro intentaba descubrir cómo calcular y responder a eso. "Y... ¿realmente me gustas?"

Sakio frunció el ceño. "Siempre pareces... incómoda conmigo. ¿Realmente odias que te llame madre?"

"Yo... yo no... no lo odio. Sólo... no sé cómo reaccionar. No creo que esté preparado para eso". Dijo Amai con un gran sonrojo en su rostro. "Todo es tan... raro. Y por eso me hace sentir... raro".

"Eso... supongo que tiene sentido. Ni siquiera tengo un año y puedo decir lo extraño que es esto". Sakio suspiró. "...Bueno, no necesitas verme como una hija. Mientras me veas como una familia. Entonces supongo que está bien. ¿Te parece bien?"

Amai sintió que una sensación de alivio la invadía. "Sí, eso es... me gustaría eso."

Sakio sonrió. "Bien. Ahora bien, ¡abrázame!"

Kyodon: Bueno, entonces, ¡buenas y malas noticias!

¡Buenas noticias! ¡Tengo un trabajo!

¡Malas noticias! ¡Tengo un trabajo! Lo que significa que tendré menos tiempo para trabajar en este fic. Entonces los capítulos pueden salir un poco más lentos.

De todos modos, sí, toda esta situación de Sakio es extraña y es mejor no pensar en ello.

Por favor revisa y que tengas un buen día.

Oruga: Solo puedo decir esto después de Izuku el mejor padre que hay es Yami.